REFÚGIATE
El perdón es tu arma,
La palabra suave tu escudo,
Pero todos sabemos que tu almohada esconde tus momentos más oscuros.
Llora, insulta, desahógate,
No te guardes el dolor causado sin buscarlo,
Refúgiate, ¡sí! Refúgiate en palabras, en música y arte,
Pero no en alguien que puede volver a lastimarte.
Tal vez Dios pueda ayudarte,
Mejor un amigo invisible y agradable,
Que uno visiblemente desagradable,
Ayudarte, a sanar y recuperarte,
Ayudarte a ser la misma que eras antes,
No tan frágil,
Pero si la misma,
Sonriente y amigable.
Un milagro, algo que escapa a lo naturalmente aceptable,
Un amigo que te ama, y en quien puedes refugiarte.
¡Refugio, refugio! él es tu refugio,
Tan alto y seguro, como ninguno.
OPINIONES Y COMENTARIOS