Discurso de despedida a mis alumnos.

Hablar lo hace cualquiera… pero tocar el corazón y despertar la conciencia de quien te escucha solo se logra hablando con el corazón.

Palabras sabias que el día de hoy me permiten iniciar con mi último discurso ante ustedes y así como cada vez que tuve a bien brindarles un espacio dentro del aula de clases para hacerlos recapacitar o bien aconsejar sobre muchos temas que analizamos y en donde siempre les hablé desde el corazón… hoy también estimados alumnos les dedico estas últimas palabras utilizando como pretexto este escenario y poniendo nuevamente el corazón de por medio esperando una última vez tocar sus corazones.

Sepan que para un servidor fue un camino largo que durante estos tres años en los que tuve esta gran responsabilidad de contar con su presencia y de velar para que así como llegaron en aquel agosto del año 2016… egresaran hoy ya en 2019 de manera exitosa de esta institución que los arropó durante todo este largo camino.

El camino esta inconcluso, terminan hoy una parte de ese trayecto, más aún falta mucho por recorrer. No quiero menospreciar ni realzar a ninguno de ustedes, sé que todos dieron su máximo esfuerzo, a su manera, a la medida de sus posibilidades, tal vez algunos dieron poco y otros mucho pero hoy queridos alumnos es un buen día para reflexionar: ¿Cuánto hicimos para llegar hasta aquí? ¿En qué fallamos? ¿Qué hicimos bien? ¿Qué tenemos que hacer, no para no fallar sino para aprender de nuestros errores? Porque ténganlo muy claro alumnos, todos somos seres humanos y alguna vez hemos fallado, y por favor apréndanse y siempre lleven con ustedes esta frase: la diferencia entre aquellos que cometen errores y aquellos que aprenden de sus errores es el ÉXITO.

La sociedad se ha casado con la frase de que el fracaso es malo, pero lo único malo del fracaso es no aprender de él. No hay que temer a equivocarnos, hay que hacer las cosas sin miedo a perder, porque les insisto, tememos al error porque no sabemos aprender de él. No sabemos ver el otro lado de la moneda. Ustedes seguramente en algún momento de su vida cometerán errores y podrán fracasar, pero recuerden siempre que fracasar nos da experiencia, nos da conocimiento, nos da sabiduría.

Albert Einstein dijo: “Quien nunca ha cometido un error nunca ha aprendido algo nuevo”

Muchos de los personajes históricos a nivel mundial nos enseñan que la teoría es correcta y que error más error es igual a éxito. Walt Disney fue despedido de un periódico en el que trabajaba, según por falta de imaginación y de no tener ideas originales y hoy sabemos que es el creador de Mickey Mouse y quien ganó 22 premios de la academia, Leonel Messi a los once años de edad fue destituido de su entonces equipo de futbol por detectarle una rara enfermedad que hacía que tuviera una deficiencia en su crecimiento y por lo tanto era más bajo que los demás; hoy es considerado uno de los mejores jugadores del mundo. El grupo los Beatles fueron rechazados por algunas disqueras debido a que aseguraban que no tenían futuro en la música, pero llegaron a ser el grupo musical más exitoso en la historia.

¿Así que fracasar significa triunfar? Así es alumnos, pero ojo… siempre y cuando no nos demos por vencidos, siempre y cuando aprendamos del fracaso, siempre y cuando el error nos forme y nos haga crecer como personas. El fracaso es el primer escalón para lograr el éxito, recuerden, aunque fracasen mil veces nunca se den por vencidos. Cuando le preguntaron a Thomas Edison el creador del foco eléctrico ¿Cómo te sientes tras haber fracasado mil veces? el contestó: no fracasé mil veces, solo encontré mil formas de cómo no iban a funcionar las cosas y cada vez que perdía en el intento ganaba más experiencia y conocimiento.

Se dan cuenta alumnos, perder no significa fracasar ni fracasar significa perder, más bien significa darnos cuenta que estamos creciendo y aprendiendo cosas nuevas. Seguramente ustedes cuando iniciaron su educación tuvieron muchos errores, seguramente se dieron cuenta de cómo no hacer las cosas para poder hacerlas bien, seguramente sus padres con ustedes han aprendido de sus errores al educarlos porque de lo contrario no estaríamos aquí festejando la culminación de sus estudios. Seguramente los maestros tenemos miles de errores que nos han hecho crecer y ser mejores, cada uno de los que estamos aquí presentes tenemos una historia que serviría como ejemplo para complementar todo lo que les digo.

Seguramente ustedes alumnos, hoy que egresan de esta institución y después de todo este tiempo dentro de la escuela, ya se dieron cuenta de qué hicieron mal cuando sacaron malas calificaciones, pero aprendan de ello; si saben que faltando a clases, ser incumplido, impuntual, que no participan o no saben trabajar en equipo, o son mal portados e irrespetuosos es algo que les traerá consecuencias, pues cambien esa actitud. Ahora bien, me dirijo a ustedes padres de familia para preguntarles también lo mismo que a los alumnos: ¿Qué hicieron bien o que hicieron mal para que su hijo o hija este en la situación en la que esté? Si su desempeño escolar fue malo o fue bueno ¿Qué hizo usted como padre de familia para ello? Porque déjenme recordarles que ustedes tienen mucha responsabilidad en los logros o fracasos de sus hijos, ustedes desde su seno familiar son la primer escuela, desde que nacen y para casi toda su vida, ustedes son quienes empiezan a educar, son los primeros maestros de ellos, cuando les siembran en su alma la conciencia de ser buenas personas, cuando les inculcan valores, cuando con el ejemplo les muestran el camino; pero ojo padres de familia, que pueden mostrarles el camino del bien o el camino del mal dependiendo de su filosofía de vida, dependiendo de cómo los eduquen, dependiendo del ejemplo que les transmitan. Yo quiero invitarlos papás y mamás, a que si hicieron las cosas mal, lo reconozcan y como le decía a mis alumnos, aprendan de sus errores y eviten cometerlos en lo que viene para ellos, en su siguiente etapa escolar, y para aquello padres y madres que hicieron un excelente trabajo con sus hijos y que hoy los vemos recibir algún reconocimiento por su excelente desempeño escolar, también les pido algo: sigan haciendo todo eso para que sus hijos sigan por ese mismo camino y lleguen a la meta final.

Por ultimo queridos alumnos quisiera recordar algo de lo que siempre les hablé en clase, las metas, ¿recuerdan? Siempre les dije que hay que tener metas y sé que ustedes las tienen, hoy no recuerdo cual fue la primer actividad que tuvimos al iniciar nuestras clases pero si recuerdo la última, y ésta fue la de elaborar un texto reflexivo en donde ustedes plasmaran sus metas a largo plazo, qué querían llegar a ser de grandes y sépanlo padres de familia, tendremos doctores y doctoras, veterinarios, chefs, maestros, futbolistas profesionales, ingenieros, arquitectos, estilistas profesionales, entre otros. Pero ahora bien alumnos sepan que no basta con tener metas sino que hay que reflexionar sobre lo qué tenemos que hacer para lograrlas, tienen que tener un camino muy claro, saber por dónde ir y cómo llegar es la clave, no basta con querer ser doctor, hay que saber que para ello hay que estudiar y prepararse muy bien. Solo les pido alumnos, esa meta que tienen alcáncenla, pongan todo su empeño, su dedicación, su esfuerzo, sus ganas y lleguen a ser lo que quieran ser, y si fracasan en el intento, recuerden que están aprendiendo, que están creciendo, que están dándose cuenta de cómo no hacer las cosas… nunca se rindan, no se den por vencido, luchen por sus sueños. Nosotros los maestros, hemos hecho nuestro trabajo, ahora toca a ustedes alumnos y padres de familia continuar con lo que viene, así que no desistan de ese camino que se están trazando, no existen imposibles porque lo imposible solo cuesta más trabajo.

