Insomnio vital

Sueño despierto con almohadas,

sueño con soñar en sueños,

con encontrar la llave a la habitación de Morfeo

y pedirle que duerma y sueñe

por las veces que no pude dormir.

Sueño con habitar un sueño de naturaleza inmortal,

un sueño que salte a otro sueño

como aquellas ovejas que tanto cuento,

y despertar sonámbulo

y preguntarme, preguntarle:

¿Quién sueña este sueño?

Temo que la noche me engulla,

me atrape en su sueño,

en mi pesadilla.

Las sombras de la oscuridad del dormitorio

gritan en dolor,

las paredes también gritan,

no tienen aparato fonológico

y gritan

sin parar,

se desangran entre gritos,

ensordecedoras

gritan.

Me estoy desquiciando:

a la noche me exalto,

degenero,

quiero reír a carcajadas

a la vez que llorar entre las sombras

y el abismo.

Siento la sangre burbujear,

me siento hilarante

y por alguna extraña razón quiero apuñalarme

entre risas,

entre sombras desangrarme

y hablar con las sombras y la muerte

y la sangre.