Brenda era una joven que estaba en su habitación escuchando los gritos de las discusiones de su madre con su padrastro, ella se colocó una gorra, tomo su mochila y salía de su habitación, se veía molesta, -“¿¡hey a dónde vas?!”- dijo su padrastro molesto con botella de licor en mano, -“¡¿a ti que te importa?, no eres mi padre para darte explicaciones de a dónde voy!”- respondió Brenda enojada, -“¡eres una pequeña zorra, seguro te vas a verte con hombres, eres igual a tu madre”- dijo el hombre serio, -“¡déjala en paz!, ¿Brenda a dónde vas, cómo vas a salir a esta hora de la noche?”- dijo su madre molesta, -“prefiero salir a esta hora que quedarme escuchando tus gritos y los insultos de ese idiota que tienes como pareja”- dijo Brenda molesta, -“como quieres que te respete si tú no lo respetas”- dijo su madre enojada, -“si ni a ti te respeta, que me va respetar a mi”- dijo Brenda seria mirando a ambos, se alejaba de la casa, -“¡Brenda regresa aquí, regresa niña grosera!”- dijo su madre gritándole desde la puerta, -“te lo dije, es una zorra eso aprendió de ti”- dijo el padrastro enojado, -“¡cierra la boca y deja de tomar!”- dijo la madre dándole una bofetada, el hombre furioso la sujeto de los cabellos y la metió a la casa cerrando la puerta.
-“¿Alo Gianluca?, ¿aún sigue el empleo disponible para esta noche?”- dijo Brenda hablando desde un teléfono público, -“ya te animaste, a entrar al negocio”- dijo Gianluca hablando por teléfono mientras conducía su furgoneta, -“si, quiero el dinero para viajar a la capital, ¿pagaran muy bien verdad si hago lo que me dijiste?”- dijo Brenda seria, -“claro que sí, te pagaran muy bien si haces lo que ellos quieren, tendrás dinero como para que vivas un par de meses sin preocupaciones”- dijo Gianluca riéndose, -“entonces ¿en dónde nos vemos?, si conozco, estaré esperándote ahí”- dijo Brenda colgando la llamada, –“una más para la fiesta, ahora por donde vivía esta otra zorra”- dijo Gianluca buscando una dirección, luego al encontrarla se detuvo, toco el claxon varias veces, frente a una casa, veía a una joven que salía apresurada y le pedía que guarde silencio, -“date prisa Melva no tenemos toda la noche”- dijo Gianluca serio, -“ya estaba lista esperándote, vámonos”- dijo Melva algo nerviosa subía a la furgoneta, -“sí que estas animada”- dijo Gianluca sujetándole el mentón, -“no lo hago por diversión, necesito el dinero para mañana, tengo que venir a pagar la renta de mi casa o nos echaran a mi madre y a mí, apresuraste a más rápido lleguemos más rápido terminaremos y regresemos también”- dijo Melva, Gianluca como traía su cabellera larga se la recogía y se reía.
Brenda estaba en una esquina fumando un cigarro, veía un auto de la policía que pasaba cerca de ella, ella se cubría con la gorra que no la vieran, luego de ver que el auto se marchaba, ella camino hacia otra calle, -“espero que venga por esta calle, esa zona están peinando los policías”- dijo Brenda pisando su cigarro, en eso apareció la furgoneta, tocando el claxon muy exagerado, Brenda se acercó, -“puedes hacer menos escándalo, vi un auto de policía que esta peinando la zona”- dijo Brenda seria se acercó, -“tranquila preciosa, vi el auto de los policías ya están lejos de aquí, sube”- dijo Gianluca riéndose, Brenda subía y veía a Melva algo tímida, -“hola, soy Melva”- dijo ella extendiéndole la mano para saludarla, -“¿cuantas mas serán Gianluca?”- dijo Brenda seria, evitando el saludo de Melva, se sentó en la parte ultima de la furgoneta, Melva avergonzada se quedó al no recibir el saludo, -“faltan dos zorritas más, ellas tienen experiencia en esto, así que depende de ustedes que tan bien les pueden pagar”- dijo Gianluca riéndose, conducía la furgoneta.
En un lugar oscuro, se veían a varios hombres sentados, esperando el show, en eso salieron dos mujeres, una rubia de cabello corto con disfraz de muñeca sexy y la otra de cabello negro con disfraz de policía sexy, ambas empezaron a bailar en el tubo o baile de mesa, todos los hombres sonreían y con aplausos recibían el espectáculo, entre la multitud había un hombre de anteojos que las miraba muy atento, la policía sexy subía a las mesas de los clientes, bailaba agachándose hasta abajo y esposaba a uno como parte del show, la rubia muñeca se sentaba en las piernas de un hombre y le daba su paleta para que la lamiera, luego las dos bailarinas se reunían y se trepaban en el tubo para bailarles, contentos todos los presentes aplaudían y se ponían de pie al verlas terminar. –“Estuviste genial Ivette, ¿le sacaste dinero a alguien?”- dijo Tatiana, la policía sexy, -“si, me dieron buenas propinas”- dijo Ivette arreglándose el cabello, la muñeca sexy, -“hola chicas, permítanme presentarme soy Lorenzo, Gianluca les debió haber hablado de mi”- dijo Lorenzo entrando al camerino muy sonriente, -“si nos habló pero antes de entrar toque la puerta”- dijo Tatiana seria, -“es cierto, hoy será el espectáculo privado a donde iremos, como ya vio somos unas profesionales”- dijo Ivette sonriente se le acerco, –“ambas son magníficas, con lo que vi créanme que a mi jefe estará más que satisfecho”-dijo Lorenzo sonriente, -“¿y tu jefe es guapo?”- dijo Ivette sonriente, -“que importa eso, pagara muy bien por el show para mí eso es más que suficiente”- dijo Tatiana, -“les pagara muy pero muy bien chicas solo diviértanlo”- dijo Lorenzo arreglándose los anteojos, -“nosotras ya estamos listas, vamos a ir así”- dijo Tatiana seria, -“están maravillosas”- dijo Lorenzo sonriente, saliendo con las chicas del night club.
El par de chicas estaban con Lorenzo esperando en una esquina Gianluca, -“¿y que tan lejos queda la casa a dónde iremos?”- dijo Ivette sonriente le acariciaba el hombro, -“no muy lejos”- dijo Lorenzo sonriente, -“me encantan tus tacos punta aguja Tatiana”- dijo Ivette mirándole el calzado, -“son para ocasiones especiales, me hacen ver más alta”- dijo Tatiana, -“y que hermosa esta la luna”- dijo Ivette mirando la luna llena, -“ahí viene Gianluca”- dijo Tatiana seria, Ivette levantaba los brazos para que los vieran. La furgoneta se detuvo, Gianluca saco su brazo y acaricio a Tatiana, -“¿listas preciosas?”- dijo Gianluca sonriente, -“que gran tatuaje te hiciste Gianluca este es nuevo, cada vez te llenaras más de tatuajes todo el cuerpo”- dijo Ivette mirando su brazo, -“tú conoces todos mis tatuajes muñeca traviesa, vaya mi buen amigo Lorenzo veo que es muy puntual, espero que mis chicas lo hayan tratado bien, ya suban todos al auto, que nos vamos a divertir”- dijo Gianluca sonriente, Lorenzo subía en la parte de adelante con Gianluca, las chicas subían en la parte trasera, el auto se puso en marcha.
-“¿y ustedes en que night club vienen?”- dijo Ivette mirando a Melva y a Brenda, -“yo no trabajo en ningún night club, es mi primera vez que hago esto”- dijo Melva tímida, -“¿es enserio?, espero que no pongas el show aburrido, porque si no pones diversión no recibirás buena paga”- dijo Tatiana seria la miraba de pies a cabeza, -“¿y tu querida, también eres primeriza en esto?”- dijo Ivette sonriente mirando a Brenda, ella solo miro ambas y no dijo nada por la ventana veía la luna llena y que estaban saliendo de la ciudad, dirigiéndose pro un lugar desierto, -“vaya se ve que no es de hablar mucho, pero bueno nosotras venimos a trabajar no hacer amigas”- dijo Tatiana seria, -“esa es la actitud, a todas las quiero con su mejor sonrisa y las quiero ver radiantes, así que vayan cambiándose, Melva no puedes llegar con esa ropa, vas a animar a un hombre no vas a una universidad a estudiar”- dijo Gianluca, –“¿cómo se supone que debo vestirme?”- dijo Melva nerviosa, -“chicas ¿trajeron ropa para estas novatas?”- dijo Gianluca sonriente, –“por suerte yo traje unas ropas mías, espero que les quede”- dijo Ivette sonriente dándoles ropa a las chicas, Melva veía la ropa que le dieron, -“¿pretenden que use esto?”- dijo Melva mirando la ropa muy descotada que le dieron, Brenda tomaba la ropa y empezó a vestirse, -“si debes usarla para que muestres lo que tienes”- dijo Gianluca serio, Lorenzo por el espejo retrovisor las miraba vestirse, él sonreía.
