Genesí Apokálypsis.

Vernarth estaba dispuesto al umbral de la vigencia de la constelación de Orión, apenas con cien millonésimas tal como lo indicaba el Duoverso en su anfibología Cosmogónica, y sensible del espacio físico con las vasijas Kli que portaba en sus espalda que estaban en la proximidad del Bucle de Bernard como la nebulosa de Omisión a manera del hemiciclo exponencial en el centro del óculo de Aorion esperándoles a Vernarth y redistribuir sus moléculas a 518 años luz o 440 Pársec, con el diámetro que se reflejará en Patmos de más de 300 años luz condensado con el elemento del Hydor o agua del espacio alto sobre Aorion. Vernarth unido de la olorosa mano del Mashiaj lo podía portar cuando se alejaba del Opistodomos y de restos de lagunas incandescentes de materias de súper novas que les rodeaban para acelerar la masa del Nimbus Iridiscente que les portaría Vernarth, y el Mashiaj como centinela de su Purgación ya definida toda vez que se haga efectiva la explosión simultánea de la Súper Nova con Patmos, y el Mundo Terrenal en impulsividad que le amonestaba bajo el omoplato derecho en la enjuta oquedad del brazo que iba deshaciéndose del oscilómetro justo en la entrada original de Betelgeuse, y cuando Vernarth permanecía solitario en la recamara de altitud frontal para despegarse hacia las cosmogonías de Eridanus para sintonizar en la ptolemaica astral. La Sybilla que hacía de consorte estelar seria Herófila con visos de expansión y su masa brillante métrica que le llevaría por Betelgeuse Orionis aliado a un instrumento multifuncional como el Aulós de entrada expeliendo hidrógeno como un As en 240 escalas de armonía, y sones de luz que rimbombaban hacia las pléyades y Vía Láctea donde sería el supuesto primer estado de paradoja donde Vernarth proferiría: “Dadme un poco de Gála y seré más que Zeus”. He aquí donde experimentará la diartrosis de sus articulaciones sinoviales en vías del cartílago Hialino, aliándose con los dos huesos y sinovial para dar caza anticipada del Trampero Aorion para despertar del temido mundo inerme que el temía dado que todo lo que abandonaba a pesar de tener su Purgación descargada, seguía intuyendo que sin el nada trabajaría para un mundo perdido. Aquí Vernarth sostendría la primera visión de infancia de Alejandro Magno cuando era un infante en Péla usando su escapula con la fuerza de los discos de frotación en las olimpiadas haciendo del cielo su Constelación incrustada de batidas de Odisea, y hoscas Helenísticas estando para mayo en el trapecio del ámbar tronco y en cada mano una Xiphos y Dorus. Las patologías estaban a la vanguardia con diestras inclinaciones de su Kopis al poniente cuando la arroja y el silbido de vuelta le hace ver que los meteoritos llegaban hasta donde su mirada podía observar las latitudes del Tirreno. 

