Cuando empecé a leer el libro; “Padre Rico – Padre Pobre”, se vinieron a mi mente las imágenes de papá y mamá.
No quiere decir que mi madre era adinerada y mi padre pobre, sino que cada uno tenía una distinta forma de generar dinero.
Mi padre, un hombre muy trabajador, inteligente y creativo. A temprana edad
empezó a trabajar para ayudar a su madre y hermanos. Fue por ello que dejó sus
estudios y empezó a trabajar en la empresa Metal Mecánica.
Poco a poco llegó a ocupar importantes puestos en diferentes empresas, hasta
llegar a dirigir a sus compañeros de trabajo. Gracias a su habilidad y perfección en
el trabajo, es requerido en empresas más prestigiosas. Debido a esto se conformó
con ser empleado y no se arriesgó a poner su propio negocio, ya q le iba muy bien
económicamente.
Debido a esto, nos inculcó siempre a estudiar y a ser unos buenos profesionales, para que de esta forma, generar dinero.
Por el contrario, mi madre fue siempre una mujer arriesgada y constante para los
negocios. Mi madre heredó todo esto de mi abuelita Victoria, quién siempre estaba incursionando en algún negocio para tener una mejor condición económica para sus 9 hijos.
De tal forma que mi mamá, nos llevaba a ayudarle en su almacén, para que fuéramos aprendiendo ventas. El trabajo nos permitía ir proyectándonos, creando algo novedoso en lo cual podamos invertir a lo seguro y podamos ser los dueños del negocio, es decir nuestros propios jefes.
Además generando empleo y así tener personas que tengan un trabajo digno.
Pero de igual manera, todo va de la mano con el estudio de una carrera universitaria. Bueno, con esta mezcla de ingenio y habilidad de mi padre y la suspicacia y
visión para hacer dinero de mi madre, mis hermanos y yo, nos hemos criado en el mundo de los negocios.
Hemos creado fuentes de trabajo en algunos campos, siempre honradamente y
con la satisfacción de aportar para el desarrollo personal de nuestros
colaboradores.
Han pasado los años y mi mamá, aun sigue con ese ánimo e ímpetu de seguir con sus negocios, transmitiendo ahora a sus nietos esa visión y ese espíritu de ser emprendedores.
OPINIONES Y COMENTARIOS