Muchos mueren a los dieciséis u dieciocho, pero nos los entierran hasta que llegan al punto máximo de la senectud; tristemente es el caso de varios/as.

¿Cómo seguir sin el corazón? Sin eso que nos hace vivir…Literalmente y metafóricamente, te lo llevaste, y no piensas volver; te lo llevaste y solo lo dejaste en la basura.

Hiciste de el lo que se te dio en gana con la estúpida excusa «es lo mejor», ¿Qué? ¿Acaso es lo mejor dañar a alguien que supuesta-mente quieres?

Lo más fatídico es que no me importa, que aún así, y in saber como sigo de pie, respirando con las pocas fuerzas que me quedan, con le esperanza que vendrás y me lo devolverás…Y es ahí cuando pienso si la esperanza es buena o mala por que eso, la esperanza, me ayuda a estar aquí de algún modo, pero también hace que me quede esperándote con la idea de que podrías volver…

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS