Entre verso y versos anhelo darte un beso,

de esos que cantan y brota un brezo.

drama y dramas por cada rama descolgada por tocar tú ventana, y descansar mi corazón en tu cama,

eres lo que pasa una sola vez en la vida,

mi vida es tuya si es así que lo aclamas.

No tomará ni un minuto y él triunfar estará. El dominio recordará tú nombre; el poder de tu llamado llegará.

Tú nombre y únicamente tú nombre idolatrará las palabras de mi memoria, y en nombre de mi gloria llorará un sin fin de gotas que caerán en la punta mis botas.

Botas viejas y rotas que me servirán para correr y huir de la vileza y olvido, un olvido no percibido.

Ahora mantendrán cerradas las puertas de mi hogar, hogar al que llamabas antes de llorar, hogar en que llegabas unos minutos antes de resonar la señal para cenar.

El teléfono de la pared no recibirá más llamadas, porque nadie más sabrá donde estará, ahora mi sofá tendrá un nuevo lugar y ahora existirá un nuevo lugar para decorar.

Decorar es no parar de soñar,

y soñar es nunca morir por amar…

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