Cuando nos conocimos fue amor a primera vista, así de cursi y meloso como lo pintan en las películas.
Cuando la mire no pudo resistir la fuerza que me atraía a ella.
Nos entregamos a la sensación, éramos inexpertos pero queríamos amarnos.
Nos amamos tanto y nos dimos tanto que en algún punto nos perdimos.
Yo me perdí, ella se perdió, caiamos en un pozo sin fondo y en la caída nuestro amor se perdió.
No mal entiendan, nuestro amor estaba ahí sólo se escondió. Estábamos sin estar, nos buscábamos temerosas.
Llegamos al fondo y no había más que subir separadas para en el camino volvernos a encontrar y con ello encontrar ese amor que profesabamos.
La vida tenía otro plan, apago su luz dejándome sola con este intento de recuperar nuestro amor, con una gigantesca sensación de vacío, como rompecabezas sin una pieza, con preguntas que nunca obtendrían una respuesta.
La vida tenía otro plan, entregarte a la muerte.
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