Me acordè de ti…

La noche de ayer, fue extraña.

Sentìa una ligeresa que hacìa mucho tiempo no sentìa, similar a la paz, experimentarla se sintiò tan bien. Dormì tarde, en un sueño profundo, sin soñar nada. Hasta que despertè. El sol que entraba por la ventana golpeaba mi cara, avisàndome que era un nuevo dìa. Exigiendo que me levantara, que lo intentara una vez màs. Animàndome quizà a que no me rindiera, no hoy. 

Hacìa viento, pero no un viento resonante, sino, de esos que refrescan en cada respiro los pulmones, de esos que te hacen sentir la pureza de la vida. 

Y, todo marchaba bien. Era un dìa perfecto. Mis quehaceres de diario los realicè con normalidad. Pude comer algo en la tarde. Mis redes sociales no tenìan nada nuevo ni bueno que ofrecerme sino noticias tràgicas de todos los dìas. Mis hàbitos fueron los mismos pero, por què sigo en los mismos si son terribles?… Yo y mi costumbre, o quizà, mi falta de voluntad.

El dìa iba perfecto pero, me acordè de ti.

Y se amargò mi mañana. Me di cuenta que me gustaba el sol en mi cara, pero amaba cuando nos alumbraba a ambos por la mañana al despertar. Me di cuenta que me gustaba levantarme, pero no tenìa sentido por que nadie me abrazaba de vuelta a la cama cuando intentaba hacerlo. Sabìa que hoy habìa sido un nuevo dìa, pero vi que fue un dìa sin ti. Que lo intentè, pero lo intentè sola… 

Y entonces lo que habìa logrado comer se revolviò en mi estòmago y me calò. 

Hubo un nudo en mi garganta y un sabor amargo en mi boca. Mis ojos ràpidamente se mojaron. Y nuevamente sentìa que me ahogaba. 

El aire que en la mañana me hacìa sentir paz, ahora me hacìa tanta falta para poder respirar.

Y sòlo habìa un lugar seguro donde querìa estar. Pero no estabas. 

Y para calmarme sòlo recordaba… los dìas en que me tomabas de la mano. Caminando por los campos verdes de futbol un domingo en atardecer. Cuando me besabas, una noche de callejòn a medio llover. Cuando me abrazabas, a medias carcajadas por que nos hacìamos felices. Recordàndonos escuchando nuestras canciones felices viendo las estrellas… 

Y me calmo, logro calmarme mientras mis ojos se relajan y las làgrimas salen.

Y te escribo, te escribo aquì, para que quedes en un lugar màs que solo en mi memoria. 

Para que mis làgrimas no se queden sòlo atrapadas en mi almohada para siempre.

Por que nadie màs està aquì. Por que sòlo te tengo asì. Entre mis làgrimas, entre mi mente, entre mis letras…