Al llegar al punto de trabajo, Era una gran casa antigua, -“es aquí señoritas, ya saben las quiero complacientes, sonrientes, a mi jefe le gusta que lo diviertan, otra cosa hace unos días fue su cumpleaños y vinieron sus amigos con obsequios, él es un gran coleccionista así que no vayan a romper nada por favor”- dijo Lorenzo bajando del auto, Gianluca y las chicas miraban la casa, Lorenzo tocando la puerta, en eso abrió el mayordomo de unos 50 años de edad, -“buenas noches a todos, pasen el señor Máquense los está esperando”- dijo el mayordomo. La sala de la casa era enorme, había una gran mesa con bocaditos y bebidas, -“vaya, todo se ve de buena calidad”- dijo Ivette mirando la mesa, Brenda miraba una hasta con una bandera de Inglaterra, -“no es de aquí, es un inglés”- dijo Brenda, -“esos se pudren en dinero”- dijo Gianluca sonriente, -“¿y donde esta el homenajeado?”- dijo Tatiana seria, -“buenas noches bellas señoritas”- dijo el Sr. Máquense, un hombre elegante de bigote, que aparentaba cerca de 40 años de edad, bajaba por sus escaleras, -“no está nada mal”- dijo Ivette sonriente a Tatiana, -“sean bienvenidas a mi humilde morada, espero que se sienta a gusto, es más que se tomen la libertad de sentirse que están en la suya, beban, coman, todo es para ustedes”- dijo el sr. Máquense, -“señor Máquense, aquí están las mujeres que me encargo conseguir”- dijo Lorenzo sonriente, -“muy bien Lorenzo, como siempre haces un buen trabajo, todas jóvenes, hermosas, me encantan”- dijo el hombre mirando a cada una, -“usted decide a qué hora empezamos con la fiesta”- dijo Brenda seria, -“tienes ansias por comenzar, eso me gusta”- dijo el señor Máquense sonriente la miraba, en eso dio unas paladas y llegaron sus dos mayordomos, “Iker pon la música quiero verlas bailar para mí, Timothy sirve las bebidas”- dijo el señor Máquense sonriente, los mayordomos fueron a obedecer las órdenes, Lorenzo le alcanzó su silla a su jefe para que mire el espectáculo, Gianluca se alejaba del centro de baile, la música empezaba sonar, (Baccara- yes sir, I can Boogie – música de fondo). Las chicas empezaron a bailar, -“vamos bailen como saben hacerlo”- dijo Gianluca recibiendo su copa, cada una se dispersaba y empezaba a bailarle al señor Máquense, Melva se quedó en medio nos sabía qué hacer, -“ubícate en un lugar y mueve el trasero, te tarje para que lo menes”- dijo Gianluca serio se le acerco y se retiró luego de hablarle al oído, Melva se ubico en una esquina, Tatiana bailaba sobre una mesa muy sensual mirando al homenajeado le mostraba sus esposas de policía, Ivette sonreía bailando levantando las manos, Brenda se tocaba el cuerpo y bailaba, recordaba su vida cuando discutía con su madre y su padrastro, ella seria se veía pero bailaba muy sensual, Melva no se veía sensual bailando pero lo intentaba. Lorenzo aplaudía, los dos mayordomos a lado de su jefe miraban el espectáculo, Tatiana se fue acercándose, Ivette igual, Brenda no se quedó atrás, Melva al ver lo que hacían todas también se unió a ellas, todas lo acariciaban por todo el cuerpo al homenajeado, luego se dispersaron y terminaron frente a él, el señor Máquense aplaudía a gusto por lo que vio, sus empleados también, -“¡muy bien chicas!”- dijo Gianluca contento.
-“Me gusto lo que vi, así que empezare a tomar a una por una”- dijo el sr. Máquense sonriente, -“¿y quien será la primera afortuna, Tatiana, Ivette o Brenda?”- dijo Gianluca no mencionando a Melva, -“todas me encantaron pero me gusta la inocencia de esta chica, eres primeriza en esto y me encanta las que son calladitas, porque dicen que las que son así en otros rubros son ardientes”- dijo el sr. Máquense tomando de la mano a Melva y acercándosela hacia él, las demás no creían lo que veían, -“buena elección, tiene buen ojo señor Máquense, es nuevecita en esto por eso la ve un poco callada, le aseguro que le complacerá en lo que le pida, ya que es muy obediente”- dijo Gianluca sonriente, -“¿qué dices vamos arriba?”- dijo el señor Máquense sonriente, Melva asustada no sabía que decir miro a Gianluca, quien lo miraba y le decía que vaya, -“está bien, supongo que debo aceptar para eso estoy aquí”- dijo Melva nerviosa, -“me gusta tu inocencia, vamos a pasarla bien te lo prometo, Mientras los demás diviértanse”- dijo el señor Máquense sonriente, llevándosela por la escalera a su segundo piso, -“que suerte tienen las que no se bañan”- dijo Ivette, -“amigo Lorenzo, entonces que dice si me da mi pago para ir contándolo, no es que sea desconfiado pero soy muy lento para contar el dinero”- dijo Gianluca sonriente, -“está bien le llevare al despacho de mi jefe, ahí podrá contar su dinero”- dijo Lorenzo llevándose a Gianluca, -“vamos a bailar, si”- dijo Tatiana mirando a Iker el mayordomo más joven, lo sacaba a bailar, -“si hay que divertirse se supone que esto es una fiesta”- dijo Ivette tomando de la mano a Timothy y empezando a bailar, Brenda fue a servirse algo de tomar.
