Era el silencio quien mas decía, y el verso tuyo quien mas demostraba.
Nunca fui bueno escribiendo, tu en cambio eras entera poesía
siempre fría, con esos ojos que en ocasiones mostraban melancolía.
prestarme interés nunca fue lo tuyo, aun así verte siempre me alegró el día.
por alguna razón un día con grises con nubes siempre te ponía feliz, esa sonrisa sentida.
tan única, tan llena de placer, lo expresaría como quizá ver algo tan magnifico, pero a la vez tan irreal, en todo caso algo que solo usted entendería.
han pasado años, y contemple como su mirada de indiferencia hacia mi, cambio por una agradable efervescencia, cosa que en un momento dado le dio sentido a mi vacía existencia.
han pasado años, y por fin le encontré respuesta, a la única pregunta que no le di respuesta en mi juventud, cuanto usted me hacia compañía.
…
Un trueno en venas de luz alumbran el lago, y la lluvia se pronuncia en las oscuras y grises nubes, mientras me acuesto sobre tu pecho añoro y espero el aroma de hojas y tierra mojada, en tanto pienso y suspiro un cálido verano en invierno, y tú aun así ¿Te quedaras a mi lado?.
quizá sea cosa del destino, pero en la respuesta yo no eh pensado, quizá llego a mi, como un trueno cayendo del cielo.
Un trueno en venas de luz alumbran el lago, la lluvia pronunciándose en oscuras y grises nubes, ese sería el mejor escenario, para mí siempre deseado, tenerte al lado, sentir una tenue brisa que es suficiente para ponerle calma a la tormenta que agobia mi alma, el aroma a hojas y tierra mojada que al contacto nuestro nos llevará a vivir un fascinante primavera aún en pleno invierno, aunque no llueva me quedaré a tú lado.
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