A mi angel de cuatro patas

Te llevaste un pedazo de mi corazón mi viejito adorado.

16 años a nuestro lado, todo este tiempo crecimos juntos. Desde el primer momento que te vi supe que debía quedarme contigo, y entendí que te convertirias en mi mejor amigo. Te encargaste de llenar de de amor y bondad a la familia, fuiste mi compañero en tardes de juegos, en noches donde me quedaba estudiando hasta tarde, siempre estuviste a mi lado para todo. No había nadie que me recibiera con tanta emoción como lo hacías tú. Esa forma tan peculiar de recibir a las visitas oliendolos, ellos si me leen sabrán cuál era esa forma tuya de recibirlos. Gracias por enseñarme el significado de la palabra responsabilidad, ya que lo fuiste para mí desde que yo tenía 8 años. Fuiste un guerrero que luchó hasta el final, hoy te despido con mucha fortaleza, porque me quedo con los maravillosos momentos compartidos; con lágrimas en los ojos escribo esto esperando te encuentres en un jardín lleno de flores descansando, un lugar al que algún día a todos nos tocará visitar.

Te recordaré así como en la foto, feliz, lleno de bondad y puro como lo fuiste siempre mi bebé, mi Rocky, mi amor ❤️