-“Aquí está su dinero puede contarlo con toda su paciencia”- dijo Lorenzo sonriente mostrándole el maletín repleto de dinero, luego lo dejo solo y se marchó, -“vaya este negocio me encanta”- dijo Gianluca riéndose al ver tanto dinero, empezaba a contarlo.
El sr. Máquense ingresaba a una habitación con Melva, ella se veía muy nerviosa mirando la cama, -“tranquila, te siento nerviosa, no encenderé las luces para que lo estés menos”- dijo él, -“es que no tengo experiencia en esto, es mi primera vez que hago esto”- dijo Melva nerviosa, -“tranquila solo acuéstate, yo empezare, seré muy delicado”- dijo él sonriente, le ayudo a acostarse en la cama, -“por favor sea muy delicado”- dijo Melva cerrando los ojos, el sr. Máquense se iba quitando la camisa sonriente la veía temblar de nervios,-“tranquila, disfruta, relájate”- dijo él besándola por su cuello.
Lorenzo llegaba a la fiesta y veía a Brenda bebiendo sola, -“¿qué pasa no te diviertes con tus amigas?”- dijo Lorenzo sonriente, -“no son mis amigas, es más ni las conozco, primera vez que las veo”- dijo Brenda seria, Lorenzo le quería tocar la mejilla pero ella se distanciado un poco, -“vaya ya veo porque no tienes amigos, tranquila si te portas bien conmigo te puedo dar un dinero extra”- dijo Lorenzo sonriente, -“así de cuanto hablaríamos”- dijo Brenda seria, Lorenzo le susurró al oído, luego Brenda acepto salir a bailar con él, Tatiana e Ivette sonreían al ver que Lorenzo saco a bailar a Brenda.
El sr. Máquense besaba y acariciaba a Melva, ella cerrando los ojos asustada quería llorar, -“necesito el dinero para pagar mi renta, lo necesito”- dijo ella repitiéndolo en su mente, en eso abrió los ojos cuando sentía que le tocaban sus partes íntimas, -“¡no!, lo siento no puedo hacerlo”- dijo Melva llorándolo empujo a un lado de la cama, -“¿qué dices?”- dijo el sr. Máquense serio, -“lo siento no puedo, necesito el dinero pero esta no es la forma como lo conseguiré, quiero irme a mi casa”- dijo Melva llorando, -“no puedes irte y dejarme así, pague dinero por ti, quiero que cumplas tu parte”- dijo el sr. Máquense molesto, -“que le devuelvan su dinero, pero no puedo acceder a esto”- dijo Melva llorando luego se fue a querer abrir la puerta pero no podía, estaba cerrada, -“no podrás salir de aquí”- dijo el sr. Máquense serio, -“ábrame la puerta por favor quiero irme”- dijo Melva asustada empezó a llorar, el sr Máquense tenía los ojos rojos, ella asustada lo miro, -“tú eres mi plato de entrada”- dijo él empezando a transformarse, su cuerpo le brotaba mucho pelo, su espalda se encorvaba, sus pies le creían y sus manos se volvían garras, tomaba la forma de una bestia licántropo, Melva al ver en lo que se convirtió empezó a gritar y a golpear la puerta desesperada, -“¡sáquenme de aquí, Gianluca ayúdame!”- dijo ella aterrada, en eso el sr. Máquense frente a ella la sujeto le mostraba sus grandes colmillos, Melva grito, en eso el hombre lobo le mordió del cuello, arrancándole un gran pedazo, el cuerpo cayó al piso, él se quedó mirando la cabeza en sus manos, la arrojo a un costado y fue comer el cuerpo, la cabeza de Melva estaba a un costado de la habitación.
-“Quiero ir al baño”- dijo Ivette al mayordomo, -“por aquí la llevo”- dijo Timothy sonriente. Tatiana estaba con Iker bailando, él la besaba por el cuello, ella le hablaba al oído. Se veía las patas de la bestia que se acercaban por el pasadizo, veía a todos bailar, el sr Máquense rápido retrocedió ocultándose que lo vieran, Brenda miro hacia arriba por las escaleras, veía el sr. Máquense bajar, lo notaba algo extraño como más joven, sin bigotes, -“vaya sí que se están divirtiendo”- dijo el sr. Máquense sonriente les aplaudía, -“¿y Melva?”- dijo Brenda intrigada, -“debe estar dándose una ducha”- dijo Lorenzo sonriente la abrazaba por la cintura, -“disculpe señor ¿desea algo de tomar?”- dijo Iker apenado alejándose de Tatiana, -“tráeme una copa tengo sed”- dijo su jefe sonriente, Brenda lo miraba, parecía otro, ella no entendía que se hizo para que se rejuveneciera.
Ivette iba a entrar al baño, Timothy la miraba y sonrió, -“no seas un pícaro, entrare yo sola, tu espérame aquí”- dijo Ivette sonriente entro y puso el seguro. Ella se miraba en el espejo y se pintaba los labios, sonreía arreglándose el cabello, en eso escuchaba un ruido extraño afuera del baño, -“¿señor Timothy?”- dijo Ivette escuchando un rugido como de animal, asomo su oído a la puerta, quiso abrir, en eso quisieron abrir la puerta desesperadamente, Ivette retrocedió asustada, -“señor Timothy está ocupado aun”- dijo Ivette asustada, en eso empezaron a golpear la puerta, Ivette asustada miraba como empezaba romperse, quería ingresar como sea, Ivette asustada gritaba ayuda, en eso ingreso una mano peluda de la bestia, Ivette retrocedió asustada y grito, miro la ducha e ingreso, puso el seguro a la puerta de vidrio, la puerta fue derribada, ingresaba la bestia, Ivette se alejó de la puerta a través de la luna de vidrio tipo nevado veía la forma de una bestia que asomaba su cara para poder mirarla, asustada se tapaba la boca y soltaba lágrimas, la bestia respiraba fuerte, luego se alejó saliendo del cuarto del baño, Ivette temblaba, quiso abrir la puerta de la ducha para percatarse que se fue la bestia, de pronto el hombre lobo entro sorpresivamente golpeando la puerta del baño, esta se rompió de la mitad para arriba, Ivette grito, el hombre lobo la sujeto de las cabellos y la jalo hacia él con una fuerza, introduciéndole su mentón en una parte filosa de la puerta rota, Ivette estaba muerta votando sangre por la boca, la bestia miraba su pata de sangre y se lamia.
Lorenzo ya estaba ebrio, seguía bebiendo y bailando con Brenda, ella se notaba incomoda ya, el sr. Máquense la miraba sentado en su silla, cruzado de piernas, Tatiana bailaba sola, luego se acercó al sr Máquense, -“¿qué pasa, no se divierte?, veo que miraba mucho a la chica y a su empleado, ¿está usted celoso acaso?”- dijo Tatiana sonriéndole, -“Lorenzo es mi hombre de confianza, puede tomar una, de ahí todas ustedes son para mí”- dijo el sr. Máquense sonriente le acaricio, -“¿entonces aún puede divertirse conmigo?”- dijo Tatiana, -“aún tengo fuerzas y ganas”- dijo él sonriente, Tatiana lo sacaba a bailar, abrazados empezaron a bailar una melodía lenta. -“¿Vamos a otro lugar para estar solos, que te dices?”- dijo Lorenzo sonriente, -“tú jefe lo veo distinto, algo se hizo, no se tiene otro semblante”- dijo Brenda, -“cuando prueba a una mujer se rejuvenece, u también tendrás otro semblante cuando me pruebes”- dijo Lorenzo sonriente le hablaba al oído, -“¿no abra problemas con tu jefe?”- dijo Brenda, –“claro que no, soy su brazo derecho”- dijo Lorenzo sonriente, la tomo de la mano y se la llevo.
-“¿Dónde está tu amiga, la rubia?”- dijo el sr. Máquense, -“fue al baño creo, se fue con uno de los mayordomos, el más viejo”- dijo Tatiana, -“mi fiel Timothy espero que se esté portando bien”- dijo el sr. Máquense acercándose a su cuello, se le notaban sus colmillos, sus ojos se ponían rojos, -“señor Máquense su fiesta esta sensacional”- dijo Iker apareciendo, Tatiana lo miro, el señor Máquense serio lo veía por interrumpirlo, -“¿se está divirtiendo con las chicas?”- dijo Gianluca con una copa en mano, -“si, todas están preciosas, la primea estuvo deliciosa, esperemos que esta belleza este igual”- dijo el sr. Máquense sonriente la miraba ya con los ojos normales, -“soy mucho mejor que la estúpida esa que te llevaste”- dijo Tatiana sonriente, -“será cuestión de probarte, divirtámonos un poco más arriba en otro de mis cuarto, hazme un show privado”- dijo el sr. Máquense sonriente llevándosela al segundo piso, Gianluca estaba comiendo lo que encontraba en la mesa.
Lorenzo iba por un pasillo con Brenda de la mano, llegaron a una habitación e ingresaron, la habitación tenia las luces pagadas, -“sabes ve a lavarte la boca hueles a puro licor, mientras yo me alisto”- dijo Brenda subiendo a la cama, Lorenzo sonreía la señalaba y entraba al baño, Brenda miraba la habitación, –“este lugar tiene algo extraño, algo tétrico”- dijo Brenda sintiendo escalofríos, en una mesa veía unas joyas, -“¿y esto de quien será?”- dijo Brenda mirando las joyas que pertenecían a mujeres, -“ya salgo espérame”- dijo Lorenzo riéndose desde el baño, Brenda volteo a mirar la puerta y por debajo de esta, se veía la luz encendida, la sombra de los pies de Lorenzo empezaron a transformarse, Brenda asustada los miraba, escuchaba un ruido extraño, -“¿Lorenzo, te sucede algo?”- dijo ella retrocediendo de la puerta del baño y se dirigía la salida, en eso la puerta se abrió, -“¿dónde estás palomita?”- dijo Lorenzo convertido en hombre lobo, Brenda impactada lo miro, ella abrió la puerta, y se fue huyendo. Lorenzo la perseguía, Brenda corría pidiendo ayuda, Lorenzo aullaba, Brenda volteo por otro pasadizo y veía a Timothy rejuvenecido limpiando con un trapeador la sangre del baño donde mato a Ivette, asustada lo miro, él le sonrió, asustada entro a una habitación, se encerró, empujo un mostrador para reforzar la puerta, -“¡abre la puerta maldita zorra!”- gritaba Lorenzo empujando la puerta de una manera brusca, -“¿qué está pasando, a donde venimos a llegar?”- dijo Brenda asustada miraba a todos lados, entro al baño de la habitación y veía una pequeña ventana de escape, ella se trepo y salió por ahí hacia otro pasadizo, corría asustada sin mirar atrás.
El señor Máquense estaba besando a Tatiana afuera de la habitación, -“entremos de una vez”- dijo ella sonriente entro al cuarto, cuando el sr. Máquense iba a entrar, en eso apareció el mayordomo, -“señor Máquense, Timothy se comió a una de sus presas, deme a mí una de sus invitadas, compártamela por favor”- dijo Iker suplicando, -“¿que está diciendo?”- dijo Tatiana sin entender lo que escuchaba, el sr. Máquense miraba Tatiana luego miro a Iker, -“¡eres un idiota lárgate de aquí!”- dijo el señor Máquense acercándose a su mayordomo y dándole un par de bofetadas lo empujo que se fuera, Tatiana cerró la puerta dejándolo afuera, -“espera, abre la puerta”- dijo el sr. Máquense, -“¡no hasta que me digas donde esta Ivette!”- dijo Tatiana seria, -“tranquila, mi mayordomo perdido la cabeza, esta ebrio”- dijo él serio, -“pues llama a mi amiga, ve y tráela”- dijo Tatiana seria, el sr. Máquense empezó a enojarse, sus ojos se volvieron rojos, -“¡abre la puerta eh dicho!”- dijo él golpeando la puerta, empezó a transformarse en un hombre lobo, Tatiana adentro de la habitación estaba asustada, en eso los golpes empezaron a ser más violentos, Tatiana no sabía qué hacer ni a donde esconderse.
Brenda corría hasta que llego a la cocina, entro y se escondió detrás de una mesa, en eso miro un juego de cuchillos, ella tomo uno, el más grande que encontró, -“esas cosas parecen lobos como de los cuentos, pero en las historias que podía matarlos, a diferencia de los vampiros son débiles con algo, pero que era”- dijo Brenda asustada, cuando entro el mayordomo Timothy silbando, empezaba servirse un vaso con agua, empezó a olfatear, dejo en vaso en la mesa y mirando el lugar donde estaba Brenda se acercaba sonriente, cuando se asomó por debajo de la mesa, -“te encontré”- dijo Timothy pero no había nadie, luego se levantó, -“¡muere hijo de perra!”- dijo Brenda saliendo detrás de la cocina, clavándole el cuchillo en la mano atrapándolo en la mesa, Timothy grito al ver su mano atrapada, -“no es plata idiota esto no nos puede matar así de fácil”- dijo Timothy con sus ojos rojos y sus colmillos grandes, -“gracias por hacérmelo recordar a que eres débil”- dijo Brenda enojada con su otra mano tenía otro cuchillo y le corto la garganta, Timothy se empezaba a desangrar tocándose la garganta, ella salía de la cocina apresurada.
El sr. Máquense convertido en hombre lobo derribo la puerta, ingresaba a la habitación, Tatiana debajo de la cama estaba escondida, en silencio por debajo de las sabanas veía que caminaba en dos patas, -“vamos sal de tu escondite preciosa, te prometo que no seré muy rudo como lo fui con tu amiga”- dijo el sr. Máquense, empezaba a oler, entro al cuarto, estaba vacío, veía al cama bien tenia, empezaba a olfatear, miraba la cama, se acercaba lentamente, –“¡te encontré!”- dijo el hombre lobo asomando su cabeza, Tatiana grito y le incrusto su taco en su ojo, el hombre lobo adolorido se cogía la cara, levanto la cama con sus fuerzas, Tatiana se alejó asustada, -“¡maldita perra te vas a morir!”- dijo la bestia quitándose el taco de su ojo, Tatiana se puso de pie, se quiso los tacos y corrió hacia la salida lo más aprisa que podía.
