Oye, espera, aún no me beses y me digas «au revoir»
detén marcha y por un momento pausa tu vuelta atrás.
Guarda el celular, y préstame tu mirada un rato más
anda, que por un minuto nadie murió jamás.

Solo tengo algo que decir, sé que otro día podremos hablar
cada vez pasa de todo contigo, cada vez te quiero escuchar.
El asunto aquí no es algo del otro mundo, nunca lo fue
tampoco me apresures, no pienses que nunca lo pensé.

Tú, ¿podrías voltear tus ojos verdes hacia mí?
no pienses que quiero sorprenderte en un desliz.
Aquieta tus tibias manos, e intenta no reír
pues como dije antes, solo tengo algo que decir.

Oye tú, mujer de sombras y melancolía
nadie conoce las despedidas mejor que tú,
nadie ha abrazado el amor sin conocerlo
ni ha caminado entre valles de poca luz.

Oye tú, humana con consciencia sin igual
de mente profunda, ideas y pensamientos,
razones y sentimientos carentes de todo mal,
¿por qué no compartes toda esa dicha?

Tú, que coleccionas miradas al andar
y vuelves locas a las personas por doquier.
Tú que con audacia, menosprecias tu belleza
pero escondes tus dudas bajo el somier.

Esa persona que todos un día, deberían de conocer
y no lo tomes a mal, no quiero más que describir
compartir el sueño cumplido que es tenerte cerca
hacerte ver que no existen carencias en tu vivir.

¿Qué hice yo para ganarme un poco de tu atención?
¿por qué soy dichoso de coincidir en tu camino?
entonces comprendes el porqué, tú, sin hacer nada,
sin aparente motivo ni razón, me llenas de tanta emoción.

Oye, tú, no quiero más que admirarte un poco más
y quizás te parezca aburrido y te tengas que ir,
pero hasta que volvamos a vernos, ojalá mañana
no es más que «gracias» lo que tengo que decir.

Lo que ha salido de mi boca, lo que tú ya sabes
que sin ti he reído, he vivido y hecho tanto
pero estando incompleto.

Tengo que decirte que contigo hago más que eso
he de admitir que me siento bien, invencible
a donde quiera que vaya, contigo todo es posible
y debo decir que es lo mejor, que te llevo junto a mí.

Si hubiese tenido que definir a la mujer perfecta,
me hubiese faltado imaginación, reflexiones
visiones y no la hubiera podido describir mejor,
escondiendo mi rubor te digo; estuvieras allí…

Oye, tú, mujer perfecta con tus «imperfecciones»
chica de inmensos sueños y grandes ambiciones
dueña de mis ganas, de mi corazón y mis razones
propietaria de mis amores; gracias por existir.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS