Fragmento 1: 

Todo comenzó, una noche tan tormentosa, que Virginia, apenas pudo agarrarse de una pata de su cama para que no se la llevara la fuerte ráfaga de viento. Miró cómo todo a su alrededor daba vueltas dentro del torbellino; al igual que la cama con ella giraban y giraban. Entonces, el aire se tornó denso, oscuro y una sensación tenebrosa se apoderó de Virginia, viendo como dentro de la bruma espesa se desdibujó su pasado y presente, y entonces comprendió que su futuro estaría enmarcado por algún nefasto destino. De repente, Virginia despertó sobresaltada; eran las 4 de la mañana; hacía un calor soportable en la madrugada de Cartagena y dado que no pudo dormir más, se ubicó en la ventana a esperar el amanecer. Desde esa noche y por mucha más, las pesadillas y el insomnio se apoderaron de su alma.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS