Entra al cuarto, todo va a estar bien. Mientras desnudo mi alma, puedes acomodarte en el sillón. Perdón por la falta de encaje pero siempre me han gustado las cosas un poco más directas, espero que el interior negro no te importe. Alistare mi pelo; que normalmente llevo suelto al viento pero en esta ocasión sera atado perfectamente para descubrir mi rostro falto de expresión. Muerdo mis labios que violentamente quieren susurrar verdades al oído. Sírvete un trago que yo revisare mi maquillaje antes de que corra por todo mi rostro.
El calor ardiente que emana de mi cuerpo como un grito de sed no deja ocultar mi nerviosismo. Quiero gritar tu nombre una y otra vez, y que mi cabeza olvide el pasado. Te observo mientras caminas hacia la cama y un rastro de seducción en tu camisa me recuerdan las noches en las que una vez jugamos a vencer al cuerpo. Veo como te acomodas y te quitas la corbata. Me coloco frente a ti y mientras acaricio tus hombros te digo con amor…
Tenemos que hablar de ella.
OPINIONES Y COMENTARIOS