Coge su garrote de bronce latón con halito corrosivo limando las odiseas sobre los concupiscentes pezones de Eos, Diosa del amanecer abriéndoles los cielos de oriundos deseosos de Gála, al libar leche prima por el límite derecho de la comisura de sus labios superiores ante los primeros amaneceres del mundo, cuando Eos estaría en granos o gramíneas que blandían desde la clava de bronce que esperaba Vernarth antes de dejar Gaia, o más bien la tierra fecunda de Patmos que le oficiaba. Aparecían megas hectáreas que amenazaban la venganza de Enopión turrándole los ojos que brillaban en las estrías de Hesíodo al advocarle en el Duoverso donde todas las deidades se anularían pero sus ramificaciones psíquicas como humanos estelares se revestirían del accionar del gas Helio. De este modo Vernarth ya se despedía de San Juan Apóstol con su redomado ojo puesto del brillar de ambas pupilas entre Mintaka, Alnitak, y del tercer brillo de sus pupilas unidas en comunión a Vernarth al arribar de soslayo al pálido brillar de Alnilam(Las Tres Maríah) cuarta estrella a seguir en Orión como las más brillante de las tres en el cuello de Vernarth como un collar de aljófares preciosos. De este modo subía los escalones a medida del brillar pausado de la inmensidad del celeste solsticio que le levantaba con el Sol expediente que también le conducía hacia la duodécima lunación de la bóveda celeste apegada a Pléyone en su matriz oceánida bolometrica, que surgirá entre el estelar limítrofe entre los Canes Mayores y Menores, y a priori en la mensura del ojo de Aorion siempre acosando las Pléyades. La intríngulis por segunda vez renacerá del envión del Duoverso que Vernarth tendrá que dejar en el páramo de oscilación de biosfera de Prometeo ya liberándose de la vida en comunidad, y de una extrema sensibilidad de conexiones psíquicas mayores que fluirán por toda la inmensidad del tiempo inabordable, sobre la atmósfera de la tierra como bronces que se tuercen en los cuellos de los bueyes que orinan sobre las dotaciones del Bucle de Barnard, y su polifónica excitatriz magnética, sobre él la Orina de Orión cayendo sobre los polos como flagrante Anfibología. El Corcel Kanti y la nebulosa de Aorion al compás de un waltz irán ionizando portentos químicos de iones exentos de electrones, sobre las moléculas neutras de Betelgeuse para propagarse en los nervios de los hombros del garrote de bronce ad limite de praxis armoniosa, y avenencia neta al ir suministrando pasos a la nebulosa y arte del Duoverso que muestra los primigenios días cuotidianos cómo en su brazal alquímico, germinando astrales del Lynothorax y axilar sobacal que le acoyuntaba en su máximo garrote, talando raíces de Olivo Bernar después de los Bucles de Barnard entremedio de estrellas fugitivas que se van regimentado en su explanada sangrante ionizada, como Stellae Novae que trasfiere los cultos astronómicos en la formación y pretexto de ir por las obscuridades a dormir cerca de sus padres Poseidón y Euríale, aclamándole cerca de los gramíneos campos para empastarle de arcilla explosiva sobre el cartapacio de tal cara ebria sonriente de vino Jónico, en precedencia del diseminar por el nuevo y expandible naciente Duoverso, Vernarth ya iba en los postrimeros escalones de la escalinatas símil a la de Florencia en la Medicea Laurenziana como bien dicho sentir vivir al ir yendo al paraíso junto al Messiah que le vino a recoger.Pero a ratos electrizantes residuos se desvanecían por sobre su campo visual en pequeños haces o flashes, que le impedirían seguir avanzando hacia los últimos estribos sin mirar hacia atrás donde toda la Primogenitura le estaba observado para verle por última vez. Sentado en el borde de Andrómeda estaba Zefian esperándole para encontrarse con él en su cámara obscura, ya al causalidad mas intima y primigenia de su metafísica emergía de la bases de la razón de todas las cosas que debieran existir, antes de todo lo creado y que nunca ha tenido preeminencia como es en este caso de la cámara parasitaria de Zefian en la compañía del Auriga, que venía a esperarle asimismo en la calesa desbocando tal como la prescribe el Duoverso en las estructuras de luminosidad en medio de esta colosal cámara inter planetaria, entre puntos agitados moleculares que se aventurarán por el axón del infinito impredecible longitudinalmente por años luz aun siendo así. Los desenlaces térmicos de remanentes sobrecalentados sobre toda la luminosidad hablaran de la hecatombe, y de la vaciedad inherente en los ojos del invernáculo eterno muy próximo a las súper novas que solo pueden afianzar la fusión de los discos de espacialidad del Universo-Duoverso mucho antes de la explosión entre Orion y Andrómeda. 

Los ejes del tiempo se dislocaran entre ambos componentes astrales en este disonante caos que se contraerán con la levitación de Vernarth toda vez que haya pisado el último peldaño antes de ingresar a la cámara del Hydor en toda porción obscura del Universo haciendo de de ambas constelaciones la virola o anillar que cederá ante el sobacal de Betelgeuse, desposeyendo los alardes del Comandante Hetairoi apropiado de su Lynothorax para resistir los embates y turbulencia del Apokálypsis, que traían las inmensas cargas de materia que descargaba toda su energía contante por medio de las circulantes nucleares centrales, y tangentes que provocaban cambios de galaxia agujereada por glebas de Hetairoi Aorion satirizando expendios por retraer las galaxias debajo del precepto de Soldado y masa súper homeostática atraída de su distanciamiento a escalas astronómica de 2,5 millones de años luz. La galactógena galaxia se valía de grandes prominencias que cubrirían el proporcional mayor que se esboza en Andrómeda de las hebras del Universo adyacente al espiral que rueda sobre el sobacal postergándose a secciones de telescopio, y campo gravitacional para ejecutar su traslación nocturna como la Galaxia Hiperdisis que recoge los borbollones del cinto en conjunciones de estrellas menores haciendo mecánica de estrellas por exalto ,y trastornos del magnéticos creando otras atmosferas dirigentes en las desprendidas del cordón de Andrómeda, Vía Láctea y Orión. Vernarth seguía asido de la mano trasparente del Messiah mientras iba subiendo los peldaños de ascensión al Hydor que le trasportaría a viajar con el por los Cúmulos globulares conformarán el perfecto retardo de transfundir de la estirpe y No otra, de este modo el Lynothorax o pectoral sangrante de Vernarth seguía fluyendo de este tractatum de polinomio entre todas la directrices de subyugación del área, y refinamiento del perfil sagital de Hiperdisis en el Duoverso replanteado reversible inter-galáctico. Lenticular a irregular por sobre la Clava del trapezoide se propagaba hacia el brazal derecho de Aorion, secuencialmente haciendo el hipo céntrico radiograma, no obstante profitando de la materia interestelar para autogenerar luz propia trasmisión, esto hacia de abstener de emanar la hibridez que salía de su cuerpo al vibrar por sobre todo lo que expelía desde su centro hacia la rectitud derecha de Orión, haciendo de este modo la multiplicada velocidad de contenerse de ambas partes del hemisferio nulo de su libre albedrió al constatar que este nunca existió, que fue solo una ilusión de materia dubitante que prontamente se Iría como agua gasificada sobre los repulses galácticos que se decantarían sobre Patmos como devociones de Skalá, y astro-omegas que estarían adheridos a la Xiphos y Kopis, que aun estaban unidas a su ser más bien en el contorno del perímetro de su alma a dos metros flotando como universos cuánticos invisibles. 

