para alguien importante en mi vida

Hola

Seguramente no esperabas un mensaje mío y tal vez te sorprendas (o quizá no, no importa). Antes que nada una pequeña actualización de mi vida: como ya sabrás de sobra, tu servidora es muy descuidada con sus cosas (dos palabras: melón y libreta), se descompuso la entrada del cargador de mi teléfono y es muy difícil que cargue batería, por dicha razón casi no uso WhatsApp (es por eso y por la extensión de este texto que te escribo desde aquí corriendo el riesgo de que no sé cuando lo leerás. No creí volver a usar esta página, al menos este usuario, ya que actualmente la uso para publicar una historia bajo un seudónimo, pero creo que este será no solo mi último mensaje hacia ti, sino también mi último escrito en este perfil) el caso es que el otro día en la noche por mala o buena suerte entré y vi tu historia de “Tomoyo” y me hizo `pensar varias cosas, para empezar, la última vez que hablamos me quedé con mal sabor de boca, creo que no esperaba la forma en que reaccionaste, aunque creo que era de lo más lógico que fuera así, dadas las circunstancias, el caso es que al día siguiente analicé todo lo que te dije ese día y me di cuenta que si bien era lo que pensaba en ese momento, no era o que siento realmente, además de que siento que fui muy insensible. Pero no te lo dije ese día porque en el calor de mis pensamientos pensaba “se lo merece…aunque sea un poco”, y sea esto o no verdad siento que te debo una disculpa (eres libre de aceptarla o rechazarla) volviendo a lo de tu historia, cuando cuento sobre nosotras a otras personas, estas me dicen cosas como “que mala amiga es”, pero quizá esto es también porque siempre me he victimizado, con lo que digo no estoy buscando justificar tus acciones ni hacerte sentir mejor, pero el tiempo me ha hecho darme cuenta que yo tengo responsabilidad en todo lo bueno y malo que me pasa, gracias a mi actual pareja me he dado cuenta que si en mis relaciones algo no me gusta, basta con que lo hable con la persona y juntos lleguemos a un acuerdo; no en vano todos los libros de ética hablan de que la respuesta más asertiva a los conflictos es el diálogo, lo que quiero decir es que si nuestra relación no funcionó fue cosa de las dos y no solo de una, y a pesar de todo lo bueno y malo, me dejaste muchas enseñanzas que no cambiaría ni por la vida “perfecta” (una vez dijiste que te gustaría al menos dejarme una enseñanza, pues bien, lo has logrado) y bueno, el motivo de este mensaje (que más bien parece carta) es sobre lo último que dijiste en la historia de “Tomoyo”, por todo lo que vivimos juntas no tengo ningún arrepentimiento o duda, hicimos lo que hicimos y estoy feliz con ello, y creo que ahora ambas aprendimos cosas de la otra que nos ayudarán a crecer como persona; pero quizá eso no sea garantía de un progreso, como tu bien lo has dicho, aún habrá momentos en los que cometeremos errores. Para no hacértelo más largo y “reflexivo”, tal vez ya no merezca la pena que nos diéramos la oportunidad de forjar desde cero una buena amistad (aunque confieso que eso me gustaría) y probablemente esta sea nuestra última comunicación, decidí hacerla porque pensé “si hubiera sabido que esa sería la última vez que habláramos me hubiera gustado quedar en los mejores términos contigo. Por lo tanto quiero corregir mi anterior error: lo que te quería dar a entender realmente es que puedo ser para ti esa persona en la que te puedas desahogar sin miedo a herir o a ser juzgada y que estará cuando sea y no se irá como lo han hecho otros, porque gracias a todo lo que vivimos eres importante para mí; no te puedo asegurar buenos consejos, mucho menos entendimiento, pero al menos tendrás buenos oídos (si de algo sirve), algo así como el árbol bajo el que la cenicienta lloraba cuando la madrastra no la dejaba ir al baile. En fin, si no quieres hacerlo no hay problema, también podríamos hablar de cosas cotidianas como solíamos hacerlo hace tiempo. Porque también te agradezco que contigo encontré una persona que me escuchaba (que para alguien que habla muchísimo como yo es algo extremadamente valioso) y que a mi pesar me daba su sincera opinión y no lo que yo quería escuchar. Por esta gratitud que te tengo no te puedo ofrecer nada a cambio, porque no quisiera que lo viéramos como una deuda que te tengo que pagar. También lo que te he dicho anteriormente no tiene fecha de caducidad, si crees que ahora no es buen momento para volver a hablar como antes, no hay problema, podríamos intentarlo dentro de un tiempo, si la vida nos lo permite; si no fuera el caso debo decir: (utilizo uno de tus seudónimos por respeto y anonimato) Zayko, ha sido y siempre será un gran placer y honor el haberte conocido; porque a pesar de lo que tu creas para mi eres una persona increíble, con defectos y todo. Por todo y a pesar de todo a todos les diré que fuiste mi mejor amiga. Perdón por la extensión de esto pero era todo lo que tenía que decirte, pasaron varios días antes de que me decidiera a escribirlo porque quería pensar bien en todo lo que te quería escribir (incluso hice un borrador a mano) para no arrepentirme después de lo que dije o no dije, y a pesar de ello aún siento que te quiero decir más, pero esto fue lo más relevante. Si lo has leído hasta aquí, que seguramente así fue, te agradezco en verdad, porque aquí escribí mis verdaderos sentimientos. 

Hasta pronto o hasta siempre, mi amiga.