
Quiero que todos recuerden mi alegría, que se olviden si alguna vez me vieron triste o si sintieron melancolía en mis sonrisas; quiero que los demás recuerden mi risa como el sonido de un alegre cascabel, que el recuerdo de mi alegría les contagie la actitud de vivir positivamente, de creer que las cosas negativas no durarán para siempre si las aceptamos y aprendemos de ellas; hoy deseo borrar la tristeza de todos los que se acerquen a mi, quiero encender una llama en sus corazones, quiero curar sus heridas invisibles, quiero ser la medicina que necesitan para sus enfermedades ocultas.
No tengo palabras sabias para ofrecer a nadie; no puedo dar consejos, pues aún yo, sigo tropezando en mis errores; no puedo decir a los demás que deben hacer con sus vidas, pues todavía yo, me confundo a veces de camino en la mía.
Pero tampoco quiero que me recuerden en palabras, quiero que mi recuerdo sea para ellos un sentimiento, algo que quede grabado en sus memorias, algo, que cuando yo no esté y se acuerden de mi, les haga erizarles la piel dibujándoles una sonrisa en sus caras y que esa sonrisa de mi recuerdo les haga fortalecerse y seguir adelante en sus retos; porque es como quiero que me recuerden, …
… con una sonrisa.
OPINIONES Y COMENTARIOS