Asì como es arriba es abajo
(para ser leìdo de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba)
Era feliz
La primavera besaba mi rostro
En la noche despertaban mis deseos
Era joven y más atractivo que el dinero
Cuando la conocí
Comprendí porque se mata porque se muere
Cuando me dijo: nunca voy a quererte
La asesiné y devoré su cuerpo
Para que viva eternamente en mi
Los años pasan lentamente
Encerrado en la torre del castillo
Jamás volveré a sonreir
Como la quise a ella
Jamas querré a nadie
ya estoy viejo
La muerte asoma su rostro
Nunca
Nunca voy a saber a que huele tu cuerpo.
Nunca voy a conocer tu rostro dormido
y tu pelo revuelto por las mañanas.
Nunca voy a caminar en el jardín de tus pensamientos,
no conoceré tus cosas,
tus gustos,
tus colores,
tus sentimientos.
Nunca voy a saber tu nombre.
Jamás tendremos hijos.
Jamás te verè envejecer.
Tu serás nunca jamás para mi.
Somos
Somos caricias que en la piel se bordan
junto a las sombras
cuando tus deseos me nombran
y nos conocemos con premura
durante la penumbra
que siembra la luna que nos alumbra
hasta el amanecer.
Navego en las entrañas de tu ser
para volver a nacer,
entre tus piernas, mujer.
Sin ti
Si tu vientre hubiese sido nido
de los hijos que jamás tuvimos.
Si tus manos tiernas
volviesen a mi
para aquietar la sangre de mis venas.
Si tu voz endulzara mis oídos
y calmase mi odio.
Si encontrara hilos de tus cabellos en mis cosas
Si pudieras ver como se oculta el sol suave del otoño,
conmigo,
juntos,
abrazados.
Si pudiera sentir el calor del sol que se escondía en tu cuerpo
Si pudiera mirarte, por largas horas en silencio,
como cada noche
miro a la luna.
Si pudiera ser ese jardín de lirios
que crece sobre tu cuerpo
para que vivas en mis colores
Tormenta
Tus deseos arrecian durante la tormenta,
los truenos gritan tu nombre,
el viento canta nuestra canción,
y comprendo todo lo infinito,
iluminado por el resplandor de tu desnudez que opaca la luz de los relámpagos.
Tus aullidos desgarran a la noche,
tu alma me busca, incansablemente,
y me envuelvo en tu esencia que ya es ausencia
mientras la luna oscurece
y poco a poco
nos convertimos en olvido y recuerdo.
Ahora
Ahora que no recuerdo tu cuerpo/ni el olor ni el color de tu piel/ni la miel de tu voz resuena en mi, para endulzar la soledad/Ahora que tengo otra edad/Ahora que comprendo la otredad/Ahora que no eres la sal de la tierra/ni la paz, ni la guerra/ahora que el sol se va y no me duele/ahora que no huele a ti el fantasma que conmigo vive/ahora que no hay dueñas, ni dueños/Ahora que no estás en mis sueños ni en mis pesadillas/ahora que no estás…aprendí a decirte adios
–
Preguntas
Su nombre tiene el color de las rosas.
Su olor es de incienso.
Su belleza es tan necesaria para mi alma
como el agua para mi cuerpo
Sus ojos brillan más que el oro.
cuando los alumbra
la luna roja
Su rostro es màs esplendoroso
que el atardecer en primavera.
Son sus manos,suaves,como el sol del otoño.
es su risa como el cantar de las aves.
En su voz anida la ternura.
Su piel tiene la luz de la luna.
En sus labios encierra los únicos besos que deseo.
¿Será mi hombro su apoyo?
¿Será su cuerpo, caliente, como el verano?
¿Qué olor tendrá su pelo enmarañado por las mañanas?
¿Serán sus caderas, mis cadenas y mi almohada?
¿A qué sabrá su piel desnuda?
Dolor
mi dolor no es tu desamor
saber que pudiste olvidarme
y que yo todavía te recuerdo
ese es mi dolor,
es un dolor con olor a muerte
porque todavía no se quien de los dos es el muerto.
Recordarte
Recordarte toda como eras en la primavera
cuando la luna llena nos bañaba con su resplandor
y los pájaros gritaban en el rìo.
Recordarte toda como eras en la primavera
cuando la madrugada nos envolvía
con túnicas de terciopelo
y tu olvido no existía.
Recordarte toda como eras en la primavera
ahora que tu reflejo se asoma en el ocaso
y me revuelvo en la melancolía.
Recordarte toda como eras en la primavera,
ahora que los espejos están cubiertos de sombras
Jamàs
jamás voy olvidar aquellas noches desveladas llenas de sueños
jamás voy olvidar aquellas tardes de verano cuando jugábamos con nuestros cuerpos
jamás voy a olvidar el color de tu voz cuando me nombrabas
jamás voy a olvidar el calor de tu mirada
jamás voy a olvidar que una vez te quise
Somos II: Flor
Somos caricias que tejen nuestros cuerpos desnudos
desatando nudos profundos
hasta el amanecer
y navego en las entrañas de tu ser
para volver a nacer
entre tus piernas, mujer.
Somos deseos que se bordan en la piel
cuando junto a las sombras
tu devoción me nombra
y nos conocemos con premura
durante la penumbra
que siembra la luna que nos alumbra.
Somos fuego y viento
y te invento en cada pensamiento
en cada sentimiento
en cada conocimiento acerca del infinito
comprendo que todo tiene que ver contigo.
Mística
Encuentro todas las respuestas en tu vientre
cuando la tarde se aquieta en nuestros brazos
y mis manos mansas recorren tu sombra
mientras cae el sol rojo.
El dulce color de tu voz me nombra
cuando mis deseos queman en tu piel
y bebo el fuego de nuestra pasión mientras la luna nos refleja desnudos…
El viento juega en el río
cuando las aves en el cielo gritan nuestros nombres
y te acaricio con versos y besos que tejen mis labios
mientras los primeros rayos del alba iluminan nuestra almas
Comprensiòn
mi mente se libera de todas las cadenas y mi horizonte es una soledad sin fin que siempre me acompaña…
una soledad que nace en el abismo del conocimiento absoluto
cuando se vislumbran los designios del universo girar en un cìrculo infinito…
corriendo el manto que cubre la noche eterna del cosmos…
ya no soy nada y al mismo tiempo soy todo…
4
la brisa está empapada con tu perfume
y mi sangre se inquieta.
El atardecer se apaga
y un suspiro de mujer, en mi cuerpo se enreda
Somos III: Misterio
Somos caricias que se quedan en la piel
cuando las sombras
que reflejan nuestros cuerpos
iluminan nuestras almas .
Somos besos que crecen en la miel
cuando nos conocemos en la penumbra
que siembra la luna que nos alumbra.
Somos fuego en el viento
cuando se desatan los nudos
que envuelven a nuestros cuerpos desnudos.
Somos el numen de todos los secretos
cuando nos iluminan los silencios
que nos revelan los misterios del universo.
Somos IV. Nacimiento
Somos fuego en el viento
cuando la noche nos cobija en las fantasías
que tejen nuestros cuerpos desnudos.
Somos caricias que se bordan en la piel
cuando entre sombras
tus deseos me nombran.
Somos la miel de todos los secretos
y nos bebemos en silencio
mientras la luna nos alumbra.
Somos V: Luna
Somos fuego en el viento
cuando nuestros deseos desatan los nudos
que envuelven a nuestros cuerpos desnudos.
Somos el numen de todos los secretos
cuando nos iluminan los silencios
que revelan del universo, los misterios.
Somos caricias que se bordan en la piel
cuando entre sombras
tus deseos me nombran.
Somos besos que crecen en la miel
cuando nos conocemos en penumbras
que siembra la luna que nos alumbra.
Volver
Volver a escuchar a tu cuerpo durante el ocaso
junto al reflejo de nuestras sombras
y jugar en el río con la luna
cuando tus ojos griten mi nombre.
Amanecer en las pupilas ardientes de tu mirada
junto al calor de nuestra pasión
y recordar los secretos naturales soterrados en el abismo
cuando los colores del sonido envuelvan nuestras almas.
Buscar la esencia de nuestro ser
Junto a las profundidades de nuestra existencia
y naufragar en pensamientos
cuando todo sea confusión.
Quisiera II
Quisiera habitar en el jardín de tus pensamientos
sembrar dudas y certezas
comprendernos, aprendernos.
quisiera ser tu viva esperanza
tu libertad , tu verdad
tu deseo , tu consuelo
porque en vos todo es nuevo y eterno
como la primavera.
Recordándote recorriéndote
Recordándote recorriéndote toda
te recuerdo ahora
cuando tu imagen se dibuja en el ocaso
y eres mía junto a las sombras que teje mi memoria
y siento tus deseos en mi piel, ahora que no estás
y me urges aquí en cada rayo de sol que me nutre
y me surges aquí en todos los sentimientos que escribo
en cada silencio que te nombra
en cada verso que respiro
Una mujer desnuda
Una mujer desnuda es el bálsamo que cura heridas, es el amanecer después de la guerra.
Una mujer desnuda es el reflejo de la dicha, la luz que arrasa, la fuerza de un manantial, la oración que habita en la piel.
Una mujer desnuda tiene la frescura del campo verde en primavera y es la luz que ilumina al páramo silencioso.
Una mujer desnuda es la plegaria que nace en nuestros labios…
Una mujer desnuda es el credo vivo de mi existencia.
Una mujer desnuda juega en el mar de mis deseos y alborota mis pasiones.
Una mujer desnuda es mi patria, mi pueblo, el vientre que da comienzo.
Creo
Creo en el fuego que resplandece en nuestros cuerpos desnudos bajo la luz de la luna…
Creo en la tierra que besa tus pies cuando el río nos viste con colores nuevos…
Creo en el viento que envuelve tu ausencia cuando las gaviotas pierden el rumbo del verano…
Creo en el agua que nos alimenta…
Creo en los elementos que habitan en tu piel…
Creo en la esencia de tu vientre.
Creo en nosotros.
Tanto te quise…
tanto te quise que el fuego aprendió a arder mirando nuestros cuerpos desnudos
tanto te quise que hasta el mar me encelaba cuando te tocaba
tanto te quise que el aire estaba embebido con tu perfume
tanto te quise que guardé para siempre en mi tierra las huellas de tus pies
tanto te quise que ahora vivís en mi.
Heme aquí
He poblado tu vientre de preguntas
tu mente de respuestas
tu cuerpo de urgencias
He probado tus deseos bajo la luz de la luna y el viento nos acariciaba
He devorado tu ausencia
Atardecer
La tarde bajo el sol se durmió
tu voz callada y triste apagó su color
una lágrima asomó a tus ojos durante el ocaso
y las flores caminaban sobre el rìo.
El viento enjugó tu llanto
la tormenta lavó nuestras memorias tristes
cuando vimos juntos todos los colores del arco iris
luego un manto de pájaros cubrió la bóveda celeste .
abrí las puertas del infinito y vislumbre la esencia del universo…
hoy dejo que los años discurran mansamente
tempestad
Nació la tempestad, los truenos gritaron nuestros nombres
el resplandor de tu desnudez opacó la luz de los relámpagos
tus deseos estallaron en aullidos que hicieron estremecer a la noche
tu cuerpo tembló y el viento enjugó tu llanto.
La tempestad dio paso a la llovizna y el olor a tierra mojada nos embriagó
hasta que el cielo se lleno de color sangre
te acaricié con versos que iluminaron para vos la última estrella de la noche
en tu cuerpo nacieron todos mis sentimientos.
Hoy te busco entre las cenizas de todo aquello que pudiste haber sido conmigo.
Y si acaso regresaras
Como cada dia vuelve el alba
Para alumbrar mi vida
Y si acaso vuelve tu alma
en cada ocaso
para enseñarme el olvido
Y si acaso de mi te acordaras
en cada noche que la luna se llena
Y si acaso, mi alma, por fin hallara paz…
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