Gianluca estaba ebrio en la sala, cuando escucho a Tatiana, –“¡Gianluca tenemos que irnos de aquí, este lugar es un matadero!”- dijo ella bajando por las escaleras apresurada, -“¿un matadero de que hablas?”-dijo Gianluca riéndose, -“vámonos de aquí eh dicho, corre o te va a comer el hombre lobo”- dijo Tatiana llorando asustada, -“¿hombre lobo, te has drogado?”- dijo Gianluca riéndose, -“si el sr. Máquense es uno de ellos”- dijo Tatiana llorando, -“entonces hay que conseguir herramientas de plata, los lobos son vulnerables a la plata”- dijo Gianluca riéndose, -“¡es en enserio idiota!”- dijo Tatiana enojada, en eso miro al hombre lobo que salto hacia la sala, Taiana grito y corría, Gianluca voltio y asustado veía al hombre lobo con el ojo herido, -“¡tu zorra me dejo tuerto!”- dijo el hombre lobo molesto, en eso le giro la cabeza hacia su espalda , Tatiana grito aterrada y corrió por otro pasillo de la casa, -“¡ven aquí zorra!”- dijo el sr. Máquense furioso viéndola escaparse, Tatiana lloraba y corría lo más aprisa que podía, el sr. Máquense estaba persiguiéndola, cuando estaba por alcanzarla, de uno de los pasillos apareció Iker para atraparla pero se chocó con el señor Máquense, estos cayeron y rodaron, Tatiana dio la vuelta al pasillo, -“¡imbécil me tienes harto!”- dijo el hombre lobo furioso, -“perdón señor es que…”- dijo el mayordomo disculpándose, el hombre lobo lo mordido de la cabeza y la arranco de un solo mordisco, arrojándola hacia un lado, el sr. Máquense fue a buscar a Tatiana.
Tatiana por el pasadizo estaba sola gritando ayuda, cuando veía a Timothy arrastrándose afuera de una habitación, golpeando la puerta, -“¿qué es eso?”- dijo ella asustada se detuvo, Timothy al verla le mostro sus colmillos, de pronto la puerta se abrió y salió Brenda con un abre cartas, le incrusto en la cabeza, Timothy empezó a quemarse, luego se le incendio la cabeza, -“¡pasa rápido!”- dijo Brenda pateando el cuerpo del mayordomo a un costado de la entrada, Tatiana ingreso, -“¿qué está pasando aquí?”- dijo Tatiana respirando más calmada, -“son hombres lobos y nosotras somos su presas, así que si no quieres morir tienes que defenderte y aquí tenemos todas las herramientas”- dijo Brenda mirando varias vitrinas de vidrio con lanzas de plata, espaldas de plata, -“es un coleccionista, aquí tiene todo lo que le hace daño y los hombres lobos son débiles contra la plata”- dijo Brenda seria, -“¿estas segura lo que dices?”- dijo Tatiana, -“si, ya viste como se encendió ese mayordomo apenas le incruste el abre cartas, eso les pasara a cualquiera de esas bestias que se nos acerque y lo ataquemos con estas armas, tenemos que luchar para salir de aquí”- dijo Brenda seria, –“¿y si esperamos al amanecer?”- dijo Tatiana, -“no son vampiros, no mueren con la luz del sol, así que toma lo que puedas pero debemos atacar o antes de ser atacadas”- dijo Brenda, -“tenemos que buscar a Ivette, tal vez esté viva”- dijo Tatiana, -“viste al que mate, era el mayordomo viejo que se fue con Ivette, creo que tu amiga fue su cena, la sangre de los humanos los rejuvenece, me di cuenta cuando el sr. Máquense se llevó a Melva y bajo a la fiesta rejuvenecido, seguro se la comió, por eso nos trajeron aquí para ser su fuente de juventud”- dijo Brenda rompiendo una vitrina saco una lanza, tomo un pistola con balas de plata y un par de abre cartas más, Tatiana rompió otra vitrina y saco una espada de plata, también tomo unos cuchillos de plata, -“acabemos con esos hijo de perra”- dijo Brenda seria.
Las dos mujeres salían muy alertas, mirando a todas partes, -“¿por qué nos trajo Gianluca aquí?”- dijo Tatiana, -“a mí me dijo que se encontró con un tipo en el bar que estaba buscando mujeres para la fiesta de su jefe, ese era el tal Lorenzo, este le ofreció mucho dinero a cambio de llevar a mujeres no sabía que iba a ser una cacería, que nosotras íbamos a ser las presas de estas bestias”- dijo Brenda enojada, -“esto parece un cuento de terror”- dijo Tatiana, en eso escucharon un ruido, ambas miraban por todos lados, pero no veían nada, -“¿de dónde vienen esos ruidos?”- dijo Tatiana asustada, -“están cerca”- dijo Brenda, -“pero donde esta no lo veo”- dijo Tatiana asustada, en eso empezó a caer baba desde el techo, -“¡arriba!”- dijo Brenda mirando hacia el techo, el hombre lobo salto sobre ellas, Tatiana grito arrojándose a un costado, Brenda le disparaba en las piernas de la bestia, este aullaba de dolor, luego se dirigió hacia Brenda para atacarla pero ella se metió bajo una pequeña mesa del corredizo y le iba disparando mientras la bestia le salían humo de sus heridas, el hombre lobo tomo la mesa y la arrojo lejos, Brenda ya no tenía balas sentada empezó a retroceder, la bestia aulló y se saltó sobre ella, Brenda tomo su lanza y la coloco contra la pared, el hombre lobo con la fuerza se incrusto, miraba su estómago que salía humo, se empezaba a encender, se convirtió en Lorenzo con la lanza atravesada, -“vámonos, ya mataste a uno”- dijo Tatiana tomándola de la mano la ayudo a ponerse de pie y se fueron.
