❝ESTACIONES FRAUDULENTAS❞
Por qué somos adictos al sol, a la luna, a los sueños,
por qué obligamos a la noche a tender trampas,
y allí mientras el insomnio palpita nacen nuevas ilusiones.
Hoy sonrío al amor que indiferente me sonríe,
Los días van pasando y me siento prisionera a la desesperanza, agotada al hastío del tiempo que me hace jugarretas y me castiga.
Con qué magia perseguimos la felicidad que nunca llega y cuando llega no deja ver su rostro…
Acaso no encuentro la formula exacta para existir.
De qué vicios está hecho tu aliento,
Cuando no encuentro la palabra precisa para descifrarte…
En qué perspectiva de las matemáticas te apareciste robándome la calma.
Escucho el tiempo diáfano, en la melodía de un reloj que espera y pregunta constantemente ¿Y mañana que pasará?
DÉCIMAS SUELTAS
Para aliviar los enojos
que me tiene desvelada,
voy a pintar en la nada
la arrogancia de tus ojos.
Voy a borrar los sonrojos
que dejaste en tu nombre
voy a aprender, no se asombre
si ya no puedo confiar,
porque al verte desandar
eres la sombra de un hombre.
Cae la noche y sorpresa
se perdió donde el camino,
hizo juicio al asesino
del puñal que le atraviesa.
Cae la noche y apresa
lágrimas, a donde fui,
palabras, de todo oí
aquella noche espantosa,
Tú le nombraste celosa
cuando solo fue por ti.
UN AMOR, AMOR, AMOR
Me preguntas ¿Qué tenemos?
y yo miro en derredor,
una lámpara mi amor
vamos a ver…¿Qué tenemos?…
Yo creo, es más, poseemos
algo que no contabiliza,
tenemos amor, sonrisa
y un techo que nos protege,
cuando la noche se aleje
tenemos también la risa.
Pero amor, no puedo darte
más allá de mi existencia,
tengamos también paciencia
deja besarte y besarte.
Quiero a tiempo valorarte
como has pulido tus manos,
de aquellos versos mundanos
pintado hasta mis paredes,
y en tu candor me concedes
Todos mis sueños lejanos.
SIN TÍTULO
Pellizco la noche, para despabilar la incertidumbre,
heme aquí sobre este lúgubre lugar donde hasta las sombras hayan paz.
Cientos de voces arcaicas suenan quejumbrosas cual concierto
que en la bruma es un sepulcro…
Un murmullo inoportuno bebe los vientos extraídos de la luna,
mientras murciélagos anidan en este paraíso perdido, desordenado…
Reaparecen de la nada momentos fugaces, luego silencio en la penumbra.
Nos siguen uno tras otro
hasta tu última morada,
pero se niegan a entrar en ella…
Mirando desde afuera dispersarse en realidad o fantasía.
Padre un día como hoy, fue tu inicio en la tierra.
Y un fatal día como el de mañana, nos abandonaste
hasta apagarse tu recogimiento,
tu corazón no pudo más y estalló…
Cuántos días de angustias…
Te quiero padre,
y aún me duele tu ausencia …
no existe palabra que justifique tu adiós,
Mucho menos tu ausencia.
POETA…
Alma tienes de poeta
y en tus ojos soñadores,
sos adivino y profeta
orgullo de triunfadores.
Poeta no eres celoso
cuando miradas ajenas,
leen mi verso y pomposo
salen a prueba tus penas.
Dices que no te incomoda
si por mis letras desandas,
Hay poeta, no esta en moda
que te las tomas y mandas.
Y me olvidaba decirte
que tus letras enamoran,
Pero al no venir asirte
muchos poetas me añoran.
Hay poeta yo lo siento
si en algo yo lo he ofendido,
los versos lo lleva el viento
y su amor está escondido.