Existen cinco reglas de oro que menciona el famoso actor Arnold Schwarzenegger y que tienen que saber si quieren tener éxito en la vida: 1.Tener metas y saber a dónde quieren llegar, de nada serviría tener el mejor barco o crucero del mundo si el capitán no sabe a dónde ir, sería un barco que viajaría sin rumbo navegando por el inmenso océano sin destino y nunca llegaría a algún lugar. Así que tengan metas y cúmplanlas. 2. Piensa siempre en grande. Si queremos lograr algo hay que pensar en grande, que tus sueños apunten a las estrellas, la razón por la que muchas personas piensan en pequeño y no tienen metas grandes es por miedo al fracaso y nosotros ya aprendimos que el fracaso es aprendizaje. No tengan miedo a fallar porque es parte de la vida. Apunten a lo más alto y si quieren ser el siguiente presidente de México o el mejor jugador de futbol del mundo, propónganselo sin miedo al fracaso. 3. Ignora a los que no crean en ti. Es muy común que cuando tienes grandes metas y grandes sueños, alguien te diga que no podrás hacerlo, te tacharan de loco tal vez, pero no permitas que esto te impida apuntar y soñar en grande, elimina de tu mente estas palabras “imposible” “no” “no se puede lograr” cada que alguien te diga “no se puede hacer” debes escuchar “si se puede hacer”, cada que alguien diga “es imposible” debes escuchar “Posible” cada que alguien diga “no” tú debes de pensar “claro que sí”. 4. Trabaja duro. Nunca nadie ha tenido éxito por casualidad, trabaja hasta el cansancio, sin importar lo que hagas o a que te dediques, trabaja, trabaja duro para alcanzar lo que te propongas, si no aplican esta regla niños las anteriores no tendrán ningún sentido. Nunca digan no tengo tiempo, no tengo tiempo de hacer esa tarea, no tengo tiempo de ir a entrenar, no tengo tiempo de cumplir mis sueños, no tengo tiempo de esto o de lo otro. Hay una frase que dice: “no existe la falta de tiempo, existe la falta de interés, porque cuando realmente queremos algo, la madrugada se vuelve día, el martes se vuelve sábado y un instante se convierte en una oportunidad”. El día tiene 24 horas y si dormimos 8 tenemos otras 16 para estudiar y hacer lo que tengamos que hacer para alcanzar nuestros sueños, pero no debemos malgastar nuestro tiempo, así que tomen en cuenta algo: no podemos alcanzar el éxito al estar de brazos cruzados solamente. 5. La ultima regla y no menos importante es que siempre deben de regresar algo de lo que la vida les dé, debemos de tratar de dejar huella en este mundo, pensar en los demás, rompan ese espejo que solo nos permite vernos a nosotros mismos, y se darán cuenta que pueden ver más allá, darse cuenta que existen millones de personas que necesitan de nuestra ayuda; tomen en cuenta que a veces hay más felicidad en el dar que en el recibir. Sean agradecidos con todos aquellos que los ayudaron a lograr sus propósitos y principalmente con sus padres, recuerden que el mejor regalo para un padre no es algo material sino que logren ser los mejores hijos. Para vivir de forma honesta en esta vida hay que regresar un poco de lo que nos hemos ganado y tratar de hacer de este mundo un mundo mejor del que encontramos. Quien escribió estas reglas es una persona que desde sus logros y éxitos les asegura que si las siguen podrán tener muchas victorias en su vida. Así que recuérdenlas: 1.Ten metas y una visión de lo que quieres. 2 piensa en grande 3. Ignora a quien no cree en ti 4. Trabaja duro 5. Regresa algo de lo que ganes y cambia el mundo. Porque si no lo hacemos nosotros ¿quién? y si no es ahora ¿cuándo?

Hablar lo hace cualquiera… pero tocar el corazón y despertar la conciencia de quien te escucha solo se logra hablando con el corazón, y tocar el corazón, y despertar la conciencia, debería redundar en motivación. Sé que se van motivados de esta escuela y que alcanzarán todas sus metas y sueños, les deseo mucho éxito y que triunfen a lo largo de su vida. MUCHAS GRACIAS.