Llegaron a la sala principal, no veían nadie, solo rastros de sangre, -“que asco”- dijo Tatiana, -“vamos salgamos de aquí, date prisa”- dijo Brenda corriendo hacia la puerta pero esta no se podía abrir, -“no se puede abrir”- dijo Tatiana intentando abrir, -“no puede ser, nos encerraron”- dijo Brenda, -“por supuesto, pague mucho dinero por ustedes así que son mías, son mi propiedad y puedo hacer lo que se me plazca con ustedes”- dijo el sr Máquense más rejuvenecido se presentaba, -“está más joven”- dijo Tatiana sorprendida, -“parece que se comió a otro”- dijo Brenda seria, -“exacto, a su amigo, ¿cómo se llamaba?, ¿Gianluca creo? pero no lo termine, no estaba apetitoso la verdad, ¿chicas necesitaban una mano?, aquí hay una”- dijo el sr. Máquense arrojándoles el brazo con el tatuaje de Gianluca, Tatiana grito asustada, -“maldito, no nos vas a matar, hemos matado a dos de tus sirvientes, solo faltas tú”- dijo Brenda enojada con la lanza en mano, –“el pobre de Timothy y el idiota de Lorenzo, bueno si los mataron es porque son fuertes, eso quiere decir que su carne será deliciosa”- dijo el sr. Máquense sonriente, en eso se empezó a transformar, Tatiana gritaba al verlo convertirse en hombre lobo, -“¡no bajes la guardia!”- dijo Brenda seria, quitándole los dos cuchillos de plata a Tatiana y dirigiéndose atacar a al hombre lobo pero este se agacho, dándole un golpe que la arrojo a varios metros lejos de él, -“a más joven más fuerza tengo, y por eso serás la primera en morir”- dijo el hombre lobo dirigiéndose a Brenda, Tatiana grito y con la espalda le hizo un corte en la espalda, el hombre lobo aulló, –“¡maldito déjanos ir!”- dijo Tatiana enojada, el hombre lobo se le acercó furioso, Tatiana asustada miraba lo grande que era, -“atácalo, no le tengas miedo”- dijo Brenda gritándole, la bestia frente a ella, la sujeto y levanto, le quito la espada, ella empezó a gritar, en eso la bestia la arrojo muy lejos contra la pared donde había una bandera de Inglaterra, Tatiana quedo incrustada, colgando. Brenda asustada se puso de pie, -“ahora sigues tú”- dijo el hombre lobo dirigiéndose hacia ella, Brenda tomo su lanza de plata y se fue dispuesta atacar, el hombre lobo sujeto la lanza y se quemaba la mano, -“soy más joven y más fuerte te dije”- dijo él quitándole la lanza y sujetándola del cuello, la levantaba con su brazo, -“dime ¿cómo quieres morir, como tu amiga?”- dijo el hombre lobo riéndose, Brenda no podía hablar muy bien, -“yo también soy joven y fuerte”- dijo Brenda sacando de sus bolsillos los dos abre cartas de plata y le incrusto en el otro ojo, el hombre lobo aullaba de dolor, la soltó arrojándola lejos, Brenda dio varias vueltas, -“¡maldita, me has cegado!”- dijo el hombre lobo tocándose sus ojos, Brenda veía la espada de Tatiana, se dirigió para tomarla, el hombre lobo escuchaba sus pasos y fue hacia la misma dirección, Brenda tomo la espalda, -“¡donde estas zorra!”- dijo el hombre lobo queriéndola atrapar pero no la veía, sus rasguños estaba dando sin dirección alguna, -“justo aquí”- dijo Brenda enojada que estaba agachada esquivándolo, en eso le clavo la espada en el pecho, el hombre lobo empezó a quemarse, Brenda retrocedía asustada, el sr. Máquense aullaba regresando a su estado original, se iba incendiando hasta que se detuvo, cayó al suelo, estaba carbonizado, Brenda se puso de pie, se acercó al cuerpo y le saco la espada, se dirigió a la puerta y con un fuerte corte en la cerrada la abrió, era un día soleado, miro la espada de plata, -“espero que me den un buen dinero, la plata tiene valor aun”- dijo ella llevándose la espalda, se marchaba de aquel lugar. (Baccara- Yes sir I can boogie – canción de fondo). Fin
OPINIONES Y COMENTARIOS