Hola. Lamento generar este vago reencuentro. Pero juro que mi corazón necesitaba verte de frente para finalmente cerrar este ciclo que no había querido ver morir.
Qué largo el trayecto para llegar aquí, pero hoy sin detenerme puedo decir que: Te perdono. Todas las heridas finalmente forman, en su totalidad, parte del pasado. Y en el presente, porto cicatrices que muestro con orgullo por haber sido el resultado de no tener miedo y entregarme al amor más grande del mundo.
Siempre te llevaré conmigo. Siempre formarás parte de mí, de quien soy, de mi alma y mis recuerdos. He de confesar que no hay día que pase en que no piense en ti. (Te sigo viendo en sueños incluso, una que otra vez)
Sé que a pesar de las caídas y equivocaciones, me amabas tanto como yo a ti, y quiero que sepás que te amo y te voy a amar siempre.
Somos jóvenes y quizás pensés que es estupido lo que voy a decir pero, sos el amor de mi vida. Y hoy sin ataduras ni resentimientos te lo digo a los ojos con total honestidad. Hay una parte de mí que siempre va a estar en tus manos; ligada a tu corazón y a todo lo que sos. Fuiste ese hombre que marcó un antes y un después; ese que me enseñó a amar desmedidamente. Ese por el que di todo lo que pude, todo lo mejor de mí.
No cambiaría ninguno de los detalles que quise dejar en tu vida, no eliminaría todas las vivencias y aventuras juntos, no desprendería de mi recuerdo ni un solo día que escribió nuestra historia… Desde aquella primera noche estrellada de enero, pasando por tenernos frente a frente, ilusionados a más no poder en aquella bella noche de abril, hasta la última vez que cruzamos miradas; miradas frías, pero llenas de amor… un amor teñido en orgullo y un tanto de tristeza.
¿Sabés? Es lindo finalmente poder hablarte sin dolor. Y es que el tiempo me ha servido para hacerme un sinfín de preguntas… para conocerme mejor y trabajar en mi plenitud. Meditando mucho y casi todo, soy abierta y te digo que en realidad no sé si alguna vez vuelva a amar así como te he amado, (mi corazón simple y sencillamente lo cree imposible), y es por eso que necesito que, si todo esto se termina porque nos hicimos mucho daño y finalmente no somos el uno para el otro, pueda llegar a su término con sutileza y sobre todo sinceridad. Una sinceridad reventada que pinta un amor inmenso; uno que no supo conocer final, porque simple y sencillamente ha sido real.
Finalmente comprendí que no tengo que dejar de amarte para avanzar. No tengo que olvidarte para seguir adelante. No tengo que negar que vivís en mi corazón para perder el miedo e intentar enamorarme otra vez. Nuestro capítulo está allí, escrito y resaltado. Largo e incomparable. Increíble e inolvidable.
Siento que ha pasado tanto tiempo desde que supe de ti. Pero te llevo muy muy dentro, y aunque quizás no me creás, aún hay noches en las que pido a Dios por ti.
Dejo un beso y mi corazón siempre contigo, pues que no podamos estar juntos, no significa que no te ame. Como siempre, te deseo lo mejor. Aún estoy convencida de que volarás muy alto y llegarás muy lejos. Sigo sin dudar de tus capacidades y del increíble potencial que sin duda te define.
Nada es suficiente, porque cuando habla el corazón, las palabras no parecen alcanzar, pero… Después de tanto y todo, Gracias por enseñarme el poder del verdadero amar.
OPINIONES Y COMENTARIOS