«AL SUR DE MI GARGANTA, PARAFRASEANDO A CARILDA»
(Homenaje póstumo a la poetisa cubana Carilda Oliver Labra)
Como caudal de aluviones
fue tu inmensa poesía,
Carilda tu melodía
llena al mundo de adicciones.
Tus versos, cantos, pasiones
toda erótica y cortante,
tu pluma que desafiante
fue paloma enamorada,
tal vez ya desordenada
en la lira de tu amante…
Carilda, pluma de oro
como una fruta madura,
como de espuma segura
en tus versos tu decoro.
Colores al tocororo
tú cual río matancero,
Carilda, tu de aguacero
y corazón encendido,
Carilda tu no te has ido
eres tiempo de avispero.
Serán tus versos de goces
en sembradíos de encanto,
mis ojos llenos de llanto
releen tus tiernas voces.
Eres palmar, de mis roces
jilguero en alguna planta,
dulce rima que amamanta
a verdes cañaverales,
y de un pomar que a raudales
queda al sur de mi garganta.
«SUSURROS DE AGOSTO»
Agosto se vuelve lentamente un velo de adioses,
y las noches son una nueva tentación de amores cálidos
de besos confusos, cuando el día muere y renace.
Agosto con exuberante lluvia, truenos, hasta una granizadas;
Agosto ha sido calma, ansiedad y cientos de miles de minutos ocupada.
Y mucho antes que termine nuevas ilusiones tocan las puerta de mi corazón…
Abro las ventanas de septiembre, mes de cumpleaños de mis nietos…
Así es la vida, la vida de esta solitaria poetisa escribiendo sus versos al mar, a un horizonte, a la noche en que desaparece el amor y nunca llega…
Es agosto que tiembla,como flor pálida cuando un ave susurra en su nido te amo, amore mio…
Es un agosto que lucha ante la muerte, con garras y empuje… Es vino rojo que se acaba…
Agosto en los extramuros de la luna, que no sabe de fronteras, sumando tiempo, pactando negocios…
Es agosto mirándome en tus ojos, pobreza y tranquilidad…Pero es amor.
Es agosto una madre dando a beber de su senos, leche de siglos.
Un largo viaje a la encrucijada de septiembre…
Mientras yo sigo siendo espectador,
en la otra orilla del océano.
«DÉJAME»
Déjame quieta sobre el lugar exacto donde descansa un minuto, entre el mar y la luna.
Entre la sombra y la soledad que duerme con la incertidumbre de tamaña inexistencia, viendo como se malogra todo en un instante,
tu aún vives prendado de un nombre, una fecha, y un símbolo del ayer…
Déjame sobre el remanso de paz, para que mi alma pueda dormir;
Déjame si mis ojos están cansados, y el camino de rosas que me haces ver en tu poesía dedicada a mí, está cubierto de espinas…
Déjame no ves, trato, necesito prescindir de los fantasmas que incomodan mi espíritu…
Déjame, no respiras que después de mi tranquilidad viene el mazazo… Y me hace volver a la realidad.
Sobre la mortaja de mi voz, una daga clavada, inmola mis deseos y mis ganas…
Entonces, cómo puede el beso fructificar mi piel, cómo detener el tiempo que atrapas de recuerdos y un constante menosprecio, si no dejas derribar el muro y no dejas volar libre al papalote, jamás verás llenar los hilos en tus manos…
Déjame si al final del día, o la noche yo sigo aquí, muerta en tus miedos, escuchando y viviendo las secuelas de un presente que no tiene un mañana…
«ESTACIONES FRAUDULENTAS»
Alto el aire
que mece la marea
tiernas oleadas.
Un desvarío
habita en la nada
sin más remedio.
Atormentado
ruidos en la cabeza
tal vez un rezo.
Graznan las aves
llamándose entre sí
cantos de Zeus.
En alta mar
de barcos son la ruta
casi lo olvido.
De magia siempre
hermosos laberintos
se coaguló.
Irrepetibles
se van las estaciones
ya fraudulentas.
FIN
OPINIONES Y COMENTARIOS