La totalidad de todo iba incitando los campos de omega-astros que comenzarían a adelantarse luego de quedar visible del espolón de la espada que se hacía más densa con la viscosidad del Adom Hebreo, que se escurría desde Orión hacia tierras Helénicas como edad Omega para Vernarth que se concibe temprano cuando lleva las Kleidia de Hécate o llaves del mundo Omega hacia las proto-galaxias que brindan ultramarinas hogazas, sabiéndose que la Vía Láctea y Andrómeda acuden tan cerca en su masa estelar pudiendo colisionar en unos millones de años luz. Se pronosticaba el Duoverso de Hiperdisis en la realidad visual de una fusión de cambio para interactuar entre ellas cuando iba desmembrándose, pero re transformándose en el nuevo núcleo teórico del Duoverso como un gran Agujero Negro incrustado en el centro de Patmos. De tal modo que todos los habitantes empezaron a inquietarse cuando fenomenales masas de aire cálido que comenzaban a tomar la apariencia del Universo se plagiaban unas de la otra generando los seísmos de ingreso, no afectando el Opistodomos ni la Primogenitura, ni la muchedumbre que estaba expectante de todo el cenobial de monjes que se agrupaban arrodillados en la cima del Profítis, haciendo flotar las desmenuzadas partes de madejas pelusientas del Himation. Al ir tiñéndose de albi-color de Calígine demostrando las tinieblas del terror intrínseco de quien ara luego para liberar a todos los sucumbidos que cayeron en toda Grecia y Judah, exponiendo todos los orígenes de apariencia desde el ahora interno en el converso Universo que iba reimplantándose en el helicoidal de polaridad, y bifurcándose al pretextar todas las reencarnaciones y pulimentar el cese de oscuridad estancado hacia una luminancia que les podrían advertir y observar donde podrían moverse su pies a resguardo de la camada monumental de calorimetrías, y cromáticas que se enlazaban en romances triviales con los residuales de la galaxias de angelotes en donde entregaran las progenies de Aorion en candelas por metros cuadrados, en vigilia de :LV es la luminancia, medida en Nits o candelas por metro cuadrado (cd/m²). 

• F es el flujo luminoso, en lúmenes por la triada Andrómeda, Vía Láctea e Hiperdisis en conjunto con Orión. Desde aquí Vernarth aprovisionará a todas como quien haya de habitar en el prefacio de sus Fábulas de Calígine con lo siguiente: «Ex Calígine Chaos: ex Chao et Calígine, Nox, Dies, Erebus, Aether», que transcrito quiere decir «De Tiniebla: Caos. De Caos y de Tiniebla: Noche, Día, Erebo, Éter».Decretando la (Tiniebla ardiente) antes que a Caos como flujo F, siendo también el único que divinizó esta abstracción, confiriéndole un sentido propio a la palabra. Y luego hacer de la normalidad de habitar en las tinieblas que es la opulencia irredargüible del deseo de mantener la radiantica de todas la fuerzas que devoren la eternidad. 

Desde los ases remotos venían familias oscuras de voladores Lepidópteras Ditrisios, enfiladas de otras innumerables especies que portaban ojos dimensionales que serán devoradas por ocelos o gigantes ojos que proviene del caos del Calígine de Vernarth para apaciguar los efectos de los rayos ultravioleta, que arrancaban del Nimbus Iridiscente creando una capa de protección entre la nueva dimensión del crepuscular de vuelo que ya comenzaba a encenderse desde los escamosos dedos del Aorion.

• dS es el elemento de superficie considerado la triada Kímolos, Rodas y Patmos. Estando Vernarth distraído logra disipar el crepuscular del erebo invertido entre Eleos y Ezis personificando la Clemencia y Tristeza, en donde bordean los mundos que aun no son acribillados por el caos o Calígine que se enaltecía sobre el Érebos con la redención de Eleos que se aprontaba a engullir la tristeza de Ezis. Por tanto Kimolos, Rodas y Patmos consolidaran su hegemonía de tierras inalterables donde la pieza de clemencia de Eleos traerá el sostén que hace del portento cariacontecido de Ezis, cercano a la hibridez de los dioses Itheoi, en los Valles Trasversales del Horcondising, con las Nornas y generosidad de Apolo que les había obsequiado después de largas estancias en Hiperbórea como espíritus femeniles una vez más como abogacía y resguardo imperecedero del legado de los viajes de Esmínteo al brindar la compañía de Dísir, Uror, Verdandi, y Skuld como entidad Femenil, del pasado, actual y futuro que debiera ocurrir por mandato de Skuld. Esto permitirá que la as tres su unan con el Ds para fusionar las tres como complemento de tres entidades femeninas que resguardaran todo el cambio climático sobre futuros desastres en el Dodecaneso.

• dΩ es el elemento de ángulo sólido, de Vernarth Omega y origen del Duoverso. Desde esta premisa el peor de los temores de Vernarth era soltarse de la mano del Messiah y caer en la ira que sonroja aun Héroe Hetairoi desde el Deimos, cuando la noche se revierte sobre el resto de los démones y la noche adopta a los que van percibiendo en Vernarth que tal vez iba asido de la mano de Ares para la batalla junto a su hermano Etrestles, bajo las ordenes del salvajismo de los motores metafísicos del pánico. Desde esta visión Vernarth logra abrir su ojos con el afán de demostrar a quienes le observaban, y poder demostrar que estaba consciente de estar preso de sus emociones y fugarse de sí mismo en el ínclito padecer de miles de flechas, que corrían a su alrededor como fugaces meteoritos hasta el campo llano de la venganza de Tisífone. Las luminancia se hacían y se tornaban de colores que se hermanaban molecularmente de tonos dispares que eran capaces de diferenciarles, y a la vez de anular el poder de oscurecer el semblante de Vernarth para tomar su diestra mano y coger la flecha para romper la oscuridad que se abalanzaba hacia él.

• θ es el ángulo entre el diámetro desde Andrómeda y Vía Láctea ( 2,5 millones años luz), Némesis o Ramnusia como la retributiva coacción de desobediencias, estando consciente Vernarth se hacía cada vez mas de un ser prohijado del balance Némesis por el equilibrio de comandarle en sus sentidos antes de ingresar al campo de limpidez de su alma en tránsito a liberarse de todos los encadenados que solían estar felices, pero tristes de que nadie les aclame excepto Aiónius Itheoi de Vernarth que traducía los mensajes que desde ahora diametralmente se moverán desde Andrómeda a Vía Láctea, sin que ninguna de estas dos porciones se invadan solo bajo el orden de Némesis, y Vernarth acatando la justicia retributiva de La luminancia que se puede definir a partir de la magnitud radiométrica de la radiancia sin más que ponderar cada longitud de onda por la curva de sensibilidad del ojo. Así, si LV es la luminancia, Lλ representa la radiancia espectral y V (λ) simboliza la curva de sensibilidad del ojo de Vernarth en el área sobacal de Betelgeuse, derramando plasma y hematomas magnéticos sobre las galaxias y Ojos de Orión. El intertanto se manifestaba como un universo personal, no excluido del tiempo y espacio para una causalidad metafísica que no logrará componer la mentalidad que sea medible en los ajuntados sentidos de un nacer del Zig Zag desde este mismo calígine emergiendo de otra catadura del auto-observar, y ver la fisonomía del Horcondising anti material y másico Universal. Del cual preexistimos a dispendios de ciencia que modela el sistema de energía y materia en causas de ancestros con los cuales su vida y la nuestra que se impulsaron furtivamente. La gravedad hizo una gran paternidad en activa Biomasa de Vernarth, al estar en el Dodecaneso y cosmos en la verificación de curvatura que nos hace pantallear con la luna de sus románticos vaivenes astrofísicos y geometría exagerada de un Zigzag. Somos masa versátil multi dinámica que se expande simultáneamente en el vacío que hace pausa en el Nothofagus Obliqua del Horcondising de Vernarth, y también del tiempo2-espacio2 que no se han atribulado al origen de los astros que se mueven irregulares en Zig Zag, para su componencial inmaturo que es netamente de luz azul aramaica del Pealim del Abba, circulando de abaleos movimientos rozando el aire de las gramíneas atrayendo la atención de todo el orden del universo hipnotizado, haciendo aparecer ante ellos la duplicación del universo mismo; en Duoverso que es el Universo sacudido reciente y de gratitudes en la distribución de galaxias cercanas que son llaves del paleo kosmous ya dispuestos en macro ondas, que son porcentuales de los espacios de los campos energéticos Tri-solados, que interactúan con la filogenia del Mashiaj en Getsemaní, tendiéndose ahora en un futuro descompuesto estancado, en un presente congelado específico del peri Kosmous. 

Su estación final, es apostar el Universo Zig Zag sobre la crestomatía del Medioevo temporal re-expandiéndose en cualidades de gregaria Sub-mitología, ya conformándose aquí en Archangelos para activarse. La implosión de la gravedad ha procreado mundos de visibilidad de magnánimos anhelos astronómicos, en algunas fracciones de tiempo en Zig Zag por millones de años luz fractado, como una irregularidad que se asemeja a medida de todo lo cuantificable, siendo omnisciencia o no adquiriendo la hexagonal de la primogenitura del fragmento desde que Jerusalén va a Bethlehem, donde el prisma Davidiano cuyo Original se atribuye fractal en la forma. La personificación de la longevidad era atrapada por Geras, siempre evadiéndose del universo ofuscado o temperamento que podría representarse en la humanidad que se apoyaba en los antígenos que le servían de apoyo a la reversibilidad de todo héroe como Vernarth, que intentaba glorificarse en la plenitud de vida en el Heraklion o en la arena que se tiño de rojo-azurí cuando el alma de Alejandro Magno subiría junto Vernarth con el Mashiaj. La línea batiente fractal de la mediterránea hacia una venia asemejándose a las pedrerías del Rey David al Ziziphus del Messiah simulando ser formatos irregulares simétricos, para construir gemas en espinas de paisajes que básicamente van sub dividiéndose en embudos cónicos asimiles, para luego ser desplazados aleatoriamente hacia su punto central compartido con la corona Incorruptible de las cinco del Rey David, recursivamente reiterándole en cada cuadrado hasta que se alcanzara la eminencia del detalle anhelado en la curva que une el paisaje a Bethlehem y luego al Baptisterio de los Pastores en su base hexagonal, figurando ser la cellisca en la Corona de Regocijo final cayendo en la cúspide de los techos “Doroteo o dones teologales” en el cual el establo de Kafersuseh del Mashiaj irrumpió y agonizó en la abstracción de las Vigas Unidimensionales con foráneos ojos, y propio tisular erosionando a mortales frunces que se avizoran con sus ojos divinos en auto semejanza nuestra, y del plan fallido al aumentar el tamaño talmente desconocida y analítica en esta peripecia de la ideología implosiva del burbujear del Duoverso Verthiano. 

