Odiar todo a mí alrededor ? No, solo detesto a las personas que me hicieron daño, por años solo estuve consciente del dolor físico que sentía, miraba a la gente y pensaba que fingían o simplemente eran muy débiles, no llorar, hacer lo que se le ordena, respetar a los mayores sin importar sus orígenes. Mi crianza se basó en ser un niño a hombre recto, tuve que madurar a temprana edad para prestarles mejores cuidados a mis hermanos pequeños

Ser un niño ejemplar? No pude serlo, fracasé en ese aspecto defraudando a mi madre y a mis familiares eso es le que creía. Murió mi abuela materna cuando tenía solo 4 años, aunque cueste creer fui yo quién la encontró sentada como si estuviera mirando algo y se quedó dormida para siempre dejándonos tristes derrumbándose los cimientos de esa familia que siempre mantenía la cabeza en lo alto.

Un gran grito se oyó por toda la casa que en ese tiempo eran 3 pisos aparte del taller que era un espacio simétrico a mi hogar con la diferencia que era un cuadro sin estructuras siendo también el lecho de muerte de mi abuela, no, no fue una muerte normal ni un asesinato, fue suicidio lo que cometió el pecado más grande que pudo cometer siendo devota a la iglesia y al “señor”.

Muchas voces en mi oído abrazándome, las lágrimas me humedecían desde el pelo hasta los hombros gritándome que me calme, que no mire. El sonido de las ambulancias era aterrador, patrullas de la policía se acumularon en la calle, todo era aterrador muchas personas que nunca había visto entraban y salían de donde estaba parado.

-dónde está la mami Lupe?, preguntaba muchas veces pero siempre me decían lo mismo, está con diosito, en esa etapa de mi vida muchas cosas cambiaron en mi familia, mis tías y tíos se alejaron entre si pero solo de una forma de tener más libertad por así decir, mi madre no fue la excepción, tuve una hermanita y más primos menores, mi vestir era sencillo como cualquier niño que le encantaba jugar sobre todas las cosas, quería mucho a mi hermana era la primera ves que lo sentí, debía cuidarla, era mi princesa, le besaba mucho sus mejillas ella se parecía una monita bebé tenía mucho bello en su carita y brazos. Jugaba en las calles, era arena, desmontes de arena por todos lados ya que muchas casas se estaban remodelando, jugaba en la playa que solo estaba en unas casas de paso, también paseaba mucho por un campo de futbol que se encontraba a unas calles de mi casa, era intrépido, malcriado también sería una buena definición para mis travesuras, muchas veces ayudaba a mi abuelo que era un maestro en su trabajo, le alcanzaba cosas que me decía, pero solo por la curiosidad que tenía del como creaban tales objetos era que me pasaba mi tiempo con él en ese taller que fue donde murió su esposa.

Si alguien te pregunta- ¿Cuándo o quién fue la primera persona que te pagó por trabajar? ¿Qué responderías?, en mi caso, si , fue mi abuelo quién me dio mi primer pago mi primera propina que valía mucho más porque me sentí reconocido por alguien a quien admiraba y quería mucho, lo primero que pensé y como cualquier otro niño fui a comprar, un plato de chicharrón fue con lo que regresé a mi casa, mi abuelo fue quién me abrió la reja para entrar ya que traía ambas manos ocupadas sosteniendo el plato, quise compartirlo con mi abuelo y mi madre que eran los únicos presentes pero ninguno acepto y solo miraban con una cara alegre mientras comía.

Miraba la televisión con mi primo 2 años mayor, más que mirar discutir era lo que hacíamos por elegir que ver y por el control remoto, en un instante nos quitaron el control y pusieron el canal de las noticias, muerte otra vez, un planta de bombas que eran grandes almacenes de metal, cerca de una docena de personas muertas, quemados hasta los huesos sin poder ser reconocidos por sus familias, fueron días difíciles para todos, mi madre cargándome en sus brazos rompía en llanto, su hermano mayor murió, su sobrino y amigos cercanos murieron, nadie podía consolar a las familias dolidas, porque sabían que no fue una simple muerte como un balazo o ser acuchillado, sufrieron mucho mientras morían sin mencionar que los cadáveres estaban todos reunidos en un circulo y con indicios que estaban abrazados para que no murieran soledad se daban fuerzas unos a otros.

Murió mi tío, era simplemente eso, con esa inocencia de un niño no sabía que era la muerte, que era morir y nunca más estar con la presencia de ese ser querido, escuchar su voz o recibir sus golpes en la cabeza. Mucho cambió en mi familia, si antes fue un alejamiento leve, esta vez, se separaron incluso para tomar cada uno su propio camino, dejaron el país, viajaron, todos buscaban oportunidades porque la verdad era una y todos estaban claros de eso, los dos pilares de la familia ya no estaban, la empresa de soldadura se fue a la quiebra, se vendió todo, herramientas, materiales y se terminó rematando aun precio muy por debajo el taller de trabajo por la necesidad de pagar deudas acumuladas.

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