Las matemáticas han sido por cientos de años, las que han despejado ciertas dudas, han aclarado cuentas, he incluso nos han dado con mayor claridad el pronóstico del tiempo en el año.
Pero, ¿qué pasa, cuando una fórmula que parece matemática en física ha gobernado nuestra vida y no nos hemos dado cuenta? ¿Una formula gobierna mi vida?, te estarás preguntando ahora mismo. Sí, por mucho tiempo, hasta yo desconocía de ella, por años para mí la «V» fue velocidad o volumen, la «C» era una constante, la «H» era la altura de una figura geométrica o cualquier otro cálculo y finalmente la «A» terminaba siendo la denominación del área hallada en una figura.
V=(C+H)*A
Para muchas personas, estas letras no llegaron a tener el mismo significado, pero si formaban parte del abecedario. De que estoy hablando me preguntaras, ¿Fórmulas?, ¿letras?, ¿que ganaría con eso?, exactamente en ese instante ya estas dándole sentido a la letra «A», como tomas lo que estás leyendo y querer saber más, te dará por conocer la C, dominar tu conocimiento reflejara la H, para que finalmente descifres la V.
¡Por Dios!, esto parece un trabalenguas mal redactado me dirás o quizás un acertijo sin sentido.
Pero, tú como persona tienes un valor definible para quienes te conocen, ¿por qué?, ¡Exacto!, eres la suma de los conocimientos que tienes, la habilidad que has desarrollado, pero estos toman fuerza y resaltan en cada uno, cuando se multiplican por la actitud que tienes en cada etapa de tu vida.
La primera vez que escuche de esta fórmula, me intrigo, con el tiempo se profundizo al punto de detenerme a pensar en lo que hacía y en lo que transmitía, entiendo de primero, que sin la aptitud necesaria (c+h), la actitud no tenía sentido y esto hacia que mi valor como persona disminuyera. Que las personas llegan a nuestra vida con un propósito, eso sin duda, por varios meses a partir del día en que entendí el valor de la formula, nunca encontré a quien me diera la razón, pero pude ser la luz al final del tunal para quien estaba deprimido o sin ganas de echar para adelante a seguir conquistando sus sueños.
El 10/11/20, entendí que llego a mi vida, quien me volvió a dar ese empujón de entender que cada día hay algo nuevo que aprender, conocía de esta fórmula, la fórmula del éxito decía el, que grato tener personas así en mi vida. Me menciono que le gustaría que le escribiese algo, quizás esto no sea lo que espere, pero sin duda será por lo que más lo recuerde..
Pd: Amigo, en números incontables e intangibles, millón gracias por estar en mi vida.!
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