Bocanadas de ti.
¿Donde estuvo mi ser tanto tiempo deambulando?, lugares similares a pantanos lodosos y oscuros, grises, sin noción de tiempo ni espacio, sin mi antorcha heredada del cosmos, con la piel seca, mi boca sedienta del ámbar de la vida, mis pesadillas vivas paseando cerca de mi. Aferrándome al sonido de un reloj a cuerda que cargaba, para espantar los males y silbando para no temer, olvidando totalmente que el reloj gira en un solo sentido. Miré el agua espesa ya sin vida y reconocí ese reflejo, esa mirada, volteé al cielo infinito y vi sus ojos que me seguían sin notarlo y su susurro en el fondo de mi pecho remeció «Lo que tú boca calló, tu piel lo gritará, lo que tú miedo amarró, tus manos lo liberarán, has vencido?
OPINIONES Y COMENTARIOS