Mi último poema escrito,
después de esto versos despedidos,
mi último intento repito,
tal vez nuestro destino no era estar unidos.
Que bueno que no creo en el destino,
creo en mí y en ti, ya sé quién soy
creo… que estoy siendo un cretino
pero también creo que sin mi inmadurez seguiríamos juntos hasta el día de hoy.
Estoy sufriendo por que te fallé
te amé, y sabes que nunca quise hacerte daño y te logré dañar,
no creas que no te quise, te amé
solo que nunca supe demostrar.
Por eso te empecé a escribir
por que era mi manera de decir «te quiero»,
aún así destruí lo que empezamos a construir
por eso ya no merezco tu «te quiero».
No aprendí a dejarte ir
no aprendía, simplemente no aprendí,
no aprendí a dejar de sentir
algo por ti.
No me gustó el final de esta historia, cambiémoslo
o sigamos y que no haya final,
cambiémoslo
y vivamos en un cuento ya que no me quieres en lo real.
Si hablamos de realidad
lo mejor es estar separados,
o mejor me drogo y escapo de la verdad,
y creo creo un mundo para nosotros, un mundo para dos.
Estoy feliz de haberte escrito tanto
por que es el testimonio de mi cariño,
gracias a ti, la tristeza con amor suplanto
y haces que quiera seguir y que la vida me lance un guiño.
Perdón por lo grosero de este párrafo en el texto;
caminamos por la vida dejando en personas huella,
a veces introducimos esa huella, pero ¿Qué viene después del sexo?
por eso no quiero un culo, yo no tuve una mujer, yo tuve una estrella.
Es muy lanzado lo que a continuación vas a leer,
y tengo esperanza en que vas a responder,
igual ahora ya no tengo nada que perder,
por eso te pregunto: ¿Me dejas volver?
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