las gotas no mojan el alma

Viendo por la ventana, sentada en el piso, mientras la lluvia cae silenciosa por el balcón, es algo que me encanta presenciar acompañada de una taza te café, una cobija y la música resonando a todo volumen en los audífonos, tal vez un libro o simplemente viendo las gotas caer, es algo indescriptible,con mucho significado para mí, y bueno para muchos tal vez igual; se que tienes duda de porque, pero la calma que transmite, el ruido que para muchos causa miedo para mi puede ser impresionante, los rayos iluminándose en el cielo oscuro. A veces escucho a las personas decir » el día esta horrible, lloverá» pero bueno son típicas palabras de personas que no entienden el significado de agua.

bueno creo que se me fue la idea principal, el cielo esta nublado, y las gotas cada vez se hacen más frecuentes, el aire pegándome en la cara proveniente de la ventana abierta y el silencio total que hay dentro de la casa, me pone un poco confusa respecto a que hacer, estoy tan aburrida que lo mejor que puedo hacer para callar mis quejidos, es escribir, algo en lo que tal vez soy un poco torpe, pero la historia que estoy a continuación de contar es algo no ficticio, no es el típico cliché entre dos jóvenes y mucho menos se trata de mi vida, se que tienes la duda de que habla ero ara eso tienes que seguir leyendome, espero les guste mi historia, no olviden las gotas no mojan el alma.

CAPITULO 1

Estaba tan sumida en mis pensamientos que apenas y logre escuchar el ruido del celular indicándome que alguien estaba marcándome desde hace tiempo atrás, en cuento logré agarrar el aparato este dejo de sonar finalizando la llamada, el registro marcaba un númerito de 5 y al lado estaba el nombre de mi mejor amiga Marissa , y creo que todos los pensamientos que me venían de todas partes de mi cerebro entonces si se revolvieron llegando a una sola conclusión «me matará», y les explico tal vez crean que soy una loca y bueno si lo soy, pero creanme conozco a mi mejor amiga y cuando no contesto, me espera una muy buena riña.

Mi nombre es Roxanna, tengo 18 años y acabó de terminar la preparatoria en la ciudad de baja california ensenada, ya casi inició el primer año de universidad y eso me tiene con los pelos de punta, ¿tengo miedo? no, eso es poco, estoy muerta de suspenso, verán toda mi vida he estado con mis padres, y mi hermana mayor, ellos siempre han estado al pendiente de mi y bueno aun que no quieran reconocerlo yo de ellos también, el punto es que mi universidad es nada y menos que en Barcelona, es decir que muy lejos de mi hogar, donde me encontraré personas nuevas, un idioma nuevo y una casa nueva y solitaria, pero que más puedo pedir, mi padre siempre me dice «no temas hacer cosas nuevas, teme a ser lo mismo siempre» y es verdad, jamás saldrás de ahí si no intento nada nuevo.

rayos me fui de nuevo y ese númerito de 5 cambio rápidamente a 12, ahora si que me matará, por favor llevenme rosas y jamás me olviden. la terciaba llamada entra y entonces si puedo responder antes de que de por finalizada la llamada.

-«Roxxana Eangeline Fuentes García dime una buena razón por la cual no deba matarte!!!!- y ese fue el saludo tan glamuroso de mi mejor amiga, señores y señoras, se los dije.

-Mari, no me grites que quedaré sorda!!, perdón sabes que me pierdo fácilmente y no escucho el celular. –

-por esta vez no mueres, pero solo por que iras conmigo a la fiesta que organizó Trevor en la noche y no acepto un no por respuesta, así que te quiero linda a as 8, te amo- y sin mas colgó antes de que pudiera responderle un rotundo No.

verán yo no soy amante de las fiesta, amo estar en mi casa, bajo las cobijas leyendo uno que otro libro o jugando en la computadora, pero jamás salir y mucho menos ponerme vestidos y tacones, no es que me vista mal, de hecho me encanta arreglarme, pero odio caminar con esas cosas que parecen zancos y no hacen más que molerme .los pies y ni hablar de los vestidos, esas cosas son del diablo, no puedo sentarme con ellas sin enseñar los calzones a medio mundo.

son las 12 del día por lo que aun tengo mucho tiempo, me meto al baño hago mis necesidades, y me cambio con una licra y una playera suelta perfecta para salir a caminar y despejarme un rato, bajo sin olvidar mis audífonos y ya abajo veo a todos sentados en el comedor desayunando tranquilamente.

-hola familia, buenos días, me voy a caminar vuelvo mas tarde, adiós los quiero- sin dejar que respondan salgo por la puerta y empieza mi caminata al parque que se encuentra a unas cuantas cuadras más de mi casa, al llegar lo primero que veo es que no hay muchas personas, solo unos cuantos niños en los juegos y sus padres sentados vigilando que todo este bien y del otro lado unas cantas parejas sentados bajo un árbol sin prestar la mínima atención a su alrededor.

después de un rato de caminar, mi estomago hace acto de presencia exigiendome que lo alimente. A los alrededores no hay muchos locales; por lo que camino un poco más y me encuentro con una pequeña cafetería,a simple vista se ve acogedora y no hay tanta gente, por lo que es una perfecta opción. cuando entro un olor a hogareño y comida se filtran por mis fosas nasales haciendo que suelte un gemido por tan delicioso olor y provocando que mi estomago ruga mas. veo por todo el local buscando un asiento un poco alejado de las pocas personas que se encuentran sentadas, y lo encuentro, un lugar pegado a la ventana que me brinda la magnifica vista de la ciudad, las personas caminando de un lado a otro apuradas por llegar a tiempo a su trabajo, u otras atascados en el inmenso trafico de la ciudad, me siento y empiezo a imaginar la vida que pueden tener todas esas persona tan ocupadas, entonces siento que alguien toca mi hombro delicadamente, haciendo que disperse todas esas ideas de mi cabeza y me concentre en la persona que se encuentra frente a mi. entonces me quito los audífonos que hasta ese momento no sabia que seguía teniendolos puestos, cuando levanto mi cabeza lo primero que veo son dos ojos verdes con motitas cafes, jamás en mi vida había visto unos ojos así,lo siguiente que vi fue un cabello castaño todo despeinado como si no dejara de pasar sus manos para desordenarlo, brindando un aspecto sexy pero a la vez tierno, y no faltaba ver su cara, tenia unos gestos delicados, como si lo hubieran pulido por mucho tiempo para dar perfección,una nariz respingona y unos labios carnosos, cuando salí de mi ensoñación pude notar que el joven de nombre desconocido para mi, estaba con una sonrisa ligera haciendo que unos tiernos hoyuelos hicieran acto de presencia y logrando un ligero sonrojo en mis mejillas.

-lo- si-siento- fue lo único que pude decir, me moría de vergüenza

-no hay problema, se que soy alguien que puede dejar sin palabras a cualquiera- finalizó con una sonrisa coqueta.

y entonces toda la magia desapareció y la vergüenza fue suplantada por una ira. Me entraron unas enormes ganas de darle un buen golpe.

– me refería a lo siento por no hacerte caso- dije con una sonrisa triunfal, logrando que él cambiara su sonrisa, por una mueca de irritación, al ver que no logró su cometido.

-si bueno te preguntaba que si ya sabes que vas a ordenar- pregunto sin quitar su cara de fastidio

– un café de vainilla y unos waffles están perfectos, por favor-

-en seguida- terminó de escribir en su libreta y se fue por donde vino.

seguía observando por donde se fue lejana a lo demás, hasta que logre escuchar mi celular, rápidamente pude contestar sin ver el dueño de esa llamada.

-bueno- respondí aun que sonó mas a pregunta

-si Roxxana soy yo Lucas- respondió mi mejor amigo a travez de la otra linea.

Lucas es mi mejor amigo desde hace muchos años, creo que desde que tenemos 3 años nos conocimos, pues eramos vecinos y nuestras madres buenas amigas, teníamos muy buena relación, muchos decían que pareciamos novios, pero como no, si Lucas era tan sobreprotector y celoso que hasta a mi me ponía a dudar de nuestra relación y los sentimientos que él tenía hacia mi, aun que muchas veces el me confirmo que no le gustaba. Bueno la comunicación se fue a la basura cuando él y su madre tenían que ir se a Irak puesto que su padre formaba parte del ejercito y lo necesiban allá, desde entonces solo podíamos hablar unas cuantas horas y eso era todo.

-hey Lucas, ¿cómo esta todo por allá?-

– roxxy, todo esta estupendo, pero eso no fue el motivo de mi llamada, te tengo una sorpresa- dijo con un tono de emoción, logrando que mi curiosidad saliera a la luz

-bueno y ¿cuál es esa sorpresa?-

-bueno, si te digo no seria una sorpresa-

– o vamos no me dejes con la duda, me conoces- mi voz salió un tanto con reproche, pues el sabe que odio las sorpresas, no dejo de pensar en todo el día de que tratan.

– ten aquí esta tu orden hermosa- no pude evitar no saltar por el susto que me acaba de provocar el de ojos verdes al dejar mi orden frente a mi, en cuanto la vi agua se me hizo en la boca al notar que se veía delicioso y sin mencionar el olor estaba igual o mejor.

-es bueno saber que no solo me comes a mi con la mirada, si no ahora también a los waffles muñeca-

– o cállate estúpido- eso solo logro que se alejara con una carcajada y yo quedara de nuevo con un sonrojo por culpa del patan castaño,

la voz de alguien me hizo reaccionar y acordarme que estaba hablando con Lucas.

– me decías lucas- pregunte con mi voz tierna para evitar que el se enojara por dejarlo hablando solo.

-oo no jovencita! no intentes que no me enoje con tu voz de niña «yo no hice nada» , ahora dime ¿quien era ese? y ¿por qué te lo comías con la mirada?- su tono de voz mostraba irritación y molestia.

Bueno recuerdan cuando les hable de los celos de Lucas, no mentía eran una exageración.

– lucas es solo un mesero que me trajo mi orden y antes de que digas algo la respuesta es no, claro que no me lo comía con la mirada, bueno te dejo tengo que regresar a casa mi madre ya debe estar preocupada por mi.- y es verdad ya llevo 3 horas fuera de mi casa y mi madre no es una mujer tranquila.

– muy bien después tendrás tiempo de explicarme todo, te quiero hermosa, y recuerda tu sorpresa.-

-muy bien, no lo olvido, bye-

cuando termine mi desayuno dejé un billete de 3 dolares en la mesa y me levante para después dirigirme a la puerta y que el frío me llegará de nuevo a la cara. camine rumbo a casa por 15 minutos ajena de nuevo a todas las personas que pasaban por mi lado, solo estaba enfrascada en la música y en el camino. Cuando llegué lo primero que hice fue saludar a mi madre y subir a mi habitación para dormir un rato, y esperar que las 7 dieran para poder arreglarme e ir a la fiesta, en 5 segundos caí en brazos de morfeo y no supe mas de mi.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS