Suplica de Amor

SÚPLICA DE AMOR

El amor se comienza a perder cuando se lo empieza a conocer. La vi entrar al tranvía y sentarse al lado de él. El pantalón corto, blanco; muy ajustado, mostraba su sensualidad; y la blusa de colores vivos, con un nudo delantero a la altura de la cintura, su ombligo. Su pelo rizado, suelto, hasta la nuca; como un emblema. Sus piernas delicadas y bien formadas sirvieron de estimulante a más de un par de ojos indiscretos, que fielmente las siguieron hasta que su dueña se acomodó en el asiento.

Después de un par de mudos minutos:

ELLA: -Ya hace un mes, y doce días.

ÉL: La mira y calla.

ELLA: – Estoy empezando a creer que no me amas.

ÉL: – La belleza pura y simple no es motivo para amar, cuando la desnudez deja de ser un acontecimiento.

ELLA: – ¿Nunca?

ÉL: -Eso no lo dije yo.

Sus rostros aparecían y desaparecían azulosos, a tono con la luz del tranvía al rebasar las fronteras entre los campos magnéticos:

-¿Cuándo volverás a casa?

-No te he dicho que volveré.

-Cierto.

-¿Entonces?

-No sé… Todos tenemos derecho a la curiosidad ¿no? La esperanza no tiene apellidos.

Ella lo miraba permanentemente, de perfil. Él, a ella nunca:

-¿Sabes? No voy a morir porque tú no me ames.

-Lo sé, y no lo espero. El amor dejó de ser cicuta.

Y se hizo un minuto de silencio; como en la canción. Luego, se rompe:

ELLA: -Sé que a veces no soy yo. Y te pido perdón; pues en ocasiones deseo experimentar y sentir en mí lo que quizá no debo, como si quisiera.

-Eso deseo yo, entender. Pero no soy botánico. Las lianas son un misterio para mí.

En ese momento piensa en una mujer a medio vestir, moviendo agresivamente su cintura, al desafiar ojos ladrones en un night club. Un tirante rojo, que contrasta su carne blanca, le rodea el muslo derecho, donde les son pillados billetes de diferentes denominaciones. Se estremece, y castiga:

– Las decisiones correctas, a destiempo, son tan ineficaces como las incorrectas a tiempo. Esas veces eres quien no debes porque eso quieres. Odias quien eres por no quererlo ser. Admiro tu liberación espiritual.

-Free spirit; así me conociste –contesta ella. Y agrega:

-A algunos desdichados la vida nos quita lo que nunca nos ha dado. A otros, viceversa.

ÉL: -Procura que te dé lo que es tuyo y que se quede con lo que de otros, es.

-Ella nunca da; si no se le arrebata. -Arremete ella.

-Nada bajo el sol, que no se aprenda. A ser ladrón, también hay que aprender.

-¿No serás muy duro conmigo?

-¿No será lo contrario?

A pesar de la atención que este inusual rompimiento cautivó, como un flechazo; la parte mas cercana del resto de pasajeros; no escuchaba, así que se auxiliaron de la pantomima y actuaron como grupo de extras en la filmación de una película. De pronto aprendieron a leer el movimiento de los labios. La luz semi oscura destacaba en él el brillo de sus ojos negros y ausentes; su pelo negro peinado hacia el lado derecho, se tornaba en un azul oscuro que, paradójicamente, devolvía un intenso brillo plateado:

-El amor se ha convertido en un orfanato. Una gran cobija para expósitos. Yo nunca lo he sido Amanda.

-No. Es que en ocasiones avejenta y necesita renovarse; update itself para ajustarse a la realidad actual. Come down to reality, Jorge. Le urge admitir que, mas que placer, es una necesidad; y como tal, no se debe resistir a sus impulsos cuando se está cerca de la persona amada. ¡You are the man I love, coño!

-Eso… cuando hay necesidad, Amanda. El valor de la comida es igual al hambre que se tenga.

-¡Pendejo! ¡Stupid!

-Las circunstancias me han enseñado a serlo. Por ejemplo, those sweet words you just said, baby.

Ella se pone de pie. Se adhiere a uno de los barrotes, como si abrazara a un hombre. Internamente suelta un improperio, y se decide, con ojos acuosos:

-Pues esas mismas circunstancias deberían de enseñarte a hacer lo que fuere de lugar para conseguir lo que ellas mismas no te dan, y que cuesta tanto. Encontrar a quien amar y que te ame, no tiene precio…

-Aprendí a robar y estoy servido; a menor costo.

Ella toma un largo respiro, como si fuera un trago; al cual le siguieron otros algo más trabajosos de elaborar, y que a seguidas se alternaron con el llanto abierto.

“Una vez la vida fue tan simple, y después ¡tan complicada!”. “Y cada nueva complicación es una forma diferente de morir.” Pensó la joven.

Finalmente gira el rostro en varias direcciones, hace gestos de rabia hasta que exhausta, la desesperación arranca de sus adentros ese gran dolor cobijado en el fondo de su obstinación:

-…Como por ejemplo, esta conversación que… de paso, ¡acaba de terminar! -dijo, como si se quedara sin el poco aliento aun retenido en su último resuello. Ahora sintió que el corazón se le mudó a las sienes.

-¡Shit!- Expresó; y de inmediato reventó la lluvia de lágrimas como un desliz sobre su pecho:

“Es lamentable que en la vida todo comience tan bonito, y termine tan feo.” dijo entre palabras quebradizas.

En la siguiente parada, la vi salir, sin hablar ni mirar atrás. Él, tranquilo y sereno… sin esperar a que ella hablara ni mirara:

-“No tiene sentido la vida, si nosotros mismos no se lo damos.” –

Dijo Jorge para sí.

Fin

AUDIO: Murió el Amor.

Letras: MM

Interpreta: Brianna

Música: DJ Saulo Music Studio.