Pensamiento de tunupa
El desierto de sal
Salio a caminar
Dejo solo al volcan
Su llanto salio a derramar
Se silenció para acatar
El deseo de extasiar a la luna y el mar
Complicado más de lo normal
cocaina espiritual
Qué alimenta al super yo
Cambiando la visión
La peor parte de la historia
Cuando todo vuelve a su origen
Me devuelven los golpes
Me recetan cicatrices
Le concedo el consejo
Se revela lo nuestro
Soy yo Quien está lejos
Oveja negra
Lo que esperan de la lluvia
Limpiar tus manera tus conductas
Él agua turbia
No cesa él chocolate
Justo al punto de quemar la lengua
La piel se abre la mente se expande
Es que te pienso luego te olvido
Te digo, no te hablé, lo se
Estaba cerrado por dentro
Con el alma opuesta
Cerraron el paso del agua
Pero él interior se moja
Por qué no eres nada
Ni un cometa, ni muralla
No somos nada
Moralejas
Ni cruzadas
La oreja se queja por saber qué va arder
Saber por qué te quejas y no empiezas a ser
Saber qué incluso la oveja negra sabe correr
PoemaV
Se hundió junto a sus notas
Y con las rosas que encontró
Se demoró mil años en caer
En crear fiestas ficticias para su entorno
Se deseo inerte a lo nuevo
Vuelve que hoy me escapo del cielo.
Desclasificado en el patio de atrás
Por qué en la eterna y diminuta tinta
Algo deseaba un puente edificado
una escalera de humo, Algo imaginaba
“qué la vida tenía significado”
Me arresta de cierto modo
No saber si este mundo
Se traga o se mastica
Y se escupe después
Eliminar mi postura en su
Actual impunidad del tiempo
Mi pensamiento se esconde
Ya no hay sombras
En las que debe pensar
Iluminar.
Saltaría de una nube por ti
Me evapora esa sonrisa
Se detienen las gotas para
Para verte brillar a contraluz
Los músculos cansados
No están fácil levantar al mundo
Desmontar mil años de historia
En un minuto de silencio
En una hoja de cuaderno
Rio de mis derrotas
Por qué he sido vida
Ventajas de ser mar
Bajorrelieve de roble
Qué no te tiemble la mano
En en sueño volteando mi piel
Eres mía cada día reflejada en agua turbia
Atascada al descender del roquerío
La llave atascada en la cerradura de la cordura
Qué queda en la semana, actuando una vida
Sonriendo a una cámara
Deteniendo los instantes
Él sepia se queda en la piel
Eres tu lo que falta ver para creer
Impaciente
Llevo la carga del mundo
Más allá de los sueños por nacer
De la soledad de verme bajo un árbol
O un pensamiento recurrente de madrugada
Nacer cómo humano o pájaro
Imaginar el mundo impensado
Reposar de lagunas mentales
Para terminar riendo de cosas
Bulgares
Reposamos en él amor
Para seguir martillando
Un futuro incierto.
Nos llenamos de conciencia
Y de teorías que le dan sentido
A nuestras pequeñas conquistas
Construir un milagro
Para seguir creyendo en la magia
Ser un loco etereo
Inconsciente, impaciente e indescifrable
Solo angustia al tiempo, llueve él minutero
Tu sonrisa brilla y es esperanza de partir
Para salir de nuevo entre el polvo en qué se nace
Y ver que la vida es corta.
Busco fuego y acelerante.
La partida
Me proyecto en tus reflejos
En el ocaso lunar
Lo veo en tus ojos
Tu beso se desvanece de mi mejilla
Aun estando en la orilla
Me separo de tu abrazo
Y tu cintura cerna
desastre al dejarle
Te miro de reojo
No te volteas
Camino en tu espalda
No me dejer ir
La noche no para
Cuando el futuro es un misterio…
Poema Inconcluso
Caricia solapada
Esperando un inevitable
Desenlace, tomó aire y pienso
Si saltara un más mínimo
Defecto en su mirada
De los qué calan los huesos
Y entibian la mente
Me hace estrellar
Una pincelada en los labios
Pinta la sonrisa perfecta
Qué causan los recuerdos
Un mar entre nosotros
Derecho a vaivén en la proa
Y la brisa se agota entre los dedos
Profundo suspiro imaginario
Dónde tu nombre no existe
No has nacido en prosa…
en que el tiempo Acepta abdicar
Y el reloj comienza su marcha al revés
PoemaXIII
belleza incomparable
Abrumada inalcanzable
No conoces mi existencia
mi procedencia de los cielos
Avellanas frescas,
Trigo de abundancia
Comeré de ti lo inalcanzable
Dama carismática
No escucharas mis palabras
Ya están en mi boca
De los lazos se despojan
Marea tenue, amapolas
Pensarla
Olvide sentar cabeza
Liberar a la bella muchacha
Que en ocasiones
Me roba el pensamiento.
Ya no quiero volver a verla
Y me sueño descremado por ella.
Las cenizas regadas
Se adentran en mí ser
Pero llega a la hora
Y mis pobres manos
Ruegan tiritar
Mi cabeza escapar
Luego vuelvo a soñar
Asumiré el riesgo
De jamás competir contra la locura.
¡Oh! De jamás compartir
Mi ser sabe que me perderé en la luna
Porque prácticamente
Me vendo a su luz y caricias nocturnas
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