La naturaleza de los copos de nieve en Bethlehem son fractales naturales detallándose en su naturaleza, y en el infinito natural que aquí se avizoraba del nuevo mundo privilegiado para auto similitud en funciones especulativas de Vertnarth, por intervalos en cada espacio de bardas sombrías, trayendo aceleradas bombillas de mensajerías desde Getsemaní en intermedios de olivos transformados hacia otros humanos.“Su correlación es infinita con el tiempo observable reversible, y patronal pertenencia de móviles ecos amordazados de un espacio que es obstruido por Vernarth, en tal monografía y enteros entre los enteros fraccionados” Finita es la curvatura entre el recorrer que camina entre la espesura del Duo-Universo como alternativa de energía Zigzag y Duoverso, que se desencadena a nuestro orbe observable subconsciente, y qué gran fanal ojo reflectando que desconoce y prescribe partes extremadas lejanas y focales de las Vigas Unidimensionales de Kafersuseh en Ein Karem. El Duoverso es el Universo de ensayo que tuvo el Mashiaj antes de venir a Tierra Santa, proveído por su forma de Hiperdisis escoltándole desde Betelgeuse Orión, cambios de arduos colores en degradé y Avant Garde, para confines de perspectivas y verbalmente de enmiendas de campos físicos entramados por un mediante gravitacional externo. Las macro ondas son materias expuestas no contenidas en los abruptos cambios de la selección óptica del Mashiaj con las Vigas Unidimensionales, atrayendo cristales de selección para atomizarlos en turbaciones de reacción, y recreación de salvadores plasmas multiformes de astronáutica cristiana, el examinar el doble de las macro onadas y ecuación de ellas sobre el axial del universo convertido en Duoverso, ya en millones de años luz continuarán en el Duoverso, para reconvertirse de ectoplasmia con grandes márgenes de asertividad. La cartografía es la corrección de error del actual universo perdiéndose en las secundadas milésimas de cifras que nos separan del Universo, pero todos siendo más que el tiempo…!, quedando a dispendios del pabilo del Cirio con toda su electro-materia”Ya habiéndose constituido la sub-mitología, aparece Hestia después de haber dormido un gran sueño, ella al presentarse ante Vernarth en Tsambika se le veía cambiando de tamaño, cuando estaba a seis metros se veía ínfima y cuando ya estaba a dos metros de él se veía monumentalmente descomunal, pero de polivalente fisionomía por tanto se apreciaba ya en los últimos pasos con su doméstica figura de diosa que emanaba años luz disertados por chimeneas y sus habitacionales. 

La crítica de inmanencia que sucedería, preexistiría del plan perfectible para el Universo Zig Zag e Hiperdisis como Híper-Hestia, trayendo desgarrados vocablos para los que se avecinaban al altar mayor del Vas Áuric, que constaba del gran ratio del proscenio en las Teodora cercanías de Tsambika, entre Clarividencia/Juicio para mecanismos constantes de Sabiduría/Meditante de acuerdo a la constante cosmológica, llevándoles tal vez al comienzo de un decenio y tercer universo llamado Triverso. La oscilación de todas estas fantasías las observaba Vernarth, pero sabía que tendría que colisionar con esto finalmente, ya precipitados de temperaturas que actuaban sobre el promedio del rango normal, por lo tanto era inminente mutarlo al Duoverso provisional proselitista, que retrocede avanzando entre las luces vertiginosas de la creación. Acto seguido, se desgarra el Universo y se pierde entre los que le rodeaban, estableciéndose unidades de millones de años de luz comprimidos del flautín Aulós, que portaba en una de sus manos paliadas Hestia, su prytaneion iba encendiéndose con las llamas del corazón de fuego y pasión de amor consanguíneo, “Prytaneum”, allanando la luz en la claridad de la fe de los dueños de caseríos que se fundaban cuando arribaban a Tsambika en busca del Vas Áuric, aclamándose con la piedra omphalos que marcaba el ombligo del mundo con desafío de vagar hacia la isla de Delos en la cotidiana tibieza de una tarde de primavera en Rodas. Ella es una mujer con velos sobre su rostro caminando siempre desde y hacia su morada incólume en casa de vírgenes necias o vestales, no hay una Hestia solo tal vez hay algunas similares que iban quedándose en el fuego frío de su climaterio perdiendo fertilidad después de que su padre las tragara, y luego fuesen expulsada de él mismo regurgitada en flamígeras cerillas de una casa bendita llena de indemnidad, dándole al Duoverso otra categoría calculada con ángulos jamás contenidos deslizándose vibratoriamente entre las distancias que descuentan minutos del espacio Hestiano para tal corolario de aproximarse a la finitud del mismo e inaugurar el sub-finito, , que jamás será fuente de término en un desconcertante final del tiempo no terminado a ras de la ecuación física.“Esto consolida el Duoverso en Duouniverso, expresado en cifras que moderan la longitud de un estado físico antes que sea consumado y recomenzado en un proceso que no termina (sub-infinito)Vernarth estaba a pocos metros de ingresar al Nimbus, cuando de pronto se oscureció su alma y su pánico se encendió…, de pronto sintió un alarido desde la altura y más abajo veía como todo se hacía de escombros. 

La valentía le cegó no queriendo observar lo que el evidente acabo del mundo y cascotes pretendían consumarle si se despidiese de sus más queridos seres, hasta que las líneas del infinito se acercaban a las del mundo terrenal pretendiendo eliminar toda huella de sus estirpe familiar. De este modo empieza a correr por sus manos el Hydor reflejado de colores que traspasaban el tragaluz de las palabras austeras. Logra divisar mas lejos de la bruma a Calígine del Apokálypsis desprendido de toda fuerza gravitatoria solo pudiendo ver entre la fumarada a su madre que venía subiendo por un rayo de luz, Vernarth trata de liberarla de ese instante de expiración pero no alcanza a llegar a la sincronía de catástrofe en lo que pretendía ser de la mano de Eris como la desavenencia que no le permitía poner en orden sus armas de sobrevivencia, creyendo que esta instancia no le permitiría arrebatarla de la diosa Eris, si pudiese creer que era inevitable que su madre Luccica se convirtiera en una blasón de granito, luego de la noche oscura que le amenazaba con desgranarla de su estado sólido endeble, y luego desmoronarse a la tierra convertida en la tierra que era aplastada desde unas raíces que la postergaban a ser consumida por el don de luz de vida, y fin de una luz que sea visible en todas la raíces de la tierra al ser consumida por el infinito que se desvanece en la existencia de todo ser. Vernarth cuando un instante de claridad le permite ver a su madre intenta rescatarla, percatándose que su padre Bernardolipo estaba junto a ella, entre ambos intentarían redimirles de la propagación de Nix y Calígine, que se comportaban con grandes dolores al mofarse del los bordes del Éter que recibían a Crono, no lograbann ser victoriosos de llegar a tiempo rescatarles, si desde la armonía de un trovador del Mashiaj le observaba para ver si retornaría junto a él para internarse. Se hacían visibles en sus padres como contendían ante un evitable percatarse de este indivisible suceso con las palaras agresoras de rémoras y generaciones de milenarios que anticipaban el omega de todo en la parte inferior, bajo los pies de sus padres apareciendo nimia una (w) que antecede y sucede al principio de un comienzo basado en el final de un comienzo mil veces más que un umbral en base de centenares, apropiado de la unidad métrica del numeral Myríaz = diez mil, tres veces más que los falangistas, un mil menos que los Peltastas y tres mil menos que los jinetes, total treinta y siete mil menos que las fuerzas de combate en Gaugamela de un total de cuarenta y siete mil, bajo las miríadas del Myríaz de Falangistas socavados por sus Xiphos en la zona del calcáneo derecho de cada hombre fiel bajo su comandancia antes de enfrentar los Aqueménides. En este lapso Vernarth extremaba sus pasos para rescatarles y detener el efecto de entumecimiento de toda materia orgánica, no pudiendo lograr de rescatarles solo concederles en la imagen de cada uno cuando empezaban de pies a su cabeza a hacerse pétreos hasta la frágil solidificación de sus ojos cuando por última vez, se miraron solo patentizando que era un tardío gesto de salvamento. El omega era inefable hasta mas allá del omicrón, siendo Omega y Micrón en la cartilla bélica de iniciación de su causa dentro de la profética en todas las necrópolis de omega minúscula (ω), hacia un Omega que reafirmaba la mano enhiesta en San Juan el Apóstol de reescribir dos veces el Apocalipsis, habiendo de ser la misma pero con la voz de Vernarth comandando los diez mil falangistas que conformaban las brechas inter generacionales, mas de antepasados alienígenas mimetizados. 

En tal efecto como es sabido, el Duoverso abrió los tragaluces con sus pilares envainados y con la seguidillas de tetra cloruro de cloro en ángulos sólidos de Ω en lo que era Virgo institutionum/Oarion, entidad que se inmiscuía por proyecciones y fugas que se convergían en el puntal del omphalos de su padre celestial lidiando en frecuencia y exangüe de inmortalidad, constándose desde un ser auxiliador hacia los planos de re programación subconsciente y perspectiva. Con sus brazos alzados en cada zarpa una espada alzada para agujerear el punto de fuga entre los espacios que se adstringían, bajo la proyección sólida desde un observador que inhibe ad limite la biomasa en todas las repastas de filtro acuoso y lúmenes, hacia el trono del guardián angelical de avant-guard por estereotipo y esclerosis de Zeus de fisicalidad disociada, aún siendo un ente amorfo con magnitudes pulverizadas entre numerosidades de Pi y Áureos, desvaneciéndose sin área ni volumen. 

