He tenido bastante tiempo para pensar, demasiado tiempo libre, qué en muchas de las ocasiones, por no decir que siempre, resulta nada productivo. He pensado acerca de todo, pero en nosotros principalmente, ha sido una introspección nada divertida, que me ha tenido con cambios de humor nada agradables, sin embargo, sea bueno o sea malo, las conclusiones que he sacado han servido para saber y responder ¿Dónde ha quedado nuestro mundo?
Ese mundo, en él que un día existió lo nuestro, ha quedado en silencio. Risas y promesas han silenciado el ruido que un día alegraba al corazón. Te prometo que no he sido yo quien ha decidido extinguir y destruir ese mundo que ambos construimos y que con amor mantuvimos vivo.
¿Has sido tú?
quizás fuimos juntos quienes al alejarnos lo dejamos morir y a estas alturas, no vamos a permitir deslindar culpas, quien quiera que sea el responsable de dicha extinción ha sido liberado del descuido.
Así que probablemente nunca existió, que los colores que tu y yo veíamos brillantes, en realidad siempre fueron grises, que nuestras promesas no sonaban en ecos en las altas montañas de felicidad y las risas simplemente eran quejidos de angustia. He tenido mucho tiempo para pensar, demasiado tiempo libre, qué en muchas de las ocasiones, por no decir que siempre, resulta nada productivo.
OPINIONES Y COMENTARIOS