Gladiador

Y me di cuenta que ya no escuchaba musica, solo clientes quejandose… ya no escribia, cosa que antes hacia desvelarme, en pocas palabras, me despertaba a trabajar.

Note que los sueños se van si no duermes, y que las ideas mas brillantes pueden llegar cuando te desvelas, es todo un equilibrio mental este proceso.

Tambien me di cuenta que mis circunstancias eran feas, que estaba en el coliseo y el leon propiciaba cada rasguño, golpe en mis puntos mas debiles, y yo solia fallar todas las estocadas…

Una vez en el piso, me miraba con ojos de superioridad y resumia: ¡Quedate en el suelo osado gladiador, si te levantas, separare tu cuerpo en dos con mis garras, mi certeza es fiel reflejo de mi grandeza, y tu no puedes ni hacerme un rasguño!

Jamas habia visto el suelo tan cerca, estaba caliente por la dura batalla y el Sol brillaba a todo dar, el leon se quedo ahi, mirando y esperando paciente mi tambaleante reacción… pero solo ahí pense: ya me hubiese asesinado si asi lo hubiese querido, estoy vivo, respiro, tengo una oportunidad.

«Estoy vivo… tengo una oportunidad»

Se levanto el osado gladiador recogiendo la espada la esperanza del suelo, y solo tenia una cosa en mente, sobrevivir al ataque del Leon.

Este reacciono y cargó contra el guerrero mostrando ferozmente la agonia que dirigia las ancias de sangre y tomar su vida.

Fue una larga batalla entre la esperanza y dicha agonia, la armadura de tela cosida con descuido del guerrero estaba casi deshecha, pues las garras del Leon deshilachaban cada costura.

«Está agotado, y la espada aun tene filo, si continuo de esta manera en un descuido suyo atravieso su corazon y destruyo la agonia», fueron las palabras que llegaron a la mente del guerrero, percatandose de que la pelea nunca se trato de que tan duro intentó de conectar la estocada, sino cuanto tiempo y cuantas veces lo intentaba, pues era la perseverancia la que mantuvo afilada la esperanza..