Le escribo esta carta estimada autoridad,

donde pongo este reclamo formal, puño y letra, 

por ruidos molestos cada noche sin fallar. 

No puedo consiliar el sueño cuando cada noche, 

miro el pálido techo y comienza un festival. 

No me tome por exagerado estimada autoridad, 

Cada noche su voz escucho en el silencio, 

muy ruidoso, un par de canciones y letras de amor, 

promesas sin atar, unos te quiero y un ven conmigo, 

su risa y su llanto explotan cada noche sin saltar. 

Pienso estimada autoridad y le prometo sin exagerar,

que en el piso de arriba un terrible infierno y 

paraíso hermoso se han de desatar,

ya que en este insomnio constante y cortante, 

un par de risas y algunas lágrimas me han de sacar.

Le cuento con confianza estimada autoridad, 

que un cóctel de pastillas me han de ayudar, 

para no escuchar ni ver estas cintas en sepia, 

de lo que debió ser quizás pero no lo fue jamás. 

He reflexionado varias cosas estimada autoridad, 

que debo cambiar el destinatario de está carta para enviar, 

que ya creo que usted mi queja no ha de solucionar. 

Disculpe usted autoridad a este arrendatario, 

por derivar problemas que el mismo ha de terminar. 

Se despide atentamente, este vecino difícil de atar,

Y que el pago del gasto común ha de pronto cancelar. 

A.P.M.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS