Estoy aprendiendo a ser mía.
A poner mis límites.
A darme mi propio tiempo.
A estar en silencio conmigo misma y no sentirme incómoda.

Estoy aprendiendo a decir NO.
A no estar siempre.
A parar mi mundo por mucho que el resto siga girando.
A que no me importe perderme algo. A no estar conectada permanentemente. Ni controlarlo todo.

Estoy aprendiendo a quedarme un viernes en casa viendo una peli y no sentirme rara por no estar en el centro del huracán,
rodeada de gente.

Estoy aprendiendo a estar a gusto,
a no necesitar nada más que mi silencio,
mi tiempo,
mi mundo.
Aprendiendo a estar rodeada de mí.

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