Oso y Su Jardín

Oso, el jardín y su sentir.

Oso es un peludo amigo que vive en un pequeño valle con sus dos perros, Cupidito y Luchifer. Su preciado jardín se encuentra al frente de su cueva y a la derecha de un majestuoso lago que hasta el cielo se asombra al verse reflejado en el.

7.25 Am, Café, papel y lápiz en mano es ley. Haga frio o calor, sople el norte o venga del sur y con el sol de testigo, que a veces pone el ojo entre una multitud de nubes; el café, papel y lápiz en mano es ley. Al ratito se les une Jack Johnson, que a veces se suma a la recolección de frutas y otras solamente reposa en la orilla cantando. A su vista, casi sobre el filo del agua se asoman dos enamorados que «pio pio» le hacen de coro sin ritmo alguno ni coincidencia en melodías con lo que escuchamos, pero ellos no aflojan. Y debo decir que es una hermosa combinación de desconocidos. El jardín por las mañanas para Oso es sencillamente lo mas divino y extraordinario. Un frenesí tan controversial que pone en calma cualquier océano de pensamientos.

Mañanero como cualquier otro, nuestro querido Oso no es cualquier oso. El, tiene el poder de congelar el tiempo y que aún así las cosas sigan con su ritmo y movimiento.

Un día nuestro querido Oso se encontraba observando a sus perros jugar, pelearse y abrazarse cuando se dio cuenta de que su jardín todas las mañanas le regalaba sin condiciones ni esperando nada a cambio algo tan valioso, el poder ser en quietud. Una quietud que es muy difícil de encontrar dentro de la fricción necesaria para vivir en su universo. Fue en ese momento cuando Luchifer tan dulce y suavemente le susurró a un oído:
                                – Has tuya y solo tuya a esta mañana. Inmortalízala con tus poderes.

Oso que hasta ese momento nunca lo hubiera pensado, comenzó a empatizar con esa idea y estaba en camino a hacerla realidad pero del otro lado se encontraba Cupidito. De una manera tan simple y sin enfatizar tanto su palabra, Cupidito dijo lo que pensaba:

                          – Vivimos y estamos hechos de historias. La belleza mi amigo, está en apreciar el                                            momento para hacer del recuerdo y la memoria, algo eterno.

Es en ese abrir y cerrar de ojos donde Oso comprendió. Comprendió que aunque queramos sostenernos en la eternidad de un momento, ese momento debe llegar a su final para que luego florezca un nuevo comienzo y es a través de ese ritmo vital en el cual debemos de hacernos.

                            -Tiene sentido Cupidito, debemos hacer de un «Buen día»                                                                                                    todo el día, cada día.