Cartas

Hola.

Tu no me conoces, ni yo te conozco a ti.

Pero eso no significa que no pueda ayudarte.

Es verdad, poco puedo hacer con mis palabras, pero al menos puedo decirte lo maravilloso que eres.

Y no, no necesito conocerte para saber que es verdad…

¿Como?

Digamos que solamente lo se.

Seguramente ahora lo estas negando ¿No? Crees que si te conociera bien no diria lo mismo, bueno, en eso te equivocas.

Puede que seas la peor persona que existe o quiza eres la mejor y solo no te has dado cuenta.

Asi que dejame ayudarte con eso, quiero que vayas y tomes un espejo, se que no te gusta lo que ves reflejado en el, pero eso es porque has olvidado ver lo que nadie mas podrá: el verdadero TU.

¿Es hermoso no? Yo se que lo es…

Bien, ahora acerca más el espejo y respira lento.

Empañaste el vidrio, eso solo quiere decir una cosa: aun estas vivo, en ti aun hay fuerzas, sentimientos, motivos y deseos, aun hay algo por lo que debes luchar.

Olvida al mundo, olvida todo aquello que te grita que no puedes y deja hablar a tu corazón.

Adelante, grita, llora, rompe algo o has lo que quieras pero luego de eso prometeme que te pondras de pie y continuaras caminando…

Las cosas no siempre van bien, la mayoria del tiempo estaras solo y eso no esta mal, porque al caer aprendes y al levantarte te vuelves mas fuerte.

¿Ahora entiendes porque no me importa quien seas?

No me importa porque se que eres unico, que no hay nadie igual a ti o que pueda hacer lo que tu haces como lo haces.

Y si yo creo que eres sensacional,

¿Por qué no lo creerias tu?

Te pido una última cosa antes de irme…

Por favor,

SONRÍE.

Porque no hay nada más hermoso que una sonrisa sincera que ahora reside en el rostro de quien antes sólo creyó merecer lagrimas…

Y cariño…

Tu mereces mas que eso…

Con cariño,

de una desconocida.