San Jerónimo de Estridón: “Vernarth, vengo de Bethlehem a auxiliar vuestra vida porque he detectado el subsumirse de las cadenas donde vuestros padres hicieron la alianza desde donde vuestra vida se ha erigido desde Sudpichi, Valles Trasversales en el templo que lleva mi seudónimo. La única runa que ha de determinar que puedan vuestros padres seguir unidos, es por medio de la acción y dirección que se me ha consagrado. Ninguna lengua muerta habrá de desdecir lo que un alma muerta no pueda interpretar. Nuestro Mashiaj me ha encomendado liberar los lenguajes que han conspirado por la noche, y poca luminancia donde Calígine se ha incomodado al verme al saber que es mi predilecto ambiente, la memoria de las cadenas desean encarnarse en las piedras que envuelven vuestros padres, mas ellas son propias de una respuesta que obtendré que concluir exhortando a vuestra madre, y padre para que reconozcan que aquí hicieron las alianzas, ordenamiento y reconciliación de vuestro mundo que a todos nos atañe en interminables dictados por convenir, sé muy bien que el punto no ha de permitir que vuestra expiación se haya impedido por esta afrenta cosmológica, he aquí los Valles transversales en el lugar predilecto de los Espíritus yacen los tratados que moverán mi máximo interés de volver a desposar a tus padres de las verdaderas cadenas del erudito complaciente, así toda la vastedad que os aflige será de vuestro servidor Jerónimo” 

Vernarth replica: “A vuestro servicio su majestad, aquí he vuelto desde la amanecida arribando a la villa al encuentro ellos cuando contrajeron su nupcias. Sé que no debería estar aquí, más bien se que inquiridos decenios lo habían planificado así. De tal convicción que sus cadenas se ungieron desde las alturas del Kanthillana del cual su parcialidad emite los cercanos parciales a vuestra dirección. Como es sabido mi extensísima caminata por esto pulverulentos derroteros han de reconocer que la personalidad, y nobleza de sus túmulos harán de reforzar mi presencia para que todo de lo inabarcable si sea breve al hacerlo vecino a mi razón”

San Jerónimo de Estridón: “todo ha sido planificado así, y mientras se alarga el tiempo se que vuestra heridas arden en mi epistolario como voces latinas y griegas que reticentes obran de dirigirme en vuestra ayuda. Todo es lindamente parangonable, y primero a lo que no se debe decir…, sino hacer al género que ante todo practica, lo segundo a uno de los modos con el ante todo lo que practica”  

Por el envés del improperio al destino infranqueable, Vernarth le coge sus manos y San Jerónimo se las retira diciéndole que no era tiempo de vanos mayores para la equivalencia de menores deseos de complacerle si no se hubiese presentado ante el. Le demuestra festejarle y querer hacer de él la permutación de su áurea polisemia o interpretación del Apokálypsis del mundo por no variar su eje de cambio, por redirigirlos a intereses de comodidad enunciada. Es decir; los líderes del mundo en su mundo de anulada libertad de albedrio de practicar el seguir a su antojo al interpretar del Apokálypsis solo como revelación, y no como destino que enaltece lo sentidos y compensación que reconquistará la consistencia de la naturaleza del Apokálypsis que se ciñe a la humanidad como áurea que consolidará a la humanidad temerosa de su propia perversión y exceso de avidez, así como fue tan solo a pocos pasos antes de entrar a Templo de San Jerónimo en Alhué tomado de la mano con Vernarth ya totalmente sanado de sus pectoral Lynothorax. Se dirigen al ambón y sustancialmente San Jerónimo saca de sus bolsillos un tamo que era de del escape de la masa de piedra que todavía no se endurecía finalmente, permitiendo generar un sermón místico para que vuelvan a la nave del templo en persona sus progenitores para rebasar a lo más lejos del hontanar del despertar del Kanthillana solicitando la unificación de la cenizas de su progenitor Bernardolipo y Vernarth, para rescatar a su madre de una pobre abundancia, y sea traspuesta por la metáfora del espíritu vivificador. Acto seguido San Jerónimo vierte por toda la superficie el tamo de sus progenitores, se produce un gran estruendo, las puertas y ventanas del templo se cierran de pronto sus padres se aprecian venir caminando por la ringlera central de la nave, donde la ficción podría testimoniar que todo era un fantasía, más bien un gran testamento que exhibiría la unión de dos flancos yuxtapuestos previo a un inapreciable franquear de sonrisas y flores que caían desde el altar superior sobre sus coronillas, ellos venían asidos de sus brazos como fronteras abiertas con el proceder ante la agreste realidad de una metáfora hecha realidad en el devenir de dos amados pastores que cruzaban el limbo de sus dedos, con la virola o el acto de engendrar argollas de procreación familiar. Las cruces de Lisboa y de San Jerónimo resemblaban la monografía en compases de sus pies pudientes que hacían consonancia con el núbil gesto de sus labios, para luego soltarse con todo frenesí hacia el encuentro de su amado Vernarth danzando los tres juntos en el pináculo central de la obesa luz que les abrigaba, significando del hebreo testamentario el Aleph camino a Sudpichi luego de la ceremonia de Raphaca “Curación” hasta la diástole que se adhiera entre medio del boquete que se producía cuando los tres se confrontaban y el vocablo nuevamente “Heth” se hacía encorvado para llevarles como camellos gigas al encuentro de sus familiares y fantasmas que le rodeaban al observar las alturas del Kanthillana al asentimiento de todo esto. A causa de toda esta similitud la tribulación desde Patmos se embravecía con una fortísima resistencia, dejando totalmente despejado de los condicionales del sílex o pedernal, que envolvía a los padres comenzaba desvanecerse de sus cuerpos mientras que se recomponía de siete formas elementales en lo referente las trascripción e identificación de los tres como un troncal familiar enormemente de sus posibilidades exegéticas. 

En lo tangente a la transcripción, y si es el caso identificación de los nombres que nos atenemos a reunión y redención de sus progenitores, como toda la antropología que se encadenaba a las cifras y caracteres que acordonaban en la cúspide del templo cuando los tres se abrazaban y se tomaban de las manos en signo de ilustrativas demostraciones de nunca superarse. Comenzando con las compensaciones en la plenitud de las tablas, y compleción de todos los hechos que demostraban que de la lengua nada escapa de lo que un ojo puede observar; es decir mientras haya una luz parlante siempre habrá que oír y luego observar en la presentación de la mecánica por los renglones que expresaban las cifras ,que iban aumentando del número de letras que eran posibles descifrar; llamado esticometría o medición de las líneas en los textos que San Jerónimo  iba ordenando para ordenar un vademécum o memorándum de esta desenfrenada situación, que de todos modos tenía que simplificarla toda vez que sea indicada para la lectura de tres seres que se reunirían en lo literal de cuatro espíritus articulados en el continuo, de tal modo que Vernarth a esta simétrica vivencia sumaba su bilocación para reunirse nuevamente con el Mashiaj que le espera en el tercer peldaño antes de ingresar al Nimbus Iridiscente. Sus progenitores serán los copríncipes reunidos en la calzada de Supichi con destino al Horcondising, en donde Vernarth todos Solsticios de Invierno Austral vendrá a pedir audiencia a sus padres en las Alturas del Kanthillana donde se resumirán del día exacto, que todo acaeció desde un jueves a un domingo en la prima hora del Sábado certísimo en el cual los doce cirios contranaturales se incorporaran al Duoverso desde la ramificación del Códice de Raedus, concretamente desde la Antífona que les acompaña hasta la comprometida, y sinuosa altura que se empañaba del vaho de nieve, y vehemencia que se percibía en las mayores asiduas de Spílaiaus, teniendo un ruedo de luces como si tal fuera un ademan de Jerónimo y todo lo que llevara por nombre en la concordancia que podría ser una confusión que se colaba de la metafísica de espacio nuevo por comenzar. De tal raíz emerge la Eta o valor numero e Vernarth simbolizado como ene veces del “8” hasta el entero valor de cifra de 800 “w” u Omega, que serán los valores de cifras y números para predisponer la alternancia de las visitas que habrán de tener con sus precursores cada Solsticio, después de alternar con los Elfos de Arquímedes, y franquear con ellos las manifestaciones que le hacían ser más liviano que el aire, tal como cabía esperar antes de la imposición de todo lo que imaginaba dormir al mal gestado mundo que se había alterado, aun con una remota Fe que simbolizaba las decisiones de San Juan Apóstol al disponer de los salvamentos de los vestigios que se habían destrozado en la fisionomía de un causa que se demostraba más elocuente que una mera revelación que nunca se creyó que despertaría de su mismo superlativo semítico. En este caso la alegoría superaba al prototipo de todo lenguaje visual ensortijado que emanaba de la decisión de Vernarth para la humanidad que le necesitaba, por un lado San Jerónimo ya resuelto, y San Juan Apóstol en la división de dos sucesos de una misma historia que iba fundiéndose en la complejidad que sería inenarrable para dos Santos en medio de Vernarth demostrando que les había llevado con todo el poder de la fuerza que es capaz de tirar y manipular hasta arribar a la oscuridad de los sentidos donde se duerme todo comprender, y razonar solo permitiendo que el silencio les llevara en la elipsis recién emanada por los Nothofagus que iban caminando en la fláccida nieve, los tres iban con gracias de fe y satisfacción, San Jerónimo les escoltaba con todo lo saludable que hacía explotar el incomparable despertar de dos latitudes que lograban revivir en la invisibilidad, luego de resistir la latente verbigracia del Apokálypsis que demostraba que el tópico incomparable denotaba la mayor resistencia de todo lo destructivo y Omega con la única sujeción que solo hace el verbo “Amar”. Llegaban a los helados y hediondos gases similares a lo que emanaba Santa Rita de Casia, que a la vez serian rompientes divisorias como los que declaraban los corintios sobre los Israelitas al quedar cegados con el resplandor de Moisés. Lo mismo ocurriría en el velo de poquedad de nieve que quedaba atrás de sus postrimeros pasos cuando todo era albo como un creciente incidente que se acoplaría de una vez a Pastmos y Sudpichi, así como Kanthillana y el Olympo. Se despide de sus padres y cargaron en la meseta sus impulsivos acuerdos de encontrarse en el próximo Solsticio junto a San Jerónimo y Spílaiaus.