Querido yo

Querido yo, no quiero ser duro aunque necesites amor, abramos un paréntesis y perdona mi trato pues de un solo hachazo destajar tu alma quiero, pero no, no es lo correcto, escucha hablemos sensatamente tú y yo amablemente, así seamos uno sin querer somos dos tú desde el corazón y yo desde la razón, aunque no sé dé que hemisferio soy, ni tú ni yo podemos pelear para tener derecho a la verdad. Querido amigo deja por favor administrar yo lo que das para que rinda con sinceridad entre una y mil veces más que intentemos llegar más allá de lo habitual, y aunque trato de deleitarte con rimas sencillas, únicamente quiero darte aliento para que no te sientas mal pues esta vez fuiste tú de cristal. Toma las cosas con calma no me grites cálmate y no brinques y quieras dejarme sin matices, pues cuando yo razono tú me tiras al abandono, te digo y te digo te cuento y te miro como te equivocas dando amor sin alivio, sin límites ni destinos. Cálmate no llores que yo estoy contigo en las buenas y en las malas amigo mío, ya que a pesar de ser dos siempre andamos como uno, solo que tú me ignoras y yo te sigo como perro callejero buscando abrigo en el frío, me tapas con tu espalda y tu pecho erguido, y yo ahí razonando para el olvido esperando la caída del que más me oculto, sin pena ni remordimiento y al caer derrotado por tu testarudo andar hoy, no quisiera decirte te lo advertí, más, sin embargo, querido amigo aquí estoy para que no sientas a solas tu olvido, no te rompas no te oscurezcas ni pienses que la bruma regresa, tan solo espera un momento sin el contar ansioso, pero contando conmigo, con mis crudas verdades y un poco de cariño para que seas fuerte hoy mañana y siempre querido amigo, querido yo…