EL EQUINOCCIO DE OTOÑO, Fenómeno Astronómico.

La palabra equinoccio, viene del latín ”aequs-nox = noche igual”. En esta época el sol cruza la línea imaginaria del ecuador celeste en su paso de norte a sur. El sol estará en el Cenit (90°) sobre la línea del ecuador terrestre, es decir sobre todos los territorios que se encuentran en esa línea terrestre. El sol en su paso del solsticio de Verano al solsticio de Invierno visita un punto medio que es precisamente el equinoccio de Otoño. Para los que estamos en el hemisferio norte empieza el otoño, pero para los habitantes del hemisferio sur empieza la primavera. Los equinoccios y los solsticios son considerados por la astronomía antigua como grandes relojes divinos donde el Sol trabaja con la madre naturaleza en una transformación, en una conjunción cielo y tierra. En esos fenómenos se encierran los misterios de la creación, de la luz y la oscuridad, los misterios de la vida y la muerte. Según las creencias más antiguas, el otoño marca el inicio de la muerte del Sol quien en este punto este astro es vencido por las tinieblas y muere lentamente: aquí el Sol es golpeado por la constelación Libra y cae hacia al sur gravemente, después en octubre es interceptado por la constelación Escorpio quien le da otro golpe mortal y sigue cayendo hasta que se encuentra en noviembre con la constelación Sagitario y este lo mata con un golpe de gracia.

Este fenómeno astronómico en particular es la esencia de las religiones; el hombre a través del tiempo lo ha personalizado en divinidades a su propia imagen y semejanza.

P.D. debido a la precesión de los equinoccios, los puntos de las constelaciones han cambiado algunos grados, pero en la línea del tiempo se constata que se sigue la misma línea.

I.E.C. Ociel Estrada Apolinar