Diálogo susurrante con la noche.

Diálogo susurrante con la noche.

Yannis Lobaina

02/05/2020

Toronto, 20 de Abril, 2020

Querida Valentina,

Estos meses de confinamiento en Toronto, me han hecho evocar mis primeros años como inmigrante.Mi edificio, parece estar congelado. O todos se han muerto o marchado. No escucho a nadie en el corredor. Yo, solo miro por el cerrojo de la puerta. Hace más de cuarenta días, que no salgo a la calle. Mi gato Horacio, parece el dueño del edificio, sale a pasear constantemente sin miedo.

A veces, escucho un murmullo distante, pienso que son los brasileños del piso cuatro. Mañana, mandaré a Horacio con un mensaje en el cuello, ya te contaré si alguien responde. Hace tres años que vivo aquí, antes del confinamiento, solo conocí a dos vecinos, F, una mujer muy simpática con la que antes de la pandemia, tomaba Té Blanco mientras conversabamos  de astrología y la pareja de brasileños del piso cuatro. Con el resto de los vecinos, apenas hemos cruzado palabra ni siguiera sé sus nombres.

Vivo sola con mi gato Horacio, como una matrioska, llena de micromundos, encerrada en unos cuántos metros cuadrados, en un viejo apartamento en el downtown de Toronto.

La ventana, mi gato Horacio, mi cámara Canon y yo, nos hemos convertidos en partes esenciales. He movido mi mesa de trabajo cerca a la ventana, desde aquí puedo ver la ciudad cableada por doquier. A veces, una que otras personas con máscaras y mucha prisa.

Mi ritual, es oprimir el obturador un par de veces al día, desde varios ángulos y elegir una de esas tomas, que me hacen soñar. Horacio y yo jugamos con las nubes, Y a atrapar los pájaros. Los pájaros, ahora más que nunca, se asoman a mi ventana, me hacen recordar mi gran imposibilidad de volar. Valentina, he creado una nueva serie fotográfica titulada: The world from my window.

Todo, se ha reducido al simple espacio virtual de mi MacBook: amigos, familias, cócteles, lecturas de poemas, Yoga, clases, risa, llantos, y proyectos.

Valentina, por suerte el árbol de arable, empezó a florecer, como la esperanza que nos hace falta a todos. Acabará pronto el encierro?. Da igual, yo seguiré en mi eterna self-isolation en la ciudad de cristal, escuchando a Catch The Wind the Donovan: In the chilly hours and minutes, Of uncertainty. I want to be…

Abrazos,

Te escribiré pronto,

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS