PROLOGO:
Hace frío y Jhony dice; ¡escribe un libro! yo me quedo pensativo… ¿De qué escribo? ¿sobre qué? ¿para quién? sólo tengo unos cuantos años, vivo con mi padres, me molesto cuando los videojuegos no cargan rápido. ¿Quién soy yo para escribir un libro? (…) Jhony da un respiro algo profundo y dice; da igual, escribe porque no hay mucho por hacer… Yo me le quedo viendo y, tiene razón, Jhony, aunque no tenga razón siempre logra tener mucho sentido en sus palabras. Puede que no salve al mundo escribiendo, pero me salvo yo, al menos por un rato, donde la ansiedad no tiene cabida y la duda se convierte en una gran certeza; escribe, escribe, más letras para el papel, así moriremos por cualquier cosa, menos de frío.
La verdadera fuerza de un hombre proviene de la ausencia de querer resolver todo conflicto con la violencia
Y cuando estoy cansado, agobiado por las formas inanimadas del mundo, busco más soledad de la habitual y pienso en ti… Huu… Como sonrío en ése instante, es el mejor momento de mi día, de mi vida; cuando pienso en aquellos labios rosados, esas mejillas suaves como las nubes en las que vuelo cuando me miras… Sencilla mujer pero complejo éste amor tan grande que te tengo.
Tiempo, ¿qué es el tiempo? una leve caricia del viento que pasa y nunca regresa.
Somos estrellas, brillantes y enormes para alumbramos en la oscuridad.
Y de repente estás sentado, y una voz te dice; ¡de pie hijo de perra!… ¡La vida es un puto desastre y no hay tiempo para que tu te lamentes!… Respiro, y sigo caminando.
Pues nada acalla tanto la desgracia como pensar que la responsabilidad incumbe a los otros.
En la guerra con la soledad, sólo aguantan aquellos armados con lo que han amado…
Me hablan sus ojos, dicen que son mares, que son océanos inmensos de amor pero para llegar a sus playas hermosas se debe sopesar una dura tormenta, y dice, que sólo los mejores capitanes lo han logrado y al llegar han muerto… ¿Quién tendrá el valor para resistir las inclemencias del romance? de seguro quien lo logre será completo merecedor de su mirada.
Nada importa, ni tu ni yo, ni ellos, ni nada. Estamos aquí para ver pasar el viento… O más bien, para que el viento nos vea pasar. Jugar con los pétalos de las flores, fijar la mirada cada vez que una mariposa se atraviesa. La vida no sirve para nada, lo que sirve, es ver como todo pasa y es bello…
Para que me preocupo, nadie puede detener la lluvia…
Eres un fósforo buscando la luz.
Tranquilo… ¿Qué sería lo peor que pudiese suceder? ¿que por un beso se acabe el mundo? ¿que por un abrazo yo pierda la cordura? ¿que por su amor y el mío al unísono me asuste? ¡vamos coño! ¡despierta ya! la vida es un paraíso, no te quedes observando el suelo cuando vas en autobús, demonios, ¡mira la ventana! observa esos lindos árboles que pasan de largo ¡carajo! ¿tan difícil es amar sin miedo? Entrégate, sumérgete, que importa que se te caiga la cabeza, las orejas, hasta el pelo por haber perdido tu corazón ¡inténtalo! El mundo se escurre entre tus dedos ¿y tu tienes miedo de amar demasiado? ¿miedo? ¡miedo a nunca haber tenido la opción! y tu te escondes como un cangrejo, temeroso de que las gaviotas vengan a sacarte las tripas, ¿miedo? imagina que es vivir sin amar, sin nadie, sin personas que te apoyen, que te digan que eres especial, que todo a tu alrededor sea un silencio enorme, aplastante, doloroso porque nunca tuviste el coraje para decirle que te gusta, carajo, te daría una bofetada si pudiese, ¡despierta! ¡ama! como si no hubiese un mañana, como si un si o un no significasen poco para este salto mortal al que se le llama sentimiento. Y si te metes al mar y te ahogas por llegar demasiado profundo ¡pues has tenido el puto valor para ver a los peces! ¡tu muerte jamás será en vano; pues tuviste las pelotas, las agallas y el valor para que el agua te llegue hasta el cuello y más arriba. ¡Ama! ¡ama! que de lo contrario te morirás solo, triste, abandonado, ¿qué importa si se va? ¿qué importa lo que pase después? ¡alimenta el amor, vívelo!. Aunque sólo sea un maldito segundo en tu corta existencia, deja de arrastrarte como gusano recogiendo pedazos de mierda y lodo ¡vive! ¡busca! ¡entrega! qué tan difícil puede ser pedirle un beso, un abrazo, que tan difícil puede ser amar. Y si no funciona que importa ¡tenemos tiempo, tiempo de sobra para hacer que funcione!… Ama por que si, porque se puede, porque se te da la puta gana, ama porque es lo único que hace de un animal un ser humano, ama porque serás feliz o te pudrirás de tristeza, pero nunca y digo nunca; le temas al amor, estamos aquí, ¿y qué carajo hacemos ahora? ¿ves lo insignificante que es el mundo sin amor? Busca, busca y sigue buscando, intenta hasta partirte los benditos huesos, porque morir sin haber vivido es una farsa, una pérdida, una escoria, una rama que se pudre en el asfalto. ¡vive!, aunque eso te deje inválido, te deje paralítico, te deje sordo, mudo, estúpido, ¡ama! tírate de una puta vez al maldito acantilado y vívelo, siente como el aire no te deja respirar, siente como al intentarlo lo dejas todo, y mueres, y que tus tripas se esparzan hasta en la última roca, pero mueres con el honor más grande que se le pueda conceder a un gusano con temor toda su vida, porque lo intentó. Y si ganas, si por algún milagro logras caer de pie sin un solo rasguño, disfrútalo… Siente lo, llena te de esa sensación mágica y transparente, besa como si nada más importara, como si nadie los estuviese mirando, abraza como si fuesen dos piezas de un engranaje perfecto, y mírala como las galaxias, como los cielos, como una mujer linda que te dio el regalo más grande… Su corazón. Y una vez que lo tengas, cuídalo ¡cuantos amores he dejado pasar por abandonar el corazón que se posó en mis manos! cuida ese pedazo de carne rojo como si fuese tu propia alma, limpia lo como a una alfombra, acaricia lo como a tu gato, riega lo todos los días para que crezca, para que brote flores con aromas hermosos, una vez que lo tengas no le quites el ojo de encima, cuida lo de las moscas, y deja que vengan los colibríes… (…) Si alguna vez, de todas las veces que tus sesos se esparcieron en la tierra, de todas las veces que has muerto, llegas a caer de pie, honra a quien te sujetó, has que sienta que eres digno de su presencia, quítate el sombrero y arrodíllate ante el amor… Porque, si lo tratas como se merece, tu, amigo mío, tendrás más cielo que Dios.
Esto no es un beso… Yo he estado en tantas bocas que puedo asegurarlo… Esto es más bello, esto es el corazón agitándose, nuestros dedos apretándose casi hasta la asfixia, nuestros ojos perdidos dentro de los párpados suaves, suaves, suave como tu lengua… Húmeda, cálida como el verano, tus labios fríos como el helado, dulces como la miel, jugosos, deliciosos, me vuelvo loco en tu boca… Me pierdo en mis letras de tanto que te quiero, de tanto que disfruto esto, escabullirme en ese manantial, esa cueva con diamantes por doquier, esa saliva viscosa es un río en el cual me sumerjo como si deseara rehacer mi espíritu limpiando mis pecados. Tus labios se aprietan a los míos como si estuvieras cayendo a un precipicio y yo fuese la única salvación, te sujetas, te sostienes con vigor, con fuerza, con miedo, como si no hubiese momento más especial que este, en este lugar, así; con las almas desnudas, los cuerpos en el aire, los labios inseparables. Crujidos, bombas y demás explosiones en nuestro corazón, tormentas relámpagos y huracanes en nuestro estómago, terremotos en nuestros dedos, icebergs en la puta de nuestros pies… Tu lengua y la mía, como el gato y el ratón… Esto no es un beso, esto es el mundo.
De pintar aprendí lo esencial que resulta escapar del miedo; tienes una montaña, no te atrevas a detenerte por creer que lo puedes dañar, deja el susto, ¡atrévete!. Que la pintura sufra, que los colores se estremezcan de tanto poder que tienes en los dedos, de tanta voluntad que tienes en la imaginación, que el pincel se rinda ante su único rey, y nunca al revés.
Por encima de todas las estupideces es creer que la violencia puede dar con la solución.
Y no decirte ni lejana ni perdida para no darle razón al mar que te retiene. Y elogiarte en la más perfecta soledad a la hora en que tu nombre es la primera lumbre en mi ventana.
-Benditos sean mis ojos porque tan alto miraron.
Estamos bien, estamos felices, mira que bonitos nos vemos con tus piernas entrelazadas en las mías, tus dedos acariciando mis orejas, mis labios sobre los tuyos, mis brazos al rededor de tu espalda. ¿Cómo te sientes? ¿es lindo no te parece? el sentir que hoy es un perfecto día para repetir mañana, y pasado mañana, y así hasta que nos cansemos y decidamos hacerlo en el sofá y luego encima de la mesa, pero sólo contigo…
Me he vuelto adicto a mis propias flores, éste jardín es mío, yo lo cuidé, yo lo regué, yo le dí amor, yo estuve cuando a penas eran simples semillas… Midiendo los pétalos a la altura de las palabras, ya me es difícil sentirme conmovido por una literatura que no surja de mi.
A lo mejor es que soy demasiado bueno en esto, pero bueno… Todo lo que sube baja y yo, yo voy a preocuparme más por divertirme con la belleza de mis creaciones.
Indefenso, como paloma a merced de la lluvia… Tranquila pero con algo de miedo y adrenalina, ¡tiene que salir de ese agujero! volar, que temor pero que entusiasmo, ¿qué sucederá? pero ésta cuestión es arrebatada por el «que tristeza vivir sin haberlo intentado…»
Y así el amor se abre paso, surca los cielos, devora infiernos sólo para llegar a su destino, allá donde la lluvia más que temida es disfrutada, donde todos bailamos en un continuo y completo reventar de gotas.
Se debe acostumbrar la mente a pensar sólo en cosas
agradables, desterrando lo malo, inútil y ocioso.
-Baines. Los brujos hablan
Si en algún momento me he arrepentido de algo ha sido por no besarle más tiempo.
Contradicciones… Como colores en el cielo cuando es de día y llueve un poco. Como los colores de nuestra piel, los lenguajes que nos separan, los tamaños del valor de cada persona. Son tantas formas y figuras en mis pensamientos que controlarlas sería imposible, ¿has intentado detener la lluvia?… Y liberarlos sería como abrir las puertas de un zoo; todos correrían asustados sin saber a donde ir. Supongo que el escribir es un intermedio, un punto donde no estoy loco pero no actúo muy normal, donde puedo hablar con ellos y hacer metáforas, decirles que amo el aplastar una hormiga pero adoro más el hundirme en un baso de agua.
No me imagino la vida sin la escritura… ¿En dónde quedaría todas mis conversaciones? ¿en la gente? jaja, aquí nadie me entiende, aquí todos corren como sardinas huyendo de la muerte, el miedo que les produce estar encerrados en una lata con el valor de un par de dolares los asesina. Pero vamos, que yo no soy mejor que eso, ¿a quién engaño? yo soy una comadreja que se esconde cuando se enamora, que pierde todo el apetito por la vida cuando le rechazan, ¿yo? soy otra nube en este cielo, observadora, pendiente de la tierra, aquello que jamás podrá tocar a menos de que cambie de forma.
Me siento tonto, tontamente feliz es cierto, pero muy tonto, no se qué hago aquí escribiendo en vez de ir a tu casa con un ramo de sonrisas y con ese perfume que tanto te gusta, ese que tiene aroma de muchos besos… Que poco a poco se transforman en caricias y terminan en sabanas, sabanas presenciando como nuestros dedos se abrazan, se besan, se muerden, se comen. Practicando todas las posiciones hasta llegar a entrelazarse y quedarse quietos, experimentando el honor que sostiene la belleza del amor…
Pero bueno… Comencé con pena y terminé con una sonrisa, ¿qué le puedo hacer? mi escritura es confusa pero es un buen deleite para el que camina tranquilo de la mano con sus contradicciones.
Ella es preciosa, no puedo evitar decirle cuan bella es para mi, es como si ahogara, si un pedacito de infierno en mi garganta se crease cuando no le digo cuanto la amo, la amo… Que corta palabra para éste sentimiento tan ancho, tan grande. No sé qué sería mi vida sin ella, ¿a quién le daría todas estas ganas de querer? creo que sin más remedio explotaría… Y todos mis pedazos como cenizas irían por el viento buscándote, incansables para acariciarte las orejas y susurrarte lo preciosa que eres, no que como te ves, si hablase de como te ves creo que detallaría los cielos y nunca podría terminar, por tu culpa, por tu bendita culpa y esas preciosas curvas de tu labios cuando sonríes.
¿Lo has pensado? que cada persona sea una fogata o un pedazo de hielo derritiéndose… ¿Cómo evitar congelarse con los melancólicos? ¿cómo inhibirse de amar a los alegres?…
Lo único en lo que pienso es en mi, ¿seré bueno para ella? ¿tendré el suficiente calor para no romperle el corazón?… o más bien; ¿soy lo suficiente para mi? ¿he tenido las agallas para atreverme a disfrutar ésta vida o… Simplemente la dejé escapar?.
Supongo que todos somos la mitad de cada cosa, que todos existimos como arañas y moscas en ésta enorme telaraña de tiempo.No escribo para ti, ni para mi, más bien; la escritura es una copa de vino para esta soledad.
“El romper de una ola no puede explicar todo el mar”.- Vladimir Nabokov.
Cuida tus pensamientos, ellos son los ladrillos o el montón de estiércol con el que construirás el mañana.
«Todos los males del mundo provienen de que el hombre cree que puede tratar a sus semejantes sin amor»
-Lev Tolstói.
Y escribir y dejar que las olas más enfurecidas se tomen de la mano, abracen mi barco, con el que cruzo los mares, los océanos, con el mismo conque suelo ver las estrellas, con el mismo que va en busca de tus labios; esos que no me dejan morir de hambre en este eterno peregrinaje.
-Me encanta pensar en ella… Jhony se queda mirando mis ojos perdidos y dice -Bueno, eso puede ser un buen principio de escritura, el amor. Yo asiento con suavidad, cayendo de esa nube en la que estaba, -el amor… ¿Qué será el amor? Jhony dice -ni idea. Con un alegre sentido del humor. De seguro el amor debe ser sólo una palabra, porque, pienso en ella y… Todo se comprende, todo es, y ese «es» me saca una sonrisa; su cabello, montón de largas y delicadas tiras que se dejan llevar por el viento, que siempre que estoy cerca producen su mejor aroma, rayos, ese bendito olor a caminatas por el bosque, a tardes enteras viendo como el sol se va, a noches frescas donde la luna brilla y olfateas las estrellas como si fuera un público ansioso y casi desesperado por ver como se baja el manto que cubre la parte principal del escenario y sale su cantante favorito y todos enloquecen… Ese aroma a locura, a adrenalina mezclada con ferviente pasión por saltar, por gritar, por disfrutar de ése momento único en la vida… Ella tiene aroma a belleza, aroma a placer, de esos que te dan cuando sufres, sediento por llegar a la cima de la montaña, cada piedra, cada vez en que tu zapato se lisa en la tierra mojada, cuando apoyas tu mano en un árbol para descansar, cuando sientes que tu corazón se está casi desgarrando por latir, sientes un tambor en el pecho que está que se rompe, esa respiración agitada, tus pulmones se inflan como globos y quieres llenarlos más pero no puedes, y sigues caminando y tus tobillos tiemblan y sientes que pierdes el equilibrio, pero continúas, sigues, como si una fuerza de victoria te empujara, te estuviera agarrando de la mano la voluntad y te obliga por tu honor a seguir caminando, así que prosigues la marcha después de aquel respiro, y tomaste veinte de esos suspiros enormes, cincuenta, doscientos, hasta que por fin llegas… Ese momento en que tocas la parte más alta de la montaña y sientes flotar al poder sentarte, inhalas un aire de gloria, como si millones de voces se uniesen para decir ¡bien! ¡si fuiste capaz! ¡grandioso! entonces tu corazón se calma, comienza a palpitar más lento, más suave, y le dices a tus pies ¡los amo carajo! ¡sin ustedes no hubiese podido llegar hasta aquí! ¡son increíbles! y te recuestas sobre el césped y… Ya está, la paz me invade sin poder alguno para evitarlo, y entonces… Pienso en ti, huu… Lo lindo que sería abrazarte en este momento, de decirte; «oye, ¿por qué cada día te ves más sexy? y besarte mientras sonríes, luego, tomar tus manos, apretarlas, jugar con tus dedos y ver ese paisaje enorme y delicioso que se devoran mis ojos a grandes mordiscos… Ese paisaje que me acuerda a tu cabello, a ti, de lo lindo que es el olor a la belleza, a tu belleza… De cuan lindo es amarte.
¿Mi sexo? la letras, ¿mi alcohol? una de esas siestas por la tarde de un domingo… ¿Mi droga? música suave de esa que te deja un poco más mareado de lo normal. ¿Mi objetivo en esta vida? amar, amar y entregar sin condiciones todo lo que pueda salir de mi cabeza. ¿mi propósito? disfrutar cada paso como si fuese el único, de la forma más sana, ofrecerle al mundo paz, silencio, calma, serenidad, que les haga entender a todos que todo estará bien. ¿Mi búsqueda? es tan simple como dejar llevar todas mis intensiones hasta que éstas encuentren su objetivo. ¿Se arrepiente de algo? tal vez, y solo tal vez, no haber luchado un poco más por ese amor adolescente del que solía disfrutar escribiendo charlas enteras toda la madrugada. ¿Ha valido la pena llegar hasta aquí? cada maldito segundo lo ha valido, cada día por más pesado e incómodo que pueda parecer siempre habrá algo dulce en mi paladar, la risa de un niño, el canto de un ave, mis pies tocando el suelo una y otra vez, el recuerdo de los ojos de ella clavados en los míos. ¿Cual «ella»? Todas. Yo considero que en el principio como en el final lo que importó no fue esa piel, esa voz, esas caricias y besos eternos que le diferencian de la multitud, más bien, lo que le hizo especial fue el sentimiento enorme que de mi surgía, esa magia preciosa que nosotros construimos con el paso de las sonrisas y las muchas citas a escondidas. No es «ella» es el amor que en todas «ellas» he dejado. ¿Por qué no sólo una, lo convencional? Porque cuando eres un niño, a pesar de los 70 años que se te notan no logras comprender y agradecer el amor que las personas te ofrecen, por lo tanto, cada vez que algo terminase yo iba en busca de otra aventura, persiguiendo ese apasionado encuentro con la belleza, de lo contrario te hubiese respondido que si, que me arrepiento de muchas cosas. ¿Por qué no sueles relacionarte con las demás personas?, ya sabes, el lado social es un bien necesario, pero las personas suelen ser incómodas, irritantes, infantiles, algo que en mi punto de vista he notado por muchos años es la ausencia de amor de cada ser humano, todos buscan y tratan al amor como si fuese un arma, la tomas, la recargas, y buscas a qué apuntarle, una vez que disparas no hay retorno, ¿lo entiendes? todos son tan «exclusivos» te amo, pero sólo tu puedes recibir mi amor, entonces mi amigo de hace cinco años lo voy a tirar a la basura pues necesito concentrarme sólo en ti. Por lo tanto cada uno fija su objetivo, dispara, y se olvidan del resto, de las demás personas, y creen que los «otros» no son tan importantes, no son necesarios, así que cada uno va a su manera concentrándose en lo que quiere y punto. ¿Entonces cual sería el amor para ti, por lo cual puedas socializar con los demás? yo creo que lo correcto sería que cada uno se inundara de amor propio, que expresara cada quien lo mejor que tiene y buscara mejorarlo cada día. ¿Significa que te irritan los demás por su falta de autoestima? exactamente, pues no tendría que estar recibiendo críticas destructivas, ni faltas de moral, ni apoyos a la violencia, ni chismes, ni vulgaridades, ni historias ajenas mal intencionadas, pues si cada uno encontrara el valor propio y buscara aquello que le da paz no tendría por que estar escupiendo le la verdad a las demás personas. ¿A qué te refieres con «la verdad»? se puede decir que las conductas socio-adecuadas del común denominador de las personas son tan rígidas que no toleran que alguien venga a pronunciar un lenguaje distinto al convencional. ¿Qué quieres decir con eso? quiero decir que si toda tu vida has tenido la cama en una posición específica de tu habitación y nunca se te ha ocurrido mover esa cama, el día en que visites la casa de un amigo y te enteres que la posición en que se encuentra la cama es diferente la vas a tachar de «equívoco, erróneo, obsoleto, inútil» pues eres tan inamovible que te resulta imposible aceptar la existencia de algo opuesto a tu sentido de lógica. ¿Te refieres al sentido psico-rígido de la humanidad, bueno no todos son iguales, o si? Seguramente yo también tendré mis comportamientos excepcional-mente estúpidos, pero habrá quien no, de seguro lo habrá y si no lo hay pues me lo invento.
-Jhony, creo que soy bastante bueno. -Eres un presumido. -¿sabes? a veces hay que convencerse de que los mejores días llegaran en algún momento y así no perder la calma cuando una adversidad nos afronta. -¿Quieres decir que no eres tan bueno pero pretendes serlo afirmando una realidad? -Exactamente, pero, a diferencia del ejemplo; yo si soy bueno, me siento bien haciendo esto, me siento libre… -Eso es bueno.
Hoy el día se nubla un poco, y pienso… Jhony, ¿tu que harías el día de hoy? -Nada, sentarme a ver la tele, ¿tú que harías? -Pues por eso te lo pregunto… Se me antoja ir a caminar, me gustaría ir a comer un helado de mandarina, de esos que tienen chispas de chocolate. Me gustaría conducir un rato en la motocicleta de mi padre, darle la vuelta a la ciudad, ir despacio para apreciar la fachada de las casas, las partes imperfectas de los tejados, los pobres canarios y pericos enjaulados en los balcones, ver a los perros dando le un paseo a las personas, o, al revés. Sentir como las ruedas de mi vehículo se topan con algunos baches y huecos que tiene el pavimento, disminuir la marcha para evitar que mi trasero reciba un buen golpe, luego acelerar, doblar por las esquinas, sentir el viento, los muchos olores que te encuentras por el camino. Jaja, una vez Jhony, estaba observando a una niña, iba tan concentrado en como saltaba con su cuerda, luego colocaba los pies en el suelo, luego saltaba otra vez. Parece increíble como un niño puede dominar a la perfección esa técnica de saltar dejar que el lazo pase por debajo de tus pies y luego hacer lo mismo, que cuando menos lo pensé ¡bam! un par de bolsas de basura se toparon con la llanta trasera en el intento de desviar mi rumbo hacia la derecha, jaja fue muy gracioso porque mi velocidad era casi la de una persona caminando, así que medio viré el manubrio y pasé de largo, sentí como las personas me miraban de forma extraña porque no paraba de reír, me causó mucha gracia, creo que llegaron a pensar que lo hice con malicia. Bueno, en ese momento yo voltee la mirada hacia atrás para verificar que ningún daño grave había ocurrido, me acuerdo como vi esa bolsa negra rodar unos centímetros, pero el mundo no estallará de repente por eso, así que continué mi camino. En aquel entonces tenía una novia y me dirigía justo a su casa, era muy linda, de seguro ahora debe estar mejor, tenía una estatura un poco baja, el cabello algo pintoresco, las uñas no muy bien cuidadas pero poco importaba, me tomaba de sus manos con tanta energía que no podía evitar decir «oye, tu si me caes bien» Y en esas palabras se encontraba tanto amor… -¿Siempre tienes que hablar de poesía en nuestras conversaciones? -Jaja vamos Jhony, no seas amargado, ella era perfecta… -Dices lo mismo de todas. -Exactamente, porque todas lo fueron.
Jhony, esto es una mierda… ¿Por qué tengo que escribir para eludir la soledad en vez de ir y buscar el amor que tanto y tan bien me merezco? -Será porque siempre has fracasado en el tema. -¡Pero es que no me conformo! ¿dónde está ese ser perfecto que encaje más perfectamente con mis perfectas imperfecciones?… Bueno, eso fue algo extraño, cielos Jhony, la extraño tanto… -¿A quién? -Pues yo que sé, a la sensación de tener a alguien para volverme loco, para asustarme cuando observa a alguien más, para tener esa incómoda idea; el miedo de no verle más a la hora de la despedida. -¿Por qué no le buscas entonces? -Eso pienso hacer, pero ya está tarde, son casi las 8 pm no pienso salir corriendo a buscar el amor, gritando a los cuatro vientos lo desesperado que me encuentro por sentir calor, o frío, o nada, lo que sea que me saque de mi mismo, que me regrese la idea de que soy un poco normal, al menos un poco. He estado sentado todo el día, si me muevo es para quitarme el dolor de mis pies y mis glúteos tiesos, rayos, cada vez tengo que regresar más veces a esa montaña, para sentirme vivo, para mover el culo de esta maldita silla de la cual no salgo. Cielos, me siento como un niño de 7 años en una guardería, veo como el Andres busca en su nariz montañas verdes y viscosas, como el Cristian se queda babeando su ropa todo el tiempo, y lo peor, verme a mi sentado esperando a que el tiempo se acabe con ganas de salir corriendo pero no hay donde, no hay otro camino que aguantarse los lloriqueos de esta sociedad infantil… Pff, tengo pensado, volver a salir mañana, no sé, a lo mejor llevo mi mochila con un par de botellas de agua, algo de comida, una sombrilla, el buso… Mi buso favorito se está lavando ¡nooo! ¿por qué mamá? ¿por qué tenías que lavarlo hoy? (…) Bueno, acabo de preguntarle a mamá si ya lo colgó para que se secara y dijo que si… Una sonrisa interna me surgió. Entonces llevaría eso y… ¡La guitarra!, aunque… Hace días que no ha parado de llover, llevar la guitarra sería un desastre, aparte de que sólo la utilizaría hasta que me quede sin voz, mejor no. ¿Qué más?. Jaja, no puedo creer que tenga que escribir esto para pensar que el amor es una irregularidad y algo innecesario, pero ya que, mientras me quite el mal sabor que es extrañarle todo está bien. Pero entonces saldría temprano, para subir aquella montaña, me estoy imaginando como mi paraguas sale volando y yo tengo que ir a perseguirle, a lo mejor yo salgo volando con él, entonces sería un día bonito.
Ella es tan linda… Jhony, no sé como sacarle de mi cabeza, siempre está, ¡por todas partes! ¿estaré alucinando?. Cada persona que pasa a mi lado tiene sus ojos, sus labios, esa cintura… Su color de piel, diablos, su color de piel es inconfundible ¡pero me salta el corazón cada vez que creo que es ella! como si fuese el sol mismo y me iluminara de repente hasta dejarme ciego, ciego, ¡eso debe ser Jhony! a lo mejor ha sido tan hermosa que he perdido de vista todo lo demás, todo de ella está en todo del mundo. Cuando camino pienso en ella… Cuando respiro pienso en ella, cuando hablo, hablo de ella, es que es tan linda… Como me gustaría que se diera cuenta; que imagino sus dedos con los míos, que si salgo a caminar es siempre por ella, siempre para ella. Que si salgo a sentarme a los lugares donde ya hemos estado sólo es para enamorarme más de su linda voz, su voz… Creo que se asustaría si le digo que me he memorizado cada pedacito de palabra que me ha dicho, cada párrafo, cada carcajada la reproduzco en mi memoria como una canción y vuelo… Vuelo de verdad, vuelo como cuando era niño, vuelo como sólo el romance puede hacer volar. Tanto la amo que siempre que regreso a casa paso por la suya para ver que todo está bien, jaja, típico tonto. Tantas ganas de que salga de esa puerta y me de un abrazo, pero no, no lo necesito, me basta con esa sonrisa para volverme el hombre más feliz del mundo. No estoy obsesionado Jhony, estoy enamorado, que es casi lo mismo.
Y amanece, todo es hermoso, todo tiene sentido, mil proyectos te animan a seguir, a continuar, tienes de sobra otras mil razones para intentarlo, para buscar respuestas, para correr, para saborear el viento… Luego anochece… ¿Qué soy entonces?. Como si todo lo que yo conocía hasta ese momento simplemente se desapareciera… Se lo llevara el viento como la ceniza, se fuese lejos y, entonces, solo quedo yo, cansado, mirando la nada, sin saber que hacer…
Al parecer la vida es una competencia entre noche y día, o más bien una relación, o un apoyo mutuo. Ni idea… Pero al menos ya sé porque mis escritos son tan hermosos y luego tan deprimentes.
No hay de otra que esperar a que el sol se desnude y luego, intentar eludir el miedo a la luna.
Te extraño tanto… Tanto, que escribo dos veces en un mismo día. Linda, ¿cómo es posible que yo te ame? ¿cómo puedo olvidarte cuando ni tu ni yo podemos acordar la distancia? cuando todo de ti lo veo en todas partes, todos los lugares tienen nuestras historias, de sonrisas, de lágrimas, todo me acuerda a ti, hasta a mi, siempre que me veo en el espejo te veo más a ti que a mi. Cuanto quisiera no tenerme, cuanto quisiera no tenerte; en esta distancia… El tiempo me ayuda a sopesar la idea de que toda primavera necesita un invierno para regresar, pero esto de tenerte lejos me duele. Por orgullo quise creer que todo estaría bien, que no te necesito para ser feliz, pero, es que, tu eres quien más feliz me ha hecho.
Yo quiero, quiero levantarme y verte a mi lado, decirte lo hermosa que eres. Pero últimamente mis amaneceres tienen tus ojos en mi memoria, y miro aquel espacio vacío de la cama, esa almohada arrugada de tanto que me muevo por estar soñando contigo. Entonces me quedo ahí, observando la luz del medio día que pasa por las hendiduras del tejado, y me siento solo… Y no hay quien pueda quitarme ésta angustia, esta dicha angustiosa, este lamento célebre, este amor solitario… Este recuerdo inolvidable, esos ojos tuyos tan hermosos. Esa belleza tan dolorosa.
La luz se asoma como un perro asustado, y yo que empezaba a acostumbrarme a la solitaria oscuridad. Ahora tengo que tolerar la compañía del amanecer y su insípido calor, a veces irritante porque, te llega, lo respiras, se sumerge todo ese vapor en tus pulmones y sientes tu piel sudorosa y fastidiada. ¿Qué mejor que la noche? hace un frío de la mierda pero nada te molesta, todo es tan silencioso, todos duermen… A lo mejor no es el calor del día sino el exagerado abuso del ruido de las mentes ajenas lo que trastorna mi paz. Aunque sería aburrido todo tan silencioso, creo que terminaría rompiendo mi propia calma con alguna carcajada o algo parecido… Si, me conozco, sé que cuando más feliz estoy debido al aburrimiento más empiezo a reír sin motivo aparente, me invento cualquier excusa para darle significado, pero esa risa, ese momento; es tan espontáneo que ni yo mismo sé como es que me sale. A lo mejor no soy yo quien sonríe, sino alguien que tengo aquí encerrado conmigo en éste cuerpo, a lo mejor es mi cuerpo, a lo menor soy yo el invasor de esta carne que no deja de preguntarse el significado del tiempo… El tiempo, ese puto reloj que no se detiene, esa sucia melancolía que no se sacia, esa linda sonrisa que se esfuma tan rápido como aparece. ¿Qué soy sin el tiempo?. Nada, absolutamente nada, pero con el tiempo soy más nada que el espacio mismo, el minutero se ha encargado de dejarme sin nada, me lo ha dado todo para luego arrebatarme de las manos su regalo; éste día que comienza luego se esfumara y nunca lo recordaré, ésta noche que se acaba, ésta noche que me dejó mantenerme despierto para escribir esto, también se abre paso entre la niebla y poco a poco desaparece sin dejar rastro… Nada, al final no queda nada, nada, más que un recuerdo. Eso es esta vida, ¡nada!… Pero, está bien pensado, sería aburrido si toda la eternidad fuese de noche o de día, al menos me entretiene saber que todo tiene su momento.
Yo tenía una baja expectativa sobre el mundo; que bajo, que mediocre, que insulto para la evolución. Pero cada día siento que estoy más equivocado; puedo ver como una pareja de ancianos se toman de las manos, como los líderes son más propensos al cambio colectivo y no a la competencia, como los niños prefieren jugar con su padre al caballito que ir y tomar algo parecido a un arma, como los pensadores ya no buscan sobresalir y en vez de eso dejan como su ejemplo arrastra a quienes los ven, como los tontos se dan cuenta que gritando jamás se soluciona un problema, como los melancólicos buscan otra forma de desahogarse que no sea el daño. Veo como la música cambia las vidas; como la literatura, te lleva a mundos mágicos. Veo como el pasado es lento y el futuro se viene cada vez más rápido, lo opuesto al sexo con amor, ése que dura una eternidad… El mundo no está tan mal, a veces, sólo tienes que observar más salvavidas que personas muertas.
Estaba caminando… ¡Y bam! ¡la suela de mi zapato resbala en algo parecido a un peldaño! ¡segundos de segundos me tomó darme cuenta que ya no tenía soporte, que mi pie estaba volando, que inevitablemente mi cara chocaría con el duro suelo empantanado! ¡así que mire mi brazo y le dije ;demonios eres lo único que me puede ayudar! lo llevé lo más rápido que pude a la zona de impacto y antes de que nos metiésemos el duro golpe vi pasar toda mi vida, todos mis amores, todas las obras que dejé a la mitad, todos los sueños que conseguí y los que me dio pereza comenzar, todos desfilaron frente a mí en ese instante de vacío donde mi cuerpo no tenía peso, lo que tenía era una inminente gravedad acelerándose sin freno. Me quedé pensando; cielos, todo lo que hubiese hecho en la vida, pero bueno, valió la pena. ¡El crudo momento se acercaba cada vez más y yo sólo podía cerrar los ojos porque el viento me estaba dejando sin cara! Luego llegó… ¡Y como si se tratara de una pesadilla me desperté con mis pantalones mojados! observando todo a mi alrededor, luego miré mi brazo; joder, que valiente… Me levanté, me sacudí las piedras que se quedaron pegadas a mi brazo, luego tome mi mano y en la palma colorada le di un suave masaje. Continué caminando.
Muchos pueden decir que me resbalé. Yo les digo que tienen razón.
Lo mejor de ser una persona melancólica, es que siempre serán mayores las ganas de hacer algo divertido. Que aburrido donde fuese feliz todo el tiempo y mi búsqueda del equilibrio sea el camino hacia la angustia…
No sé si aun se acuerda que escuchaba sus canciones favoritas porque era de mi placer todo lo que me recordara el hecho de que ella existía, siempre tuvo un gusto increíble por la música, o yo tenia un gusto más que asombroso por ella, que todo lo que tocase era digno de mi admiración.
Yo, otro fantasma pagando condenas y karmas. Empolvando ésta casa de mi corazón; ambivalente dicha, incoherente gozo, entusiasta esperanzado… He perdido la escritura, en mis letras nada se entiende. Soy la felicidad desaparecida y un llanto triste que busca el desahogo en las palabras, porque ellas me torturan hasta dejarlas a la vista, ellas me desvelan, me revelan, me hacen carne y hueso en un mundo en el que no existo. ¿Cómo aceptarme como vida cuando yo mismo he buscado la muerte? ¿cómo declararme melancolía si soy tan feliz? Me averguenzo de mi ir y venir, si cada vez que me siento acompañado es estado solo, si cada momento en el cual me siento al lado de otro; el frío del abandono me sumerge en una tempestad gris…
Tengo razón y soy la equivocación más grande. Hablar de poesía y aventura para ocultar el amor que nunca se atrevió a quedarse. Ir de viaje para no someterme a la gran verdad de una monotonía que no cesa. Buscar entretenimiento, dulces, amigos, para no aceptar la aburrición con la que nací.
Así soy; un poeta mágico, un mago que saca dolores de su sombrero, una gota que viaja por el mundo a merced del río, un hombre que quiere vivir, pero a tu lado… Un fantasma que deja ceniza por donde camina. Un idiota. ¡Un genio! un miedoso… Un valiente con más cicatrices que historias, una letra que nadie escribe, un enfermo que busca la salud, para enfermarse de nuevo… Un tonto que se cree listo, un espectáluco tan costoso que todos le dejan en el olvido una vez acabada la función. Soy una estrella, un brillo que sube y baja…
Soy quien piensa en ti, para creer que vale la pena existir.
No soy bueno por el hecho de estar rodeado de malos. Como en la naturaleza, una flor no es menos que un árbol, y la semilla que germina nunca debe ser subestimada. Puestos a pensar; hasta el más encumbrado pino debe caer para dar lugar a otra vida.
Si nada perdura no es nuestra culpa. ¿Qué sería el mundo sin noches, sin días, sin un arco iris a mitad de año? Todo debe continuar, y como el viento; darle la vuelta al mundo, soñando con deslizar los dedos en otras montañas.
¿Qué le puedo hacer? si hasta yo mismo me encuentro ambiguo, viejo, cansado, cansado de luchar, de golpear muros que me empujan al cielo, de intentar detener la lluvia que puede florecer a mis plantas, de buscar el caos para apreciar la paz. Si me pueden acusar de idiota, será que tienen razón. Será que la cordura me ha fallado, que mi memoria ha desaparecido y me encuentro distante de la vida, ¡por más que la mencione en mis palabras! me encuentro alejado del mar del mundo… Y sigo así pensando, sentado en esta roca plana en la mitad de saturno. Observando como me observan, dirigiendo mis andares a ningún lugar. ¿Cómo aceptarme si nunca he estado completo? si en todo momento me obligo a buscar a alguien que me suavice la cruda realidad, ésta de no saber qué es el destino; ese tiempo que me deja con menos vida.
Pierdo la mirada en la pared, veo como todo encaja, cada bloque de ladrillo, la líneas de hormigón paralelas al suelo, verticales; rayos grises y sólidos… Que terror. Tener que ser tan suave; porque todo es lo que no parece.
Al final sólo queda el final. Lo más excitante; es el comienzo, el ambivalente empezar. ¡Todo lo que hagas, todo lo que decidas hacer! Todo está en el comienzo. ¿Qué haces ahora? Bueno, ese es el comienzo de algo, y puede ser lo que se te de… El final existe y es la muerte, aunque, si somos algo ingenuos la muerte es el comienzo de algo más. Todo es un principio interminable donde buscas lo mejor… Lo digo porque me quedo haciendo tonterías hasta la madrugada, y quiero justificar el terrible sueño que me dará al despertar en unas horas, pero qué le puedo hacer, la vida es un segundo, debo aprovechar el relojito ése que sigue girando.
La paz es el encuentro consigo mismo, la felicidad es la presencia del entretenimiento de cualquier índole, y el sufrimiento es el intermedio entre ambos; un momento donde haces algo que no te entretiene y te encuentras ausente de ti.
“Algo he de andar buscando en ti, algo mío que tú eres y que no has de darme nunca”
Adán y Eva
Jaime Sabines
Por miedo a la soledad abres tu puerta a esos ladrones de tiempo que llamas amigos.
*En mis labios te sé, te reconozco, y giras y eres y miras incansable y toda tú me suenas dentro del corazón como mi sangre.»
Jaime Sabines
Y sin más me encauso a la corriente del destino, sin miedo, sin nada que perder; puesto que hay todo por ganar cuando se viene desde abajo.
Un sol que ayer fue amarillo, un viento que insiste en acompañarme.
Árboles, que envidia, quedarse todo el día recibiendo el sol y la lluvia.
Hay tiempos, y los tiempos cambian y ojalá una manzana durase más, que pudiese ser saboreada eternamente, que las nubes nunca se fueran, nunca se alejaran del cielo y nunca tuviesen que peregrinar sin sentido en el limitado espacio de la existencia. Que los atardeceres quedaran impregnados como una foto; que ese rojo anaranjado y amarillento del sol dejara de moverse y quedase flotando estático en el azul del mar. Las olas, turbulentas e impredecibles crearan el pacto de calma, y entonces, disfrutar eternamente de un momento maravilloso; quedarte sentado en la arena o cualesquier puta roca y ver como todo es tan hermoso e inútil… Mirar lo mismo por horas, días, años, y jamás volver a ver algo distinto. Aburrirse hasta levantarse y caminar y sentarse de nuevo, luego, hacer lo mismo.
Me siento, y por cada vez que lo hago; considero que algo bueno ocurre, que el buen aire que muere cuando es expulsado de mis pulmones tuvo una existencia decente comparada con los demás mortales que poco suelen utilizar su tiempo para sentarse y ver el mundo estrellarse consigo mismo. creo muy en el fondo que algo bueno saldrá de tanta mierda. Oro puede ser. Entonces ellos estarían moviéndose de nuevo, eludiendo el sentarse, pero al menos son ricos y no tienen que ir envidiando todo a su maldito paso.
No serán tus palabras, ni las mías, sino más bien un silencio que conmueva, que busque y recupere la esperanza por la que yo he muerto tantas veces en tantos mundos. Batallas sin armas donde gana el más prudente no el más osado.
Es muy cierto eso de que la discreción me invade pero como toda mascota hiperactiva a veces es bueno dar rienda suelta y dejar que corra a donde le plazca. Un libre albedrío sin moral, sin dogmas, ni reglas, sin estatutos, sin diplomas, sin nada aquello que se ha creado para restringir la creatividad. Así te quiero, ilimitada, incólume, indescriptible, inexistente…
Es divertido creer que un mundo pueda ser regido por lindas palabras, que el amor podrá gobernar en los corazones de todas las personas pero, bueno, no tengo nada mejor en que pensar. A lo mejor si, a lo mejor si…
¿Y si encendemos un volcán con otro? Si, como un juego de fósforos. Jaja, creo que así se me perdería el frío.
No puedo creerlo. Pero me gusta, es increíble; matar problemas psicológicos con más problemas psicológicos. Ayudar un conflicto grave de tensión y angustia con uno viejo que hizo lo mismo, pero que de alguna manera yo extraigo las partes más favorables de aquel entonces. Espero que ayude, esto lo escribo no sólo como confesión de que he vuelto a salir de la tumba con una nueva propuesta de respirar el aire, sino que también lo tendré en cuenta por si mi plan falla y tengo que regresar a sus causas principales. Voy a acordarme de un amor pasado, doloroso, pero magnífico, mágico, muy lindo y que me sacó los huesos para conseguirlo, creo que esto, esto podrá ayudarme a alivianar mi enorme puta carga de perdida por la que me encuentro. Estos amores de mi vida, pero estas ideas de mi tiempo, todo tan ocurrente.
Que basura, que seas tan perfecta y tan imposible. Que ridículo, que yo sea tan exagerado y tan exigente. Que aburrido… Que me quede minutos que parecen horas con las muchas ganas de abrazarte e irme. Que ilógico, que yo mismo sea las puertas que se cierran. Que monótono, que yo te busque y tu me busques sin decidir nunca nada. Que patético, tu tan lista, yo tan sabio, tu tan linda, yo tan profundo, tu tan compañera y yo tan ansioso de consuelo… Tu tan lejos, yo también. Tú tan divertida, yo tan serio. Que doloroso… Tener que aferrarme al suelo que eres tú y no poder ir al cielo que es la libertad, por que si, porque aunque no quiera, me tienes preso, yo mismo me vigilo para no salir, yo mismo me encerré en ti como un tonto. Yo mismo me lastimo con tu grata existencia. Que deprimente, tener que desahogarme en las letras, guardar silencio un par de semanas, y nuevamente volver a escribir, detallando una escalera que ni sube ni baja, ni me alegra ni me deprime, sólo busca que sea más fuerte, que la vida es bella sin ti, que debo creerlo o… Morir de extrañar tanto… -Chico, nuestro amor sólo se respira. No hay relaciones, ni besos, ni caricias, sólo nos respiramos. Nos sentimos y eso nos basta. He visto tu cara de angustia todos estos días. Y no hay motivos, nos tenemos a pesar de todo. ¿Puedes sonreír?
Y letras que se repiten como huevos rompiendo se para crecer y hacer más huevos, para lo mismo, y lo mismo, y lo mismo… Que ojalá un dragón aparezca de la nada un día de estos, es eso, o renuncio al puesto de vigilante en este zoológico. A ser, yo que sé, el que separa las hojas verdes de las amarillas.
Acostarse en cama de hierbas, un manto de estrellas, mirar hacia la derecha y entrever más luces de las que se puedan contar, cerrar los ojos y recordar al amor que se acuesta en el pecho, abrir los párpados como cortinas y sonreír al viento que le cuenta a la luna que ha perdido el brillo.
Nacer de nuevo, para morir, para buscar algo que pueda hacer latir el corazón.
Un hombre que habla consigo mismo y recupera el aliento para regresar. Un niño que juega con el amor cada vez que sostiene la oportunidad. Un escritor que no sabe de qué escribir, sólo busca soluciones a sus asuntos. Un joven aventurero que ya conoce el mundo. Un anciano que espera el atardecer. Un muerto que sigue respirando, o un vivo que quiere morir. No sé que soy ni quiero saberlo, simplemente quiero no querer y así estar en paz con tanta deprimente guerra que se desenvuelve en mi alrededor.
He estado muchas noches haciendo le compañía al viento, y pienso, que el amor es una consecutiva expresión de un tiempo que no existe. Que la luna persigue al sol con ansias. Que el sol siempre regresa por lo mismo. Que juntos se buscan sin poder encontrarse pero viven porque aún creen que se puede. Entonces, de alguna forma mágica; cada año se observan y por unos segundos un eclipse se muestra en las nubes, y eso es suficiente como para continuar esperando con paciencia y calma.
Porque el mundo es un recuerdo, una nueva aventura que me invite a besar tus mejillas tanto, que hasta puedan perder el color, ese lindo color que se enrojece cuando te muerdo las orejas.
Es más sencillo abrazarte que explicar cuan difícil es la vida sin ti.
El amor es sincero; demasiado explícito para ser preciso. Entonces, ven y hagamos uso de él hasta morir.
Hoy soñé contigo, y ayer, y detrás de ése día, y detrás de ese… No sé en qué mundo vivo; pues todo lo que tengo es un sentimiento que crece cada día al despertar y sin embargo continúo caminando solo por las calles oscuras… Soy un fantasma que abre puertas en la madrugada, que nadie entiende porque sonríe siempre que concilia el sueño.
Que más puedo ser. Que intriga la de existir como personaje de novela encerrado en el perfeccionamiento del guión; dormir, despertar y creer que algo bueno puede ocurrir antes de volver a dormir, especulando que se pueda volver a despertar. Pero como obviamente todo el campo de experimentos es la incertidumbre; se sostiene el deseo de conocer la razón por la cual se debe vivir. Es gracioso, pues ésta prolífica idea ha tenido grandiosas propuestas para justificar la respiración constante del ser humano. El amor; como excusa frente al exceso de individualidad. La alegría; como satisfacción a las necesidades químicas de la carne. La felicidad; movimiento de paz interna debido al florecimiento de la moral que consecuentemente se expresa en bondad y plenitud con su alrededor, algunos le llaman espiritualidad. (Y una de mis favoritas); la escritura; inherente del pensamiento desarrollado e intrínseco del ser humano, como expresión de su soledad y la basta colección de experiencias que lo invitan a mejora que lo invitan a mejorar su imaginación, la que posteriormente lo encausara en una aventura con limites desconocidos y como todo entretenimiento es remedio para el insomnio, el escritor busca detallar cada idea con la más sutil e informal manera, para así sentirse orgulloso de el derroche de tiempo que ha tenido lugar desde su nacimiento. No se necesita talento alguno, simplemente es indispensable una tristeza que con frecuencia se resiste al olvido, y escribir de alguna forma alivia o sopesa esa carga de sensaciones. Es cierto que se puede escribir con felicidad, pero ésta también participa en el vacío de la melancolía en mayor o menor medida, o sino, ¿Quién escribe teniendo la tranquilidad y el cobijo de la compañía que tan dispuesta comparte su amabilidad? ¿Extraño que alguien lo hiciera no? Al parecer el movimiento literario es un deseo por algo de lo cual no se tiene; y esa es la razón de la tristeza. Explicado de otra forma: escribe quien no ha podido encontrar paz en su vida y por lo tanto, crea un amigo, y toda conversación es a través de una pluma. Obviamente estoy generalizando de forma empírica, no creo que todos los artistas silenciosos sean tan parecidos a mi. Sin embargo, como razón y explicación del hombre que se gasta su tiempo moviendo su muñeca no está nada mal. La vida es un acertijo, ni yo sé concluir con la solución a tantas dudas, pero intentarlo no está demás.
Sentarme al borde de la cama, la mirada perdida, el corazón inquieto, la respiración algo silenciosa, la mente vacía, no hay espacio para las ideas cuando los recuerdos invaden con su aroma toda mi ropa, las sábanas, donde te abracé toda la noche, las paredes que no podía mirar por insistir en fundirme con tus labios. Fue tan lindo… Que ni espacio hay para el presente; dejaré que me viva el pasado hasta que se me pasen los mil suspiros. Nuestras respiraciones sofocantes que aún pululan en el nuevo día.
De tanto mirar sus labios se me empañan las pupilas.
Indeciso, con vocación a la tranquilidad me paseo por el tiempo que me queda, amando lo que se puede… Algún día antes de morir, lloraré de la alegría, pues sé, que en mis manos tuve la gloria de conocerte, y la desdicha de no haberlo hecho antes.
En la fortaleza de la soledad, yo no te enseñé a vivir, más bien, buscamos juntos la manera de cruzar un río sin ahogarse.
Esto es una mierda. Alguien tiene que aceptarlo, y alguien también tiene que reconocer que no hay muchas respuestas distintas en un grupo que se ha leído el mismo libro de mierda. Por lo tanto, no nos quedaremos de brazos cruzados mientras nos sentimos vacíos, y la verdad, yo toda la vida me he pasado por los huevos eso de distraerse y no pensar mucho en asuntos inquietantes para no despertar la ansiedad, sino que yo mismo he ido en busca de que algo realmente jodido me destroce o me torture o viceversa; porque no pienso sentarme a recalcar lo estúpido que soy, que también, sino que quiero ir y darle la cara de la forma en la que sea a eso a lo que le llaman vergazos de la vida. Está bien, hay que llorar de vez en cuando, y si tienes una piedra en el zapato es tolerable pero una ardilla en los pantalones no, ni tampoco una cucaracha muerta en tus medias, ni mucho menos una rata que parece un puto gato que te mira debajo la cama… A lo que me refiero es que hay problemas pequeños que se aguantan por un tiempo, pero hay otros que se merecen desempolvar la escopeta y esto no es una metáfora. Mierda, eso de la rana que no siente como la están hirviendo es muy cierto; llega un momento en que te das cuenta que no hay marcha atrás, que lo que parecía una gota en el tejado se a convertido en un pedazo de arroyo que está inundando la puta casa y que pronto se convertirá en el océano más cabrón que hayas conocido, y luego todos se van a pasar por los huevos de que es tu casa e irán a bañarse porque se puede ¡Y no exagero! ¿Entonces como es posible quedarme tan tranquilo en cada pedacito incómodo de mi vida? Que alguien me llame loco, pero todo lo que he hecho es porque no había de otra. Si, he sido cruel y todo un hijo de puta, pero también le he puesto lágrimas a cosas simples y sencillas como un atardecer de mierda que me consuela. Sobre todo por esto; la vida no es tan terrible como se suele imaginar, hay momentos buenos, cortos y que se olvidan pero que te dicen a gritos que por esto ha valido la pena. Eso se lo dije a una chica una vez, le dije, que nunca mi vida ha tenido tanto valor hasta este momento, y estaba abrazado a la hija de puta y un día después ni idea si seguía respirando. Pero eso es lo que vale, el hecho de que algo importante exista durante un segundo, un maldito segundo para concluir que tanta joda con la vida y que realmente sirvió de algo. Bueno, si llegase a ser viejo con un bastón café oscuro y unas revistas porno detrás del cuadro de la sala y esperando la muerte y que por fin me quite los dolores de espalda, diría muy a gusto que la vida no deja de ser una mierda, pero a veces diría, y en muy escogidas ocasiones, que yo volvería a nacer sólo para pasarme por los huevos el tiempo y llegar a ese momento donde me brillaron los ojos café tierra vieja y mojada que llevo puestos. Que me tiemblen las manos como esquizofrenico hijo de perra por sentir el estremecedor momento en que una hormiga cae de la mesa y se me parte el corazón por sentirme un asesino… Si es que la felicidad está en lo más sencillo, el colocar un brazo en la cabeza y rascarte la caspa es orgiástico, yo no sé porque me gusta tanto empaparme de cuestiones inconclusas si todo lo que quiero es respirar profundo después de no hacer nada en todo el día. Pero que le puedo hacer, si reír es más bonito después de haber sufrido a lo pendejo.
Pensarte es mi pastilla para remediar la depresión. Que bueno que la sobredosis no tenga efectos secundarios.
No logro conciliar el sueño y el sol se asoma por las grietas del tejado, el tiempo pasa rápidamente, y aún más cuando los ojos de ella aparecen en las paredes de esta habitación, mis ojos decaen, mis parpados se cierran y entonces aparezco yo en un lugar cambiante donde reina el olor de la primavera; estúpida cursilería, no puedo evitarlo, a pesar de lo arrugado de mi corazón aún sostengo el vigor de un adolescente enamorado… Aún imagino sus mejillas coloradas… Creo que moriré de tantos pensamientos dulces, que asco, pero que fascinante el sentimiento que me tortura cada noche; obligándome a escribir.
Es más sencillo odiar. No cualquiera ama por encima de los prontos 49 infinitos que preceden a la muerte y al olvido. Es una tontería regar un árbol en invierno, pero bueno, mi don preferido es la insistencia silenciosa. Ella no lo sabe, pero le llevo flores todos los días, hago que los huevos de su desayuno tengan una pizca de sal. Yo me invento una vida contigo. Mi terapeuta me sugiere darme unos días de vacaciones pero no hay descanso más bonito que esperar impaciente el próximo día sin ti.
Por una caricia la muerte implora un aliento de vida, para así, darle sentido al mundo. Porque de nada sirve morir sin nunca haber vivido la magia de un beso. Y como si fuese la secuela de Romeo y Julieta, yo prefiero soñar para verte, vivir para encontrarte, y morir para buscar de entre los muertos tu esencia, para patearle el culo a Dios y decirle que tus ojos son mejores que todos los paraísos. Dichoso por ser nube y no desear más límite que el cielo. Alegre de entregar mi corazón al desierto de tus sentimientos. De hacer sopa con el calor de mis promesas y el hielo de tus palabras.
Es que es muy agradable dejarse las pelotas en algo que te importa, ver como se va a la mierda pero tener la consciencia tranquila. Después de todo; tiene que llover, no mucho, pero si se necesita mojar la tierra de mierda en la que se vive. Que rayos caigan, que se encienda todo el puto bosque pero por mi, ya está todo hecho.
Los mediocres siempre se preocupan, saben que pueden dar algo más pero no lo hacen, yo también fui así. A la mierda, hay que llorar al cantar, reírse de tristeza, enojarse de alegría… Da igual que el mundo se derrita, yo entregué cada uno de mis dedos en lo que hice, y tú deberías hacer lo mismo; es la única forma de dormir temprano.
Susurro una canción que lleva tu nombre. Escucho la voz del sentimiento; es un silencio que no se calla, que no deja lugar para la certeza, pues todo lo que siento es un nido del ave que eres tú, y aquel lugar donde te encoges al dormir está hecho de ramas de todos los lugares, de todas las clases, y te posas sobre mi al anochecer. Seguramente por eso canto, pienso que tal vez puedas escucharme, suelo decir, lo raro que se sienten tus suaves plumas en comparación de mis rígidas y secas ramas.
Soy castillo no rey, pues en mi vive el poder más no lo soy. Cada día me quito el musgo de los ladrillos que rodean mis torres, a veces es imposible, hay incluso nidos de pájaros en los tejados y cuevas de ratas en las alcantarillas. Soy fuerte o intento serlo; busco la manera de convencer a un leñador para que arregle algunas ventanas, o un minero para que coloque algunas piedras grandes en los senderos del alrededor, lo hago porque hace tiempo me aburrí de ser choza albergando a un anciano, por lo que poco a poco me convierto en el imperio que cuida de buenos habitantes. Soy una puta casa parlante, no se me ocurre hacer algo más interesante. Por lo cual, dejo que los años pasen con buen sentido.
Si imaginase mi aspecto unos años atrás, no estaría nada mal, la verdad, hasta me daría envidia, pero con el tiempo mis paredes fueron más altas y más aferradas al suelo para sostener la firmeza, puertas enormes pero con un dureza impresionante. Por supuesto que no soy el mejor de los castillos, pero si yo fuese un hombre en busca de un hogar y me encontrase, no dudaría en quedarme… Entonces ello me hace pensar, ¿Cómo podre ser unos años en el futuro? ¿cuanta será mi fuerza? ¿cómo de maravillosas y recordables serán las caminatas por mis pasillos? Porque, aunque me encuentre decidido en adornar, embellecer y fortalecer mis exteriores e interiores, algunas circunstancias me darán dificultad en lograrlo, y no tengo certeza en si tengo el valor suficiente para afrontar cada golpe; hay guerras, hay intrusos, hay enormes cambios climáticos, hay hombres de mal que desean pasar por mis puertas o sino por mis ventanas sólo para saquear o sabotear a mis hombres de bien que tan celosamente cuido y protejo, claro que también tengo en custodia a malvados seres, ellos están en mazmorras o en cárceles subterráneas que yo mandé a diseñar en caso de motín. Lo que ellos hacen es pensar, reflexionar, porque yo les doy la libertad en el momento en que lo deseen, pero si quieren vivir con mis habitantes, entonces tendrán que re modelar el uso de sus actos, pues no tolero abusadores dentro de mi reino. Por supuesto algunos se van, otros, pocos, se quedan a mi cuidado, y allí tienen todo el tiempo para mejorar. Es lo que yo le llamo: una cárcel con estilo. Mi rey. El es un hombre vigoroso, fuerte, justo, muy sabio, por lo que yo decidí que gobernara toda mi «pequeña villa». Al principio se extraño, fue muy modesto, pero lo convencí de que alguien debía sostener el poder y el control cuando yo no pueda hacerlo. Aún me acuerdo el día en que llegó; hacia una tormera terrible, rayos caían en mis jardines externos y torres más altas, el agua fluía como enormes arroyos al caer de las puntas de los tejados en forma de triángulo. Cuando de repente, de entre la neblina llega un jinete a todo paso, me pide que lo deje pasar, que en su casa el agua le llega hasta le cuello. Por lo cual abrí las puertas y ordené una habitación cálida y cómoda para su descanso.
Una perdida de tiempo, todos los saben y casi nadie lo acepta; la vida se crea con el fin de desaparecer, no hay más, y lo que hagas hasta que lo consigas es pasajero, olvida ble, insignificante. Sólo perdura aquello que no nace, aquello que trasciende de la materia. No por nada he muerto tantas veces intentando conseguirlo; el amor; aquello que a día de hoy me convierte en un desalmado encantador, una maravilla sin corazón, o un destrozo de genialidad: Pues no me defino, no busco parir mi espíritu, más bien voy en un intermedio entre la vida y la muerte, soy eterno, pero incalculable mente triste.
Mi deseo como arroyo que baja incesante por un lado de la montaña, gotas que desaparecen y nunca nadie reconoció.
Tanta vida desperdiciándose en todas partes, tanto tiempo inútil, tantas sonrisas forzadas, tanta belleza flotando y cuanto odio acomulandose. El precio de un buen recuerdo… Antojo de volver en el tiempo y querer cambiar algo, ganas las mías de no envejecer lentamente; lo peor no es morir, es más bien el olvido; caer en la perdida de lo único que me ha hecho sentir vivo. Espero que esta vela de la memoria no se consuma, pues una vez apagada yo haré lo mismo: pues si respiro es por imaginarte a mi lado.
La vida no fue divertida hasta que le conocí… Eran atardeceres cuando la miraba a los ojos.
Soy una respuesta esperando una incógnita aceptable, al menos prudente… La tierra quiere la lluvia como el amor su eternidad y yo deseo un momento, donde tanto tiempo haya valido la pena.
Una hoja que navega por el viento, esperando a caer, dando vueltas…
Estaba tan triste, y ella y sus ojos amarillos lo sabían… Se quedó a mi lado toda la noche y no pudimos sostener una conversación completa pues yo tenía un nudo en la garganta y ella unas lágrimas por ocultar. A veces me pregunto que hubiese sido de mi si ella no viniese a consolarme, qué habría hecho entonces, quién vendría para auxiliarme, porque, aunque ella siempre fue hielo, yo nunca perdí la curiosidad de ver un poco de vapor, por lo que cualquier otra persona por más buena que sea su intención no habría conseguido lo que ella. Y aquel día, cuando salió corriendo de casa para llegar a la mía, yo me quedé sin palabras, sin gesto, pues nunca en mi vida me habían dado algo tan bonito, un regalo tan real… Son de esas promesas que nunca se dicen pues son las únicas que se cumplen. Y cuando tuvo que regresar, yo por primera vez no me sentí vacío ni herido ni temeroso, pues ella se había marchado con lo único de mi que no extrañaré: el miedo al amor.
Es sorprendente la forma en que mi mal humor desaparece cuando la veo, a veces me quedo escondido detrás de los árboles esperando a que pase, y a menudo le imploro al cielo que me permita recordar con claridad su rostro, pues han pasado años desde que mi corazón perdió el ritmo y que mis manos tuvieron vida propia, seguro que aún se tambalean cuando la miro. Es imposible no mirarle, su cuerpo es… Bellísimo, su sombra es impredecible, sus gestos al pensar, al sentir, al odiar; todo lo conozco, cada trozo de sus innumerables tristezas y cada escasa pero maravillosa sonrisa, me tomé tiempo en amar a quien conozco y en comprender a quien me ha dejado el terror a un lado… Si me siento feliz, me sentiré aún más feliz por saber que existe. Tengo, una foto que guardo con orgullo y muchos celos, es de ella cuando la conocí, y la tengo en mi celular, es lindo, porque siempre que algo anda mal veo mi teléfono e inevitablemente escribo esto… Que su madre me explique por qué es tan bonita.
Algún día todo esto acabará, y yo buscaré asomarme de entre la niebla; te veré y pensaré que no todo paraíso es el sueño de un hombre.
Tardes en mi corazón. Lugar donde no habita tiempo, no hay días después de otros. La sola tarde es lo único; la fría corriente de aire, el sol acomodado en las montañas, las nubes en el cielo de tus ojos. nada se mueve, mi destino se ha quedado sin baterías y no se me antoja verlo funcionando otra vez. Es aburrido, pero es la vida, es mi vida; un segundo contigo que se ha convertido en una eternidad.
Si todos somos fragmentos dispersos de una unidad incomprensible, entonces la excusa de la unión debe ser la más buscada por el hombre: El amor; lo parcial es el sentimiento eterno de sentirse parte de algo. Entonces se puede deducir que el odio y todas sus ramas excluyen al hombre de si mismo, y por lo tanto se fragmenta aún más hasta el punto de volverse ajeno a su propia vida. Pero, ¿qué hacer cuando todos los fragmentos no reconocen estas palabras y si lo hicieren lo olvidasen? Para ser más claro: ¿Cuál sería la forma en que un fragmento se recupere a si mismo y regrese a ser un individuo independiente? La respuesta es una mentira. La única manera de vivir es apretar lo conocido hasta asfixiarlo y entonces, sólo entonces, buscar la verdad por medio de la vida misma. Esto significa que cada hombre en su propia dirección aprende algo nuevo y distinto. En otras palabras: la vida es una oportunidad para que el ser pensante descubra su fuerza y la utilice para ser feliz. El problema es que la felicidad es producto de la paz y ésta a su vez es consecuencia de una mente tranquila, por eso, resulta necesario dominar la mente y al mismo tiempo corregir sus estados ambivalentes y sin ritmo. No es casualidad que se pierda el control de las emociones, que no se tenga idea de como responder ante una crisis, que se pierda todo el valor de la vida misma. Todo ello, son oportunidades, son mensajes que ayudan al hombre a convertirse en quien realmente es. La capacidad para ser más fuerte y audaz está en sus manos todo el tiempo, solamente debe resistir, debe tolerar las lágrimas, los gritos, los golpes, las perdidas; porque en el momento en que un hombre se encuentra vacío, perdido y sin nada a su alrededor, entonces es el único momento donde se pregunta el significado de su vida. Y sólo en ese momento renace, crece, y si tiene el suficiente coraje para continuar, entonces estará el resto de sus días construyendo un casa en donde vivir. Un hogar en su alma. Entonces llega el momento donde mira el cielo, y se siente vacío… Solo, triste. No hay nadie a su alrededor que haya querido crecer ni prosperar y por lo tanto, el hombre desarrollado que vive con su eternidad se excluye de los fragmentos que viven con el paso de los días. Es inevitable, no hay nada que hacer, aunque se arrepienta sabe que era el único camino para ser libre. Comprende entonces que el conocimiento es su mayor poder y el amor, su propósito para vivir. En conclusión, nunca hay respuesta correcta, sólo hay historias por contar. Esta es la mía, y aunque sienta el mañana frío y sin sabor, no pierdo la esperanza, de algún día ver como tantas personas perdidas se encuentran y entre todos juntan sus esfuerzos para buscar la manera de amar, de aprender, de vivir. Porque la única manera de vivir es nunca olvidar que siempre, siempre hay una oportunidad para ser feliz.
Despoja a un hombre de su traje, sus joyas, su casa, su cara. Entonces conocerás quien es realmente.
Bien Estuve pensando después de pensar en toda mi vida y aprovecharé éste espacio para comunicarte todo lo que aprendí o intento entender. Espero estés de buen humor porque dejaré unas buenas y largas ideas. suspiro xD Okey. Cuando nos conocimos por facebook, yo pensé que eras de esas chicas geniales que no tienen tiempo para observar a un chico callado y apartado de la gente tal como soy yo, fue muy extraño cuando me dijiste que me amabas, yo… no había frecuentado esa palabra. No lo entendí pero de seguro era algo muy importante, por lo que sin pensarlo dije lo mismo y comenzamos a tener una conversación de esas que no se ven todos los días. Cuando nos despedimos ese mismo día yo pensé en la fortuna que un hombre como yo había encontrado, en la grandeza de esa oportunidad; de tener por fin a alguien que de verdad me quiera. Entonces comencé a aprender de todo para gustarte, te envié imágenes dulces constantemente, te escribí pedazos de canciones, o canciones completas, te lleve bombones algunas veces que nos encontrábamos. Cuando te conocí no pude dejar de sentirme bien, fue… Mágico. Cuando te besé en la mejilla al lado de Mariana todo el mundo desapareció y luego te abracé por la espalda y tu hiciste lo mismo. Nada, hasta entonces había sido de tanto gusto para mi. No sabía tu apellido y me sorprendí cuando me enteré de tu edad porque al principio no te creí, pero sin duda aposté todo lo que tenía en ese momento por alguien que no conocía pero que a medida que lo hacía yo lograba estar mejor. Tuve momentos muy duros en mi vida, sobre todo cuando perdí el apoyo de mis padres, mis hermanas me acusaban de ser un estorbo y mis amigos todos los perdí porque no me ayudaban a ser una mejor persona, por lo que siempre tuve que quedarme solo, aún con compañía yo me sentía vacío y triste. A día de hoy aún lo siento pero aprendí a soportarlo, a aceptar que la vida es así y que no hay más remedio. Lo que sucedió cuando te prometí quererte para toda la vida, fue que te entregue lo más bonito de mi y lo que yo había cuidado hasta entonces para que comprendieras que serías tú lo único que deseo que esté a mi lado… Todo marchaba bien, muchas mariposas, repetidas veces en que dejaba de prestarle atención al profesor para pensar en nosotros y como volvemos a pisar una popó en nuestras citas. Entonces conocí que te cortabas, no le había prestado mucha atención pero ahora eras muy importante por lo que en vez de enojarme me entristecí y te dije que no era la forma correcta de vivir. Nunca supe por qué lo hacías, lo único en lo que pensaba era en como ayudar, como ser más inteligente y convencerte que eso no era muy bien visto por nadie y sobre todo por alguien que te quiere, en aquél entonces no sabía que las personas sufrían más que yo. Hubieron muchas discusiones entre ambos para lidiar con muchos problemas que tú tenías, yo no sabía que tu querías apoyo y comprensión además de respeto, lo siento, de verdad que lo siento, yo no tenía idea de como cuidarte. Sin embargo coloqué mis esfuerzos en aprender y ahí fue cuando buscaba acercarte a la religión como método para superar la adversidad. Entonces comenzó otro problema: Tu familia no se sentía conforme con una hija joven y diferente al lado de un hombre mayor y desconocido. Sabemos lo que ambos tuvimos que pasar por ello. Me derrumbé… Escuché hablar a lo que era mi amiga Kelly, que te habían básicamente masacrado a golpes por ser tan testaruda. Yo… Me hice pequeño, completamente y tuve que aceptarlo, que, tal vez, tu hermana tenía razón y que yo no te amaba, simplemente te quería para un rato y nada más. A día de hoy, no puedo calcular cuan equivocada estuvo ella. Así que te dije adiós, con mi vacío no enorme sino gigantesco, y verte llorar, no sólo eso, sino, sentir como bajaban tus lágrimas por mi espalda ha sido la sensación más horrible que he tenido en el mundo, todo lo que amo, ahí, destruyéndose, por culpa mía, por mi razón de existir, y sin embargo, no poder hacer nada por pensar que es lo correcto… Que estúpido. No pude soportarlo, pasaron unos días y no lograba concebir mi enorme cobardía o mi abundante prudencia. No me resistí más y te pedí estar a mi lado de nuevo, todo parecía absurdo lejos de ti. Y comenzó lo que hoy parece que se repite pero sin tanto melodrama. El temor a vivir sin ti me hacia querer más estar contigo, pero el miedo de que nos vean juntos y que te lastimen era suficiente para dejarme inmóvil y no sólo me dejaba abstenerme de tus besos sino prohibirlos. Yo me comencé a morir lentamente. Todo me atrapaba, el deseo, la culpa, el amor, el miedo. Era tan feliz contigo, sentía que todo encajaba, pero moría si te pasaba algo, lo sufría como si tu carne fuese la mía. Te dejé, te recupere, y así muchas veces… Conocí a Mafe. Fascinante, en una palabra, y dejando todo de lado le pedí estar conmigo porque realmente necesitaba escapar de tanto dolor. Así que me despedí de ti por lo que pensaba sería la última vez. Si supieras cuanto peso calló de mí en ese momento. Mafe por un par de días me hizo ver lo fantástico que puede ser un beso sin temor a que alguien nos lastime, y yo no pude evitar ver una esperanza en sus ojos amarillos, le dí todo de mi, y fue justo en ese momento, la noche en que le dije que la amaba, cuando ella hizo un gesto, algo que nunca olvidaré y que a día de hoy interpreto como un «Fue lindo, pero no necesito a alguien como tu» Quise aceptarlo, quise, de la forma en que fuese entender que no soy lo quiere y punto. Pero no pude, mis ganas, mis enormes ganas de amar me dejaron tomar una decisión suicida; intentarlo hasta que ella quiera. Eso pudo conmigo, fue enorme, enorme el tiempo y esfuerzo que invertí en ganarme su aceptación. No quería ser un amigo, ella significaba para mi lo que no pude contigo… Hice todo lo que pude, hasta la última gota de sangre que emanaba mi corazón la moldee para ser algo bonito para ella. Nada funcionó, todo, todo perdido, todo en vano, definitivamente conocí su ira y me aparto bruscamente y me dijo que «ya no» ya no… Me quedé solo, abandonado como a un perro, maltratado, engañado, y muy furioso pero, más triste que todo lo anterior. Lloré, lloré, lloré hasta creer que de lástima podía ganarme un poco de sus palabras. Te volví a ver, tan linda, un poco más alta, los ojos sexys, la palabra lúcida y elegante y fuimos novios por unos cuantos días, fueron pocos, porque yo no te hablaba, tu me lo pedías desesperada mente y yo me quedaba en silencio total, hasta que, sin misericordia alguna te dije: «Ya no te amo» No quise decir eso, nunca olvidaría mi amor por ti, jamás. pero no pude decir nada, todo de mi estaba por los suelos. Quería explicarte que he amado a alguien mucho, tanto, que me vi aplastado por toda mi fuerza al ver que sólo me utilizaron como a un par de tennis. Después de eso, nada tuvo sentido, me levantaba a las 2 o 4 de la madrugada, me sentaba en el sofá y veía a Mafe, la soñaba, la quería, la tenía ahí en la oscuridad. Quería abrazarla, pedirle perdón por no ser suficiente, suplicarle que me deje escuchar su voz, pero sólo había una sala, vacía y fría. Lloraba, golpeaba las paredes, el viento, lo que fuese que me quitara tanto dolor del pecho, todo, en todas partes me mataba, me dolía, lloraba, y lloraba, a veces asfixiaba mi almohada mientras escuchaba las canciones que yo le dediqué. Pasaron meses, esperaba un mensaje de ella, yo le había enviado veinte como poco. Nada, simplemente un frío demoledor. Lloré, y esa vez, fue mi última vez por ella. Camila me dijo: «Hola :v» Cielos… si yo pudiera hablarle ahora, no tendría palabras, no tendría un abrazo tan fuerte para expresar el alivio que me dio conocerle. Pasaron cientos de cosas pero desde que comenzamos a hablar mi dolor se esfumo, como cuando sale el sol y la niebla de la noche se va, ya no reconocía quién era yo meses antes. Hice lo que pude para ganarme su aprecio, aunque sabía que me quería, también comprendía que no era por mucho. Yo le decía que la amaba, que no sabe cuan fuerte soy desde que hablamos, que no tiene idea de lo feliz y capaz y de todo lo que ha hecho en mi. Pero no fue suficiente, ella siempre respondía que no debo apegarme, que simplemente debo disfrutar el momento, que sólo debo vivir y ya. Y eso no tiene sentido para mi, el amor no es un momento. Lo supe antes de que me lo dijera pero creía que sólo estaba acobardado por lo que pasó antes. Así que continué, aún sabiendo que sólo era un pasatiempo para ella. Siempre me lo repitió. Un día me dijo, que volviera con Mafe, que arreglara mi vida, que yo estaría bien sólo tenía que pasar un rato con Kelly y todo pasará… No sé como algo así se puede digerir. Ese día, no tuve lágrimas, sólo me senté en mi balcón y me quede pensando. Todo lo perdí, todo mi esfuerzo se perdió, todo mi amor, todo lo que hice para crecer y madurar, todo, ya nada importaba… Subí a esa montaña sin querer volver a bajar y cuando regresé a casa entendí que siempre me dolerá haber arrancando un trozo de mi alma para darlo a alguien más, no sólo uno, sino tres. Me quedé solo después de eso, ya nadie me parecía excepcional como ustedes. Tenía noviazgos cortos, las chicas me producían una aburrición enorme, sus besos eran aburridos, sus manos, sus ojos, su pelo, sus palabras. Una vez hubo una chica, era más lista que yo así que imagínate. Bueno, intenté quererla, tuvimos sexo unas cuantas veces, muchos abrazos, muchos besos, pero, no sentí ni el 2% del placer que sentía antes. Comprendí que ya no tenía nada para dar y entonces me fui… Me quedaba más solo cada vez, las chicas que estaban a mi lado eran insignificantes, todo de ellas me provocaba más vacío. Tú yo volvimos a conversar y, tuve tanto miedo… Nunca en mi vida había tenido tanto. Cuando, me acosté sobre tus piernas en la cima de esa montaña me sentí tan libre, tan completo… Por fin, la vida me da tregua, pero, estaba seguro, completamente de que eso sólo era un momento. Cuando me entregaste el anillo y el listón yo me había preparado, sabía que era inevitable. tenías razón, te arruiné la vida a ti y, también a mi… Cuando regresé a casa, lloré, pero ya había hecho las pases con mi dolor y sabía que jamás se iría, que de ahora en adelante sólo habría que esperar a envejecer y morir, que ya no puedo amar a alguien que no le haya dado mi alma y mi alma ya la había repartido. Entonces sentí el vacío del tiempo y me fui acostumbrando, entonces, como oportuno que soy te saludé cuando estabas en la biblioteca. Quisiera arrepentirme, pero no recuerdo que es estar feliz antes de eso… Te sabes la historia, sabes las veces que caminamos juntos de la mano hacia todos los lugares, que yo, hacía todo lo posible para sentirnos bien ahora que nada nos lo impedía. entonces tú me lo dijiste. No me amabas, nunca lo hiciste, yo sólo fui un capricho para ti. No me importó, de todas formas nadie me amó, yo sólo quería sentir esa paz que te surge cuando amas. Pero lo comprendí luego, cuando dijiste que te molestaba, que te aburría salir al mismo lugar con la misma persona a hablar de lo mismo. Yo no podía verlo, porque lo único que podía ver era la forma en como me sentía de bien al estar contigo. Te deje un tiempo, y así comienza lo que a día de hoy continúa y no lo soporto. Ahora, puedo enfocarme en lo que realmente he querido decir. Todo lo anterior es menos necesario pero igual de importante. Bien, aprovecho esto, aprovecho una vez más el escribir todo lo que pienso y siento para ti, porque no logro vivir con tanta incomodidad. Aclaremos las ideas. Te pregunté por qué me buscas, para qué me quieres y sólo respondiste «que conmigo es mejor» pero al parecer «mejor» por unos días y una ausencia de mi es un regalo. Yo no quiero ser un pantalón que uses cada vez que quieras, yo no quiero ser algo que puedas utilizar cada vez que quieras, que se te antoje. No quiero ser un amigo ni de ti ni de nadie porque siento que yo valgo mucho más que alguien a quien le cuentas tus secretos y luego olvidas como se hace con cualquiera. Cuando comenzamos a hablar otra vez tu dijiste algo que me resuena todo el tiempo: «No sé qué quiere la vida de nosotros pero sin duda no nos dejará en paz» Y toda la razón, yo, exploté un par de veces y te hice shows para que comprendieras como me duele el tenerte y no tenerte. Yo había aceptado que eras demasiado para mi, que tú tenías otras expectativas de vida pero aún así no podía resistirme al enorme placer que produce estar contigo, oír tu voz, escuchar las historias con tu padre, con la vida, con tus amigos, con tu familia, con tu futuro. Se ha vuelto una adicción para mi ver esa sonrisa, esos labios, esas mejillas que tienen un hoyuelo tan sexy. Esas orejas, ese cabello corto, tus dedos sobre los míos… Es imposible no amarte, es completamente imposible no sentirme vivo cuando estoy contigo. No puedo alejarte ni pedirte que te alejes, porque contigo, yo por fin me siento pleno… Sufrí porque al fin de cuentas yo estaba amando a alguien que no tenía o no quería la capacidad para amarme. Y es muy difícil sostener un puente desde un solo lado. Es muy complicado sostener el mundo solo. Así se siente el amor, algo tan grande que una persona por si sola no es capaz de soportar. Bien, yo medianamente iba sopesando el hecho de que no soy para ti ni una pequeña parte lo que eres para mi, no sé si es porque no te gusto, o no tienes nada claro, o tienes a otras personas más importantes que yo, o ya no estas tan segura, o sabes que conmigo todo a sido en vano, o te avergüenzas de lo que hemos hecho, o piensas que no soy la mejor opción o lo que sea… Acepté que no eras para mi pero que no podía dejar de amarte, es más, me enamoraba más con cada día a tu lado. No sé como pasó, no sé como sucedió ni a qué hora porque no tenía ni un poco de consciencia en ese momento, simplemente mi corazón y todos mis sentimientos reprimidos tuvieron más fuerza que yo y te bese… Te bese, y te bese, y te bese y cada día me acuerdo del mejor beso en toda mi vida. Ese momento, ese momento… Estoy llorando. ojalá no hubiese nacido tan sentimental. Ese momento yo sentí que nunca me acercaría tanto a la eternidad. Tus labios tu cuerpo, nuestras piernas tan juntas, nuestro aliento sofocándonos, mi semen en mis pantalones. Yo, ese día de regreso a mi casa, me sentí tan impotente, tan frustrado, me repetía por qué ¿por qué? Por qué no puedo tenerte, porque la vida me muestra lo mejor que existe y me lo arranca de los brazos. ¿Por qué Mafe se fue? ¿Por qué Camila me dijo que ya era hora de irme? ¿Por qué Natalia dice que su dignidad es mayor que es deseo de estar juntos? ¡por qué! ….. Yo… Yo, te insulte un par de días después, lo siento, pero era la única manera que tenía para dejar de volverme loco. Entonces lloré muchas veces, muchos días pero poco a poco volvía a mi sola soledad y a mi vació inconmensurable, pero me sentía bien, me sentía muy triste pero, tranquilo, si lloraba de vez en cuando me decía a mi mismo que la vida no me creó para compartir el amor que siento, que hay que aceptarlo, que al menos podemos subir a esa montaña un par de veces a la semana. Y eso era suficiente para calmarme. Entonces llegas tú y me dices que necesitas la guitarra. Bien, lo acepto, vale, fue difícil, pero sabía que era lo correcto. Intenté ser lo más simpático posible, no quería suplicarte volver a mi como cuando lo hice con Mafe, o Camila y sólo me gané ser un mal recuerdo. No sé quien era ese chico que llego a quedarse con nosotros, el Esteban o Jorge, o Andres, ni puta idea, pero que celos, que rabia, que odio el que yo solo sea uno más de entre muchos y tú para mi seas una entre nadie, porque nadie me abrazó como tú lo hiciste ese día, que justamente, me estaba muriendo por lo que hoy también me muero y tengo que escribir esto. Recuerdo que oculté todo lo que sentía, cantaba para olvidar las aplastantes ganas de besarte, de abrazarte, de no quererte soltar otra vez porque si te suelto te iras, lejos, lejos de mi… Eso fue tan doloroso que cuando llegó la hora de irme no me despedí de nadie, necesitaba reventar, estallar en lágrimas. Cuando regresé a casa, y me escribiste: «fue una excusa»… Te amo, pero no sé cuan hijo de puta se tiene que ser para decirle eso a alguien que todos los días muere, se derrite, se revienta, por estar a tu lado, que suplica día a día al cielo para que tengas un buen momento en tu vida porque la mía se consume lentamente, porque daría todo lo que soy todo lo que tengo para tener un espacio en un corazón y darte todo lo que nadie me pudo dar. Sin embargo, ya habían sido demasiadas palabras para ambos y te escribí algo que salió del lado más bonito de mi alma, paletita… No quise hablar más, te dejé en visto, pensé que «Ojalá no regreses idiota» Sería suficiente para dejarme tranquilo, y lloré. pero en mi soledad, en mis caminatas tristes por esa montaña te comenzaba a pensar, a mi lado, de mi mano, colgando de mi hombro, mordiendo mi oreja, conversando sobre tu vida. Yo hacía una imagen de ti como siempre la he querido. Prometí no volver a hacer nada que me lleve a ti, si tengo nuestra foto aún en mi perfil es porque no tengo nada más bello que colocar. Entonces todo andaba bien, yo comenzaba a soñar te más a menudo, te aparecías en mis pesadillas y entonces la luz regresaba y mis amaneceres comenzaban con una sonrisa. Pensaba que mi vacío y mi dolor es llevadero cuando tengo un apoyo, a alguien en quien pueda recostarme y sentirme amado. Así que dejé de hablarle a todas las personas, coloqué tu nombre en la pared, y desde entonces, tu eres la referencia más positiva en todo el universo. Pero, claro, no puedo soñar toda la vida por más que quieres y un día como cualquiera me dices algo a lo que no puedo resistirme… Me pides que te ayude. Es increíble, no sabía que es estar preocupado desde hace un buen rato. No puedo mentir, cuando te vi y te abrace sentí lo que he querido sentir con mi almohada, con mi pene, con mi imaginación, con mis sueños, con las sábanas, quisiera también decir con la heroína pero esa nunca la he probado. Demonios, se me rompió la garganta, casi me pongo a llorar ahí, otra vez… Es que estoy seguro que aunque intente manipularte no podría. No sería capaz. Ya me había resignado a vivir solo, a tenerte para mi, a amarte hasta morir o morir de tanto amarte y tienes que aparecer. ¿Qué hago entonces? No puedo escribir tres horas cada tres semanas sólo porque usted estremece toda mi alma o lo que queda de ella. No quiero despedirme, eres tú mi mejor compañía, hemos vivido tanto y tantas cosas que por más cruel que seas no pueda dejarte ir. Aunque me uses, aunque no me ames, aunque haya sido tu capricho, aunque prefieras a otros o a otras, aunque sea tu segunda o tercera opción, aunque no sea tan bueno para ti, aunque no te guste, aunque, aunque, aunque… No puedo dejar de amarte y usted no me deja otro remedio que afrontar la realidad y dejar de vivir en una fantasía. Por favor, se lo suplico con todo lo que hay en mi que aún late. Se lo pido, déjeme ir, olvide su guitarra, olvide la foto de nosotros, el anillo de nuestra boda, el perro que rescatamos, la pintura en la pared de nuestras habitaciones, las citas, los lugares a donde vamos, nuestras manos sudadas cuando caminamos juntos, la forma en que yo te escucho y te entiendo y la forma en que me abrazas, olvide las promesas que hicimos, las veces que sonreímos juntos, el helado que comimos, los lugares que visitamos cuando no íbamos a estudiar, las peleas con tu hermana, las veces que hicimos papitas en mi casa, olvide cuantas veces nos besamos o nos mordimos, olvide que yo la amo y que de amarla moriré por tanta soledad. Por favor, deje de pedirme que este a su lado por momentos porque no soy capaz de seguir respirando si todo mi amor se pierde todo el tiempo que no estas. Por favor, olvídese de mi, porque comienzo a perder la cordura de las veces que te he extrañado hasta llorar… O por favor, si la primera opción no le agrada por completo, porque es la que yo más odio. le suplico, le imploro, que me de una oportunidad para enamorarla, para poder entregarle todo este dolor al demonio y tomar su mano para ir a algún lugar donde solo estemos tu y yo. No me ame si no puede, si no quiere, sea como le plazca, sea fría y odiosa si eso le hace sentir mejor, pero, no me aparte de su lado, no se vaya por más de dos días sin decirme que volverás. No me haga sentir abandonado, no deje de escribirme y si lo hace pues hágame lo saber. Converse conmigo, invíteme a salir, acepte o niegue cuando yo lo haga porque me siento mal cuando no respondes. Por favor, elija ya de una bendita vez, ya basta de estar distanciadamente juntos o lejanamente cerca. Ya basta de vernos un día y pensarnos treinta. Por favor, no me haga sufrir más de lo necesario… Dígame que siente, que piensa, confíe en mi, que yo siempre soy el primero en abrirse ante ti. Explíqueme lo que no entiendo, sea honesta, exprese su lado desagradable si es necesario, no me importa, eres tan bella cuando estas seria que cuando sonríes. No sé que más escribir, convencerte no puedo, explicarte ya no soy capaz de más. Sólo quiero que elija, que me deje en paz o me de un milagro para ser más feliz que nunca. No prometo nada, sólo intento de todo… Me voy a dormir, estoy exhausto… Lo hice, porque todo lo que hemos vivido merece un poco de reconocimiento, y además, ya no tengo nada que perder. Que descanses. -Muy bien. Esto es una mierda, y creo que no me hace falta mencionarlo. Yo te conocí en una etapa asquerosa de mi vida. Era una inmadura niñita deprimida y sin rumbos. Y tú, exactamente la misma mierda. Jamás fuimos una buena mezcla, ambos somos conocedores de eso. Sin embargo nos arriesgamos, e intentamos tirarnos del borde de un acantilado y quedar con piernas y todo perfecto. Nos equivocamos. Sólo tenemos el sentimiento frustrado de querer ser aceptados, de querer que alguien nos comprenda, nos quiera. No encajamos, yo no me amaba, y tú tampoco a ti mismo. Tratamos de llenar algo desde afuera, cuando debe primero ser al contrario. Yo te he dado los mejores años de mi vida, y para ese entonces, te di lo mejor que yo tenía para dar. Te permitía entrar a mi vida cuándo se te daba la gana, porque, maldita sea, te amo. Tú me has dado lo mejor de ti, y sobre todo, me has dado tu tiempo. Pero a veces no sé qué pasa por tu mente. ¿Crees que es tan fácil simplemente escribir todo lo que pasó hace mucho tiempo para que yo pueda ponerme blanda contigo? Lo que ahora me escribes, debiste haberlo hecho hace mucho tiempo. Cuándo necesitaba desesperada mente mirarte a los ojos y que me dijeras que todo estaría bien. ¿Para qué ahora? Esto sólo se trata de sentimientos que no sabemos manejar. Y aunque haya pasado mucho tiempo después de todo lo que ha sucedido, está en mi poder, conocimiento y madurez actual, de que yo te amo. Te amo cómo jamás he amado a nadie en este mundo de mierda. Te amo por encima de mi, por encima de cualquier pero y cualquier babosada. Te amo. ¿Para qué quisieras enamorarme? Siempre te he amado. Debes de estar enojado hasta la madre, y te preguntas, ¿Qué mierda pasa contigo Natalia? Primero me dices que no me amas, y ahora que sí. Lo sé, y te entiendo, tienes todo el maldito derecho. Quiero que sepas que aunque te ame, yo no quiero estar contigo. Hablas de ti, como todo un mártir con toda ésta mierda, y es como si el mundo estuviera todo sobre tus hombros. Hablas del daño que te produce nuestra distancia, hablas poética mente de nosotros y ésta tragedia de mierda. No estás sólo. A mí también me agobias. Me produce agonía y abstinencia no verte, no tocarte, no abrazarte, no escribirte, no irte a buscar, no besarte por miedo a querer hacerlo siempre. Pienso en usted tanto cómo pienso en mí. Y aunque las cosas hayan cambiado, mis sentimientos siguen intactos, pero no quiero estar con usted. No he tenido relaciones exitosas, no he podido ni siquiera besar a nadie. Porqué pensar en usted me agobia. Te tengo presente todo el tiempo en mi maldita vida. Pero no quiero estar con usted. Hay personas que nacen para amarse, más no para estar juntas. Y aunque esto nos afecte, tanto a vos cómo a mí, es nuestra situación, lo que tenemos que pasar, y no hay más. También quiero que recuerdes, que todo el tiempo que hemos pasado juntos desde entonces, ha marcado mi vida. Que me vuelvo loca a veces, porqué… Bueno, ya lo he sido siempre. Y que te amo, con el alma porqué es infinita, y con la carne, porqué te amo aquí en lo físico y terrenal, y siempre será así. Con esto quiero pasar desapercibida, decirte que necesito mi guitarra, porqué esa cosa no la puedo abandonar, y si quieres la dejas ésta madrugada en la puerta de mi casa si no quieres verme. No me importa. Que ésta vez, sea definitivo, que nuestras vidas no se crucen. Gracias por tu tiempo, Adrián, gracias por todo. Ya nos curaremos. Ily. -Fascinante, por fin una respuesta. Es lo mejor que podíamos hacer; despedirnos de buena manera. Ahora te llevo la guitarra, ojalá estés en casa para poder intercambiar.
Siempre busqué la manera de ver una realidad más agradable, más bonita, más cómoda. Entendí que a veces lo que no queremos ver es lo único que existe. Sin embargo, aún soy un niño que busca sus juguetes debajo la cama. Por lo tanto, cerrar los ojos para soñar no es algo que se separe de la vida, de mi vida.
Cae la noche, silenciosa, me acusa de exagerado, de imprudente por proclamar su nombre en todas las direcciones siempre que vivo el amor. El amor… Es tan luna que ilumina, pero otras noches es tan espada que apunta a las estrellas lejanas y solitarias, brillantes pero que se sumergen en el olvido pues todas se parecen. La noche, su frío, tan acogedor al comienzo y tan delirante después de un rato. El amor, tan noche, tan lindo, tan incierto, tan corto. Pues la noche acaba y sólo queda esperar a su regreso…
Te ves… Fabulosa. No me sonría así señorita, porque se me contagia. Y ya conoce usted lo fácil que con un beso puedo cambiarle el color a esas mejillas, así que no me provoque porque se arrepentirá de extrañar el cielo al que la llevaré esta noche, ese mismo lugar al que usted me lleva siempre que me abraza por la espalda.
El camino se me hace corto cuando nos reímos, todo tiene sentido…
Siempre seré cursi y trágico, para qué vivir de otra forma. Honestamente pienso que pierde el sentido no subir todos los peldaños, no aceptar todas las oportunidades, no lanzarse al mar para aprender a nadar… Hoy, como ayer, siento el dolor del tiempo y su incesante vacío. Sin embargo, él llega como un amigo pues sabe que yo, si pudiera, dejaría mi carne, mis huesos, hasta el alma misma por respirar una verdadera aventura. Y que a día de hoy, me preceden locuras vividas nunca imaginadas, que me hacen creer, que la muerte sólo es el comienzo, y que mis lágrimas son dignas de una gran, gran historia.
Llora conmigo, y honra las veces que disfrutamos las tonterías que surgían por el camino que con tanto placer nos dejo atravesar los malos ratos.
-Puede besar a la novia. -Padre, si pudiera le enseñaría como nuestra raza prosperó tan eficazmente, pero la tonta moral lo impide, es una lástima, justo anoche estaba leyendo el libro de las cien y un posiciones. De verdad, cuando salga de aquí con ella, olvidaré que Dios nos puede estar viendo. ¿Besar la? eso será sólo el título de la canción padre.
El mundo como tal. Ahora comprendo por que la humanidad a prevalecido tan eficazmente a pesar de toda su incompetencia como ser. Estaba llevando un poco mi curiosidad al orgasmo, y me dio por registrar las zonas o lugares que he visitado, como sorpresa obvia, resultó ser una pequeña, muy diminuta fracción de tierra en un país, y éste a su vez en una masa de roca espacial. Si catalogo la experiencia obtenida; está reducida a un porcentaje microscópico. Añadiendo la conciencia global de toda la historia humana; ya me quedé sin metáforas. Y comprendiendo lo basto que puede llegar a ser el mundo que hay fuera de este mundo… Puedo asegurar que no tengo nombre para otorgarme, un nombre sería un insulto, ¿Adrian? ¿por qué Adrían? ¿qué ha hecho o que sabe para ser Adrian? He aquí la conclusión: Estoy reducido a la mera nada, a la existencia ajena del mundo de verdad. En otras palabras, no tengo, ni punta idea de nada. No me sorprende que el barbado Aristóteles, tan pensador y lúcido en una sociedad de tontos haya pronunciado tan semejante oración. Entonces es como si nadie supiera nada; se inventan una ciencia que determina causas y efectos, se crean una religión para dar significado, luego se desarrolla un sistema de moral, o mejor llamada «actos de vergüenza que se penalizan severamente» para que la gente sea buena y no cree problemas. Luego se les enseña a los niños a leer y a escribir y básicamente a seguir órdenes para luego una vez que sean adultos incitarlos a trabajar en conjunto, para hacer más ricos a los ricos y más pobres a los pobres o viceversa. Modas, comidas, circos, y no sé cuanto más y todo, definitivamente, para nada… El hombre que en éste caso no es hombre sino uno más, se da a la tarea de encajar porque debe sobrevivir. ¿¡Qué divertido es salir sin ropa los sábados por la tarde no!? Pues no. Se inventó una ley que exige «comportamiento adecuado» en todos los seres «pensantes» ¿Pensantes?… Cuando me refiero a la humanidad como conjunto de especie o raza o creación divina no veo más que monos rascando se el trasero pero con estilo. Yo lo hago todos los días por la mañana; es increíble. ¿En qué momento somos, lo que somos? Hay que ser realista, tengo 17 años y me siento de 3 y estoy presumiendo, y seguro cuando tenga 300 seré menos gracioso, más objetivo pero me sentiré de 1. Por lo que voy a la pregunta más clara, sencilla, pero desagradablemente inconclusa: ¿A dónde va la vida? Me refiero, a dónde se encamina, continúa, se expresa, se desarrolla, se motiva para seguir existiendo en la inmensa inmensidad. ¿El conocimiento? Pues tenemos algunas áreas de aprendizaje pero es muy lento y es tan rara vez que alguien hace algo por su cuenta que cuando lo hace lo colocan en un billete o en una estatua para recordar a la siguiente generación quien descubrió otro continente, o expresión matemática, o universos paralelos, o facebook, que, bueno, es como mi diario, escribo tanta mierda que ya se me olvida ir al baño. El punto, es que aunque la tecnología sea sorprendente y los avances parezcan tener beneficios provechosos yo no me dejo de sentir como si viviese en el antiguo Egipto, es más, cuando los carros estén flotando por encima de mi apartamento para llevarme al trabajo yo no olvidaré verme como un hombre que lleva un cajón con rueditas atado a un burro. Me encantaría ver como se cumple ese sueño en el cual las personas muy contentas buscan crecer y aprender por el bien de si mismos y sus hermanos de misma y distinta especie. Pero debo ser honesto, esa mierda la soñé… Muy profundamente mientras dormía, porque a todos les vale, y la razón, el motivo por el cual «parecen pensar» (parecen) es porque van a morir. Vamos a morir y entonces ves como tu padre después de tanto sacrificio en hacer una linda casa se muere, se descompone, se pudre, se lo comen los gusanos de los feo que está y en sus manos no hay más que tierra. ¿Y la casa? Pues la casa se la quedó el gobierno debido a una hipoteca demasiado alta como para des-endeudarse. ¿Entonces que te llevas? Justo ahí está el chiste… Mis conocimientos de illuminati hijo de puta es que voy a otros planos y existencia donde el tiempo es una irrelevancia, para darme cuenta que en la vida fui rencoroso con mi madre y por lo tanto debo re-encarnar para tener una esposa hija de puta que me ve a torturar hasta el punto en que yo comprenda que con el karma no se juega y pues debo tratar bien a los otros. Pero eso por más que me guste no me lo puedo tragar… Si, me gustaría manosear de nuevo a mi esposa «habla mi yo del futuro» pero no lo he comprobado y eso significa que no es más que una forma de expresión de la vida que merita de fe. Y la fe… Bueno. No es que sea lo más preciso del mundo. Tengo como muchas personas en mi posesión mental algunas significativas resoluciones del destino. A veces pienso en como me estoy derritiendo indefinidamente en el infierno por insultar a Dios una vez, le dije; hijo de perra, ¿por qué no me trajiste mi bici? Luego pensé que era Santa el que se encargaba de esas cosas y se me olvido, pero ahí está el dilema. También, mientras lloraba le supliqué a Dios que me trajese el cabello de esa mujer hasta mis narices para volver a ser feliz, pero, a la mierda, a día de hoy le llevo flores a la tumba de la hija de puta porque es una de las formas más bonitas que ha tenido la vida para hacerme feliz, no puedo negar lo, mi vida es una mierda desde que no está, pero me las arreglo para no estar cortando me las venas en la bañera «que no tengo». En fin. El conocimiento a parte de indefinible, siempre será una referencia a lo experimental, lo otro es simplemente superstición y creencia. Por lo que yo concluyo que a día de hoy las formas comprensibles de educación son relativamente infantiles, aburren. No sólo por el hecho de que voy a morir; me da pereza aprender, sino que también incide la limitada historia del saber. Me siento, como un perro persiguiendo su propia cola, encarcelado en una parcela de césped y yo insisto en lamer mi trasero. Justo, justo así. Y más allá de la cerca eléctrica hay lagos y montañas pero, no puedo pasar. Y ese mismo perro es la humanidad. Ni me imagino que pueden hacer con más conocimiento… A día de hoy, se saben hacer tornillos y ya se andan amenazando con bombas los señores esos que gobiernan… Que gobiernan… ¿Quién tuvo la buena idea de dejar que alguien lidere el rumbo de su vida? Es que sinceramente, ni sé como hemos sobrevivido a pesar de tanta insensatez. A decir verdad, si los milagros existen, admiro la forma en que los Dioses cruzaron sus rayitos super poderosos y nos salvaron del egoísmo e insensibilidad del ser humano. Entonces. Si el saber y la cultura histórica no son lo suficiente para yo ir a dormir satisfecho sin tener que escribir unos cuantos renglones para desahogarme, la verdad, no sé que lo sea. ¿El amor? No quiero ser pesimista ni presumido, bueno, presumido si, pero me duele ser tan realista. El amor… Nadie tiene ni puta idea de lo que es. Así de sencillo. Yo puedo acercarme a una idea de entrega y compañía y confianza y todos los sinónimos que se te ocurran pero, aunque sea muy bueno amando, no tengo la capacidad, bueno, si la tengo, para que mentir, soy el puto amo. El problema es que esta habilidad de entregar el corazón es muy complicado una vez que se deja de ser un ingenuo y se adentra en el profundo abismo de la desconfianza. ¿La desconfianza? Efectivamente, pues como no se nace sabiendo «el pecado como dicen los teólogos» cada persona está obligada al horror de la incertidumbre, y en otras palabras, puedes romperte todos los huesos del cuerpo intentando amar, por el mismo motivo; nadie sabe que carajos significa, y si sabe, debe ser como yo, que se caga vivo al pensar en una posibilidad de romance, ya hasta se mete debajo de cuarenta sábanas del terror que da esa mierda, porque si que te deja vacío. Y vacío porque amar dando exclusivamente un pedacito de tiempo y de vida es como nunca haber amado. Los mayores poetas me entenderán. Y si se llega a amar efectivamente, luego de un historial de tragedias, pues tengo la completa certeza de que regresas al mismo punto: Ni puta idea de a dónde va la vida. Y como te encuentras cerca de un ser semejantemente ignorante a ti, pues, no hay de otra que perseguirle la cola a ella y ella a ti. O en otras palabras, tener sexo hasta que comience la osteoporosis… Es trágico, la vida misma se estanca, pero no se estanca ya que aunque a mi no me lo parezca, la vida continúa avanzando lentamente como un arroyo sin gravedad; no sé ve pero se mueve. Los edificios cada vez más altos, los vehículos más limpios y ostentosos y las casas más blancas y transparentes… Sencillamente, ni la imaginación ni el miedo a la muerte superan las ganas de saberlo, esa pregunta con la que inicie y terminé la historia de entre muchas más. Algún día lo sabré, a lo mejor se me olvide después de tener canas hasta en los dedos, pero bueno, ahí está, el mayor misterio y la gran razón que ha llevado al hombre a no ser tan animal. Aunque a veces pienso que un gorila y un político no tienen mayor diferencia, excepto que un gorila si pudiera daría la vida intentando proteger a su manada, por lo cual es más considerado. Pero bueno, la vida no es perfecta, y eso hace que tenga más ganas de decirlo: ¿A dónde irá la vida?… ¿Qué es, la vida? ¿hm…? …
El destino te guiará indefinidamente por un camino que ya no recuerdas pero que tú escogiste. Agárrate bien los huevos, porque el propósito es que seas más fuerte.
Incierta es la vida, la vida porque la muerte es una seguridad. No sé si con los años me hago más listo o más tonto. No sé cual creencia tomar y masticar como una manzana, de esas rojas color sangre seca, esas que parece que comienzan a podrirse. ¿Qué es el saber? Es sólo una mezcla de cosas en continuo cambio y pérdida de ambigüedades, al mismo tiempo, suplantadas por términos más seguros y objetivos. Así me siento; obsoleto, inútil, desperdiciado pero también olvidado. Tal vez éste mundo no era para mi, o tal vez yo no era para este mundo… Intenta dormir sin almohada, es difícil pero te hace tener los pies a la altura de la cabeza; o las decisiones en común acuerdo con el pensamiento. O la vida, sin cuentos para hacerla más previsible.
Ya hubiese muerto, yo se los aseguro, que de no ser por la agradable capacidad que tengo para soñar y sentir, desde hace rato el polvo me estaría ensuciando la barba.
¡Sufre Gusano! Ahorca te, a no, no puedes, no tienes ni una puta cabeza, todo de ti es una masa desagradable llena de patas peludas y pequeñas que se arrastran como una babosa, pero hasta las babosas tienen mayor honor que tú, ya que ella no tenia la posibilidad de ser mariposa, tú si, y aún así prefieres dolerte de tu infortunio. Insensato…
¿Has soñado despierto? Es como fumar después del sexo… No será el tiempo tan fuerte, ni las experiencias mejores de lo que he vivido a tu lado. Ni sé en que lugar del universo estás, por ahí, seguramente. Pero yo si sé donde estoy, y pasarán años y nunca perderé el sabor de amarte. Cada noche, antes de dormir, recuerdo lo único que me ha mantenido con vida. Recuerdo lugares que nunca existieron con momentos que nunca llegarán, y todo, contigo, con tus manos, tus dientes, tus, tus, tus, tus… y todo, así toda la noche, así todos los días, y por cada vez que me hago mayor y menos joven, mi recuerdo se hace más claro, y tú y todo de ti me mira, como yo te miro… Ya no estoy enamorado, ya he superado la palabra misma del sentimiento, porque sin verte te siento y sin sentirte te observo todas las veces antes de dormir. ¿Será eso soñar? ¿Será eso amar? ¿Será eso… Ser feliz? Sin duda alguna, para esto he respirado por tanto tiempo; para superar la vida, superar el amor, superar el Segundo provisorio de la existencia, superar incluso la misma muerte y el comienzo de mi final. Todo para encontrarte a ti, y entender que el cielo no es un límite. Que Dios conoce lo inconforme que estoy con su paraíso. Que no me basta con tener te a mi lado, que aún así exprimo cada parte de mi en el intento de hacerte más mía, más para mi, y que juntos veamos el mundo que tan fascinante he creado en mi soledad, ahí donde tu gobiernas y te impones por sobre toda la creación… Ahí, donde la realidad es el sueño, y mi sueño eres tú.
Despertame, abrime los ojos, permite que este niño sienta el dulce de tus manos, y luego, cerrame los párpados, deja que regrese a mis sueños, permite que recupere la imagen perfecta de nosotros en el alta mar, en las olas ondulantes del destino, en el agua azul de la vida, esa que cuando la tomas pierde su color; como tú… Déjame verte pero no por mucho porque puedo perderte. Déjame amarte, por instantes, porque eso hace la eternidad.
El abuelo sabe que eres tan joven como te sientes
¡Lo hemos logrado Jhony! mira nada más cuanto texto, detalla esa basta recopilación de ingenio. No pensé que sería tan bueno haciendo esto; eso de conversar con los recuerdos y hablar con las manos. Ya casi el libro está completo, ni me imagino como se me ablandara el corazón cuando lo lea en 40 años. Lo bueno, es que si estoy triste ya se a donde ir para dejarme caer y reposar en esas almohadas de la escritura.
La muerte, la vida… Da igual, estoy suspendido en la nada, me muero sin acabar, y vivo sin respirar. Si ella supiera que muero, lenta y dolorosamente me desmorono de desdicha por ella, y lo peor es que no lo sabe. Y mi piel cae a pedazos como mi corazón, mi alma ya no la siento porque me congelo, desde que ella no está mi sangre es fría. A veces me muevo en mis sueños, pesadillas inconscientes, dolores profundos. En ella están mis brazos, los dejé la última vez que nos abrazamos. En ella quedaron mis labios, mi lengua, y ya no tengo voz para pronunciar algo que no sea su nombre, sagrado nombre que me dio de beber cuando estaba por morir, el mismo, que quedó suspendido en el vacío de mi existencia cuando se fue, el mismo que hoy me mata, que me hace un hombre, un viejo, un pobre anciano sin fuerza ni esperanza, que sabe que sobreviene el polvo pero la angustia es la espera que se hace eterna. Ella era mi hogar, mi fogata, mi comida y mi cama, hasta las prendas que usaba tenían su olor, y ahora, estoy desnudo en invierno, estoy cansado de caminar en círculos y las montañas se hacen más y más empinadas. No hay sol, no hay nubes, tampoco estrellas, sólo hay nieve; polvo blanco que no tiene fondo, que se traga mis pies y me deja inmóvil. Sin ella, esta aventura se convierte en una tragedia, en una película de horror donde se sabe que todos morirán, pero no si antes sufrir mucho. ¿Qué haré? El mundo es una pobre fantasía, y ella es la única realidad.
Era divertido en un principio, pero cuando creces, inevitablemente te haces más débil, más vulnerable. El mundo no es un jardín bonito, y las personas no tienen eso que los libros de poesía guardan en su interior, el mundo es como es; vacío, hueco, muerto, solitario, porque el mundo es sólo mi perspectiva. Y el mundo me ha enseñado que tener buen corazón es inútil, qué sostener la moral en una gráfica de burlas es contraproducente, que ser prudente donde prevalece la espontaneidad es una pérdida de tiempo. Y en definidas razones, ser quien quieres ser es un sacrificio… El mundo… Te motiva a ser tonto, a aceptar que se debe ser duro, a no mostrar las lágrimas para evitar perder el orgullo, a no intentar para no caer en vergüenza, a vivir sin saltar y sin hacerse el estúpido de vez en cuando porque el mundo necesita robots, máquinas sin alma que se rijan de seriedad y orden. La libertad es otra cosa, la libertad es expresar todo sin depender de nada y yo… Yo me he encadenado al pasado, he puesto el curso de mi destino en un circulo que no lleva a ningún lado, yo mismo me asesiné. Por lo que, si no soy la respuesta a las incógnitas más íntimas de la vida, tampoco seré la solución de alguien, sino, que estaré contagiando mi peste, mi mal sentido, mi pésima forma de existir a aquellos que como yo estuvieron buscando un futuro. Y entonces… Inevitablemente me convertiré en los que aniquilaron la bondad y la justicia, el amor y la paz, y finalmente, perderé el sentido mismo de mi pensamiento, y caminaré a todos los lugares a los que juré jamás regresar. Tengo miedo, de la vida misma, y por ello, por soportar el silencio y el ruido de las mentes vacías, me he convertido en un cobarde que corre asustado de todo, hasta de si mismo. Ahora, es tiempo de esperar los inviernos, mi nombre jamás se pronunció, ni se tendrá firma de él, mi voz viajó alguna vez como un murmullo, y mi amor, fue olvidado como todos los pasos que di en algún momento. Ahora dejaré que el polvo caiga sobre mi… Y como las nubes, volveré, no como antes, pero volveré, y si no regreso, si el cielo no tiene certeza de mi nuevo nacimiento, entonces estaré en otro lugar que sin piedad alguna me mostrara lo que jamás podre concebir: a mi mismo. Era divertido en un principio, pero cuando creces, de das cuenta de lo aburrido que es vivir rodeado de vacíos efímeros, y complementos invisibles.
Debía hacerlo, no toleraba la sensación que produce el que todo el mundo pueda juzgarme, nombrar mis letras, que horror. Sé que nadie me lee pero se puede y no quiero, me da nauseas saber que la gente puede burlarse de toda esa maravilla que he creado. Por lo que ahora vivo solitario y reservado, eso, me da seguridad. La escritura es un amigo, no un sentimiento de terror.
¿Cuál es el precio a pagar por circunstancias que desconozco? ¿Por qué debo sufrir esta condena? ¿No he sido yo lo suficientemente bueno? Es absurdo… No hay piedad alguna, no hay forma mínima de comprensión por parte del destino. ¡Y es qué quiero quejarme! Aunque ya no lo necesito. Es que es injusto; no tendría que acostumbrarme a soñar con ella y vivir solo. No tendría por qué sentir que vuelve, y cuando no hay nadie a mi lado, caigo en el abismo de mi decepción… ¿Por qué la ame en primer lugar? Qué necesidad tenía yo de confiar y entregar y compartir y, y, y, y sentir. Sentir, porque a pesar de nuestra gran distancia la siento, aquí a mi lado, pero más que eso; la siento cuando me siento. ¿De verdad la vida tenía que quitarme la? Yo era tan feliz, no veo por qué, no entiendo nada, no sé para qué vivir con este fuego en el alma y ese agua de su ausencia. Y sólo queda el humo gris que rodea mi vista… Ya no hay nada, no veo nada. Una burbuja de historias y sonrisas me encarceló cuando desperté un día y ella no estaba. Un dolor se quedó conmigo para ocupar el espacio que ella dejó, y como un perro yo lo alimenté y lo acaricié. Al menos mi pequeño dolor crece y a medida que lo hace me cuida, me protege, evita que yo sostenga de nuevo el valor suficiente para ir en busca de otra aventura que, a decir verdad, ya nada podré hacer con ella. Ya nada me queda para dar ni tengo espacio para recibir: Todo se lo entregué y todo de mi abraza la memoria a su alrededor. Mi dolor me cuida, mis recuerdos me mantienen vivo, mi amor alimenta mi pena y así en un círculo a mi alrededor del cual no puedo ni quiero salir, yo mismo lo dibujé, yo mismo coloqué mis pies en el centro, pues ese lugar evita que yo me vuelva loco todos los días. En lo que pienso, es en por qué de estos extremos, para qué debía yo encerrarme en mi propio pasado. Porque a decir verdad, el presente y el futuro me aterrorizan, me revuelven el estómago como si fuese vértigo. No puedo soportarlo, no puedo imaginar la idea de tener un vida, larga, complicada y feliz sin ella… La vida misma me hace pequeño ante su inevitable incertidumbre. La suerte, como representante del destino. Y así no se vive, porque si yo me he repetido algo: ha sido la sufrida forma en que la muy buena suerte me ha atrapado, me ha consumido y yo sin alternativas me dejé llevar por ella, y por eso hoy lloro, lloro y me repito; ojala no hubiese tenido tanta suerte y haber podido conocer una chica mejor increíble, menos fantástica, que al mirarla no se me aguaran los ojos por ver los suyos que se iluminan y dejan brillo en las paredes de su habitación, que al besar la no sintiese la forma en que un pedazo de mi alma regresa a mi, y que al tocar la, no pudiese evitar las ganas de jamás quitar mi piel de la suya. Ojalá no hubiese tenido tanta suerte, de conocerla… Eso me repito, a menudo, constantemente: ¿Para qué la vida me muestra sus paraísos para luego dejarme en un desierto? Pero no hay respuesta alguna, sólo estoy yo y mi camino, mi consciencia que me repite que debo dejar que todo se disipe como la niebla. Pero no puedo hacer nada, mi amor es más grande que mis sentidos, y mi sufrimiento jamás podrá ser más fuerte que todos mis recuerdos a su lado. Por lo que, ahora sólo queda caminar a la deriva, en un lago de pensamientos yo puedo beber, y en una tierra árida y sin color yo proseguiré el paso. Mientras respiro por este callejón del tiempo.
No sé que busco cuando camino, seguramente el arte de vivir conlleva un poco de dolor. Porque eso de subir montañas todas las semanas se está convirtiendo en más que una necesidad; es como dormir; no estás bien hasta que lo haces.
¿Entonces? ¿Qué tengo que sufrir a lo estúpido por ella? ¡Bien! No hay nada más satisfactorio que saber que el amor de mi vida tiene sexo todos los fines de semana con personas distintas ¡fantástico! me evita el esfuerzo a mí de verla sonreír. Ojalá se la coman como Dios mando a Adán cuando le dijo que poblara la tierra. Que se lo hagan tan bien que se aburra y tenga que hacer tríos para sentir algo. Ojalá la hagan gritar de placer, que su orgasmo haga que le tiemblen las piernas ¡Ojala! Y esté disfrutando su vida, porque yo aquí masturbando me solo en mi habitación con una foto suya la verdad me hace sentir bastante desgraciado.
Nada como jugar minecraft después de un duro día de trabajo, extrañar a Camila, recordar los besos de Mafe, sentir como Natalia hace el amor con Dios sabe quien, escuchar música de esa que te enciende como el café y tomar chocolate caliente mientras ves como los cimientos de la futura super casa tienen un esplendido futuro. La vida; lo único que la hace llevadera es que es una mierda, pero no siempre.
Hay hombres, que como yo eligieron el largo y silencioso camino de guardar el recuerdo de una mujer maravillosa. Entonces, me parece bien, que mis semejantes sostengan luto, aunque no puedo evitar algo de celos. Es lo que hay: Ella simplemente es asombrosa… Y no me sorprende que muchos hagan lo mismo que yo: Amarle hasta morir, y luego, flotar en el vacío existencial con el sabor de su sonrisa y el calor de sus labios. Supongo, que como yo, ellos tuvieron la buena suerte de conocerle, pero a día de hoy; ningún mortal en esta sección del universo ha podido trascender esa dulce capa del romance, y continuar con vida. Por lo que ella sostiene la mirada en cielos más blancos y tierras más firmes, algo, que un hombre enamorado jamás podrá ofrecer. Y como sé que ella prefiere su soledad a compartir la vida con mortales como nosotros, pues de seguro tendré que soportar la idea de que como yo; muchos habrán de bajar sus cabezas al final de la noche, tomar su sombrero y chamarra, y finalmente marchar en un peregrinaje de lamento y pesar, pues una vez que tocas a esa mujer; aunque sea parcialmente, pierdes completamente el tacto para hacerlo con otra reina que no posea tan encumbrados horizontes y bellos atardeceres.
Estaba escuchando música, acostado en mi cama… La sentí, como cuando estás cansado y el viento te refresca y das una bocanada de aire. La sentí, y las puntas de mis dedos se helaron, mi corazón no sabía que hacer; si latir más rápido o más débil. La sentí y sentí el mundo mismo devorando mi alma.
Te soñé… Y he despertado perdido, atontado; como si se tratara de un regreso, como si hubiese ido a un lugar recóndito y muy distante donde se escucha tu amor como la música que tanto te gusta. En el sueño te toco y te beso y te miro y se siente tan suave, tan dulce, tan placentero… Sé que era un sueño, y sin embargo te abracé más fuerte mientras me repetía: por fin estás aquí, por fin, por fin, puedo decir cuanto te he esperado. Luego me desperté y volteo el corazón a un costado de la cama, pensando, en dónde estarás, que harás, porque si para mi fuese la pregunta; no dudaría en escribirlo: que hasta en mis sueños apareces tú para salvarme la vida.
Nada importa. Un silencio me rodea, el nombre tuyo rompe el instante en un profundo recuerdo. Mi memoria; converso con mis historias, les hablo de ti, de cuando me viste y te sonrojaste, les hablo y ellas me hablan y juntos mis recuerdos y yo nos enamoramos otra vez de ti. Porque vivir sin ti es una comedia sin risa, y amarte es el único progreso del cual soy participe. ¿No será el tiempo y la muerte demasiado viejos para acabar con tal sentimiento? Ese que creció contigo…
Parece que mi inclinación a escribir es más propensa a repetirse al terminar un sueño del cual he sentido un trozo de mi en algún lugar donde lo habré dejado. Y regresa, para que yo no le olvide… Dayana, que lindo nombre, fue, la única amiga que tuve. No evite enamorarme de ella pero era tan fría que jamás me prestó su atención. Su sonrisa; de alguna manera yo siempre conseguía su sonrisa, y ella mi compañía, tan solo, nunca tuve a alguien para evitar sentir el paso del tiempo, pero ella, fue quien recorrió el camino aburridor del colegio a mi lado y me hizo sentir; escasamente valorado, y hasta entonces sólo podía ser un hombre invisible. Me acuerdo, que siempre tenía las manos frías y yo con la excusa de calentarlas pasaba mis dedos por cada centímetro de su piel blanca e indiferente, era la única forma de estar con ella, así la abrazaba, la besaba, le invitaba a hacer el amor con: «Que manos tan frías, préstame las.» Y así todo el tiempo, mirando cuidadosamente como es una mujer bella, sonriente, tranquila, tan lista como yo o incluso más, pero, completamente incapaz de verme a mí, como yo cuando la conocí… Ella fue la única persona que puedo recordar que estuvo ahí a mi lado todo el tiempo, además de brindarme una maravillosa compañía: Estuvo en mi boda, ella vio como me arrodille para mostrarle el anillo a Natalia. Ella me miró con consuelo la vez que jugamos con Mafe al baloncesto y por poco me da un paro al corazón: y no era por el juego tan dinámico que yo sentía el vapor del fuego que arde en mi pecho; vapor, porque me dolía ver todo cuanto amo tan cerca de mí. Ella sonrió la vez que Camila estuvo conmigo y le pidió a ella un momento para besarme… Ese día ella nos había invitado a un gran helado, luego hubo lluvia, y la mejor parte fue cuando; refugiados en la puerta de una casa, coloqué mi brazo en la pierna de ella en vez de la de Camila, con la expresión de cansancio. Ella estuvo en cada historia, en cada momento de perfección, ella, tan amable pero tan fría, me dejó un olor que hasta hoy no he recordado, es eso que no supera el amor, pero aún así perdura en la memoria, es eso lo que las personas llaman, amistad…
Silencio…
En silencio me acuerdo de ti sin desesperanza, sueño con que, por casualidad pueda mirarte a los ojos y verme reflejado en tanta belleza.
No te he olvidado, no olvido nada de nosotros, y créeme que me alegra tenerte en mi mente cada segundo de lo que ahora es mi vida, una vida extrañando todo lo que disfruto mientras camino por encima de las hojas secas, haciendo ruido con mis pasos, rompiendo tan sagrado silencio que me otorgaste en tu partida… Pero ahora soy más feliz que tu, y es por que tengo la certeza de que he podido conocerte, y eso, eso es más que todo el amor que te guardo por si regresas, a prestarme un poco más de silencio.
Mientras más grande es nuestra ignorancia, más vemos los milagros como casualidades. – Alejandro Jodorowsky
El mundo sigue girando, y yo recuerdo más y mejor pero también comienzo a olvidar, y la muerte para mi es eso… Ya no siento lo mismo, hace tanto que regue la flor del amor. Seguramente porque comienza el invierno y el árbol del tiempo pierde sus hojas. Me imagino la primavera, tan linda, tan lluviosa, tan fresca; devolviendo me las historias, los momentos, los besos, los abrazos… Pero ahora hace frío, hay un viento que te empuja, que te corta el aire, que exprime la lucidez y me hace tonto, vacío… No recuerdo mi nombre, ni mi voz, ni quien soy. Lo único que sé es quien fui cuando estaba con ella: tan propio, tan fuerte, tan capaz. Ahora se expande una soledad a todo mi alrededor y no hay nada que hacer, ni lugar a donde ir, sólo puedo contar las piedras a mi paso, el aire que respiro. Ya no queda nada más que una historia que se repite todas las noches cuando cierro los ojos; la veo, las veo, me veo… ¿Qué es el mundo entonces? El amor es una efímera aventura de poder y alegrías, pero luego todo es gris y frío, las ganas arden y el silencio congela. Este mundo me ha convencido; no se creó para amar. A veces me pregunto ¿tan malo soy? ¿tan poco y tan insignificante? Porque la experiencia me lo enseña todo el tiempo…
Viejo, soñé con ella, por fin… Con Camila, soñé hasta su lunar en la barbilla, no sé por qué se lo quitó, era tan lindo, y sus orejas, redondas y pequeñas, aunque, no se si algún día le vi las orejas. El punto es que esta semana ha sido terrible para mi, y como siempre ella llega a salvarme. Hoy, hoy parece ser un bonito día, siempre es bonito con ella.
Me salí del colegio, a tomar por culo con el amor, la responsabilidad, y la enorme soledad, pero aunque al principio se sintió increíble, hoy me pregunto ¿valió la pena? Pues hasta el primer maldito segundo en que lo pensé. A la mierda con las fiestas esas donde había música de poco agrado para mí y tenía que esconderme para no estar tan cerca de todo ese corral de cerdos mirando como se estregan los genitales, lo peor; cuando tenía que sentarme horas en el suelo frío de un pasillo esperando a que me dejen salir para ir a casa, al carajo con las colectas de dinero para al final esperar a que sirvan un helado derritiéndose con sabor a la mitad de lo que di, o las veces en que no daba nada y me escondía en algún logar poco transitado porque estaban dado carne, o chorizo, o todo lo que se le relacione. Y esto me lleva a otra de las mas horribles: tener que llevar una puta bolsita donde depositar la carne del restaurante y ver como tengo cuido para gallinas con olor de pescado de ayer en mi morral perfumando cuadernos, lapiceros, y todo cuanto se le atraviese; sobre todo, la parte donde todos a mi alrededor abrían los ojos y me decían ¡¿Eres vegetariano?! Gilipollas… Tu madre es vegetariana, pero por respeto hacía una risita tonta. También se pueden joder los descansos, siempre me quedaba solo y sin nada que hacer, una vez tuve un amigo, pero me dio mucha, muchísima pereza estar a su lado, era genial pero… Y luego, cuando profesores pasaban a observar a un adolescente introvertido quedarse mirando el suelo, la pared y luego el suelo por veinte minutos, me saludaban y yo respondía porque de ellos dependen mis notas, pero que asco hablar con esos presuntuoso conocedores de alguna insignificante área que permitió al hombre no morir de forma tan estúpida; sólo son unos cerdos arrogantes y humillantes que buscan darnos su pobre concepción de la vida. También mientras me quedaba sentado, escuchaba a niñas susurrar después de verme, luego me tocaban el trasero, que nunca me molestó pero producía algo de incertidumbre su anonimato. Que terror, cuando me quedaba horas esperando a que la puta fila del restaurante de comida de mierda pero de la cual no puedo prescindir, mermase; ya que todos se comportan como perros buscando un hueso, y en la fila más que fila se ve una serpiente cayendo por un maldito precipicio mientras la descuartizan veinte osos recién salidos de ivernar. para que al final sólo quedase yo, y los profesores y su basto intelecto me dieran piedad y me dejasen pasar a ver como sirven toda esa porquería en el plato de porquería para luego irme a sentar en la mesa de porquería a querer ver a Natalia pero resistirme, porque la hija de puta se ve tan linda comiendo que se me cae la baba, la cuchara, las manos y la cabeza y luego; imposible recoger todo eso, terminar la porquería y prepararse para otras cinco horas de clase. Hasta cagando se debe ver hermosa… Y luego, llegar al salón a esperar al profesor que a veces no llega y sólo nos vamos a casa después de esperarlo un importante montón de horas. Pero a nadie le importa, nos tenemos que tragar las circunstancias como si fueran testículos de burro. Lo triste es que todos tienen amigos con los cuales pasar el rato como si fuera un festivo viendo televisión y comiendo pizza y yo, pues yo me jodo; todos, todos, tienen más grande una célula que su cerebro, así que poco me interesa encajar en el grupo de chicas bonitas que hacen sentir a otras feas para valer un poco y tipos que hacen caballitos en sus motocicletas y lanzan insultos como escupitajos a todo animal que no sea tan animal como ellos. Al final, ahora que lo pienso, no era la soledad lo más desquician te, sino la barbaridad de tiempo donde no se hace nada que yo no conozca, y si hacen algo nuevo como lo hacía la ballena, cerda, monstruo de la profesora de matemáticas; enseñaba tan mal, tan, mal, que ni atención le daba a la vieja esa, porque siempre quedaba con dudas y la hija de perra te respondía como si fueran el presidente de la nasa. Sinceramente, que puta basura de cárcel. El único momento bueno que tengo allá fue cuando me quedé jugando dragón city en la biblioteca, de resto, hasta puedo pensar que sólo a conseguido hacerme más imbécil.
Es que, a ver, ¿cómo que el amor no es la necesidad de apoyarse y presionar al otro a sujetarse justo como tú lo haces? ¿Desde cuando el sentimiento es tan pobre que puede asegurar «si te vas yo soy feliz, porque no te necesito para vivir» que mierda es esa? Porque, o que me parta un rayo por saber que nunca he conocido el amor, o aseguro firmemente que lo más poderoso que existe es lo mismo que te funde como si fueras fuego; una llama que necesita el oxígeno para existir. El amor es eso, calor, calor que arde, quema, enfurece, calma, el amor es una vela, un volcán, un aire que si no lo tienes: no puedes vivir. El amor se va y no sólo te destruye, te mata, y luego, te revive para que veas lo aburrido y horrible que es vivir sin nada, sin absolutamente nada, pues el amor es un huracán que viaja y arrasa con todo a su maldito paso. Si esos que aseguran las preguntas principales dicen amar, no sé en que mundo de mierda tienen que vivir. Porque sin duda alguna; el amor, ese que construyes y también el que aparece de la nada, ese que es de verdad; te revuelve las tripas, las venas, el tiempo, la vida, los sueños: te revienta, te desarma. Y de eso, jamás volverás a caminar de la misma forma, si es que logras levantarte. Algo que no sea lo que he mencionado, de seguro es el amor más mediocre y pobre, a parte de in-sustancioso que puede llegar a existir. En otras palabras; si no has querido arrancarte de un tirón las cejas antes de cortarte las putas muñecas, he de decir que jamás has amado en tu puta vida. El amor es un maldito infierno, quien salga de él vivo, seguro estaba jugando con un cigarrillo.
Es que amo a esa mocosa de pelo amarillo, es preciosa la hija puta. Seguro la parió Dios, joder…
-¿Si pudieras darle un consejo, cuál sería? -No les hablaría, los escucharía. Porque eso fue lo que nunca nadie hizo.-Marilyn Manson.
Pensando… Tal vez la llegué a querer mucho pero mal, es, una pena no nacer sabiendo la importancia que es hacer de una eternidad un buen vivir. Porque el amor; si es real, jamás se irá. Y todas nuestras discusiones se quedarán conmigo. Quisiera haber sido más amable, pero bueno, siempre quise verte sonreír. Bien, seguiré, no por mí, no por ellos, sino para imaginar te. Ese es el único motivo que me alienta a desayunar todos los días.
No comprendo como puede un tío escribir semejantes cartas… no entiendo la mentalidad que se esconde tras ellas… es una forma de masturbación… -Trópico de Cáncer.
Soñé con Mafe… Fue hace tanto. En su momento lo escribí, fue fascinante, tan detallado, tan preciso. Pero aquella historia se ha perdido, así que busco hacerla de nuevo, puede que ésta sea más melódica; como a ella le gusta. El sueño es algo extraño: Estoy sentado, yo soy quien manda, yo ordeno, y ella está sentada y ambos nos vemos por un espejo. Alguien la espera, y yo le ordeno al chofer ir en reversa para que ella se baje cómodamente: ella, luego de escuchar eso, me mira, me mira como creo sólo lo hizo una vez «si es que lo hizo». Luego, desperté. Ahí está todo; su mirar, sus ojos. Delataban una leve admiración, como si me agradeciera por el hecho de existir. Sus ojos, me penetran, me excitan, me lastiman, me producen un orgasmo salvaje, pero tenue y dulce; es muy intenso, es muy suave su mirar, yo me estremezco y me siento en comunión con la vida. En su mirada veo todo, cuanta vida, cuanto mundo, cuanto amor… Es como si me abrazara con los ojos; sus pestañas me hacen cosquillas en el estómago, como si fueran mariposas. Sus párpados me dan calor, me protegen, me hacen sentir seguro; firme; capaz. Sus pupilas me hipnotizan, me dejan inmóvil, pero son lo único que me deja avanzar. El color amarillo de sus ojos; es un atardecer, es un amanecer, es un comenzar y terminar. Por cada vez que me mira tengo miedo, tengo dolor, pero al mismo tiempo siento calor, suerte; salud. Es impredecible saber que sentiré: es como la raíz de un árbol, que se expande por la tierra en formas y figuras que nadie más que la misma corteza de madera conoce. Sus ojos son mundos enteros donde me sumerjo como un témpano de hielo en el mar; sólo una parte de mi flota, luego me hundo, sin hundirme. Ella es su mirar, pero más que eso, ella es como yo la miro.
Pero conocí trechos baldíos de donde una flor blanca nació.
Subo y bajo de entre mis pensamientos, me cuelo en los recuerdos como la lluvia a la tierra. Te amo, como se puede amar en este mundo y en otros; con ganas, con aliento, con fuerza: con esperanza. Mi vida sin ti es un libro que no se vende, una canción que no se escucha. Mi vida contigo es un concierto de rock, una tarde alimentando a las palomas, una mañana con niebla y lluvia donde me sirvo un chocolate y me abrigo con una manta azul claro… Cuando pienso en ti, no pienso en lo que pasó ni en lo que pasa, más bien, me hundo en lo que pasará, en lo que me gustaría que pasara, y cuando menos lo espero, regreso al lugar donde nos conocimos, donde nos tocamos, no abrazamos, nos besamos por primera vez. Cuanto pienso en ti dejo de vivir, me duermo en una fantasía que parece nunca haber existido, y en aquel instante soy feliz… No imagino un mundo sin ti. Hace tanto que no siento la palma de tu mano pasearse por mi mejilla, y sin embargo sigo creyendo que ahí está, que nunca se fue, que me ha acariciado desde entonces como una madre que arrulla a su bebe para que duerma, para que sueñe y descase, para que algún día sea fuerte y pueda enfrentar a este mundo y al siguiente… Cuando pienso en ti, pienso en mí, y creo que no hay diferencia.
¿Qué es esto? ¿Desde cuando el mundo gira tan rápido? Han pasado unos simples meses y ya no les reconozco, ya no tengo fotos que las identifiquen, ya hasta la memoria misma me falla y se pregunta ¿cómo puede ser? Sabía que ella era hermosa, pero ¿tanto? ¡Mira esos ojos, esos labios! Dios, que me parta un rayo pero es más que una mujer, es… Magnifica. Ni mis sueños pueden concebir ese nivel de perfección. Su cabello es más largo y sus cejas más oscuras, aunque siempre miré más allá de su alma no puedo contener la nostalgia de ver como crecen y… Ya no soy capaz de distinguir a quien amé tanto tiempo, a quien aún amo. Y creí que estarían así por siempre, que no envejecerían; cuando robé sus fotos las memoricé, les hice un altar en mis recuerdos, en mis sueños las dibuje y en mi imaginación las tengo todos los días. Ahora, es imposible, son tan diferentes ahora, ni antojo me da de robarme su foto… Es bella, es demasiado bella como para existir en mi alma, es… Demasiado para tan poco. Me siento insignificante, me siento desecho, me siento… Olvidado… Más que preguntarme desde cuando las mujeres pueden ser más de lo que mi poesía puede ofrecer, es decir: ¿Desde cuando soy tan poco? Porque, yo no noto cambios, yo veo mi barba crecer y mis arrugas aparecer y las veo a ellas y, tan jóvenes, tan amadas, tan de todo lo que yo no tengo. Es más; el sólo hecho de saber que algún día yo pude oír aquellas voces, tocar esas manos, y saborear sus labios una y otra vez me hace creer que toda mi vida ha sido un pensamiento, una ilusión, un paraíso imaginario justo como el de ahora. Que ellas nunca se habrían de fijar en una hormiga insignificante como yo, que simplemente un día lo soñé y lo recuerdo porque fue, fue el sueño más hermoso de mi vida… Es que, si ya es bastante difícil creer que algún día alguien me abrazó al ver sus fotos de niñas, verdaderamente se me hace imposible considerar que algún día existieron; al ver sus fotos de mujeres, porque, no hay nada más que fotos, no hay nada más que imágenes que duran eternidades. Sinceramente, si antes pensaba que ellas son algo difícil de creer, no sé que nombre darles ahora que son más de lo que mis templos y universos bastos de admiración han dado.
No tiene caso… No hay suficiente amor en el mundo para que yo puedo sostener la esperanza. Me encantaría estar cerca de las personas en las cuales encontré un refugio, pero es imposible. Algunas fueron fogata y otras colchón, otras como tú fueron casas enteras, esas que más quieres para vivir pero que por su forma de existir no pueden acompañarte. Me encantaría amarte, besarte, abrazar esos maravillosos pensamientos tuyos y hacerlos parte de mi, pero no existes… No te veo, no te siento, no sé dónde estás y yo, no soy suficiente sol para iluminar todas las montañas… Escribir aburre, leer también, amar también y vivir lo mismo. Sólo busco un lugar; donde pueda sentarme y recobrar fuerzas, saber que el mundo es una puta basura, pero que en ocasiones deja de serlo, que las personas son maravillosas pero nada evitará que te congele la soledad. Yo no soy un estúpido poeta que habla de sus dolores y se sienta a colorear su lástima, yo soy peor. Y soy así porque lo decidí, porque un día sentí lo maravilloso que es estar cerca de alguien que te quiere, porque sé cuanto lastima ver un pedazo de tu alma quedarse con alguien más que sólo desea irse. Créeme cuando te digo que de verdad acepté y continué de todas las maneras posibles, intentando de todo sin lograr nada. Susana, eres verdaderamente increíble, me enamore de ti al primer segundo cuando nos escribimos, su forma de contextualizar sus pensamientos me dejó sin nada para decir. Yo estaba buscando, buscando por todas partes, desesperada mente, un ser inteligente, intrépido, capaz, audaz, que apriete el coraje de la vida sin temor a nada más que a no disfrutar del tiempo. Pensé que si no podía lograrlo a mi alrededor, al menos podría escribir por estos medios de la actualidad y de alguna manera buscaría un resultado agradable. No fue posible… Tú eres demasiado, otras también lo fueron, más y mejores que tú. No pude hacer nada, me enfrentaba con una realidad más densa; donde los sueños no viven pues éstos no pueden flotar. Me senté en una piedra todo el día, pensé, pensé, y pensé… La conclusión después del suicidio fue; hacer de mi vida una historia, una novela de ciencia ficción donde ya no debía preocuparme por la correspondencia ajena. Comencé a desarrollar planes específicos donde yo conduciría una vida diseñada por mi imaginación. Hablaría, estudiaría, y trabajaría como cualquier persona pero, cuando nadie me este observando, yo me sumergiría en ese poder de la memoria, logrando vivir en un mundo ilusorio donde soy feliz y no tengo que preocuparme por nada más nunca. Ha funcionado todo este tiempo, no le hablo nadie, no me dirijo a nada con mi verdadero ser, simplemente guardo silencio y si articulo palabras estas son formas mecánicas y autómatas que se encargan de sostener mi cuerpo sano y aparentar la cordura. Usted es la única que se ha dirigido a mi en meses. Todos los días me recluyo en mi cuarto y sueño, sueño contigo, con ellas, con un mundo de verdad, sueño con una mentira que acepto sin duda alguna. Para hacer más real el deseo, me he grabado las imágenes de todas las personas por las que hubiese dejando mi alma sólo por estar a su lado. Otras más especiales como tú, guardo en mi celular para recorrer con mis pensamientos cada detalle, entonces vuelo… No soy un melancólico falto de gracia y sentido, soy un hombre que conoció el precio de lo único por lo que vale la pena morir; eso que te hace creer que la vida vale la pena. Entonces, me adapté, y a día de hoy vivo con lo poco que me quedó y lo mucho que sentí. Si me despedí pronto y la dejé sola fue porque no es fácil aceptar una rotunda e innegable soledad que se cubre de historias que nunca existieron. Porque a decir verdad yo a usted la he besado más veces de lo que lo han hecho conmigo y créame cuando le digo que he conocido muchas. pero muchas mujeres.
Necesitas tu cariño, tu abrazo y tu sola existencia, para dejar de acumular tu tensión, necesitas saber y hacerte creer que vos no necesitas de nadie más para estar bien, solo de ti mismo. De ti en tu pleno resplandor, en tu pleno amor, en tu pleno ser… -Lo entiendo, me lo han repetido incontables veces las personas de buena fé… Sin embargo, nada es suficiente en mi, no después de haber conocido cielos y tierras inmensas donde mi alma flotó libremente. No he podido olvidar el océano de maravillas que sientes al tocar otros labios, otras manos. Un abrazo que expresa confianza y unión y que rompe de repente con la melancolía de la vida. Un amor; que ofrezca sentido al mundo, a mi mundo. -Vaya, que suenas a poetas baratos llenos de versos melancólicos, como una alma sin lugar donde aproximar su llegada, sin una vida con el suficiente sentido para vivir la, como un carbón que necesita las manos correctas para ser encendido, como un novato que experimenta y recorre partes pequeñas y cree que lo ha visto todo, como un café que cree no necesitar azúcar para su sabor, como un pequeño cayendo por primera vez en las redes del amor… Argumentaría sobre lo que acabo de leer, ¿podes imaginar lo que pienso ahora de usted? El mundo lo ha vuelto hueco, solo, frío y sin chispa, esa chispa que tanto amo, hablaría sobre lo hermoso que es el mundo y que a pesar de que cuesta ser como somos, cuando logras aceptarlo nadie te quita el derecho de que eres «TÚ» y eres libre y eres quien deseas ser mientras que los demás son condenados a un mundo de idiotas, de mente vulgar que no merecen y no tienen su mente propia si no llena de lo que los demás quieren, te han esclavizado ahora ellos han ganado, te convertiste en lo que no quieres ser y comenzaste a proteger el sistema con cuerpo y alma, espero que pronto regreses y si no lo haces, me disculpo por ti…
-Susan
-Amor por todo o interés a nada es casi lo mismo -¿Por qué dices que no es buena experiencia? -Cuando esa persona se va…. Cuando parece que para esa persona eres un 0 a la izquierda. Cuando no es correspondido. Cuándo la forma de querer de esa otra persona da asco. Porque cuando es una persona quién le da sentido a todo, te hace sentir mejor, te arregla la vida, te salva, esa persona se va, y quedan las heridas de antes, y otra peor. Y lo peor es que quién se va no regresa ni aunque vuelva. -Yo creo que me voy a casar con la música. Yo si debería ir a un psicólogo ¿y si dejamos de hablar de mi, o nosotros? -¿Por qué no has ido aun? -Y hablamos más de usted. -prometo dejar de hablar de ti o nosotros. ¿qué podemos hablar de mi? -Siempre he querido conocerlo, saber que pasa por su cabeza, ya sabes… -siempre te lo digo, tu que no prestas atención -¿no? Pero debe haber más Algo que lo apasione Que sea su debilidad, y así Lo que piensa antes de dormir, o... No sé. -esta pregunta no es difícil es extensa pero no difícil -Mm -mi pensamiento abarca unos conocimientos que se contradicen y al final concluyo cosas que los demás no entienden o no ven todavía… así que me siento solo la soledad no me molesta pues tengo la felicidad y la aceptación que nadie nunca mas que yo puede darme pero es aburrido cuando tengo por fin algo interesante por que luchar que no sea por mi y mi mundo maravillosamente increíble y cuando lucho por alguien mas es.. inútil… y siempre en escala de valores me encuentro con mujeres una mas sorprendente que la otra pero se van… una vez Dayana me dijo que es mi culpa sus decisiones pues quien querría irse de un lugar donde hace un buen sol y el café es tibio en las madrugadas pero por mas que recuerde en las noches lo que hice con ellas es inútil buscar una excusa pues si yo fuera ella yo seria… indescriptible mente fabuloso y aunque mejore cada día se van… así que como no tengo amigos que escuchen mis pensamientos mas altos no tengo familia que me apoye en mis proyectos espirituales no tengo compañera que me otorgue sus silencio mientras camino a su lado pues me siento aburridamente feliz conmigo mismo y eso pienso… en buenos recuerdos que se van como las hojas en invierno como el tiempo pasa y nunca nada se queda conmigo como yo esperaba eso pienso cada noche… felizmente aburrido. -Tenemos conceptos diferentes sobre la felicidad entonces,… Además el tiempo pasa que da vértigo.
-Mafe.
Ayer, me di el gusto de caminar por las calles de mi ciudad a media noche. Desde hace tiempo, suelo visitar las casas, los parques, los árboles, donde ellas y yo nos amamos, me quedo sentado en frente de sus puertas, pensando en como de lindas se ven, como de agradable es estar a su lado. Bueno, unos jóvenes se asustaron al verme y su expresión era clara; no deseaban a extraños merodeando en las madrugada por casas al azar. Así que no puedo volver a darme esa clase de aventuras… Es lindo, de alguna forma viajo en el tiempo cuando regreso a esos lugares y toco su puerta como si estuviese acariciando la. Puedo verlas, puedo verme, puedo sentir como nada hubiese cambiado, es una lástima que el mundo mismo gire de formas tan extrañas, con lo que disfruto recordar…
Considero esto una enfermedad; letal, que de a poco acabará conmigo. Por cada mujer nueva que beso, más deseo nunca haberte dejado ir. Y por sentir otro cuerpo en mi cama, siento mi alma, muerta, pues no hay dedos, en el mundo entero que le enseñen a temblar como lo hicieron los tuyos. Desgracia por no tener cielo si no es contigo.
-Una mujer sin autoestima, es sólo otra puta más para un hombre.
Me produce gracia aunque no me guste aceptarlo. Siempre he sido un presumido y lo seguiré siendo, a veces, suelo decir que no hay alguien como yo y que simplemente la humanidad se encierra en su burbuja de ignorancia en la cual pierden su tiempo. Pero yo soy un marica sentimental y adolorido, no sé quien es el que logra integrar más puntos al marcador. Simplemente me quedo pensando, y observo: yo hago lo mismo que las personas y eso me lleva a deducir que nadie realmente sabe por qué está aquí, todos de alguna manera buscan invertir su vida en algo que les provoque algo, lo que sea con tal de no aburrirse. Una vez le pregunté a una compañera del curso por qué le gustaba fumar, y sin peros me responde que no había nada más que hacer. ¿Será ésta la razón de la vida? ¿se vive, se crece, se ama y se procrea con el leve sentido de hacerlo porque no hay nada mejor? De seguro, si yo estuviese escribiendo un diccionario en vez de mis pensamientos esa sería la perfecta definición de vacío. A lo que me lleva a pensar ¿hay alguien realmente lleno en este mundo? o es que todos somos recipientes con inteligencia que buscan morir lo antes posible. Porque ya se conoce la tortura de vivir, para vivir se necesita un coraje enorme y una cobardía colosal para no terminar en una bañera cortándose las venas. La vida es aburrida, en todas sus extensiones, la vida no es más que un momento que pasa y que dejó de existir, por lo que el hombre siempre ha buscando «mejorar» eso fue una buena excusa al verdadero propósito y es que la vida en si no es nada, nadie quiere vivir. ¿Acaso no resulta renovador el hecho de sobrevivir a un peligro, un problema, un dolor? ¿No es satisfactorio sufrir y padecer la adrenalina que se siente al arriesgar algo tan insignificante como la vida, pero que de repente se torna con algo de valor cuando se puede perder? Es como si de alguna manera todos buscaran morir sin tener que hacerlo, sólo para experimentar esa delgada línea entre este mundo aburrido y lo desconocido. Como si nos gustara sufrir… Y entre más loco, descabellado, y absurdo parezca; más apetitoso se vuelve el hecho de quererlo hacer de nuevo. Las personas que realmente han sufrido son las que han amado, por lo que se juran a si mismas y al cielo no volver ha hacerlo, pero susurrando darían lo que fuera porque alguien digno y bueno los sacara de ese minuto eterno de lo que es la paz, aunque a ellos nos les guste aceptarlo. Así que, resumiendo: la vida es lo único de lo cual los hombres huyen y de esa forma pueden encausarse a sentir su muerte, que es lo que tanto les agrada, aunque a ellos no les guste aceptarlo.
El infierno es despertar cada mañana sin saber para que vivir, su voz es un perfume que me hace llorar.
En las noches, me quedo pensando, recordando como se quedaba parada mirándome… ¿Sabrá que le extraño?
Necesito respirar. Esas gotas de lluvia que caen y que viajan al mismo lugar son una misteriosa forma de estar tranquilo; de regresarle el aire al mundo. Es habitual el momento en que abro la puerta y dejo salir esa tristeza reprimida, ese odio producto del montón de indígenas sofisticados, esa pena por recién enterrar al amor… Todo, mientras respiro. Pero sé que no hay suficiente aire en el mundo, que pueda devolverme lo que ella se llevó, aún, después de tanto tiempo; siento mi corazón latente en manos de un montón de huesos diminutos que envejecen y se olvidan de mi. Ya no queda nada, no hay nadie esperando a que yo regrese de entre los muertos, no existe alguien que pueda alegrarse por ver como, a pesar de tanto humo, logro buscar un lugar en el que poder respirar… Luego, retengo el esperanzador aire y me quedo inmóvil mirando las gotas que caen del tejado de esta casa. De alguna forma, he olvidado como llorar… Supongo que es por tanto que lo hice. Considero, que la lluvia es como un deseo intenso que tiene mi débil humanidad; una ferviente intención de decirle al cielo que fue difícil vivir, que nada ha sido lo mismo, que desearía volver al infierno, al menos en ese lugar no hace tanto frío; y por eso, es que cientos de gotas caen, tal vez decenas, o un par, que con melancolía renuncian a las nubes de algodón para llegar a esta tierra, y morir. Nada más ha importado, el tiempo mismo se convierte en una nada y es entonces cuando no se aguanta más, o se pierde por completo la cordura, o se abre la puerta de en frente justo cuando hay tormenta… Y sentir un poco de frío. Seguramente sea masoquismo, pero, yo le llamo, darse un respiro. Será porque el agua viaja por muchos lugares y nunca nadie se da cuenta de cuál fue la gota que siguió mis ojos, nunca nadie sabrá, quien fue quien me regresó un poco de aliento después de una tarde aburrida, esa a la que muchos le llaman vida…
-Tal vez todo es un chiste
No me tomó mucho tiempo saber que ya no era mía. Justo antes de comenzar la conversación observé su manera de escribir, al parecer, había un mejor título que ella debía crear, pues el libro de mi vida desde hace tiempo le dejó de interesar.
Entonces le dije adiós, sin esperar su respuesta, sólo voltee y comencé a caminar sin rombo pero con una fuerte decisión en el pecho. Ella no puede buscarme, no sabe donde estoy, sólo recuerda que mis palabras más usadas fueron de un profundo amor. Seguramente me odie por regresar, hacerle el amor como pocos lo han hecho; con el alma, y sin almohada para amortiguar la caída, marchar rápido y lejos de ella… Lo más probable es que con otros labios me olvide, pero he ahí el sentimiento deambulante que rodea mis pensamientos: que cobarde. Eso era lo que ella solía reconocer como su autoestima, al parecer la copié, y bastante bien. No tengo lágrimas, estoy tan viejo y cansado que esto de arrancarse el corazón no es nuevo para mi, sin embargo es difícil digerir las palabras justo antes de dormir: «Me voy, si me quedo sólo conseguiré empeorar tu situación, te deseo suerte». Puedo excusarme con que las mujeres son rosas hermosas con filosas espinas procedentes de su amor, y que cuanto más las aprecias más querrás tocarlas y finalmente terminar como un tonto juguete y además, que ellas han madurado y jugar ya no es lo suyo. También podría decir que mi incansable deseo de sentirme vivo amando a un ser tan perfecto nunca tendría a donde parar, y como consecuencia de ello legaría un momento en que no podría despegarme de ella a no ser que la muerte en forma de su indiferencia y aburrimiento nos separe, y obviamente, después de haberlo experimentado tanto, se convierte en la forma más trágica de terminar algo que tan hermoso ha sido para esta gris vida. Pero no me puedo avergonzar de algo que ya hice, sin más, asumir el papel de tristeza es el único camino, pues el propósito de mis caminos es mayor a cualquier pena.
Entonces el karma se acomoda detrás de mi cabeza en toda la noche. Bien; mi pequeña tranquilidad arropándome se ha ido. Ella ha vuelto, y parece que su intención de hacer las pases es muy pobre. Es más sexy, pero sé que no es ella, sé que ha cambiado, que su cabello está en su otro hombro y su mirada es más fría e indiferente, sé que no quiere nada, pero a diferencia de mí, se preocupa tan poco, que hasta puedo asegurar su necesidad de llamarme por unas horas sólo para perder de vista su melancólica rutina ¡Maldita sea! no soy una puta. Y si lo fuera, que al menos ganase un poco de dinero, pero nada; sólo me busca, me dice que comencemos otra vez, y luego nos despedimos de un beso ¿Comenzar qué? Ya no eres la mujer de quién yo me enamoré, ahora no eres nadie, tienes una falta exagerada de sentido común, no buscas lo que quieres porque ni siquiera sabes quien eres, sólo vas caminando por ahí buscando vinos para tomar y luego tirar en cualquier parte, o dejarlos en sillas públicas, ni siquiera te interesa dejarlos en la basura. Puede que yo no tenga el mejor sabor, hasta puede que hayan partes en mí que son amargas y otras tan poco sustanciosas que dan ganas de dejarlo a un lado, bien, puede que yo me lo merezca. Pero no tienes la suficiente libertad para mirarme y hacerme creer que aún se puede intentar. ¿Para que me buscas? eres exageradamente bella, inteligente y divertida como para tener a cualquier hombre a tus pies, ¿por qué me torturas la vida? Sé que sólo te irás cuando te aburras, y es lo que quiero, pero entonces por qué hacer tanto drama si los finales son los mismos: En éste teatro no hay nadie, sólo es una perdida de esfuerzo por parte de los actores. Si soy realmente honesto, quisiera que mi corazón dejara de perder su tiempo en amores que nunca regresarán todo lo que les dimos. ¿Es tan difícil marchar sin mirar atrás?
Después de una incómoda conversación, aprendí algo que puede ser de utilidad, y como no encuentro mejor forma de entenderlo que escribirlo, entonces; He aprendido una palabra, se llama ego, y puede definirse como la identidad de individualidad posesiva e inmadura… mas o menos. Y si este escrito no le satisface o no le es lo suficientemente asertivo le pido a mi amado lector que me disculpe y que prosiga su maravilloso camino, una vez dicho esto. Existe un poder interior deseoso de sentirse superior, como una necesidad de aplastar a los demás para que… no lleguen a tu altura… Es gracioso como esto se oculta detrás de una mascara de «ayuda» Como si el poseedor de esta capacidad se autorizase maestro así mismo y decida que los demás deben aprender «por su bien» aunque sea de una forma desagradable, para así evitar-les un sufrimiento futuro y eso es… muy estúpido…
Aprendí que estas personas suelen tener una decadente autoestima, tanto, que proyectan su pesar en los demás, y culpan a los demás, los juzgan, los catalogan, los clasifican y sienten que ellos son los malos, los terribles, mediocres, tontos, y en consecutiva bajeza de entendimiento… Es como yo decirle a un perro que es estúpido porque no sabe cuanto es 2+2… mierda… es un perro y no considero que por eso sea inferior a mi o al presidente… para hacer comprender mi idea es como si a Einstein se le pidiera que haga arte como piccaso o de lo contrario es un perdedor… o decirle a beethoven que cree cálculos matemáticos precisos en busca de una deslumbrante interpretación del tiempo y el espacio. Mi opinión con todo esto, y reforzada por una chica muy agradable de cabello rojizo que me apoyó en el sentido, fue que cada persona nace en un destino diverso a otra, es como… que no todo es verde, y no todo es azul, son ambos. Y mi interpretación del ego fue que los compadres del lado azul creen que si otro es verde es un inútil, porque ser azul es increíble… lo mismo de forma inversa. Y la enseñanza principal del tema es, respetar el espacio ajeno y aprender del propio. Saluditos a todos.
-Si algún perro lee esto, no te molestes, ¡Eres estupendo corriendo, no sumando!
Me urge decir que ella es el fuego y evitar verle es incendiarse…
Tan fría y difícil de querer que necesitas valor para acomodarte en este tipo de invierno, total, siempre he sufrido de calor.
Estoy atrapado… El exilio es mi libertad, pero es también mi muerte. Entonces, no hay lugar a dónde ir, no hay esperanza que valga, todo en todas partes me invita a la misma conclusión: No hay salida. No tengo ganas de respirar en un mundo frío y vacío, tampoco quiero cantar en una habitación llena de miradas indiferentes, mucho menos quiero sonreír cerca de tantas lágrimas rodeándome. Sólo intento existir en éste lugar… A veces se me olvida que la pena me abraza, y entonces te recuerdo a ti, mi Dios, mi amor, mi mundo perfecto; mi nena. Y es justo el momento en que soy feliz, en que nada me detiene, y así puedo volar en cielos despejados con tu nombre escrito en las nubes. Pero, también olvido recordarlo, y todo regresa a su sitio, mis pies sienten el hedor de la carne muerta que en ocasiones se topa conmigo y me hace retroceder, el mismo conjunto de intestinos que acompaña esta casa, y a mí… Esas personas sin alma, sin sesos, que me recuerdan sólo para maldecirme; me repugnan. Sueño con ir de aquí para allá, evitando tener en cuenta que estoy completamente solo, y que lo único que me rodea son vacío más inmensos que yo. Algún día escaparé de ésta cárcel, de éste cementerio, de éste ataúd en el que mis brazos están inmóviles e inservibles, mis ojos cerrados y mis labios cocidos. Cada uno esperando su momento de vivir.
A veces no hay suficiente tiempo para reparar, para arreglar y mejorar. A veces no queda nada por hacer, pues la oportunidad se ha esfumado, y todo lo queda es el resultado; bueno o malo, es lo que hay. Se busca desesperada mente la posibilidad de vuelta, pero es tarde, ya todo está hecho y ha menos de que comience otra vez, en otro mundo, he de asegurar que todo intento está dispuesto a fallar. Tal y como una nube del cielo no puede flotar en el espacio, así mismo una oportunidad no puede ir más lejos. Por lo que se necesita una nueva idea, un nuevo esquema, un nuevo plan; pero aún así, es imposible: un edificio no se construye sobre arena y lodo. Entonces es preciso algo además de la idea: un lugar. Una estancia de condiciones apropiadas para la explosión de su propósito. Así que, si unimos estas dos formas; se puede crear, no se necesita de tiempo para reparar, pues ésta vez se tiene más sabiduría para perfeccionar y finalmente dejar una obra majestuosa, digna de admiración. Si no es el caso, y se vuele a fallar, entonces se continúa intentando lo mismo hasta obtener el resultado esperado. Así es todo en la vida: duele, cuesta, molesta, incomoda, perturba, pero hasta que no estés dispuesto a dejarlo todo para hacer algo nuevo, siempre algo te estará quitando el tiempo, y morirás, sin haber hecho lo que realmente deseabas… A veces no hay suficiente tiempo para reparar, pero si lo hay para buscar otra manera, y entonces; perfeccionar, y crear.
Ahora el tiempo se dispone a contentarse conmigo, como si yo fuese un viejo aventurero, cansado de subir y bajar empinadas montañas y le diese por apiadarse de mi, ahora, ahora el tiempo pasa tan lento y suave que te olvidas que existe, ahora el tiempo es escaso para mis amores y abundante para mis pesares, ahora el tiempo es quien me ayuda a concebir la idea que ninguno de los dos tuvo la culpa, simplemente fue… tiempo disfrutado, y ahora, es tiempo de saberlo…
Soñar y perderme en el olvido, el vacío, el silencio. Que mi nombre sea el recuerdo de dios, pero el aburrimiento del diablo: Entonces, que nadie sostenga mi imagen más que para ignorarla, pues todos son pecadores con alas.
Que la prudencia y la moral toquen nuestra puerta y la adoptemos por religión, y que se le olvide ser cuando estemos demasiado cerca, entonces pecaremos sabiendo que luego seremos perdonados.
No me lean, no se atrevan a conocer mi pesimismo, molesto, perturbador, irritante. Creencias innatas que te llevan a perder el tiempo, ¿Cuál tiempo? Si pareciera que hacemos lo mismo cada mañana, riendo como si fuese una enfermedad, sorprendidos, miedosos, con temor a lo desconocido, vagando felizmente en la rutina de lo ilusamente real.
Dios, ¡estaba preciosa! Hasta comienzo a creer que en este momento estoy soñando, porque aquello fue tan real… Fue justo cuando cerré los ojos y la oscuridad me envolvió, que pude verla, cerca, dulce, apetitosa, cálida. Su cuerpo estaba tan cerca del mío que, al igual que la plastilina; eramos de un solo color. Mis brazos rodeaban su cintura, su estómago, luego su pecho, sus piernas, todo en un intento de acariciar su alma. Mis manos rodeaban toda su bella estructura como si de dedos ella se estuviese cobijando. Todo mi cuerpo se esforzaba por mantenerla segura, que nada ni nadie pudiese impedir ese fascinante despliegue de amor. Mi corazón tranquilo y contento, sabía que ese era el momento en que todo el universo se deja caer y sin embargo, todo continúa espléndido, como si fuese un buen día para morir, o noche, o tarde, no importaba, nada importaba, sólo sus gestos de sentirse cómoda me invitaban a tocarla más fuerte y dulcemente, era como un baile, un baile que se hace en la cama, donde nadie se mueve, pero todo se siente: Que por fin la fría soledad ha desaparecido. No sabía nada más, simplemente era el observador de un exceso de ternura, y ella… Ella era tan perfecta, tan poco creíble, que no se molestaba siquiera en pestañear. Tal vez, lo estaba disfrutando más que yo…
Y todos somos gotas deslizándose por entre las hojas… No hay motivos para vivir, vivir es el motivo y nadie parece darse cuenta de que todos hacemos lo mismo; más que comer, más que dormir, más que amar u odiar, tenemos el destino en nuestra garganta y de nuestra lengua no nace un gesto nuevo. Todo es una misma dirección, el niño, el joven, el adulto, el muerto, el gusano, la vaca, nada escapa de esto, nada, y el motivo es muy simple: nadie sabe el por qué de estar aquí, en este suelo y rodeado de estas personas tan bipolares. Nadie lo sabe, ni el más desgraciado como yo que se deja su tiempo en el análisis del mundo, nada, absolutamente nada, todos caminan con vendas en los ojos y, sin ojos. El hombre que soy ahora es justo la mujer que será mañana y el niño que fue ayer al igual que el perro que ladró hace un momento. Para explicarme de forma adecuada… Nadie sabe que existe realmente como una cadena, un lazo que se encuentra atado a otros, y a otros y, a otros. Es como si lo único que nos diferencia es el nombre que nos dan, porque de resto, somos de forma abstracta; un conjunto de agua. Una gota somos, pero en el momento en que tocamos otra gota rápidamente todo cambia, ya no hay dos, hay una gota más grande, y así sucesivamente hasta llegar a un lago. Si dejamos que la idea nos invada, tú, yo, no somos nada, el hecho de que seamos simples suspiros no significa que seamos diferentes al aire, es más, somos el aire, y nada ni nadie en toda la existencia conocida puede evitarlo. Pero claro, como algo así podría ser comprensible si todos se proclaman autores de una personalidad bien desarrollada, y en otras palabras, todos somos únicos y eso significa que nadie se parece a nadie porque todos siguen caminos diferente y nos hace, nos hace incoherentes. ¡Ese es el punto! Todos estamos dispuestos a defender una idea, conocida, por, culpa, de otro. ¡De otro que nos la ha enseñado! Es absurdo, ¿Cómo podemos ser originales si todo de lo que estamos hechos es la recopilación de lo que aprendes del lugar? Porque claro, sin lugar, no hay nada, ni camino, ni elección, ni… Delirios de autenticidad. Entonces, ¿Por qué se crean las disputas si no son por las marcadas creencias singulares, angostas y arrogantes que cada ser posee? Exactamente, porque todos estamos incompletos. La diferencia, es sólo una forma desconocida. Lo que se conoce se cree y se entiende porque se vive, y se defiende cuando alguien no la comprende y la toma por absurda. Eso significa, que lo único que nos hace pendejos es la falta de saber. Bien, el tonto es tonto porque no es más listo ¿no? Parece muy sencillo de decir pero esconde una profunda verdad. El tonto es tonto, porque no se ha tomado el tiempo de ver más allá de su vida y la de los demás para encontrar las razones y los motivos que lo han llevado a tener la vida que disfruta o lamenta en estos momentos. Si el tonto, o más bien, el hombre, se crease un perfeccionado mapa de sus aventuras, y la de los demás, y la de los demás de los demás, pues… Seguramente escriba algo como esto, tal vez no tan genial, pero parecido. Y eso dejaría por completo la idea de pertenecer a un lugar definido. El hombre entendería que no está en ningún lado, ni en si mismo, que su mente, su saber, sus ideas, hasta su desayuno, es por culpa de todos los demás, y eso significa que él está en todas partes, y que todas pares son él. Bien, partiendo de ahí, el metafórico comienzo tiene sentido. El problema, es que las personas no suelen exagerar en sus observaciones, y por lo tanto siguen creyendo que su otra parte no es más es el mismo hijo de puta que le sube el precio a las zanahorias sólo para que él no tenga el dinero suficiente para ir de fiesta los fines de semana. Y, por eso mis niños es que el enemigo es cualquier persona que no se limite a pensar como tú. Y en otras palabras, esa es la razón por la que el mundo avanza… Suavemente. Tal vez, si un grupo de hombres bien lastimados y heridos por la vida llegasen a conocerse y aceptarse unos a otros, puede que todo iría por buen camino. El problema «es que una piedra en el zapato suele ser lo suficientemente inquietante y perturbadora para evitar el peregrinaje». Seré honesto, a la gente le gusta joder, les sale de los huevos estar molestando, no saben como más utilizar su agonizante tiempo y te apestan la vida. Que también hay personas maravillosas que daría la vida por ti con el propósito de hacerte sentir bien, pues claro, pero hasta ahora sólo conozco una y la suelo ver cuando miro el espejo. Y es triste, te sientes solo, en un mundo de mierda. Pero para algo nació la escritura por allá en el siglo VIII antes de que el tipo que es masoquista, se sube a palos de madera para morir y se hace el héroe por todos naciera. ¡Pero claro! ¿Cómo pueden haber personas desagradables y agradables en un mismo mundo donde se presume la unión absoluta? Es justo a lo que me refiero, y es que, si todos somos fragmentos con algunas pizcas de ingenio divididas entre todos, y… Somos bastantes. Pues eso significa que hay personas que sólo toman para sí lo malo y otras en cambio, son el hijo de perra más envidiado del mundo por lo estupendo que es. Pero bueno, ¿Cuál es la conclusión? Yo respondo que no me da la gana de responder. Es divertido dejar que la locura sea cordura y viceversa. Después de todo algún día moriré ¿Para qué aburrirme tanto? El mundo es tan pequeño, realmente no entiendo nada pero al observar lo patético que resulta ser el entorno entiendo que soy demasiado listo para este lugar tan insignificante. He repetido muchas veces «lugar» eso significa que soy un inadaptado rebelde que le gusta nadar en sentido opuesto porque no tiene nada más que hacer y se excusa con que es lógico. Es divertido… Cuando era más joven creía que era muy fuerte, muy capaz y que nadie en ese momento era más imponente que yo, y ahora que soy un anciano triste y débil entiendo como todos a esa edad dicen lo mismo, todos, sin excepción. Eso me hace comprender más a fondo este sistema en que las palomas llamadas humanidad vuelan en un mismo sentido y tapan el sol con sus plumas. En otras palabras, todos somos esclavos de lo que nos rodea, y el consejo positivo y común sería que agarrásemos lo más agradable para nuestras vidas pero eso no lo hago ni yo, me da pereza, prefiero un resfriado a ver la lluvia por la ventana.
Estoy desperdiciando mi tiempo. Maldita sea, no puedo vivir tan solo, no puedo masturbarme toda la vida encerrado en mi habitación, esa cama polvorienta y sudada por días en que no estoy y noches en que abrazo la almohada hasta asfixiarme. No puedo vivir pensando en ella, ¿Para qué? Todo terminó hace mucho y yo me he vuelto insaciable, nada puedo hacer, ni extrañarle, pues todo se ha llevado excepto mis mentiras, esas que me trago para no cortarme las venas, esas que dicen que por más lamentable que sea el tiempo tú volverás a colocar tu mano en mi rostro y a observarme con esos ojos negros tristes pero entusiastas por tenerme. Estoy cansado de subir montañas solo, estoy exhausto de tener que alegrarme por mis gracias y mis historias y no tener a nadie con quien compartirlo, lo peor; no tenerte a ti para sonreír mejor, sino un recuerdo, una ilusión, un espejismo que camina de mi lado. Estoy cansado de estar cansado y es que es horrible tener que amarte tanto, es terrible soñar con que te abrazo y luego despertar y ver unas medias llenas de semen regadas por el suelo de este cuarto; cuatro paredes que me observan y se preguntan cuáles serán mis pensamientos cuando me acuesto sobre la cama, descanso, murmuro, me enojo, me lamento y mis ojos perdidos lloran en silencio, fijados en el tejado, en las grietas donde caen las goteras cuando llueve, en el corazón roto como las paredes que se rajan de vez en cuando cuando me ven llegar. Estoy harto de sentirme vacío, de estar completamente a merced de la trágica ausencia tuya, ¿Por qué demonios me enamoras y te alejas en proporciones semejantes? No es bueno para mi alma saber que no hay nada por hacer más que esperar y delirar de vez en cuando cuando pienso en nosotros. La muerte en llamas por toda la eternidad sería más dulce que este sentir tan vergonzoso. Ayer te escribí cincuenta y cinco párrafos, hablaban de ti, de mi, del vecino, del perro de la casa, de la maceta que pasó a mejor vida, de mi mundo y mi tiempo y me duele la cabeza creer que te importa poco, me alegraría que me ignorases, pero ni eso puedes hacer, siempre te quedas en silencio, a la expectativa, calculando el próximo movimiento, y entonces guardas silencio, yo adivino que carajos te parece lo que escribo porque tú no dices nada, y luego de tres meses, o tres años, o tres vidas distintas regresas a saludarme, a decirme que no me conoces y que añoras intentarlo de nuevo. Realmente me haces creer que necesito suicidarme. Y aún así regresé rápido del instituto para esperarte y verte llegar a tu colegio, escondido detrás de un árbol, agazapado, con miedo y temor de que pudieses ver que yo estaba ahí, persiguiendo te con la mirada, el silencio y un latir que me hace temblar las manos como un psicópata y su próxima víctima. Luego los minutos eran agonizantes, nadie tenía tu rostro ni tu cabello ni tu sexy caminar, pasaban las horas y comencé a creer que no vendrías, entonces recordé que estudiabas en otro horario distinto. Debo ser idiota, pero no me culpo de nada, no sabia nada, no se qué esperar de ti si tú nunca tienes tiempo para mí, no me cuentas, no me aclaras, no me afirmas, eres transparente y te atravieso en ves de verte y sentirte ¿Cómo diablos creía que sería posible? ni siquiera te molestas en esperarme a mi. O tal vez si y entonces yo soy el malo. Al menos estoy mejor que cuando ambos estudiábamos en el mismo colegio y en el mismo horario, demonios, en ese entonces me atravesaban relámpagos de tu indiferencia y constantemente estaba en llamas por los corredores y pasillos de ese horrible lugar donde no hacía nada más que pensar en ti, y de vez en cuando tu mirada se fijaba en mí y yo me convertía en polvo, otras veces pasabas a mi lado abrazando a otro y él, entusiasta por tener a la mujer más estupenda de toda la maldita ciudad a su lado. El profesor como si estuviese entrenado por la milicia nos hostigaba con sus redacciones de hace veinte siglos y yo no podía entender nada, todo mi ser existía para lograr apagar tanto fuego, tantas llamas que inundan este navío en el que he estado naufragando toda la vida, a veces, escribía sobre ti y desde entonces todas las clases se convirtieron en poesía, en bellos sueños rotos que se pegaban al cuaderno y me permitían llorar en calma y desahogar tanto maldito dolor, pero mírame, me pudro en silencio, en soledad, en pesar y maldición por no ser nada de nadie de nunca de ningún lugar, porque yo sólo te busco a ti y tus orejas, tus dientes y esos dedos tontos que se enredan con los míos, y si no tengo nada de eso me congelo, me hielo, me atemorizo y me guardo dentro de un cajón viejo para no morir. Antes golpeaba las paredes por el miedo, luego el calor me consumía y mis llamas se hacían inapagables, y ahora mis uñas se clavan en éste Everst de tu olvido. Todo, me ocurre de todo contigo, siempre hay una forma de cavar una nueva tumba, un nuevo hoyo en que yo pueda caer, siempre regreso al infierno cada vez que vuelves, muerte por todas partes, siempre lo mismo de distintas formas. No sé para qué me esfuerzo en buscar tus labios, es como si yo mismo suplicara tener la tierra encima y el lazo en el cuello. Exijo paz pero me empeño en esperar algo de ti… Ojalá no se me caiga el cabello por tu culpa, ahí sería el colmo.
Tan fuerte, tan intrépido y suspicaz ¿para qué? Ella sola es lo único que puede derrotarme, acabarme, destruirme. Sin ella soy Dios y todos son capaces de besarme el trasero, con ella, mis rodillas tiemblan y caigo en el suelo frío que me inunda y me traga hasta asfixiarme. ¿Por amor debo renunciar a mi poder? Sería capaz, pero sólo reinaría mi amor y no nuestro amor, por lo que no vale la pena, no tiene sentido morir en vano sin ninguna causa noble y justa, no consideraré perder el espíritu sólo por una cara bonita. Que esta sea mi despedida y mi nuevo llamado a la gloria, pues sin la debilidad que me provoca su sonrisa yo lograré triunfar por sobre todos los dones. Ella es lo único que impide que yo sea libre, ella es mi infierno y también la manzana del paraíso. Esta vez debo ser fuerte, duro. No dejaré que esta vida me lleve al abismo por culpa de ella.
Escribir para nadie, para nada, ¿la verdadera felicidad es egoísta verdad?
Vida mía, que me parta la tierra si yo en mi promesa de amor te he buscado para ofender vuestra libertad y apagar esa impresionante forma de sonreír.
Tengo miedo de que regrese. Me embarga la agonía, la pena. No resisto creer que pueda arrodillarme de nuevo, porque sé que lo haré, sé que es irresistible no mirarle y quedarse atónito con tanta lumbre en sus ojos… ¡Malditos ojos! Son mi perdición, sin ella todo estaría bien, demasiado bien. Claro que deseo el infierno, pero no uno que ella pueda arrebatarme siempre que pueda. Ella es una detestable belleza, y ruego al cielo que me salve de mi perdición, que me ayude para no caer de nuevo en ese lago de amor que siento por su maldita ternura.
Estaba sumido en mi cotidiana melancolía y pensé que sería divertido jugar un poco. Le pedí a una niña que volviese a tener sexo conmigo, se resistió y se fue. Luego lo hice con otra y después de dos horas cambió de opinión y se fue, de alguna manera, me las arreglo para sumergir éstas ganas de amar en una profunda soledad, ni siquiera puedo suplir lo más básico como lo es el cuerpo. Cuando me cansé de rogarles busqué unos cuantos videos de pornografía y me masturbe un rato con el aceite de cocina de mamá. Después fui a comprar unas galletas y me hice un chocolate, no me molesté en calentarlo ¿para qué? Estoy bebiendo de la vida.
La vida me rosa los labios y me dice que no sea estúpido, que disfrute del tiempo que tan melodramático yo menciono como asesino.
La fuerza es el único lenguaje que el mal entiende.
Ni loco voy a perder la compostura y la enorme dedicación que he sostenido toda esta vida por las demandas exteriores. Que tú y tu maravilla se antojen de lo normal, de lo común, porque yo no acepto conformistas.
Hoy casi muero… El oleaje me arrebató el valor y el coraje, luego, cuando regresé a tierra con un sabor amargo en la boca me acordé de ti, y, es que soy tan grande cuando pienso en ti que hasta el día comenzó a tener buena cara. Ahora que lo pienso, será que soy demasiado pequeño para ti; que no merezco tu amor. Que tu eres mar y agua y yo no soy pez. Que por más que quiera no dejaré de temer le a tus profundidades e incapaz lograré naufragar por las olas de tu cuerpo, imposible, inalcanzable. Por más valor que haya reunido, será imposible vivir en calma con tan profundo frío mojado, ese al cual le llamas corazón.
Solo, rotundamente solo. Es la tercera vez que huyo, en el intento de un suicidio, o de una ayuda, o de lo que sea que me saque de éste laberinto hediondo en el que vivo. Nada, no duré ni cinco minutos en el absoluto exilio, simplemente me acobardé de nuevo y recordé que no tenía elección alguna, que la vida es solo un montón de angustias aplastando tu corazón y no hay nada que hacer.
Estaba haciendo una tarea, como lo suele hacer cualquier humano en este lugar… No sé si fue que la tarea estaba demasiado difícil, o muy fácil, quien sabe, tal vez por respirar un poco comienzo a escribir, o de tanto agonizar escribiendo busco distraerme. El punto es que dejé todo en la mesa, tomé la computadora y terminé visitando la imagen de un hombre, que si yo fuera más tonto lo odiaría y si fuese más listo lo envidiaría. Todo el maldito día he estado llorando como un pendejo, por la madrugada estuve lamentándome por ser un inútil, en la mañana estaba tocando la guitarra y cantando canciones gays bien detalladas, que si mal no recuerdo su coro era… «vuelve por favor que sin ti la vida no parece tener alegría» Algo así… Mientras lloraba. Luego, luego no recuerdo lo que pasó el punto es que sentía mi alma vacía. Aunque, eso de tener alma no sé si es verdad. Digamos que estaba triste, como cuando muere tu madre o algo así. Por lo que al ver la foto pensé; ¡maldita sea! Era un hombre perfecto. Fuerte, muy sexy, con cabello brillante y sonrisa simétrica. Pero lo que más me llamó la atención fueron esas tres chicas que lo rodeaban. Las malditas perras eran más que hermosas. Lo interesante es que estaban a su lado, no sé, supuse porque no habían razones para estar en otro lado. Y eso me hizo sentir patético… ¿De qué me ha servido vivir en un constante impulso de tocar fondo con recuerdos terribles? Sólo he ganado más firmeza en una soledad sin fondo. Bien, entiendo que la vida es esto y lo otro y sonríes y se te olvida que tienes cáncer o te violaron de pequeña, o mataste a tus hijos accidentalmente cuando estabas borracho, no lo sé, nunca he tenido hijos, pero si estoy seguro que me ahogan mis propios lamentos, cosas, que ha decir verdad son tonterías, son, patéticas formas de no vivir, pero son. Y justo ese es el problema; no hay salida, te tienes que comer absolutamente todo el relleno de tu situación porque no tienes otra y si la tuvieses tendrías que comerte las dos. Y, finalmente vuelves a estar triste… Cuando… Regreso al instituto a divertirme con mis colegas y hablar de porno y chicas con buenos traseros, y después de hablar con chicas y argumentar de experiencias emocionantes y justo alguien dice un buen chiste y todos nos reímos, no es suficiente, es más, es casi como una tortura, una agonizante y despreciable tortura. No quiero ser exagerado pero es que si no lo soy me aburriría escribir, es como tener un buen amigo y no subirle un poco al tono de voz cuando quieres ser escuchado, bueno, si tuviese amigos. Y ahí está la razón, no tengo a nadie. Ha decir verdad creería que nadie tiene amigos, ni familia, ni pareja porque nadie logra entenderse completamente con los demás por el simple hecho de que todos somos diferentemente, iguales. Cuando escucho la risa de esos buenos compañeros que me ayudan en la clase las veces que no entiendo nada, y al mismo tiempo escucho mis carcajadas, siento una profunda tristeza, seguro ellos también y como yo la esconden, nadie tiene una vida perfecta eso lo entiendo pero, ¿Vivir ocultándote? ¿Que mierda es esa? Y si dijesen lo que son me aburrirían porque no me interesa, justo, como si yo les hablara sobre mi vida y ellos no la entendiesen. Entonces, me aburro, y lloro en silencio, sin que nadie lo note, escondo mi rostro, me trago la pena y como si nada regreso a este mundo donde tienes que hacer esto y hacer lo otro para no parecer tonto ni raro ni imbécil. Sólo unas cuantas veces me ha interesado compartir mi vida y escuchar realmente la vida de otros pero son las veces que más marca me han dejado, ni ganas ni tiempo tengo de creer que el mundo es bonito. Pero claro, despiertas tarde, vas al refrigerador por algo de comida, regresas a la cama y continúas en ese cómodo sentir de tranquilidad. Luego te levantas y todo es más triste aún porque acabas de pasar por un buen momento y es justo ahí donde me detengo a pensar: ¿Enserio de esto se trata la vida? ¿Un subir y bajar de alegría y angustia? Entonces comienzo a hacer la tarea, resignado, pues nada puede cambiar eso… Pero me topo de repente con este hombre. Seguro que él también tiene sus circunstancias, nadie tiene la vida completamente asegurada en la felicidad y si la tiene bien por él. Pero sin embargo me recorrió una especie de admiración: Míralo, lo tiene todo, y además parece muy feliz, y esas chicas a su lado no son propensas a quejarse. Entonces comienzo a pensar… Una vez leí que «la falta de confianza en un buen futuro es una notable seña de infantilismo» Pues me declaro un mocoso. Mi vida ha sido bastante decente, he tenido profundas lágrimas como también buenos saltos de humor. Y eso es lo que más me hace querer no vivir la. Sé que tengo que hacer mi tarea, ganarme la aceptación de los maestros y conseguir un trabajo con el cual comprar mi propia cama y mi propia nevera donde pueda repetir mis buenos momentos cada vez que me entre en gana, el problema, es que eso no deja de ser un futuro, y si fuese presente no tendría sentido, me volvería gordo y vago y seguro lloraría más a menudo… No es cuestión de compañía ni de amor, es la falta de algo. Es la falta de «¡Hoy si haré la tarea porque realmente quiero hacerla!» Y eso no es entusiasmo ni voluntad, es ausencia de tristeza. Y el problema, es que siempre estaré triste, aún cuando haga el amor con las tres nenas que abrazaban al hombre, e incluso con el hombre y las tres nenas, nada podrá quitarme la melancolía; porque yo mismo la busco. Es, un alivio encontrar algo de dolor cuando estás completamente abandonado, es como una manera de sanar. Si quieres tener un jardín bonito, pues dale más flores, a si mismo, si quieres tener una buena soledad, dale un poco de lamento… Soledad, porque como mencioné anteriormente no hay otro camino, no hay otra manera. No sé si fue por que fui malvado y cruel, o aburrido e indiferente, si cometí tantos errores que no merezco ser perdonado, o desprecié y olvidé a quienes realmente valían la pena, incluso he llegado a pensar que soy demasiado bueno, exageradamente excepcional, tan único y vigoroso que nada sobre esta tierra podría dar la talla, sin embargo, sólo hay una realidad: nadie me necesita, mi nombre ya no posee elegancia y mérito para los demás. Ni siquiera deseo ganarlo porque, ya hasta olvidé que es vivir al lado de otro, ya olvidé que es compartir y sonreír porque ¡realmente se siente bien! Desde hace mucho que vivo en la completa nada y es eso lo que me hace un hombre triste… Supongo que si nadie me tiende la mano estaré bien, me esforcé en llorar todos los días de mi vida para recordar que estoy acompañado por mí. Y si alguien llegase de un momento a otro a romperme los dientes de un buen golpe y decirme que deje de ser idiota, que no todo el mundo me rechazará, que no todo. Entonces, tal vez entonces, dejaría de prolongar mis tareas y dejaría de escribir como medio de llanto y desahogo. Es… De alguna manera más triste aún el hecho de vivir sin saberlo. Hasta me antojaría ser de esa clase de personas que les entusiasma la incertidumbre y se alegran por querer buscar con fuerza lo desconocido. Pero eso sería aún más triste, suficientes máscaras tengo ya… Justo es el momento de colocarme una… ¡Cielos santo, la tarea! ¡Pero que increíble es hacer la tarea! ¿No les parece? ¡Hay que hacerla pronto, rápido, y muy bien! ¡Si la hago mi vida será fantástica, eso seguro! ¡Seré como ese hombre, viajaré por todo el mundo porque me sobrará el dinero! ¡Y recordaré que todo lo que tengo fue gracias a la tarea! ¡Sí! ¡Qué entusiasmo hacer la tarea! Que entusiasmo… si, Que entusiasmo…
Ha decir verdad, creo que he sido algo torpe… Bueno, tal vez no tanto, pero, para qué culparme, el vida es tan larga…
Lo tenía justo ahí, en mis manos, muerto, frío. Recuerdo sus ojos, sin brillo y sus labios azules, su cabeza se movía, parecía que me acariciaba con su piel. Pero no. Ya no quedaba nada de él, era yo quien movía sus huesos duros y congelados. Estuve un momento mirando le, era bello, enternecedor, pero estaba comenzando a podrirse desde sus adentros, me recordó al espejo que observo todos los días… Luego lo tomé, lo arrastré por los callejones solitarios de ésta ciudad que se encontraba rotundamente anochecida. Y después de lanzar una silenciosa maldición al aire, lo dejé llevar por aquel risco, aquel pequeño acantilado que bajaba hasta una quebrada ruidosa. No tardé en perder lo de vista, luego, comencé a caminar con furia, pues no me había desasido de él por completo, pues llevaba en mí un peso más grande; el recuerdo. Cuando abrí la puerta de mi habitación y cerré los ojos, entendí que hay llantos que no son lamentos, sino que son suspiros que te acompañarán toda la vida, y no importa quien se pueda ir, yo llevaba tantas tragedias, que pocas cosas podrían llegar a tocar tan minúsculo corazón. Ahora que lo pienso, tal vez yo estaba más muerto que él.
Es aplastante y frío, un recuerdo se mece sobre las viejas canas de unos huesos tirados en el suelo. La muerte y el polvo saben que no hay escapatoria, su destino es desaparecer, olvidar hasta su propia desgracia y perderse en el vacío de un mundo al que nunca quiso ver. Tal vez fueron tantos intentos fallidos, o tan pocas oportunidades, la única certeza es que no habrá más soledad después de esto; imposible, después del espacio sólo hay más espacio… Negro, congelado, muerto.
Gloriosa derrota. Por esa perra iría hasta el otro lado del mundo, no me importa, todo sea por verme acabado y enloquecido. Absolutamente desecho y cansado, así poder afirmar que viví y entregué sin miedo mi alma al demonio y aún así intenté violarlo para recuperar la.
Te amo. Lo hago porque nunca te he visto, no sé de ti mucho y muchos días han pasado con un recuerdo tuyo que no se apaga. Te amo, porque eres lo que otras no pueden ser, y ese encantador estilo de vivir logra enrrollarme y sumergirme en un lugar en donde puedo hacer lo que quiera. Te amo porque soy lo que quiero y digo lo que soy, y me esculpo al igual que tu, ya que nuestra vida es sólo un constante encuentro con lo que seremos, y eso me hace amar la idea de saberme feliz por tu existencia. No amo la forma en que me sabes imposible y lejana, pero si amo el sentido que eso conlleva; la idea de nunca verte y tal vez encontrarte, tal vez conseguirte, como yo he conseguido vivir sin ti… Amo el amor que nace cada vez que vienes y me levantas de entre mis simbras y silencios, pues nunca será suficientemente tarde para dejar de esperarte. Te amo, porque a pesar de saber que nunca me has tocado, siento tu dulce e inocente mirada sobre mi, como una mano que acaricia mi rostro y no necesita otro lenguaje que el placer de tenernos cerca. Te amo, porque no me importa recordar que sólo somos dos jovencitos descubriendo el mundo que les rodea, que aunque yo me pierda en la más imponente oscuridad, tú no tienes el afán de olvidarme, es más, regresas para decirme que soy tan humano como cualquiera y que no hay razones para dejarme ir como una hoja en el viento. Te amo, porque pocas veces dices algo y yo soy quien abre su corazón de extremo a extremo para que tú lo veas y respondas en silencio; esa melodramática calma tuya que yo interpreto de mil maneras. Te amo, porque he amado y perdido tantas veces, que me inundo de la pena y sin embargo, basta una sonrisa tuya para hacerme creer que no todo está perdido. Te amo, porque te entrego mi tiempo y te lo dedico suavemente, no porque seas la última mujer en el mundo, sino porque eres la mejor de todas. Te amo… Porque no hay expresión en el mundo más interesante de vivir que decirte cuanto de agradecido me siento por existir, y haberte conocido.
suele ser que diversos pensamientos acumulados debido al exceso de energía provocan una serie de espacios incoherentes en la cordura.
-Es vergonzoso saber que la vida es sólo un instante lleno de más instantes. Fue un día bastante bueno. Primero, me quedé en mi habitación desayunando y luego seguí durmiendo hasta dolerme la espalda. Después, mis padres continuaban su rutinaria pelea, algo que no me importa. Más tarde escucho a mi hermana mayor decir que soy un bueno para nada, que realmente mi presencia en la casa es parecido a vomitar. Luego escuché a mi otra hermana mayor discutir con mi padre; recuerdo a mi padre decir que nunca nos ha reprochado un plato de comida, pero que una vez que yo me vaya no será mas su responsabilidad continuar llenando el refrigerador. Lo escuché claramente, me sentí un estorbo, algo que poco me importaba. Luego, le dije a mi madre que no sabía como lograba contener tanto enojo por ella, y se fue a llorar. La razón, fue que me quito todas mis cosas y las cambio de lugar para darme una habitación mas cómoda, algo que me molesta y anteriormente se lo había repetido muchas veces, le sugerí amablemente que no tocara mis cosas personales, no me mueva esto ni lo otro, es mio, es mi cuarto. Ella no puede estar modificando la vida de los demás solo porque se le antoja, así mismo, yo no le quito sus cosas para darle unas mejores, y no lo hago precisamente porque significan mucho para ella y eso lo respeto. No puedo matar a sus hijos y ofrecerle otros sólo porque estos son mejores y aquellos no tanto. Parece muy exagerado pero realmente me importa mi vida. No lo entendió… Parece cruel, pero es una mujer malvada y egoísta… igual que todos en esta casa. Entonces, mi padre nos llama para que fuésemos mi hermana y yo al super para abastecer la despensa. Cuando llegamos estaba cerrado. Mi padre me entrego su moto para yo llevarla hasta el garaje, mi hermana también tenia su moto así que juntos fuimos a lo lejos para dar un paseo, en la mitad del fantástico trayecto cae la lluvia y nos inunda por completo, nos llega el agua hasta los interiores pero sonreímos y continuamos manejando con el sentimiento de vivir algo emocionante y divertido. Fue genial, estuvo genial. Cuando llegamos nos duchamos y luego cada uno a su cuarto… Yo encendí la computadora, quería ver una película, invite a mi afligida madre y mi distraída hermana a verla conmigo, después de dos horas de espera nos sentamos y luego de transcurrir 7 minutos el novio de mi hermana llama porque esta en camino, así que yo voy por él en la moto de mi hermana para evitar le media hora de caminata hasta la casa. Cuando llegamos, comenzamos la película entre todos y les aburrió después de 8 minutos, yo coloque otra y me fui. Me quede en el celular viendo far cry 5 con vegetta777 y pienso; que tonto es, que divertido. Luego de acabarse la película yo coloqué otra, mi madre se fue y los demás la vimos, mi hermana preparo papas fritas con coca-cola y fue genial, luego presencie como se besaban apasionadamente en su despedida. Yo lleve al novio de mi hermana hasta la estación, nos despedimos. Al llegar a casa encuentro a mi hermana molesta, se enojó con él porque ya no habían más buses y él decidió irse en taxi. Yo le llamé desde mi celular y parece que él apago el suyo. Entonces me voy a la sala, continúo haciendo ejercicio mientras escucho canciones melódicas de piano triste. Miraba tus mensajes y me preguntaba ¿Por qué no la saludas viejo? Y me respondía ¿Para qué? Seguro tiene mejores cosas que hacer… Constantemente me acuso de inservible. ¿Para qué voy a invitarte a ver mi vida? ¿Para que ser completamente sincero contigo? A ti seguro no te interesa ver a alguien que se molesta y se frustra y llora y luego se divierte y se entretiene y te cuenta con extremo detalle como es la sonrisa que pone frente al espejo o frente a las personas. Demonios, ni a mi me interesa… bueno, no de todos, por ti si me siento capaz de escuchar o leer atentamente tu vida porque significas para mi… la gloria bendita. Pero no siento que yo sea la gloria bendita para ti, no necesito ni saberlo, es obvio. Tú tienes una vida, unos problemas, unas soluciones como cualquier persona sexy en este mundo y siento que yo no estoy en ese conjunto de prioridades. Así que, ¿Para qué interrumpir tu tiempo con cuentos lastimeros míos? Sin embargo, lo hago, lo digo, te confieso mi vida y mi integridad porque me saludas tontamente y me preguntas que ocurrió. Y esto no sirve de nada, tu no puedes hacer nada por mi, yo soy asi y ese es el gran delirio mio. Cuando… desperté esta mañana pude estar muy contento, me pasa cuando juego, cuando voy en la moto de mi padre, cuando pinto, cuando escribo, cuando lo que sea. Al igual que puedo estar muy triste, porque alguien me molesta, o me quita mis cosas, o me hace sentir absurdo. Es normal, le pasa a todo el mundo y yo tengo la dicha de vivir plenamente sin tener que preocuparme por un cáncer o un sida o un hijo en la cárcel o una tercera guerra nuclear. Yo vivo bien. Pero… me siento abandonado… el mundo es absurdo, tiene momentos emocionantes y también aburridos, cosas nuevas y cosas viejas pero… Por más que me sorprenda yo, no soy capaz de sentirme pleno otra vez. La psicología denomina mi caso como una falta de proyección por el futuro. Pero es que yo ya conseguí lo que quería. Yo anhelaba una verdad superior y absoluta y la encontré, quería salud, fuerza e inteligencia y la tuve, quería la mujer mas hermosa del mundo y por un segundo en toda mi vida sentí lo que era tenerla acostada en mi brazo con sus manos mojadas, acababa de masturbarme… luego pedí la mas inteligente y me encontré abrazándola por la espalda, los dos desnudos, encima de una roca en mitad del rió. Luego pedí la mas tierna y dulce y aparecí en frente de una casa, mirando a una joven señorita que venia corriendo para lanzarse sobre mi en el intento de un abrazo… después de eso ya no quería nada mas. Me volví guitarrista, cantaba y luego lloraba… luego me convertí en pintor, hice maravillas, pero no dejaba de sentirme absurdo. Después me aleje de mis amigos, ¿Amigos? Nunca fueron nada, solo jóvenes que buscaban distraerse y se toparon conmigo. ¿las mujeres que pedí? Una me dijo que era un imbécil, otra se fue con otro para luego regresar y darme su amistad, algo que honestamente rechazaría dos veces más. La otra me dijo que me amaba, pero que no quería una vida a mi lado… entendí que no tenia amigos, ni pareja, ni nada… ¿Mi familia? Son sólo un montón de locos, algunos muy tontos otros muy listos pero todos están esperando el momento para apuñalar a cualquiera por el menor motivo. Yo me quedo en silencio… camino por las montañas y mis pies arden, se sienten adoloridos por los muchos kilómetros y kilómetros. Un taxi, un bus, un soldado, todos me ofrecen su ayuda, me dicen que me llevan gratis, que ¿Qué rayos hago en mitad de la nada? Y yo hago una broma tonta y continúo. Un día, la presión de vivir una vida tan inútil me consumió y me fui a la montaña, tenia todo listo, para vivir allá hasta que el frió o el hambre acabaran conmigo. No duré ni 15 minutos sentado en el mismo lugar… entendí que mi alma se pudriría, pero que debía cuidar mi cuerpo, no podía darle esa especie de tortura voluntaria, lo apreciaba mucho, después de todo sin él no hubiese subido tantas veces la montaña que calmaba mis desordenados pensamientos. Así que regrese. Mis padres se asustaron por mi sospechosa actitud de pena, pero hice una broma tonta, como siempre, y ahí fue donde les diseñé la idea de tener una pareja perfecta y que siempre voy a su lado. Entonces se toman muy enserio mis palabras románticas y no me han vuelto a decir nada. Sólo puedo mentirles, son tan salvajes que no podrían entender a un hombre como yo; tan harto.Mis planes eran estudiar, trabajar, conseguir una casa y buscar un suplemento alimenticio correcto y vivir haciendo, básicamente cosas aburridas pero que mataban bien el tiempo, y seguro dar lugar a todo tipo de entendimientos. Hablo de matemáticas y ciencias exactas y demás, hasta que sea el ultimo de mis días. ¿Mujeres? Desde que soy más listo me parecen más aburridas, las chicas me hablan y son simples formas sin amor y sin pensamiento, me mata sentir el vacío de los demás, su violencia, su delirio, su brusquedad, tu eres la peor. No porque seas mala, es todo lo contrario, eres bonita, tu escritura es bonita, tu voz es bonita, tu compañía es preciosa, pero tu distancia es horrible. Te ame mucho tiempo tragándome la idea de que podría esperar, podría verte y besarte y abrazarte y compartir la vida. Pero eso es desastroso, me mataba lentamente de aburrición. Así que desde entonces me ausento cada vez que tengo la oportunidad porque no logro tolerar una mujer tan, pero tan bonita y tan imposible. Luego, creí que ya era tarde, ya te había lastimado lo suficiente. Te deje por otra, me acostaba con otras mientras estábamos juntos, te dejaba de hablar cada vez que se me daba la gana. Realmente llegué a creer que me habías odiado y luego olvidado como todo el bendito mundo solía hacerlo, pero no. Y eso te convierte en la única persona sobre la superficie de toda la existencia que considera que yo importo aunque sea un poco. No se cómo lo haces pero es increíble, me quedé sin palabras, así que juguetee lo que pude para no molestarte. Sin embargo, puedo mentirle a todo el maldito universo, pero nunca a las personas que amo, y esa es la razón de encontrarme de esta manera tan, real, exacto, como siempre soy cada día de mi vida después de saber que no tenía más elección que sobrevivir en este lugar tan decepcionante… Mientras estudiaba, un primo me llamo para decirme que la fuerza aérea estaba reclutando personal y que eso me serviría bastante, acepté y ya conoces la historia. En teoría, es sencillo, sólo debo comportarme dos años y si tengo un buen desempeño tendré un mayor número de posibilidades para lograr lo que ya te dije. Y está bien, me libro de una batalla para iniciar otra, como todo en la vida… Entonces pienso en ti. Da igual que no volvamos a hablar, tu significas mucho para mi, aunque tenga que aceptar que eres sólo una niña bonita. Y para ti puedo significar mucho o poco no lo sé, no logro entender el complejo funcionamiento del sentimiento femenino, pues este cambia conforme a las circunstancias. El punto, es que no hay punto, no hay nada que nos una. No te conozco, no se quién eres porque nunca te he visto ni he hablado contigo. Sé que hemos conversado mucho tiempo, eres estupenda y me enamoras pero el amor no es eso, el amor no se ve por una pantalla… tu me dijiste que no amabas a tu ex, que sólo fue una sensación, algo explosivo pero cegador por culpa de la inconsciencia y la curiosidad. Bueno, si conocieras el amor entenderías la vida misma, lo sabrías y lo tendrías tan nítido y claro que jamás podrías olvidar el sentimiento, una vez que lo tomas nunca se despegará de ti, por eso te amo en cualquier momento, pero no lo suficiente, para amarte, necesito el color de tu piel tan cerca del mio que no pueda encontrar la diferencia. No hablo del sexo, hablo de una sensación superior al mismo sexo, que inunda el aire y nos recorre por la sangre, es nuestro corazón que late justo al mismo tiempo que el otro… necesito tenerte a mi lado para poder amarte por completo. Necesito amarte, para tenerte a mi lado. Y eso es lo único que no puede ocurrir… No puedo ser feliz si no tengo algo que amar, alguien que me de las razones suficientes para querer seguir respirando y luchar para continuar con vida en el mañana, y no puedo amar si no lo tengo pegado a mi alma. Estoy solo… y lo peor, es que no lo estoy completamente, sino que estas aquí, ¡tú!, ser magnifico que obliga a mis pensamientos a sentir el dulce de la vida. No eres ni mi amiga, ni mi novia, ni mi hermana, ni mi amante, ni mi madre o mi hija. Eres todo a la vez… Pero sólo eres una pequeña niña, al igual que yo; un pequeño niño iluso… Yo le prometí por mi vida entera que estaría al lado de ella, y ella me extendió su meñique y tomo el mio diciendo que yo era lo más increíble que pudo haberle ocurrido a su vida. Una semana después ella se acostaba con mi mejor amiga y yo con su prima. Luego otra me dijo que no quería que me fuera jamás de su lado, que nunca la fuese a abandonar. Al día siguiente me dejó un mensaje diciendo que fue muy divertido, pero que ahora tiene a alguien mejor. Otra no me dijo nada, yo era el que le daba mi vida, ella, en mitad de nuestra cita encontró a su ex para besarle justo en frente de mi. ¿Si de cerca, de muy cerca, no encontré el amor, que me garantiza que tu seas lo que estoy buscando? Tú que eres una distante luz sin rencor. Es más ¿Qué me hace creer que aún soy bueno para ti y que me aceptaras de nuevo? Es mas… ¿Cuán posible es que yo sea lo que Tú de verdad quieres y necesitas? Porque de ser todo un si, no hay más remedio que esperar, yo tomaré mi largo viaje y tú continuarás creciendo hasta llegar el momento de saber por qué hemos vivido tanto tiempo uno lejos del otro. Y de ser que no, solo habré desperdiciado mi tiempo escribiendo, una vez mas… De ser un si o un no ni siquiera importa, ambos continuaremos creciendo, aprendiendo, viviendo. Da igual, sólo somos gente, y aquí hay mucha, mucha gente. Pero, de ser un si o un no, creo que me quedaría con la satisfacción más grande. Agradecerte… No tengo a nadie, todo se acabó para mí hace mucho tiempo, sólo vivo esperando por morir y sin embargo vienes y me haces sentir alguien. No importa si me lees o no, seguro que muy escogidas personas habré amado tanto como para desahogar estos sentimientos y nudos en la garganta… Realmente te amo, aunque nunca te haya tenido cerca, por lo que si es un si o un no, eso no evitará que seas todo lo que viva en mí, aun después de mi partida. Es encantador como siempre hay una excusa para vivir un poco de cielo en el infierno, o al revés… -¿Sabes?, algo de lo que siempre me he sorprendido, y no sé cuantas veces ya lo he dicho, pero a tu tan corta edad tengas una manera tan exacta y perfecta de utilizar las palabras, y sabes, leyendo tu mensaje me he sentido feliz, ¿El por qué? Antes no entendía mucho de lo que decías, como te expresabas, no lo comprendía del todo, y me he enterado de que por fin puedo llegar a entenderte, a comprender lo, no sé como es tu vida, no se realmente como vives tus días, y quizás nunca nos habremos de ver, pero yo siento un gran cariño por ti, ¿Por qué? No lo sé, desde el momento en que fuiste mi novio sentí que marcaría mi vida, y así lo hiciste. Eres importante para mi, porque aunque te hayas ido muchas veces, Cuando regresabas era para ofrecerme una sonrisa, para hacerle sentir a mi vida que no todo era aburrido ni falto de gracia y eso, eso lo amo más que cualquier cosa. Quizás puede que yo sea nada más que una niña que quiere hacerte sentir bien, pero si al menos me consideras esa niña es más que suficiente. Yo no tengo miles de palabras porque desde niña jamás he tenido que utilizarlas, pero cuando regreses de tu entrenamiento, yo voy a estar esperándote, porque no eres ni mi novio, ni mi esposo, ni mi hermano, pero ya ocupas un gran trozo de mi corazón, y te lo agradezco; el hecho de que me tomes tan en cuenta. Y para terminar, no me conoces, así que no idees en tu cabeza lo que me aburre o no, arriésgate, como yo lo hice tiempo atrás para contestarte y darme cuenta que no eras una mala persona. -Arriesgarme…
Me encanta que no tengas que volverte loca para comprenderme. Linda, soy una persona muy melancólica, mi vida es estupenda pero la soledad me ha hecho insensible y desconsiderado. Espero no causarte más daño, e intentar devolverte esa alegría que siento por saber que existes.
Ni idea cómo logra conseguirlo pero verle me envenena el alma…
Eres demasiado sexy… Podrían quemarse mis ojos solo por verte. A veces sueño contigo y no es sencillo despertar. Cuando estoy mirando las estrellas, recuerdo tus dedos sobre los míos y entonces deja de ser la noche, aún recuerdo las veces que yo te quitaba esa pijama, y sobre la fría desnudez de nuestros cuerpos se creaba un mundo nuevo, un lugar donde todo era mágico. Luego, cuando el medico dijo que el cáncer de colon que tenias ya era muy grave, yo… Nunca pude volver a ver a nuestros niños de la misma manera. ¿¡Quién los cuidaría ahora!? Quién les enseñará la belleza de la vida si no estará la sonrisa de su madre. El día que moriste… Yo no pude verte en ese cajón, no eras tú, así que deje todo atrás y regresé al lugar en donde nos conocimos, me senté sobre la arena y sentí que el aire era fresco, como aquel día, estabas tan preocupada, tus dedos fríos, tu ropa tan perfecta, yo sólo pude quedarme a tu lado, no decíamos palabra alguna pero nuestro silencio tenia algo superior a cualquier conversación y es que estaba impregnada de compañía. Te besé en la mano, me miraste sonriendo y entonces abrí los ojos. Me vi a mi mismo en la playa, me había ahogado la maldita pena. Entonces fui caminando por medio del mar hasta llegar a la completa oscuridad donde te encontré. Sin mí, tu alma estaba perdida. Entonces nos abrazamos y caímos por el borde del gran abismo, del tenebroso paraíso, del incomparable amor…
-Yo quiero aprender violín, de hecho, muchos instrumentos pero ahí voy, Poco a poco. -¿Cuál de todos es tu favorito? -La guitarra. -Yo pensaba que lo eran todos, que cada uno tenía su especialidad y maravilla, pero escuché el violín y era tan… triste, pero escuchaba la guitarra eléctrica y era tan explosiva que no sabía cual escoger. Aún sigo en medio de los dos. Tal vez el piano, por sus teclas graves y lentas y sus agudas y saltarinas. Pero sentía la batería; como cuando escuchas una buena canción y con el pie comienzas a golpear el suelo una y otra vez como si fuese gravedad… La flauta y sus limitaciones, el arpa y su antigüedad, el bajo y su anonimato, su invisibilidad, el chello y su delicadeza, la trompeta y su alegría, su frívola necesidad de fiesta. Y más y más… Pero estaba la voz, la voz y su sentimiento, La voz tenía todo tipo de tonos, de notas, de singularidades que la hacían algo diferente y nuevo, pero yo era amante del silencio, entonces no volví a hacer música… otra vez…
-Me encantas… Tanto que yo digo, tanto que consigo y tu a penas respondes, a penas si lo entiendes, a penas si estas aquí. Me recuerdas a alguien que quise mucho, era tan exclusiva… Tú me das ganas de amarte más, Mucho mas… -No hago nada. -Y eso es encantador, eres especial, por simplemente ser tú. Me derrites… Me derrite aun más la idea de derretirme por ti. Me derrite, no tener mas razones para derretirme… -Quizás es porque no conoce a otras chicas. -O conocí tantas… Que más me convence la idea de que eres realmente inigualable, única, tan linda, tan sexy, tan silencio… A veces pienso que yo soy poso y tu eres lluvia y con tus gotas me llenas desde el interior, luego lentamente vas subiendo tocando todos mis ladrillos, y yo te contengo calmando tus olas, siendo la razón de nuestro existir… -Eres horriblemente bueno con las palabras, sin embargo, prefiero ser eso de sencilla y normal.
-Hice todo lo humanamente posible por amarlas, por darles lo que querían, por quedarme hasta morir de cansancio y las respuestas de cada una fue su odio, su rabia, su desprecio, no comprendían como en su desgraciada vida alguien se alegrara hasta los huesos por sólo escuchar su sonrisa. De ahí a que me aburran todas las mujeres que existen excepto las que amé cuando era un hombre realmente valiente. -Entonces no hallaste, creías haberlas hallado, cuando hallas realmente es porque esa persona siente algo tan fuerte por ti como tú por ella, ¿No es así? -Si, exacto, pero les entregué todo lo que tenía, me desviví por ellas y sólo me gane su indiferencia, fue mi culpa ser tan arriesgado. Pero esas mujeres eran… Maravillosas. Cada una con un estilo diferente con una fragancia un olor una mirada un calor, me revolvían la mente y me mataba la curiosidad el intentarlo. Una tan lista, otra tan suave otra tan tierna, tú tan divertida y reservada. Cada una con algo que me falta y que añoraba amar. A esas mujeres nunca les serví para nada pero ellas para mi fueron mi razón para continuar respirando, eran lo único bello que tenia este horrible mundo. -Tú miras cosas tan normales y tan sencillas como algo maravilloso, es muy encantador de tu parte, y esas son cosas que ellas pasaron o que todas las personas pasan por desapercibido. -Es mi maldición… Pero no me arrepiento de verlas llorar por saberse malas niñas y luego sentir agotadas todas las posibilidades. Ellas me hacían volar… Te lo dije anoche, me pareces tan estupenda, Puede que no lo seas, pero eso es suficiente para dejarme en la calma, en la totalidad de mi amor, el que no sentía hace mucho mucho tiempo. -No me interesa que me digan que soy estupenda, que soy linda, o que soy maravillosa, son cosas que siento huecas muchas veces, lo único que quiero oír son las «gracias» de alguna persona que yo pueda haber ayudado, quiero que me digan que les fui de ayuda. Es gratificante para mí. -Pues te aseguro que en mi peregrinaje por la nada una niña sencilla y normal me acompaño hasta que yo dejara de llorar. -Y lo seguiré haciendo hasta que esté a mi alcance. -Tú, Ashley, eres lo único que sobrevivió de mi amor, lo único que tengo que me importa en este basto mundo. -Sé que muy en tu interior hay más amor de lo que puedes demostrar. También sé que no soy yo solamente. -Tu déjame embriagarme de tu belleza y yo me encargare de preocuparme por la resaca. -Entonces me haré esa idea por el momento. -Yo te lo dije, eres una simple niña, como cualquiera, con sus pros y contras pero te amo, y esa es la máxima diferencia.
Y mientras tu vida pasa de largo se extingue la mía, es indescriptible el sufrimiento que tengo en mis entrañas al saber que solo podré amarte en silencio mientras tú vives ignorando lo que siento. Tanto me duele tu dolor, tanto sufro por lo que te atañe que me dan ganas de dañar a aquellos que contigo han sido malos, y lo peor es que los proteges de mi, por que de sobra sabes que yo por ti dejaría secas mis venas si me lo pidieras.Es tan bello el mirarte en la distancia, escucharte por medio de mi teléfono únicamente, mirarte mediante unas pocas fotos que de tus redes he hurtado, que siento pánico si llegara el día que vengas a mí y pueda ya no solo imaginarte, sino poder llenar mis sentidos de ti, al menos 4 de ellos.Escuchando en vivo tu bonita y delicada voz, mirando el ángel que eres y que seguramente solo miraré y admiraré, sintiendo tu delicado y cálido tacto, y llenando mi olfato de tu perfume, aquel perfume que hará que cada vez que lo perciba me recuerde a aquel día… El día que temblaba por que al fin cerca del milagro de tu vida estaría.
Adicto… A una fragancia, un olor anclado en mis recuerdos me hace volver, me hace creer que si se puede vivir. Adicto a la necesidad de existir, al precio del amor que me marchita pero que sin el yo no volvería.
Su belleza es un espectáculo, no sé que encuentro en ella que me resulta tan inspirador, pero sin duda mis ojos se desprenden, se salen, se explotan.
Busco como un vagabundo las migajas de sus palabras, sus caricias, busco incesante en una tormenta de tristeza el sol que brillaba en mi cuando ella me sonreía. Busco y no dejo de intentar recuperar el recuerdo de sus dedos, mágicos algodones que resbalaban por mi cabello, su mano… Aquella que nunca bese por creer no ser digno. Todo lo busco y me pierdo en lugares que nunca existieron, que sólo están en mi imaginación, igual que ella, pues una mujer tan perfecta no existiría ¿o tal vez si?
Mi corazón disuelto en pequeños soles negros palpita y naufraga hacia donde no hay olvido. Estoy enferma del corazón. Me dan sedantes. Al fin me he enfermado concretamente. Algo serio, algo con nombre, para mi espera inútil, para mi sinsentido congénito. Por fin bautizaron mi vacío, mi silencio, mi ademan de idiota enamorada del aire. -Alejandra Pizarnik. Diarios
No puedo mentirle, no puedo ignorarla, fue ella lo único de provecho que le saque a la vida. No fueron sus disparatadas risas, ni sus cambios repentinos de humor lo que me ha dejado encadenado. Mas bien, fue la lucha para encontrarla y la pena por volver a perdela lo que puso valor al pasar de los días. Fue ella el precio y el tesoro, la razón de mi aliento. El motivo por el cual me levantaba cada mañana; no para encontrarla, sino para perseguirla hasta los confines de los abismos. Creo que por eso me enamore de lo imposible.
El bosque es tenebroso y llueve, llueve lentamente una gota a la vez y yo camino por agujeros llenos de lodo, charcos sucios, rocas resbaladizas, césped mojado donde habitan cientos de masas negras y mal olientes que dejaron las vacas en el resto del día. Pero no hay día, ni vacas, ni aves, ni puedo ver nada, ni nadie despierto con quien hablar y hacer la madrugada menos fría. Solo un silencio que se interrumpe con mis pasos que rompen de vez en cuando una rama vieja tirada en el suelo, son pasos lentos y tranquilos que esconden el miedo, miro a todos lados, no hay nada, escucho en todas direcciones; nada, solo un frió, mas gotas, y mas silencio… Sé bien que no esta, que no me mira ni me escucha, y quien sabe si aun sigue en este mundo, pero siento sus brazos pegados a mi, es posible que sea el efecto narcótico de las moras recogidas del alrededor, pero sin duda es esa sensación lo único que no me ha dejado morir, ni me dejará porque cada noche es mas espantosa y sus manos mas cálidas.
Son viejos recuerdos… Flores que a pesar del tiempo conservan su aroma, me hubiese encantado ver como tomaban color sus pétalos, pero esta bien, las algodonadas nubes en donde estuvo mi mirada tampoco fueron una perdida de tiempo. Me da nostalgia, quisiera estar en todo momento en todos los parajes hermosos de este mundo, pero hay una luna por cada noche, y son escogidos los momentos donde brilla tanto, justo como a ella le gustaba… Me acuerdo cuando yo me quedaba mirando sus ojos embelesados por ese circulo redondo en el cielo, ella era mas hermosa que la luna, ella brillaba para mi, ella era un cielo, que lastimosamente no he vuelto a ver… Pero de recordarlo, podría escribir toda mi vida.
Llevo camisa de fuerza, no lo digo pero se nota, una locura sin nombre me ha invadido, se olvida cuando el peso de la tristeza me ahorca pero cada día es un desenfreno incontrolable de cosas que pienso, si aun no he asesinado a alguien es porque estoy sumamente enamorada, de todo de todos, el romance me envenena la maldad y la aniquila, pero mi bondad es ilusoria cuando arranco de mi los sentimientos puros de la nobleza, y lentamente pervierto cada paso y lo enredo en el ridículo y las estupideces. Cada cosa es oportuna para expandir nuevas ideas morbosas de destruir o acariciar su razón de ser, como si lo que hay, fuera insignificante y lo que no hay tuviese mi valor y agrado, y me perturbo, y me vuelvo adicta a la fragancia del creer saberlo todo, como inventarme rosas sin espinas y endulzar un océano infinito…
Sus besos me resucitan cada mañana, no podía dejar de preguntarme por que no la seguí desde el principio, de ser así no hubiese sido tan infeliz…
Y mira que tengo tiempo, enormes cantidades de tiempo para llorar, para pensar en ti y resucitar. Es que no lo comprendo, y esa es la causa de mis males, ¿cómo puedes tocar mis pensamientos, mis recuerdos, mis mas grandes sueños y simplemente hacerlos pedazos con tu presencia? Aun no logro entender como eres, como has sabido ser para mi algo tan impresionante, al punto en que llegas y dejas mi atención congelada, mi vista en el aire que te rodea y mi mente en todas las veces que te abrace, las veces que fui feliz… Estoy en donde no puedo verte, ni siquiera persivirte o espiarte, estoy en un lugar donde el olvido es mi vida, estoy donde nadie sabe de mi, done no puedo salir, y aun así consigo amarte, como si fuese una reacción química o un acto de gravedad te pienso y te quiero y te extraño, te imagino suave y dulce y eso me hace ser fuerte.
Tal vez fui demasiado sincero, se enteró que ella no era el único abismo en el que había caído, que habían otros dientes puntiagudos los que me habían masticado y triturado de mil maneras, dejando pedazos de mi regados en muchos seres distintos. Se fue y yo le anime a marcharse con orgullo y valor, pues no hay mejor lugar que estar que lejos de mi…
Me estoy trastornando, mi cabeza no sale a flote en este mar de obligaciones y yo solo puedo hundirme en amor y mas amor, amor ficticio, amor loco y sin razón, amor que me permite respirar pero el maldito aire esta envenenado de odio y se vuelve casi imposible encontrar paz en tanto camino absurdo y degenerado, no es mi camino, no me gusta, pero no puedo salir de el hasta que lo termine.
No puedo dormir, me enredas la cabeza, me da vuelvas y vueltas al rededor tuyo, no sé si es la impresión de unos labios después de desconocer la vida en estos tiempos dolorosos, o es que realmente eres tu, y soy yo, y ya no te puedo perder de vista, y me late la respiración e inhala mis sangre ardiendo por mis venas los aromas tuyos, tengo plomo en el pecho y caigo hasta el fondo de ti, tus dedos me atrapan como una terrible trampa, de la que no se escapa, tus ojos me hipnotizan me atontan me dejan sin criterio alguno y caigo sobre tu boca como sediento, cansado mas que excitado, me refugio en ti como quien tiene miedo del mundo de la vida hasta de si mismo y llego a lo mas profundo de ti, suave, lento, delicado, es un juego, es un divertidisimo juego donde ya no puedes abandonarme, no quieres, yo tampoco, mi alma serena, no quiere dejarte, ni un segundo, quiero seguirte abrazando, quiero que te quedes un poco mas, es frío cuando te vas…
Me sobran las palabras… Se que nada de lo que pueda decir cambiará el destino pero me invade por dentro una irremediable necesidad de quererte… Pero no es sencillo digerir tal palabra, lo mio es más que una sensación de paz al imaginarte, mas que un inmenso apego por la dulzura que siento desde que te conozco, mas que lo que he dado para encontrar en ti una sonrisa… Es mas que yo, que mi tiempo en estos lugares, que todo lo que se; eres mas que todo lo que necesito y me revuelve por dentro todo lo que podría hacer por ti o mas bien por mi porque me siento inmensamente feliz contigo, entonces te busco y te huyo y creo un circulo vicioso al rededor de ti porque me siento insignificante frente a tanto amor que sale de mi, que corre y no sabe a donde, que persigue y no sabe a quien, pero que siente y se desespera y se lastima de tanto encontrar algo tan inalcanzable… Te quiero, te amo, te adoro, y me derrito por saborear las curvas de tus labios y quedarme perplejo admirando esos ojos tan diferentes, tan especiales, tan brillantes y redondos en los que caigo como si fueran mis manos sobre las tuyas, esos dedos en los que me enredo y hago nudos indescifrables, así como esta mi corazón pegado a tus fotos… Que daría yo por pedirte unos minutos adicionales en esos abrazos que duran horas y horas, tardes en las que se asoma la luna y el frió ni siquiera se percibe… Que daría yo por amarte un poco mas y hacer que de tanta dulzura encuentres aventura en mi, peligro y necesidad de embarcar hacia ese mar de la desesperación en el que me encuentro, que daría yo por tenerte, por recuperar esa ilusión absurda y fantástica que tenias antes de irme. Pero te he perdido, y no por tonto sino por desquiciado; un autentico lunático obsesionado por el sentir del amor. Me fui y no me arrepiento, porque descubrí en mi fuerzas inimaginables, me fui y aprendí a amarte mas, a extrañarte con mas dolor y pensarte mayor tiempo porque encontré las malditas penas lejos de ti, supe que es la traición y el cuchillo en la espalda, entendí que por amor yo lograba renunciar al mundo y dejar mis huesos en forma de una tumba para verme caer sobre mi mismo. Me aleje de ti y no fueron ellas las que me apuñalaron, fui yo que no logre dimensionar la guerra que se había acabado en el momento de encontrarte. Te amo y no dejare de hacerlo, te quiero y te pienso y no quedara un antojo mas grande en el tiempo que me quede porque todo lo que tuve me hizo pedazos y tu llegaste a acariciarme las cicatrices y a besarme las heridas, me sanaste y ya no puedes hacerlo mas, no porque no quieras sino porque no lo merezco. Me siento tonto al imponerte mis excusas cuando fui yo el que en silencio profane el lecho de tu alma y tu cuerpo en el que me dejaste caer para dormir sin mas lagrimas. Me siento aun mas desdichado al saber que no encontrare en ti piedad alguna y si la encontrase la rechazaría, pues no mereces que un mentiroso como yo llene de fantasías un corazón tan dulce como el tuyo. Pero me pierdo en mis palabras una y otra vez. No puedo quedarme porque eres perfectamente inalcanzable y yo me congelo con el frío de tus silencios. Pero no puedo irme ya que eres la razón de mi fuerza y mi voluntad, eres la piedra en la que construyo la casa de mi futuro, eres los cimientos y la cama que utilizo para vivir y descansar, tu eres la primer salida que tengo y la única solución, eres mi religión y mi inspiración, eres lo que he colocado en ti y eso ha sido maravilloso. Me motiva amarte pero me desalienta haberte fallado… Te siento tan confundida respecto a mi y se que es inevitable, solo soy un mar de palabras y sensaciones, pero ya no me preocupo mas por ti. Mis últimos intentos de adorarte han fallado y enamorarte es un inútil intento y eso me hace feliz, se que ya has crecido y aceptas el mundo que te rodea con madurez y decisión, pero no dejas de ser la dulce niña que me atrapo desde hace tanto tiempo y que con el paso de los años solo aumenta mi ambición por sentirte bien pegada a mi, hasta el punto de no podernos separar mas. Así que no sufro por ti sino por mi. Se que cada día eres mas hermosa, mas talentosa e inteligente y que yo seré un suspiro de vez en cuando pero no tendré ni la menor importancia con el pasar de los años, que crecerás y no significare un obstáculo, eso significa que no me necesitas y para ser mas objetivo que no eres feliz con necesitar amarme y yo jamas podre ser como tu. Que yo soy una tormenta insaciable de ti y que mis viajes por el mundo solo tendrán tu nombre… También se que como yo habrán muchos, que se suiciden y se maten entre si para alcanzarte. pero confío en ti que no seras como yo, que continuaras sin mirar atrás, que no vivirás amando locamente, hasta el punto de morir de tanto imaginar algo tan imposible. Y si lo haces no necesitas disculparte, es una sensación increíble dejar tu piel en otra justo como yo lo he hecho. Te amo… te siento, te vivo a cada instante y jamas te iras de mi… Y si mis palabras son rechazadas e ignoradas y finalmente olvidadas en mi no habrá rencor, pues son grandes las personas que me permitieron desahogar tan absoluta necesidad de amar y no morir de frío en este mundo tan absurdo, este mundo tan aburrido en el que solo encuentro tu compañía y recupero el aprecio por los días que vienen, o los que ya se fueron…
Sólo soy un muchacho inteligente, necio, silencioso, lento, aventurero, temerario, tranquilo, suave, dulce, cursi, tonto, aburrido, explosivo, encantador, diferente, triste, melancólico, escritor, pintor, filosofo, traicionero, mentiroso, leal, anciano, pequeño nene, solitario, amante, pensador, músico y de un gran gusto por la nada. Esta bien, esta bien, es mi culpa no tener la destreza necesaria para persuadir sus habilidades naturales y aflorar su ingenuidad. Sólo intento jugar un rato contigo, de buena manera, acompañarnos con historias y sonrisas pero nada mas, no puedo salir de donde estoy… No hablo de jugar, como algo que se utiliza, mas bien jugar como alguien con quien comparto tiempo y me divierto. Tus sentimientos, al igual que las pocas mujeres inteligentes que habitan el universo, están guardados y sellados en un cofre invisible casi imposible de hallar por las manos del mas sutil y emprendedor sujeto, me basta con escarbar la tierra de la confianza y sembrar en ella una bella amistad, aunque la espera seria hermosa si en sus frutos tu depositaras la dulzura y entonces juntos comeríamos la grandeza del amor… Amor jugoso y delicioso que baja por nuestros paladares de gota en gota y nos deja ansiosos y llenos de apetito, amor que se vuelve imposible y después de llenarnos el alma muere de frío por la falta de que nuestros cuerpos se acaricien, y dejen en cenizas el bosque de nuestra intimidad. Dulce y asesino amor que rodea la adolescencia y llena de pesares y arrepentimiento la vida… ¿Qué otra meta mas grande que el amor? La amistad es un juego sucio entre las personas pues no hay mayor lenguaje que las miradas aparentemente inofensivas que tienen un hombre y una mujer, que como cualquiera guarda secretos y oculta el latir de su sangre recorriendo todo su cuerpo. No desconfíes de mi mujer, desconfía de ti pues yo soy inofensivo desde mis palabras pero tu eres la autentica lógica que les da razón y las acoge en la memoria. Que si te digo que eres hermosa no es por conquistarte aunque lo quisiera, es mas bien mi sabiduría de un anciano poeta que reconoce la mística y la cultura que poseen las delicadas manos de una mujer, tanto así, que sin conocerla puedo asegurar su posición en las nubes de la admiración, pues son ellas las que evitan que todo hombre pierda su camino en este doloroso y terrible sendero del tiempo. ¡No exagero! han sido las lentas horas que han hecho de un reluciente hombre un carbón oscuro que pasa desapercibido frente a las sonrisas ajenas, han sido los meses de sufrimiento que me colmaron desde el día en que no le fui suficiente y como cualquier humano le falle, y al ver sus lagrimas yo mismo jure no perdonarme y peregrinar en silencio el resto de mi vida pues había asesinado a alguien mas grande que el cielo mismo…
Que mi silencio solo de pauta a las maravillosas notas que he entonado para ti, esa melodía esperada que te estremece los sentidos pero necesita un leve silencio para ser comprendida y saboreada como todo un concierto de dulzura, la misma que espero no se le olvide; le entrego a cada segundo en que me es posible… Ahora no puedo hablarte, en tiempos difíciles me encuentro, aunque no son tan malos, pensar en su mirada me recuerda a un bonito amanecer. De alguna manera me siento responsable de tus sentimientos, que debo cuidarlos como a un jardín hermoso que de vez en cuando sus verdes tierras se pierden por falta de lluvia. No estoy diciendo que necesites de mi al igual que yo de ti, reconozco fácilmente que eres fuerte y lista como para evitar caer en la soledad angustiosa de gestos bondadosos que nunca llegaran. Mas bien lo hago porque al amarte tanto me siento con el peso del compromiso encima, algo que llevo en mi muy adentro, es mayor que la rutina, es el deseo infinito de que estés bien y los únicos medios que poseo son pobres y quien sabe si funcionen pero te los entrego abiertamente como mi alma, no espero nada a cambio, la satisfacción de hacerlo es mas que suficiente, sin embargo, me siento débil… Estoy delirando levemente como un hombre que busca desesperadamente razones para respirar, aun no caigo en la locura pero la rozo, no tengo tiempo, el tiempo ya no es mio, y me cuesta amarte, ya ni me amo, no tengo ni para darme y sin embargo intento regar las flores de tu piel con bellas palabras. De verdad perdona mi ausencia, si he escapado tantas veces es porque no podía amarte, necesitaba refugiarme en mi para encontrar ese tesoro de mi ser y compartirlo contigo nuevamente, ahora no puedo, ahora no entiendo nada, ahora me sienta la culpa de tu preocupación por mi silencio, créame que la amo, mas que a mi, mas que a todo, mas que a todos, sus besos son mi hogar y en el vivo, sus abrazos es lo único que me amputa de esta soledad tan abrumante y en ello pienso a cada segundo. Eres una niña, una niña hermosa que pretendo enternecer el resto de mi vida, pero me cuesta mucho en este momento… Yo buscare la manera de acariciarte, solo quiero que disculpes mi aturdido destino, que por mas que quiera no puedo encontrar el lago de mi felicidad para que te sumerjas en el… Ya aparecerá, solo son estaciones, solo son épocas…
…Comprendo tu ausencia, aunque me resulta difícil de digerir.
Me acostumbré leerte diariamente, y ya no hacerlo tan a menudo me angustia el aura.
Sin embargo, reitero que lo comprendo.
Y cualquier cosa que ocurra. Todo estará mejor, sólo… Hay que seguir peleando.
Soñé contigo hoy… -Yo sueño contigo a cada día, a tu lado, de tu mano, colgando como una bolsa de compras, observándote, tan mía, tan tuya, tan increíble… -Soñé que estabas aquí, incluso tenías ese uniforme. Bueno, no era exactamente aquí, era en otra casa y otra habitación. Me llevaste allí y había una fiesta, como un cumpleaños, no sé de quién era o qué era. Entonces me pediste que entrara a una habitación, y en la habitación habían diferentes fotografías de nosotros juntos pegadas de la pared, escritos tuyos, un par de carteleras. Esa habitación estaba repleta de nosotros. Y me levanté feliz, jajaja.
Algunos detalles del sueño, es que la habitación era gris (literalmente) llovía a cántaros, y la gente no se veía feliz, tú tampoco. Cariño, y me angustia realmente mucho saber lo mal que lo estás pasando allá… ¿Querés contarme qué ha pasado?
Voy a darte mucho amor para cuando regreses. Todo estará bien, sé que ahora quizá sea ilógico. Pero cada día es diferente, uno más hijueputa que el otro, pero saldrás, y no estarás allí toda tu vida. Es sólo un pedacito. Luego vivirás otras cosas, conmigo, por ejemplo. -Soñaste lo mismo que yo cuando aun estaba en el colegio, no solo fue ese, habían varias interpretaciones de una historia triste pero la única historia memorable y como tal es motivo de fiesta y alegría, en aquel tiempo adoraba verte y me entristecía no hacerlo a cada segundo, ahora adoro tenerte y nada puede evitarlo, quieras o no y ese es mi truco. Yo soñé hace unas semanas que tu estabas reunida con tu familia, yo te observaba desde el tejado, nadie podía verme ni siquiera era posible ver desde el tejado pero estaba ahí en cada uno de tus movimientos, y cuando te quedabas sola yo bajaba del tejado y me escabullía por detrás de la casa y me veías, casi como si me buscaras al igual que yo, entonces jugábamos como dos gatos vecinos que se sienten tan aburridos con sus amos ausentes, un día yo estaba sentado en tu cama, tu estabas abrazándome por la espalada como a mi me gusta y dos niños, una niña y un niño nos miraron y como si yo les tuviese un gran aprecio les abrí un libro, no se lo que decía, mas bien lo sentía y como si fuera una obra de teatro, una historia se desenvolvía dejando sorpresas y sensaciones en sus jóvenes rostros, tu me sonreías, y el libro también, como si ambos fueran lo mismo. Mira, yo sabia que era difícil, pero realmente lo es. Desde hace un mes que se fueron los mas antiguos, significa que quedamos con muy poco personal, yo preste guardia todos los días, me era imposible hacer algo mas que dormir las tres o cuatro sagradas horas que dan después de la guardia, para nuevamente levantarse e ir otra vez a la guardia, eso se asimila, se sobrelleva angustiosamente pero se puede vivir así semanas, fatales pero vivir es vivir. En este momento acabo de llegar con el frío y el agotamiento mas endemoniados pero debo sacrificarme por ti, aunque sea con explicaciones porque estoy harto de herirte, a cada momento piensas en mi y si yo no respondo sera una nueva forma de causar sensaciones en ti, significa que si fue mi placer encantarte con tantos gestos y besos llenos de ternura, sera mi responsabilidad hacerme presente las veces que sean necesarias solo para conservar tu calma, no le hablo a mi familia desde hace mucho, mi madre cumplió años hace unos días y se puede morir para mi, realmente me esta desquiciando este lugar, pero nada nunca sera tan importante como tu, así que me sacrificare por ti las veces que tenga que hacerlo, lo hice afrontando a tu hermana, dejando a mis buenos amores, persiguiéndote, hablándote, escribiéndote, quedarme horas escuchándote, caminar a donde tu quisieras solo por tenerte conmigo, aprenderme las canciones que te gustaban solo para cantarlas contigo, no dejare que mi pánico sea mas grande que mi amor. Hace poco tiempo comenzó lo que se le llama la entrega de la base, situación importante en que un comandante se va para dejarle su titulo de todo poderoso a otro nuevo comandante, circunstancia en la cual cada miembro del lugar debe pulir, embellecer, brillar, arreglar, mejorar y todo lo que tenga que ver con bueno a todo lo que este a su paso. Prácticamente, no, perdón, literalmente, después de estar toda la madrugada respirando niebla, temblando, sufriendo por no dormirse de pie en medio de la enorme oscuridad, llegábamos a barrer trapear lijar limpiar coser mover lavar y todo lo que tenga que ver con dar la mejor apariencia a nuevo, por poco, por poquísimo no arrancamos la tierra y colocamos una nueva para esos hijos de puta. Entonces… después de estar todo el día desfalleciendo, fui a la guardia, e inevitablemente mis parpados tenían mas peso que mi fusil y solo recuerdo el momento en que la teniente llego a alumbrarme con el celular en mi cara, ¡centinela! ¡centinela! su voz se oía lejana, desaparecida, como si estuviese en un pozo o una cueva profunda. Me dijo que si lo volvería hacer me haría escribir un informe, un informe… es la descripción de un pase gratis a la cárcel, me asusta, tengo tanto miedo, pero desearía estar mas allá que acá. Me vuelvo loco, me desquicio, el sueño me mata el frío ha helado mi corazón no tengo nada lindo que decirte, eres hermosa, ¡pero eso es tan obvio! El cansancio no me deja hacer nada, no puedo ni hablar conmigo mismo, yo que era mi mejor amigo, mi fiel consejero y consuelo en cada tormenta, ya no se quien soy, o quien era, ahora me levantan a las 10 am, debo ir a puesto 7, maldito lugar, pero mejor que puesto 2, ahí no hay escapatoria de la niebla abrazando tus pies… Se supone ya paso lo peor, ya llego el nuevo anciano con estrellitas en el pecho, le gusto la elegancia del lugar, imposible que no. También se supone que dejaremos de matarnos, y podremos dormir, hoy llegaran los nuevos, hoy a las 5 pm, no sabemos cuantos son pero llegan hoy, llegan después de el maldito infierno de la instrucción en cundinamarca, reciben el curso de seguridad y defensa de bases que dura 8 días y entonces mi problema sera su problema y así… podre hablarte, y si milagrosamente me mantengo despierto esos días, tal vez pueda hablarte mas de cerca. Te amo tanto, te amo infinitamente, te amo hasta en mi locura, hasta cuando ni yo me amo, pero te amo, eres mi excusa para vivir, así que de verdad disculpe mi invisible ser, tengo razones de sobra pero nunca serán tan grandes como para evitar amarte con todo lo que soy… Gracias por acompañarme en este solitario y moribundo sendero… -… me encantó ese sueño… Ay amor…
No hay palabras de motivación algunas que pueda usar, cuyas ya no te hayan dicho. No puedo comprenderte a la perfección en ese sentido, en efecto sí sé que ese lugar es terrible. Se nota porque a leguas, y aún no viéndote, sé que estás mal. Estás no sólo ausente del mundo, sino de ti mismo, y eso es fatal… Sólo aférrate a la idea de que saldrás de ahí, aunque los días y cada maldita hora parezca eterna en ese infernal lugar, vas a salir, y te vas a sanar, todo estará mejor. Te admiro mucho, ¿sabes? Yo siempre estaré aquí para tí. Tu ten un maravilloso día, aunque parezca difícil.
Enséñame a esos reclutas, una buena cara.
El poder no es lo único que hace a una persona digna de respeto y/o admiración.
Y a vos te caracterizan otras muy buenas cualidades, cuyas te hacen tu peso en esmeraldas y oro para mí. Te adoro mucho cariño, mucho
No me va a gustar la vida sin ti… Se que te imagino si no estas, que amo a otras cuando el corazón tiene cabida, pero para ser honesto nada se compara contigo, y aunque nadie mas que yo reconoce el mundo de formas diferentes, naturales, únicas y necesarias es difícil asimilar que te extraño tanto… Hasta he llegado a pensar que lo que he vivido se vuelve insignificante cuando tengo tus lindos deditos conmigo. No puedo detener el destino y tu tampoco, pero que bello seria que te quedaras mas tiempo, mucho mas, casi como el mio, así sea para no vernos y no hablarnos, pero es que si desapareces a quien le daré mi amor, a quien le deseare el bien, a quien imaginare en las noches solitarias si no eres tu…
Te amaba tanto… Pero un miedo enorme me tapaba, me cubría por completo la necesidad de regar tus cabellos con el agua de mis caricias… Estaba asustado, desde que te conocí solo supe esconderme, acurrucarme en el silencio y esperar un mejor momento, ¿momento para qué? Para amarte con suavidad y calma, que el mundo podría destruirse a nuestro lado pero no se escuchara ni un solo ruido, que nuestros corazones no se percataran del caos y que dejaran sin mas nuestras sonsas miradas en un cielo gris que anochece lentamente, una oscuridad que deja cerrar nuestros ojos y nos permite soñar… Pero soñé demasiado, no alcanzo a recordar las veces que yo pedí un poco de calma para mirarte, extrañarte delicadamente, pero nunca llego… nunca tuve la oportunidad, y la buscaba la deseaba de vez en cuando la pedía otras veces no la conseguía, la quería siempre, la añoraba, una oportunidad tan estrecha en un callejón sin salida que solo pudiese rendirse ante mi. Una oportunidad en mis manos, en mis dedos, en todo mi antojo. Una oportunidad para amarte… Pero no aparecía, me frustraba, ¡me enojaba! Me enfurecía, ¿Como era posible tanta falta de suerte? Necesitaba urgente desembocar este corazón, en tus manos, ya no era un arrollo como cuando te conocí, ahora se convertía en un océano un mar inmenso contenido en mi pecho, olas golpeando con fuerza los muros de este frió abandono… No había espacio, ni lugar, ni momento donde pudiese abrazarte tanto para dejar que este mar se calmara… Pero guardaba silencio, tampoco había momento para explicarte tantas ganas de adorarte, no había tiempo para entregarte siquiera unas gotas de este amor, solo podía regresar a casa, maldecir el camino y llorar finalmente en el lecho de mi habitación… No sabia como era posible tanto dolor, mi respiración era una retorcida necesidad de vivir, me dolía todo en todo momento, agonizaba lentamente y cada día después de verte se convertía en un cuchillo mas en mi espalda, en una ola aun mas grande agrietando mis ojos, mi amor salia a gotas hasta caer al suelo… Y cuando te acercabas, buscaba esa oportunidad, no sabia como amarte, estaba muy asustado de ti, tan hermosa… tocaba tus manos y la tormenta terminaba, las nubes de mi dolor me daban sombra y podía sentirme fuerte y vivo, pero se hacia peor cuando te ibas… Se hacia insoportable estar lejos de ti, se hacia un nudo en mi garganta y relámpagos caían en mi cuerpo hasta dejarme sin energía alguna, no era capaz aun de amarte, y mi propio amor me estaba matando… ¿como es posible que seas tan maravillosa? Fue una tortura mas que una pregunta. Finalmente… Tuvo que llegar el momento, no se cuantas veces he de repetirlo, pero jamas había sentido tantas ganas de quedarme a tu lado. Tenia que escapar, tenia que correr lejos de ti, entre mas lejos mejor, porque si me quedaba a tu lado moriría, me ahogaría en tantos deseos de darte mi dulzura, mi ternura mas suave… Con el tiempo, con el solitario tiempo abría de vez en cuando ante mi mismo un río de sensaciones, lloraba, reía, cantaba y hasta maldecía pero bajaba la presión, lentamente la soledad me fue curando, pensar en ti, me permitía entregarte mi mas sincero amor y como no estabas no había miedo de tu rechazo, no estaba asustado y sin mas abría de par en par todos mis pensamientos y no alcanzo a imaginar las veces que tuve que hacerlo para por fin estar en paz conmigo mismo… Y de mi solitaria felicidad, nació tu voz. Y me di cuenta que no solo estaba regando un viejo amor, sino que estaba creando una mujer tan bella, que su único propósito seria quedarse a mi lado, desde ese día tome toda mi furia y mi dolor y cree la tormenta mas grande en toda mi vida, ya no había tierra firme en mi alma, solo un inmenso estanque de inspiración, estaba preparado, estaba entusiasmado y comencé, día a día de alguna forma dejaba ir sin rienda suelta todo ese amor que nadie ha querido recibirme. Entonces diseñaba a la perfección unos ojos cálidos, una sonrisa amplia y reluciente, unas manos pequeñas y suaves, unos gestos ansiosos y libres, un pensamiento estupendo, ágil, veloz, bueno y malo al mismo tiempo, una intensión limpia, un pasado aprendido y un futuro lleno de aventuras, y llegue a lo mas importante; un corazón valiente, tierno y dulce, suave y fuerte, finalmente le di alma, fue la parte mas dura porque era como crear un ser de la nada, entonces me quite un pedazo de la mía, se la di, y abrió los ojos. Su mirada no encontraba otra cosa que a mi, no necesito decirme nada, me acaricio desde lejos, y se acerco a mi, jugueteando con mi gran impresión, venia como el aire, de un lado a otro como bailando con mi amor, llego hasta mi y me tomo del brazo, se sujeto delicadamente y escondió su mirada, se sentía cálida, viva, casi asustada pero tan segura de estar ahí, como si todo lo que quería era que yo la protegiese de este mundo y el otro en donde ella estaba, como si se resguardara bajo mi pecho, y se enredara con mis manos al igual que las raíces con la tierra. Yo sentí su corazón, tan frágil, tan pequeño, supe que su vida ahora dependía de mi, y desde entonces hacia donde sea que camine estará ella, colgando de mi como algo inseparable, indispensable, ella tiene su propia personalidad, no habla mucho le gusta el silencio, le atraen los paisajes, pero sus palabras son dulces y hermosas cuando se las pido, me jala de la camisa cuando escucha una canción que le gusta, ella me acompaña todo el tiempo, así que yo la acompaño a ella a donde quiera ir, se molesta cuando estoy triste, se entristece cuando estoy olvidandola… Así que de vez en cuando enciendo nuevamente sus llamas, su vida depende de un fuego, no es como nosotros, ella esta hecha de un imponente amor, se alimenta de lo que yo haga, y el amor arde hasta las cenizas, entonces procuro que le salten chispas de sus ojos enseñándole hermosas palabras, mis palabras le encantan, se siente feliz cuando le hablo, y la consuela mi voz cuando le canto… ella me abraza fuertemente en las noches frías, y salta como una niña en los días soleados. Ella esta hecha de Natalia… unos ojos grandes e intensos, un silencio pícaro mezclado con viejas angustias que desaparecen con mis caricias, una ternura encantadora llena de historias y unos dedos que juegan conmigo hasta hacerme dormir. Ella esta hecha de mafe… Una belleza de otro mundo, una elegancia y presumida perfección al caminar, unos ojos fríos llenos de tristeza, una maraña de indecisiones pero una apasionante necesidad de ser libre y autentica como también unas ansias por descubrir el mundo, un mundo mejor. Ella esta llena de camila… una niña entusiasmada, alegre y encantadora que me sonríe y juega con todo lo que le digo, corre, salta y se duerme cuando no le digo nada, siempre quiere hacer algo, no soporta estar aburrida. Ella es mi trabajo mas ambicioso, he sacado todos los momentos mas especiales de mi vida para crearla, y esta aquí y ahora alimentándose justamente de lo que estoy describiendo, ella es la razón de por que puedo amarte tanto, porque tu estas en ella. Y así mismo también es la razón de porque no he escapado de tus brazos, no he huido como suelo hacerlo, y no tengo por que, ella me quita el miedo, con ella no tengo por que temer, ella siempre estará ahí, tu siempre estarás aquí… Ella es mi intención de creer que el mundo vale la pena ser vivido. Fue lo ultimo y lo único que pude hacer después de verme en el suelo, sin nada mas que darle a este mundo… entonces invertí lo que me quedaba para dármelo a mi mismo, y desde entonces siento que todo lo que alguna vez ame, me ama mas de lo que algún día yo podría. Ella es tan hermosa, que cuanto mas te entrego mi amor, mas feliz es. Y así planeo mantenerla viva, hasta el ultimo de mis días, que me acompañe en esta lucha de vivir y que me otorgue todo lo que yo algún día les di a ustedes, lo mejor de ella, es que no tiene por que equivocarse como yo solía hacerlo, ella es incapaz de fallarme, la hice así porque si me fallara, seria porque se me olvido alimentar su ardiente fuego, entonces no me fallaría, simplemente moriría, y yo con ella. Si te amo, si te amo tanto, es porque en este tiempo de nuestra lejanía he sentido tus manos apretando las mías cada minuto, sobre todo aquellos que no fueron tan bonitos.
Te he escrito tantas cosas, te he dicho aun mas y te he pensado un sin numero de días… días enteros dedicados a ti y no lo sabes, no sabes que si soy tierno y obsesivo es porque he contado cada segundo en una maldita soledad que solo se calma con tu nombre… Que daría por ti, tu que eres lo mas cercano a la felicidad, lo mas parecido a mi, un hombre triste y tranquilo, tu, una dulce niña, tierna y suave, tan bella que cuando desaparece el horror se apodera de mi, temor a no escuchar tu voz, a perder esa luz que veo cada día gracias a saberte conmigo, dolor, terrible dolor al saber que estoy solo, mas que solo soy un hombre que busca a alguien mas hermosa que la vida misma cuando da tregua, busco y te encuentro, no encuentro nada mas, si me entretengo en el camino con algunas estrellas es porque mis pies cansados quieren rendirse, saben que los tiempos son amargos y que no vale la pena continuar, no hay un placer al cual perseguir, esos parpadeantes brillos me han mantenido vivo pero desaparecieron, sus nombres se marcaron en mi piel porque al igual que tu les estregue todo lo que tenia. Pero seguí, continué en vano, ciego en un mundo desolador, no había refugio ni escondite, estaba merced de un frío que me recorría y congelaba sin piedad ni clemencia, en aquellos tiempos yo entendí que tal sufrimiento era innecesario, mi lucha no me conllevaría a un tesoro tan grande como para recorrer el camino las veces que fueren necesarias. Estaba acabado y todo lo que tenia lo deje a un lado, no me quedaba mas que un abrazo hacia mi mismo, en forma de consuelo en esta muerte lenta. Y apareciste… Apareciste, renaciste de entre mis recuerdos como una respuesta a este sin sabor de la vida que llevaba, nunca quise llorar delante de alguien mas, pero tus hombros fueron tan cálidos, mi dolor se fue al igual que mi frío y entonces un mundo nuevo surgió, delante de mi, todo era tan claro y bello que me sentí no solo capaz de vivir si no de seguir llorando, en toda mi vida una marea había arrastrado mi apetito por gozar el mundo y tu llegaste como un cielo azul, un tono tan suave que me dejo dormir tranquilo desde hace tanto que ya no lo recuerdo, o es que nunca he sido tan feliz. Desde entonces me prometí ser fuerte, mas de lo que era y repetir ese instante millones de veces, extasiarme de esa ráfaga de compañía que me dejo drogado, como si me volviese adicto a esa manera de ser, era imposible que un ser tan dulce se colocara frente a mi y me dejara descansar en su regazo, era casi imposible, pero sucedió y te abrace no fuerte, sino suave, tan suave que permitieras a mi alma adentrarse en la tuya y hacer de ese instante a tu lado algo tan eterno, que aun después de la muerte habré recordado por que viví. Y es que estoy irremediablemente enamorado de ti, soy como un perro callejero al cual tu mano ha dado de comer, no se como expresar tanto agradecimiento, pero he contado todos los días desde aquel momento, días llenos de ti y esa forma de ser que me vuelve loco, estoy enfurecido, como es que no te conocí antes, por que he soportado tanto melancólico rechazo si tu has estado ahí con tus brazos esperándome. Todos los días me despierto no sin antes soñar contigo, cada noche te tengo en mi cama, abrazando mi corazón tan fuertemente que gracias a eso puede latir, y cuando despierto te visto de sonrisas y me acompañas a todos los lugares que en mi camino se atraviesan, de llegar la muerte tu estas ahí para resucitarme, y de llegar la vida, estas ahí para celebrarla conmigo. Desde aquel día no encuentro tierra mas amplia para extender tantas ganas de vivir, desde que te amo no tengo ganas de hacer algo distinto. Desde que te bese te hago el amor cada noche, donde el silencio se apodera de mi mente y solo piensa en lo único importante en este mundo; mantenerte viva, alimentar con dulce romance tu espíritu para que nunca dejes de esperarme, nunca dejar que se apague la llama de nuestro pacto para que camines el resto de mis días al son de mi pisadas. Huellas untadas de victoria pues desde que tengo la belleza de conocerte puedo enfrentarme al mundo entero sin temor a nada, pues no tengo miedo al fracaso, ya que tu estas a mi lado, y desde que estas, jamas ha regresado el dolor, no hay cabida para una nauseabunda soledad si tu llenas todas las mañas mi cuarto de tu deliciosa mirada… A lo único a lo que le temo es a perderte, porque si eso llegase a suceder no habría universo que albergase tantos soles como para ignorar las millones de veces que no dormí por solo pensar en tus caricias, tus gestos como hierba tierna y colorida que se extiende por la tierra árida de mi pasado…
Que mis manos se entrelacen con las tuyas y no tengan tiempo para preocuparse por hacerlo también con la carne. Buenas noches mi cielo…
¿Disculparla? Con una pizca de atrevimiento le sugiero no padezca tales síntomas, que ha sido el mejor tiempo para extrañarle. Usted y la lindura que le pesa bien se sabe deben caminar hacia rumbos desconocidos, no seré yo la excepción que evite que los lugares lleguen a usted jovencita de mis buenos sueños, porque de ser así el lamento mas terrible me abordaría, pues que error posee el disfrutar ver una avecilla en una jaula. Si es bien cierto que usted no puede escapar de mi corazón, o más bien, no quiero, pero por tales razones aun mayor debe ser la necesidad suya de vivir, y no precisamente bajo mi cuidado. Algo que en definitiva vengo explicándole, que no vine exactamente para rodear con mis abrazos su cuerpo, que también, pero vine más para deshacerme de este agobio de querer decirte algo y no llegar hacerlo por el miedo que produce el hastío vuestro como única respuesta, por ello, es mi obligación como buen hombre con definidos valores sentirme orgulloso cuando tan bella dama siente el llamado de las cosas, y aunque fatal, pero necesario, veo como te lleva el río de este mundo, lejos de mi. Sin olvidar con la certeza que corresponde a este sueño mio de saber que expresas con sonrisas las circunstancias de un mundo que suele producir los mas espantosos sentimientos. Algo que en definitiva me ayuda a existir, es recordar que ya no necesito poseerte para adorarte. Por lo tanto, la invito cordialmente a alejarse de mi sin remordimiento alguno, puesto que la habitación de mi alma jamás conocerá el olvido. Y su libertad, será un motivo más para no darle cabida a el delirio que me consumió el día en que pensaba aprisionarte para siempre, por el miedo exagerado de no querer enfrentar este mundo solo. Ahora si puedo, ahora si quiero, el tiempo me ayudo a pensarte, de buena manera.
No es por acosarla, es que he querido escribirte, desde hace tanto… Yo no quería perderte, y bueno, las cosas pasan, el mundo sigue, la gente viene y se va, así es el mundo. Pero, ¿quien se quedará con todos nuestros tiempos vividos? Yo me pregunto eso todo el tiempo… Qué será de nuestras vidas, las cosas que hicimos, y no cualquier cosa, sino las cosas que solo hice contigo. ¿y las palabras dichas, las noches, los lugares que sólo conocí por ti qué? Simplemente escoges otro camino, y yo te dejo en paz, ¿y luego, el olvido? Yo no pude olvidarte, ni en otras bocas, otros ojos, me fue imposible perderle de vista, todo el tiempo en mi mente, y yo me repetía, he, mira lo imposible… ¿Y qué fue de ti? Siempre quise saber eso, pero estaba tan enamorado, y recordar que no te interesaba me sumergía en el llanto… Cuanto tiempo lloré, hasta acabarme, decir; bueno, es demasiado linda, nada que hacer. Y seguro ya lo olvidaste todo, ¿por qué yo no? ¿por qué esta devoción atormentada hacia una simple persona como tu? No hay motivos, mi padres me decían que sobraban mujeres, ellos no sabían que como tu no hay nadie… ¿Y qué me gano? Te perseguí por tanto tiempo hasta que me detuve en el camino, y recuerdo todo, como si fuera ahora, verte por primera vez y pensar, waho, mira lo bonita que es, ja, mira lo imposible que es, y luego hablarte, te hable tanto, te dije lo indecible en tantas noches, noches de niños curiosos, solitarios, jóvenes aburridos, y que no te dije, no tengo idea de algo que no te haya dicho, fueron tantas horas, tantas madrugadas a tu lado, escribiendo, incesante, insaciable, enormemente encantado con tu sonrisa, la que no veía, la que no conocía, la que sólo imaginaba, y fue tanto tiempo, que mi abandono se convirtió en tu nuevo hogar, todos los días eras bienvenida, y llegabas fascinada, entusiasmada, como si hubieses tenido ese vació igual al mio todo ese tiempo, y que no me decías, me sentía tu hermano, tu mejor amigo, tu misma, sentía todos tus problemas como míos, y luego… Verte, quedarme atontado, y preguntarme siempre ¿por qué es tan bonita? ¿qué la hace tan especial? El tiempo que me diste… Toneladas de tiempo, hectáreas de alegría, tierra fértil para mis sentimientos, y lo abandone todo, deje que el mundo que conocí se fuese de mi cabeza, y te pedí mas espacio, mas cercanía, mas de ti, y tu también lo dejaste todo, lindos niños entusiastas. Y mira que no pude creerlo, mira que no podía aceptarlo ¿cómo pudo decir que si? Es imposible, ¿qué clase de hombre soy para que acepte mis palabras? Y atónito llegue a tu casa, caminar contigo, aún recuerdo la primera vez que te vi tan cerca, tanto, que pude tomar tu mano, tan pequeña, dedos flacos y livianos, ¿cómo explicarte que me siento el rey del mundo a tu lado? Y cada paso era una escalada mas en una nube aun mas alta, y sentarme a tu lado, verte tan nerviosa, yo tan incrédulo de tu presencia, y besarte… y pensé, he, mira lo imposible, mira nada más… y volverte a mirar, llenarme de la misma fuerza con que la humanidad construye naciones y cambia el mundo, y llegar a esos ojos, fue mi parte favorita, que ojos, mira ese amarillo, se siente tan bien mirarte, es un sol que no me impide ver lo demás cuando le veo fijamente, es algo que sólo yo pude entender, que divina mujer. Y de ahí en adelante sentirme el conquistador del universo mismo, cuantas ganas de devorarme el mundo entero, tenia la fortaleza de millones de hombres, la bravura de leones salvajes devorando todo a su paso, el silencio de una mariposa sobre una hoja, y me seguía diciendo; he, cómo puede ser… Cada vez más hermosa, cada vez más, y más, ¡y más! Y yo no sabia como es que era posible tal cosa, el poderte ver tan cerca… y seguíamos subidos en aquel tren de nuestras bellas conversaciones, tanta risa, más paseos por ahí, a cualquier lugar, a cualquier parte, no importaba, estabas tu, y tu eras el mundo en mi cabeza, nada pudo haberme hecho tan feliz, una vida entera buscando que hacer y de repente mirarte, admirarte, sorprenderme todavía mas, porque no aceptaba que tus palabras me pertenecían… Verte con él. La derrota, la traición, la impotencia, relámpagos en mis venas, plomo y pólvora en los músculos, sangre en la mirada, deseos de asesinar, pero, ¿Cómo puedo enojarme? Me has hecho el hombre más feliz del mundo. Acompañarte a casa, hablar más, seguir a tu lado, la ilusión más grande en mi pecho, evitar a toda costa hacerte sentir culpable, seguirte viendo, perderte… El fracaso. Millones de maneras para recuperarte, el como, de que manera, para que, con que propósito, con qué palabras, pedir opiniones, ayuda, mejorar, hacerme mejor, trabajar en mi, regresar, ya no eres la misma, aun más hermosa, más codiciada por mi sangre, la electricidad que activas en mi cuando me miras, cuando me tocas, cuando me hablas… Son drogas nocivas, adictivas, esos labios, una inyección en las piernas hasta los dedos de los pies, no siento nada, vuelo, pero me atan esos labios, tan pequeños, tan suaves, extasiarme hasta la médula, cada partícula de saliva, desgastada, tan usada como un zapato, pero es una talla perfecta para ambos. Estrellas encima nuestro, estamos tan pegados, nada que pueda evitar nuestro cariño. Perderte de nuevo, impotencia, incredibilidad, pero certeza, nada que hacer, eres imposible, eres demasiado, no puedo evitar volar cuando me miras, si quieres ser feliz lejos de mi, bien. Llorar, llorar, llorar… la muerte en vida, la desgracia, el sufrimiento, el rozar con el delirio, silencio, ya lo deje todo, y te perdí, nada que hacer, nada que se pueda hacer, imposible olvidar, recuerdos que apuñalan, se clavan al alma, me rasguñan, luego soportarlos… de la nada resurges como el verano, y luego te vas, ese ir y venir de la mierda, casualidad, causalidad, te sorprendo, te llevo a donde quieres, donde no conocemos, me buscas, te busco, no nos encontramos, seguir caminando a tu lado, a veces tan felices, a veces tan confundidos, el mundo en contra, avalanchas de problemas, verte triste… No tengo remedios, la maldita carencia de ideas nuevas. Por fin te encuentro, te llevo a esa montaña que sólo llegue a subir contigo, no evitarlo, no detenerme, no poder soportarlo, no aguantarme, abrazarte… Maravillosas luces de la ciudad, pero más inolvidable tu cuerpo reposando en mis brazos. Luego perderte. Recuperarte, caminar bajo la lluvia, mejor dicho; correr, mojarnos, nada que importe más que tu sonrisa, verte tan feliz, empapada hasta las medias, abrazarte… no hay frío, estamos tan mojados, esta tan de noche, pero no existe el frío, es una palabra sin sentido, mi corazón tan apaciguado, ya no me lastima, luego, acostarnos en mi balcón, embestidas apasionadas de dulzura, luego, la calma, el silencio de tu corazón, tan mio, tan pegado a mi, las nubes encima de nosotros, la fresa de tu boca, lo suave de tu cabello enredándose en mi rostro. perderte… Tu amistad como único ofrecimiento, ¿tu amistad? Después de tanto… como puede ser, con que sentido, si yo no te quiero, yo te amo más fuertemente que todo sobre este mundo. Que no soportaría solo verte. La derrota, la distancia, el fin. Meses, Silencio… abrumador, una chica nueva, otra, otra, otra, otra, ¡otra, otra y otra, sexo, sexo, sexo, labios gruesos, delgados, tiesos, duros, fríos, aburridos, viejos, demasiado jóvenes, inexpertos, cansados, arrugados, demasiado abiertos, demasiado cerrados, molestos, estúpidos, secos, muy mojados, ganas de vomitar! Tristeza absoluta, nadie tiene el toque, la suavidad, la hermosura, mi futuro en caída absoluta, mi única decisión; hola soledad. El exilio, la calma después del sufrimiento… Pensar, Pensar… Seguir pensando, caminar de un lugar a otro, escribir sobre ti, ¿por que ocurrió esto este día? Averiguar por qué, entenderlo, resolverlo, encontrar miles de soluciones, ya no importan… seguir confesándome el pasado, tu. Tu. Tu. Tu. Por todas partes, este momento, en este día, si hubiese escogido este camino, hubiese pasado esto otro, pero entonces, y luego, para después. Seguir pensando, entender tus razones, las que te llevaron a esas decisiones, comprenderte, respetarte, culparme, enfurecerme conmigo mismo, decirme patán, estúpido, traidor, mentiroso, basura, bastardo, porquería, perdonarme… cambiar, seguir pensando, seguir analizando, recrear todo mi pasado, calma, silencio. Con razón todo, por eso ocurrió esto, el inevitable efecto, así de sencillo. Aceptar el mundo, aceptar las decisiones, comprender por que fue, tranquilidad. Nuevos labios, últimos labios, repugnancia de las mujeres que no amo con todo mi ser, infinita repugnancia de no sentir lo que sentí contigo. Soledad, divagar, caminar, seguir resolviendo, pensando, caminando de un lugar a otro, estudiar filosofía, matarme haciéndome mas fuerte, correr, saltar, proyectos, futuro, nada que perder, todo que ganar, falta algo. Falta algo, falta algo, seguir con la filosofía, ocultismo, magia, descubrimientos nunca antes vistos, filosofía, decidir, hacer ejercicio, soledad, comer los mejores alimentos, mas ejercicio, tomar agua, ganar músculos, velocidad, inteligencia, sigue faltando algo, aventuras, montañas escaladas, soledad, recorridos, carreteras, poemas sobre ti, falta algo, falta… faltas tu. Nada que hacer… fue tu decisión acabar y la mía marcharme. Dolor… continuar, fuerza, poder, mejor relación con mi familia, falta algo, continuar, aburrimiento, soledad inagotable, falta algo, continuar, tristeza, no sentirme importante, no sentirme capaz. ¡descubrimiento! Imaginarte. Soñarte como sólo se puede hacer en la cabeza de quien ha vivido bien jodido después de perderte. Soñarte, complicado, detallar cada rasgo, palparte con la creatividad de quien no tiene mas soluciones, hacer con extrema precisión cada lunar, cada gesto de molestia y simpatía tuyos, la forma de caminar, de esa loca manera en que me mirabas, tus abrazos, tu delicado y reservado cuerpo, el pantalón que te gustaba usar siempre, unos tenis rosados, una camiseta morada, una pulsera negra, un cabello largo y brillante, un silencio tan agradable, y tu, caminando a mi misma velocidad, a mi lado derecho, tu mi mejor amiga en el mundo, mi única compañía, mi imposible amor, ya no falta nada… la calma, el entusiasmo infinito, el poder y la fuerza para ir a todas partes, y tus besos, ¿tus labios? Y.. ¿tu piel, tus caderas, tus pechos, como puedo satisfacer mis instintos mas impuros? Pensar… comprender, comprender perfectamente, el amor nada tiene que ver con el cuerpo, el verdadero amor, es amistad, es un juego de niños. Llenarme de vivacidad, no necesitar imaginarte como mi animal interno descontrolado y apasionado lo quiere, sino, como yo te quiero, como tu me quieres, idealizar tu aprecio, detallar palabras que solo tu pudiste haberme dicho, renacer cada recuerdo, y no necesitar nada mas en la vida… meses, meses, casi años después, problemas, complicaciones, le molesto a mi familia, me voy. Contigo a donde sea. Terrible lugar… te recuerdo, y sobrevivo, y cada noche, pienso en ti, acostada a mi lado, respirando tan tranquila por tenerme a tu lado, incrédula y extrañada como yo, el por que me gustas tanto. Tanto tiempo amándote en silencio… tanto que te dedique mis poemas mas bellos, y cuando mas terrible caía, mas cerca estuviste a mi lado para ayudarme a levantar. Impaciente, terriblemente, harto de hablar con el viento, venir en persona y confesártelo, que por ti he vivido y he sido absolutamente feliz. Tu, Maria, Maravillosa niña que conocí en mi juventud, y desde entonces no dejo de imaginar, y por eso, soy el hombre de ahora, tan increíble, porque fuiste tu, mi mayor motivación, lo único bueno que le ocurrió a mi vida.
El remolino de lo que es la vida, la verdad, nadie sabe lo que hace, si lo quiere es porque no lo tiene, tal vez nadie quiere nada, tal vez todos asimilamos la espera de querer algo para no parecer que ya hemos muerto, la muerte y su parecer de desagradable, pero para ser honestos tres cuartas partes de la vida no son lo mejor que te puede pasar. Tal vez ni yo se lo que digo, tal vez solo me aburro y silenciosamente como lo hace cualquiera busco con que divertirme. Me parecería tonto saber que todos somos niños en un jardín, pero me parecería mas tonto no serlo. Tal vez nada tiene sentido y como el agua todo viene y va, lo peor es que nadie se pregunta si valdría la pena vivir con sentido, tal vez es mas agradable no tener sentido y pasearse como si existiera alguno, tal vez estoy loco, tal vez todos lo estamos, y la conclusión mas terrible es que tal vez yo tenga razón.
Te pienso tanto, mi vida entera… Estas tan lejos y yo tan cerca de la locura, no dejo de soñar con el día en que estés aquí, y con tu calor llenes esta habitación de mi cuerpo, un cuarto reservado para ti, donde nadie mas puede cruzar por esta puerta de mi alma y llegar a recostarse tan frenéticamente sobre mi piel, quiero tenerte aquí, sobre mi, tu aliento como una avalancha de fresca nieve colmando mi boca, tus ojos brillantes siguiendo los míos, nuestras tantas risas, tonterías no dichas ni imaginadas, solo el placer de tenernos tan cerca, soy tan feliz… Añorada euforia, nadie mas me puede dar lo que tu, nadie se compara contigo, solo tu llegas a lo mas profundo de mi y me enredas y desarmas como un juguete, como arena, como vidrios que se rompen y tu reparas, con tu sangre, con tu dolor me levantas y me acompañas en esta tragedia convertida en comedia por tu gracia, tu nombre, tus manos… No dejo de pensar en ti, no puedo hablar con los demás sin recordarte, sin mencionar un recuerdo hermoso, terrible porque es terrible, pero maravilloso porque ocurrió contigo, contigo, mi luz…
Eres tan bonita, mira mi día, fue terrible y con mas ganas vengo a casa buscándote, aunque no te diga nada, ni siquiera un saludo, te tengo a mi lado y el latir de mi corazón es un lenguaje sencillo, tu lo entiendes bien porque yo conozco el tuyo y ambos funcionan de la misma manera, sabes bien que me aguantaría todos los días malos con tal de mirarte, y si no lo supieras vendría a esta que es nuestra casa para recordartelo.
La pasión se acaba, y temo decir que no es cuestión de suerte ni esfuerzo. No es posible construir un poder incontenible donde las miradas aluden su mágico lenguaje. No significa que los dedos sean ansiosos bailarines, mas bien se convierten en serenos poetas que en silencio expresan su delicadeza. Mucho menos se trata de corazones arritmicos que no conocen la confianza, mas bien son latidos seguros que no tienen prisa alguna. No es la pasión el camino mas largo, es el sencillo sendero de la paciencia, donde no se construye un fuego abrazador que lo consume todo, sino, un calor que enternece las almas mas abatidas por el riguroso viaje de este mundo.
Que vivan sus labios que por su gracia yo he encontrado la vida.
Unos ojos tan brillantes, eso es lo que mas recuerdo de ti, había fuego en esa mirada, cristal, lagunas, cielos y ternura. Faros incandescentes guiando mi barco errante, llamas calentando mis manos cadavéricas, estrellas de deseos, deseos de no dejarte de mirar nunca, quedarme, abstenerme a ver algo distinto, obsesionarme y ser consumido por ese delicado e intenso brillo de ti… Una mirada que no se asemeja a ninguna otra, una mirada especial, algo que fue solo para mi.
No hay nada, ella lo cubre todo, ella, es ella quien brilla, quien resalta, quien me ilumina y me permite permanecer mas tiempo, tiempo; una excusa para amarla, para buscar las razones de su querer, para fundamentar su belleza en algo posible porque me siento reducido a ella, la magia de mi sonrisa. Sin ella no viviría, seria aburrido, seria triste, no soportaría el frío de la soledad si no es ella quien me otorga los remedios, las píldoras, para soportar un mundo repleto de seres que no poseen su sagrado nombre…
No estoy en mi, ni en ningún lugar, estoy en ti, en el inmortal e irreversible limbo de nuestras voces; van y vienen, se enredan, se reparten, se expanden, me revuelven… Me llenan…
Explícame, de donde consigues tanto, todo, para asombrarme, no solo me desvelas, me arrullas, me llevas en tus brazos como a un bebe o una bolsa de compras, como a un perro que has alimentado en las sucias calles y que ahora solo tiene ojos para ti, y te sigo, y te persigo, y tu sonríes y yo me ilumino. Que cuido tu nombre y tus obras y tu mi soledad de perro moribundo, que desde nuestro encuentro no recuerdo el frío y tu el aburrimiento. Dime, como entender un destino tan perfecto donde un animal como yo tiene la oportunidad de pasear con una reina como tu. A qué clase de Dios tendré que agradecerle por saberme tan feliz a tu lado…
Su sonrisa eléctrica, me produce escalofríos el resto de partículas chispeantes que se adentran por mis ojos, me medio muero, me medio vivo, me medio existo porque parte de lo que soy esta en aquello que se impone frente a mi; exagerado, increíble, es como un remolino de maravillas, o eso es lo que produce en mi cuando la observo…
Estoy tan enamorado, mis síntomas van en aumento cuando no duermo por apoyar mi cuerpo de un lado y luego del otro en la misma cama, no puedo cerrar tus ojos, quiero decir, los míos, porque tu me invades todos los pensamientos, y tu voz esta en todas las bellas canciones, y el humor de retrasado a donde quiera que vaya, me encantas, me enloqueces y mis palabras no colaborar en olvidarme un poco, es mas, solo refuerzan mi entusiasmo, como el niño que espera sus regalos bajo el árbol, o el perro a sus amos, o los polluelos ansiosos por volar, me siento imparable, esperanzado, se que no habrá nada que lo impida; que tu sonrisa estará por siempre en mis nuevos días…
Porque si yo te elijo es porque me encantas, porque no me gustan las cosas sencillas, porque eres distinta, porque el mundo te ha traído hasta mi sin contratiempos, porque tu te ofreces tranquila porque yo te recibo eufórico, porque llevo tu risa a todas partes, porque eres buena y yo soy lindo, o al revés, pero en definitiva es porque me haces el mundo distinto, un mundo que ya estaba bastante mal sin ti.
Rosas caminan por mi mente, sólo me trae el perfecto aroma de tu piel, mis incontables besos, mis labios por tu cuello y tus caricias, tus dedos por mi cabello. Tengo jardines en la cabeza, tengo montañas de colores de tan poco que te he olvidado…
El amor no dura, el amor es tan invisible que puede perderse de vista, el amor es tan intenso que puede llegar al odio. Su única sobrevivencia no nace de las buenas intenciones, ni los grandes momentos, ni los muchos regalos, sino, su exagerado derroche de tiempo, tiempo para digerir el amor, para masticarlo lentamente, para disfrutarlo, para aburrirte y agobiarte de tanto amor, es la única forma de hacerlo resistente a los cambios; la costumbre. El hecho de hacerlo algo tan cotidiano que no se pueda renunciar a el. Un amor con poco tiempo es fácilmente reemplazable. Por eso a día de hoy hay tanto amor desperdiciado, parejas enojadas, molestas, con problemas por todas partes pero que no pueden dejar de amarse, porque un amor no necesita ser cuidado, solo necesita ser invertido para poder preservarlo.
-mis mejores momentos los viví con alguien que era todo lo que yo no esperaba.
Su miedo.. Su ansiedad… Su temor, inquietud, su forma a veces ridícula y pendeja es lo que me aferra a un mejor mañana.
Usted y todo su caos es lo que me enamora.
¿Masoquista? Bueno… uno se acostumbra a sentirse bien con lo incorrecto.
Murió por no sentirse necesitada, nadie la quiso viva, nadie noto que su singularidad era un proeza inigualable, ni eso, nadie nunca la noto. Y ella para qué mentirse, tenia fama, dinero, salud, en un mundo donde nadie la vio como realmente es, como realmente se siente. Inevitablemente su soledad la consumió vorazmente, y cuando no hubo forma de cambiar las cosas entendió que el mundo está hecho de nosotros, y amar un poco unas pocas veces en la vida nunca nos hará tanto daño como jamás llegar hacerlo.
Te soñé, y regresabas, no te explicabas como al igual que cuando yo lo hago, no podías justificar la necesidad de verme, no habían razones, y como que por fin lo llegas a entender, que estamos conectados, atados, y en nuestras vidas uno sin el otro no es mucho…
Encantadora, sabes que me molesta despertar temprano, pero prefieres molestarme con besos en la madrugada cuando no puedes dormir, te odio, me odio por permitirte llegar tan adentro, tan profundo en mi, porque hagas lo que hagas siempre te dejaré, que irás y vendrás y me amaras, y odio esa sonrisa tuya tan perfecta, eres una bruja, porque se que no puedes ser tan linda, porque no puedo evitar ver luz en tu mirada, y me tienes, me sostienes, me sumerges en este amor que es tuyo, y te amo y te odio, pero me fascina no poder dejarte, como tu a mi en todos tus pensamientos.
¿Y qué si te nombro en todas mis conversaciones? ¿No es evidente que el alma regresa a los lugares donde fue feliz? Y hasta pareciera que estoy embriagado, borracho; como el arrepentido y sufriente adulto que te llama en la madrugada, yo no tengo noches, sino años extrañándote, que hasta maté a mi ultima mascota, la asfixie de tantas caricias, convulsionaba de alegría. Pero es que soy tan terco, estúpido niño con canas, que ya no soy un joven, pero ni siquiera afronto la vida como un hombre, que tengo tan arraigado el apego que me auto lesiono con mis proezas románticas, fantasías eróticas de adolescente, sueños de adulto y el pensamiento de un cadáver. Y no necesito remedios, soy consciente que estoy enfermo, pero no por casualidad, sino como el adicto, el obsesionado, que prefiere perder su familia, su futuro y su hogar por las drogas del mundo, que no acepta la ayuda de afuera porque ni siquiera sabe si esta en lo incorrecto, y así estoy yo, ¡pero es culpa de tus malditos ojos! Pero no es tu culpa, que es mía, que yo no aprendí a olvidar, y aunque sea una farsa de humano nunca aprendí a olvidar, que no se a donde ir porque siempre camino mirando hacia atrás. Pobre cobarde, escondido entre las paredes repitiendo tu nombre; lo poco bueno que me dio esta vida. Que le corro a todo, que si existe un Dios debe de haber agotado todos los recursos para brindarme una buena vida, porque yo todo lo desprecio, yo todo lo abandono, abandonaría esta vida de no haberte conocido, porque te culpo, gracias a ti aun pienso que la vida tiene algo de bueno. Pero somos tantos, hay tanta gente, y yo no me explico mi infinito suspirar, noches escribiendo, hasta he perdido la cuenta de cuantos poemas te hice, me hice, le hice al condenado mundo que me ata, me sostiene como la cuerda a un globo, ojala yo fuese la cuerda, ojala tu hubieses sido el globo, poder soltarte, poder dejarte y así dejar este mundo. Pero en cambio eres el color que pinta mi globo, pero que de globos ni que cuerdas, cuanto quisiera besarte los pies, arrastrarme como el gusano que he sido, perseguirte por debajo la tierra solo para verte, muerta, viva, pero verte, que hace mucho tiempo no descanso, que vivo un infierno, pero soy demasiado sensible, realmente vivo mejor de lo que cualquiera, es mi pena lo que hace del mundo una mala obra ante mis ojos, pero tampoco voy a mentirnos, el mundo apesta, pero apesta no saber que hacer, y ahí nací, en un sin saber, en un no saber que decir, que pensar, sentirse un estorbo ante la gente, es tanta gente, hasta te chocas con ellos por la calle, son montones de gentes, montones de problemas, uno diría que el hombre ha hecho cosas buenas, pero es lo mismo que yo he hecho por ti, muy poco, demasiado poco, y solo me encargue de agotar las posibilidades, así veo el mundo, un mundo sin posibilidades, demasiados, muchos, mas de los necesarios, y nadie que ponga un alto, un ya basta, una pausa, sino que siguen naciendo y hasta peores que yo, inútiles, inservibles, pudieron haber servido para algo pero alguien mas lo esta haciendo, es como una lucha, una persecución entre nosotros mismos, una necesidad de sobrevivir. Todos deberían dejarse morir, que solo los valiosos se queden, los científicos, los matemáticos, los poetas, ¿pero yo? Yo sobro, yo no le sirvo a nadie ni siquiera a ti, tu que me has dado razones para no morir de amargura. ¿y que soy? ¿Una mota de polvo en un sofá? Ni mis padres saben para que me han traído, les pareció divertido contribuir con este aglomerado de manchas vulgares peleando por un puesto en este miserable pedazo de basura flotante. Y no es que sea pesimista, para nada, el mundo es bonito, es suave, aterrador, frío, tranquilo, hermoso, ¡Pero somos muchos! Hay guerras, hay ignorancia, hay desamor, hay pobreza, que alguien me diga para que continuar sabiendo que la miseria se expande a nuestras espaldas, unos maravillosos hombres convertidos en ladrones, estafadores, mendigos, todo por no saber el camino, pero hay tantos caminos… Que Dios me perdone pero el mundo que ha creado no solo se ha destruido, sino que esta en su mas deplorable momento y parece que nadie lo notara. Y me siento solo y estúpido por tener que saber y aun así deber permanecer en este dibujo de entretenimientos baratos, ¡porque mi placer mas grande no fueron tus labios! Fue tu sonrisa… no te imaginas cuanto te observe, detallando algo que solo yo veo, solo yo entiendo, y me moriré sabiendo que nunca encontrare a nadie como tu. Y es que el mundo esta hecho para amar, pero hay que estudiar, trabajar, comer, dormir, para luego morir. Me produce desaliento cuando le pregunto a los demás el por que de sus sueños dicen ilusionados que el momento lo es todo, que son felices en el presente, donde disfrutan algo que simplemente cambia y continua cambiando. Y no se si tengan razón, pero si se que no puedo vivir así, que yo estoy existiendo en el tiempo mismo, no te puedo abandonar porque siento que aun estas conmigo, no te puedo perseguir porque se que partirás por tu propia cuenta, no voy a ningún lugar porque lo que fue no existe y lo que sera tampoco. Entonces que soy, ¿un pobre desafortunado? O tengo los ojos demasiado abiertos, abiertos, abierta esta herida, me siento jesus padeciendo los males del mundo, si yo fuese el dejaría que todos muriesen, ¿perdonarlos? Ellos se buscan los males, que se extinga mi raza y los conejos se apoderen del mundo. Me tiene harto, fastidiado el tener que convivir en este tren de imbéciles y hacerme uno mas, hasta peor que ellos, ya ni se que hacer ni que decir, me siento mas tonto cada día que pasa, y hablar con alguien para que, solo tu me entendiste, solo tu me escuchaste, y sabias que estaba falto de una tuerca, tal vez tres, pero no dijiste nada. Y eso te diferenciara por toda la eternidad… Y a lo mejor me estoy volviendo loco, veo sangre y jugo de calabaza por todas partes, me siento tranquilo insultando todo lo que veo, ya ni me reconozco, y siento que este mundo me absorberá tanto que no podre escribirte mas, he pasado mucho tiempo en silencio, no te olvido, pero ya no puedo buscarte, es inútil, eres demasiado estúpida para verme, no sabes que pienso y eres tan cobarde como yo, así que no podrás salvarme otra vez. Me temo que solo queda esperar el olvido de mi propio ser, después de todo solo soy una chispa en medio de dos soles colisionando, mi ausencia no sera notada, justo como los antiguos, han sido sepultados con lagrimas llevadas por las ligeras lluvias… Que sera de mi, que sera de ti, creo no poder volver a verte, creo no tener el valor de afrontar este mundo, sobreviviré por obra y gracia de las fuerzas desconocidas, pero para que… para que si no estarás para codiciar mis frutos, saciarte de mis aguas, y créame que me sobran fuerzas para afrontar el maldito universo, de atravesarlo si es por ti, pero no es por ti, no es por nadie, no es mas que llegar solo, llegar y disfrutar la compañía de una puta que finge querer, llegar y sonreír como esta gente estúpida que navega con la corriente, que nadie tiene rumbo, yo tampoco, tu fuiste mi única estrella en el cielo, y yo ya no tengo ojos para verte, buscarte y recuperar el norte, ya no tengo nada que hacer con mi timón y mis velas, creo que ni barco tengo, no quiero, hoy no quiero hacer nada, que el agua me trague, me hunda, me ahogue, pero rendirse todos quieren y pocos tienen el valor de renunciar a todo. Yo tengo miedo de renunciar a ti, créame que renuncie a todo, me aleje de todo, lo olvide y deje atrás mi vida, mi tiempo, mi música, mis pinturas, mi perro y su estúpida cola inquieta, mis padres y su empeño por mostrarme que sobran oportunidades, mi familia, mi guitarra, la que tuviste entre los brazos, que desde ese día me quedaba dormido abrazando esa fría caja de madera, pensando que eras tu, abandone el violín que nunca supe tocar, el cuerpo y la salud que tanto me había cuidado, abandone a los amigos que me acompañaron, camine errante entre las sombras, corrí entre las lluvias, dormí bajo el ardiente sol, y respire el helado frío de las montañas, niebla, sombra, sudor, mal olor, y cuando de rodillas estaba aparecías tu… por que tu, por que no la muerte, el demonio, un ángel, un poco de agua, una pistola, un abismo, porque tu, porque… porque, eso hacia que sonriera. Este asqueroso pantano en el que vivo y tu eres mis alas, que puedo volar, volar lejos de esta mierda… por eso no renuncio, porque cada vez que tiro la toalla tu me la pones de nuevo en las manos. Maldita seas, por amarte tanto, tanto, de tener que atravesar este infierno solo para seguirte imaginando… y estoy seguro que cada vez que desee morir tu olor se atravesara, que llegare a viejo, que maldeciré por tener esta afortunada vida, sin ti. Pero seguiré imaginándote, y se me pasara, siempre se me pasa, tu y tus remedios raros, tu que ya no me recuerdas, yo que no he podido dejar de amarte, odiarte si, pero amarte, dejar de amarte ni en mi muerte, aun mis huesos tendrán los tatuajes de tus besos. Aun mis gusanos lloraran de tristeza por comerme, aun las lluvias silbaran mis suspiros en tu dedicatoria, aun la tierra que murió por su propia gente brotara bellas flores, en memoria de mis poemas, los que nunca leíste, los que fueron solo un desperdicio de sentimientos, lo que fue, un desperdicio de vida, y ojala en cien años después de morir no piense en regresar a un cuerpo otra vez, pero hasta en la otra dimensión te veré, y querré volver, así sea para verte joven de nuevo y sufrir otras nueve décimas partes de la vida, pero todo sea por ver lo único bueno que Dios hizo, lo único que le quedo bien, algo desconsiderada e idiota le quedo pero maravillosa, como solo tu puedes serlo.
Me duele la cabeza… Que le voy hacer, la vida duele y no es el primer golpe ni el ultimo. Se me asoma un chichón formidable en el lado izquierdo de mi prominente expresión intelectual, tal vez me haga mas idiota, tal vez me quite la estupidez. Tal vez no pase nada. He leído la mitad del libro de una suicida, y por lo que entiendo es que su vida fue desgraciada, porque así lo quiso, y luego sufre hasta que se cansa y muere. Si yo comprendo ese orden de acciones, puedo asegurar que la vida es el diseño que uno mismo forma con el paso del tiempo. Nacer, crecer, creer y vivir o morir de acuerdo a lo que se considera todos los días. Me preocupa, porque en el fondo me siento identificado con la maldita loca, y me produce decepción saberme tan intrépido y conquistador como para terminar colgando mi cuello de una soga a los treinta y seis años solo porque me aburrí. Se que la vida es fatal, yo mismo he naufragado en la desdicha y el olvido, ahogándome innumerables veces en mis lagrimas, pero, tener que someterme a la muerte como única solución solo significa que todo mi tiempo lo regale a motivar y engrandecer los malos hechos que hacen de una mala vida, una mala vida. No todo es bonito por no decir que muy poco merece ser tratado de bonito, pero sentirme tan encapsulado en la idea tan motivante de lo que es el suicidio porque no soporto esta vida es algo… Deshonroso. Y lo mas contundente, es el hecho de que mi vida es el resultado de consecutivos deseos de lo que quiero que sea mi vida. Por eso es que cuando la autora decía «de mi tragedia solo queda el recordarme solitaria y ausente del mundo, mundo en el cual hasta los cadáveres me han olvidado.» Significa que estaba tan empeñada en ser desgraciada que su destino solo pudo encaminarla a eso que a lo que se dedicaba; sentirse desgraciada. Entonces, ¿yo que he deseado? Si bien soy sabio y enamorado aun poseo en mi cofre de los recuerdos terribles cosas, cosas que sostengo por puro deleite de sentirlas vivas a mi lado, no como un veneno, sino como un elixir antes de ser veneno. Son cosas peligrosas, arden y queman como también pesan y te congelan, pero he sabido sobrellevarlas manteniendo un delicado equilibrio donde no solo me proporcionan poder, también un inmenso agrado por vivir. Es como caer en el infierno, meterse a una cueva, y hacer una chimenea con los huesos de los perdidos, una piscina con las lagrimas de los abandonados, una cama con los cabellos de los lunáticos, y una casa hecha de corazones fríos y miedosos que me quiten el sofocante calor del inframundo, básicamente un clima perfecto, dulce y hermoso, con elementos sacados de las mas horribles pesadillas. Así vivo yo, y vivo bastante bien pero con el hecho de mover un dedo en el lugar equivocado, todas estas aterradoras descripciones de la muerte vendrían en mi contra y me quemarían hasta lo mas profundo de mi ser. Gracias a mi talentosa calma que no ha ocurrido nada de eso, sin embargo podría ocurrir y terminaría como la autora del libro ese. La razón por la que me hago tan aliado de mis miedos es porque fueron los únicos chocolates deliciosos que probé antes de caer súbitamente en la terrorífica realidad, si es cierto que de dulces pasaron a ser verdes sales asquerosas y humeantes, también es cierto que mi amor nunca dejo de serlo, y aun sabiendo que estaban perdidos mis mas buenos recuerdos, me di a la tarea de acompañarlos en su oscuridad y gracias a mi luz es que no mueren. Ellos lo agradecen evitando consumirme aun estando hambrientos de sangre y dolor, y yo sostengo el pacto alimentándolos todos los días con mi compañía tierna y serena. Sin embargo, no dejan de ser muerte y destrucción, lo que muchas veces me tienta a seguir el camino de la perdida es tenerlos tan de cerca. Y la verdad es que no quiero terminar así, loco, cansado, triste, solo, y muerto. Yo se bien que tengo en mis manos fuerzas incontrolables que he sabido conducir con algunos muchos tropezones a la cima, pero pensar que por estas fuerzas yo pueda perder el rumbo y caer en el pozo del olvido me hace tener que replantearme mi posición en este mundo. Amo, amo mucho, amo bastante, amo bien, amo en cantidades hasta innecesarias, llevo mi amor hasta lugares impensados, amo y ese amor son las sogas que atan mis males en forma de perros enfurecidos y los hace dormir. Significa que donde yo descuide por un instante mi amor, alguno de esos sarnosos puede despertar y arrancarme un brazo, y se sabe que un ruido alerta a toda la manda. Lo que quiere decir que yo estoy al borde de no el suicidio, mas bien el homicidio, y que camino fuerte y valiente porque demonios domesticados por mi, caminan a donde quiera que vaya, y que lloro y me desilusiono porque estoy tan rodeado de sombras asesinas que es inevitable dejar caer de vez en cuando la luz de mi corazón que tan arriba la sostengo. Si he de perderme fue porque quise, porque en mi siempre hubo una razón para existir, hasta tuve que introducir mis manos en el hedor de la descompuesta crueldad de la humanidad para sacar un poco de ternura. Así que si la maldita loca del libro termino con su vida porque ya no soportaba mas, fue porque era lo único en lo que se esforzaba; en dejarse invadir por el hastío, mas yo, aun teniendo las mismas razones para lamentarme, la misma mala y buena suerte, y los abundantes sinsabores de la derrota y el fracaso, decido con miedo pero coraje luchar contra mis feroces sombras segadas por el dolor, y llevarlas conmigo hasta las cimas mas altas y las cumbres mas imposibles donde juntos veremos las estúpidas nubes, y dejar que me lleven a los rincones mas profundos y los laberintos mas incomprensibles donde ellos seguirán mi ejemplo y lucharan por mi, como yo, que he abrazado con dulzura su asquerosa mirada. Si pierdo y finalmente me veo devorado por la maldad; moriré como un hombre que combatió hasta el ultimo segundo para salvar su alma y la de los suyos, y si gano, si consigo embellecer y devolverle la vida a la fría piel fantasmal que me abraza, entonces solo quedara dormir bajo el amarillo sol que se escondió desde hace tanto tiempo. Por ahora… intentar recuperarme de la cabeza, porque con los pies no se sostiene una espada.
La razón del suicidio es la soledad, o el excesivo abandono conduce a la nociva tristeza. De ahí a que yo me sienta tan orgulloso de ser un hombre tan bien acompañado, aunque muchos lo consideren como una falta importante de moral por conducir mi atención en tantas personas. Yo lo veo como un exitoso resultado de lo que fue una minuciosa planeación para ingresar a este vomitivo destino, o lo que mejor se puede denominar como un colchón donde caer cuando las desgracias me golpean.
Tengo tantas ganas de hablarte… Pero sé que no me escucharas, y si lo haces sera peor, porque le sigue esa indiferente mirada de querer estar haciendo otras cosas a estar conmigo. Es triste saber que soy poeta y que en el silencio de mi soledad yo te escribo versos dulces porque tu no los recibirás… Tu no puedes, sientes que soy un estorbo. Y yo estoy tan antojado, por ahora, luego estaré obsesionado, en dedicarte mi tiempo, mi buen tiempo porque es malo cuando me haces falta. Tengo la calma encima porque lo intente todo, sin embargo me pesa el amor que no te doy cada mañana, me hace tanta falta besarte y repetirte una y mil veces lo maravillosa que eres. Ahora… Se que estas con otro, o con otra, o con quien sabe quien pero que dedicas tu tiempo al refugio de otras miradas, al menos me consuela el que no estés abandonada al exilio como yo, no quisiera que pasaras por eso, es el sentir desdichado de no tener un aliento para vivir mas que unos recuerdos polvorientos que sacas todos los días de un cajón secreto. Ahora se que tienes en tus manos unos senos cálidos o al rededor de tu cuerpo se deslizan caricias en las noches, me encanta; saber que no vives como yo, que poseo unas uñas blancas, cayos en las manos, arrugas en la piel, hace tanto que no percibo un cuerpo humano, el ultimo fue el tuyo; mi preferido, mi favorito, mi único recuerdo antes de mi partida. Yo pienso en marginar al olvido, tu piensas en la locura de sentir un pene retorciéndose en tu interior, o unos labios rosando los tuyos compulsiva mente. Tu piensas en todo el éxtasis que produce el calor de bellas gentes, tu piensas en el orgasmo eterno de un cuerpo devorando el tuyo, tu piensas en mujeres y en hombres que se entrelazan con tus dedos, tu boca, tus piernas, tus emociones mas desbordantes, tu piensas en todo menos en mi… y me sienta bien, amargada bondad porque te extraño exageradamente pero buen sentido porque vives mejor que yo, ¿para que recordarte que aun respiro? ¿para que insinuarte mi delirio de ti? Si lo único que harás sera perder el paraíso donde te encuentras…
El mal es la necesidad de afecto. -Alejandra
Me haces tanta falta, que duro es caminar de un lugar a otro, conversar con desconocidos, comprarse un helado repetidas veces y sentir como nada funciona, que me duele la rodilla izquierda y debo quedarme sentado, y que me duele el corazón y debo leer para no pensarte, y que me siento mareado y debo tomar agua. Todas son distracciones, lo único que necesito es tenerte cerca así no me quieras, porque vivo mal sin ti, mi vida comienza a aburrirse, mi cuerpo a enfermarse y mi cabeza a enredarse. Yo te quiero, y no quiero vivir así pero no tengo mas remedio que extrañarte…
-Nati… -Adrián -¿Por qué eres tan linda? -eres el único que lo dice. -Eso significa que soy el único con los ojos abiertos -tal vez te ciegue el romance -o tal vez el romance me mantenga al tanto -no te entiendo, no me veo lo linda en algún lado -¿y? El aire tampoco se ve -hablo de que persistes demasiado -yo sugiero insistir un poco mas hasta que te lo creas -¿creer que? -que te amo -¿a mi y a cuantas mas? -a todas las que tengan algo de ti en su vida -no soy perfecta -yo tampoco -tu no me amas, eres un farsante -entonces si no te amo mi farsa solo concluye mi total entrega -hablas demasiado -escribo -hablas -si pudiera ser escuchado por ti estaríamos haciendo algo distinto -tu amor es tan fugaz -por eso aun vive después de dar tantas vueltas al mundo -no me sirves -no puedes mentirte -intento ser fuerte, me duele verte lejos… -yo intento amarte, no es fácil para ninguno de los dos. -te busco en otros cuerpos, no estas, no te encuentro, me enloquezco y caigo, aun te amo, te odio porque no estas pero te amo… -¿ya ves por que eres tan linda? -eres un idiota -y así te encanto.
Me rehúso, me niego, a considerar tu partida, y maldita sea porque te acabo de decir adiós, pero ni creas que sera tan fácil, tu puedes ignorarme, reprocharme, insultarme, olvidarme, traicionarme pero yo nunca podre dejar de amarte. Y me emputa tener que fingir orgullo para marcharme, pero contigo no hay de otra, eres un ser despiadado, y yo un lindo conejito. Demonios, yo que tenia planeadas tantas demostraciones de mi amor y tu lo hechas a perder, maldita loca insensible y desconsiderada, púdrete. Pero, pero, pero, no terminara aquí, si bien no seguiré intentando desaprovechar mis talentos en esperanzas frustradas de nosotros juntos, si me esforzare en apretar y estrechar nuestro vinculo, en silencio, maldito silencio, pero en calma, y que me llenes y lastimosamente esta vez, una vez que me sienta dichoso de tu compañía, evitar buscarte y en vez de eso deberé tragarme la lengua y masticar mis dientes, coserme la boca y sacarme los ojos, ciego y sordo para no volver al triste recuerdo de tu puta falta de compasión conmigo.
Que ansioso, no veo el momento de ver sus palabras salir de su bella boca, tengo un miedo terrible de que nunca diga nada, tengo enormes deseos de que aterrice en mis brazos, pero lo mas probable es que su orgullo no quiera voltear a verme… No quiero enfrentar una vida sin ella, pero me temo que no tengo remedio…
Nena, no soy un hombre de orgullo, bien sabes que te persigo con toda la honestidad de mi corazón, afrontando mis errores y enmendando mis malas decisiones, nunca tome la iniciativa de irme por algo tan ridículo como «tu debes hablar primero, tu fuiste la del problema» yo siempre fui quien asumió la culpa, y se hizo responsable. Lamentablemente, tampoco soy un hombre de dignidad, si debo llorar no espero el momento, lo dejo ir, como también reír y sentir pero sobre todo intentar, yo intento, yo persisto e insisto y sobre resalto el hecho de que es posible invertir todos mis esfuerzos en metas, que realmente no lo merecen, y no me refiero a que tu no me merezcas sino que tu no ves mis grandes obras y yo, no veo que tu no las ves. En otras palabras, no se detenerme, nunca me he planteado el hecho de que desperdicio mi tiempo en el campo del amor. Pero si algo soy, es que soy humano, y como tal poseo las suficientes desventajas humanas para ser una elección de entre muchas otras mejores… Yo se que soy bueno, me siento bastante bueno, pero ha decir verdad yo no me quedaría con la chica gorda y grosera del salón. Entonces, si no te molesto es porque entendí que no soy bueno, comparándome con aquellos a los que miras, que aunque yo sea bueno para ti, otros pueden ser mucho mas buenos, y eso me convierte en un hombre poco preferido. Así que, asumiendo mi nuevo rol de joven introvertido y mal arreglado te dejo en paz, no porque me de por vencido, sino porque somos demasiados como para que quieras elegirme…
Tu tan admirada por mi y tu por tantos, a veces, siento que mis esfuerzos no han sido los mejores, que aunque sea bueno yo no soy competencia para tantos… Y lo peor es que sabes que soy bueno, que en mi no existe reto, ni meta, ni algo semejante al valor del miedo por creer perderme, que ya me tienes, que no necesitas conseguirme, que sabes que yo siempre estaré para ti y que mi bondad siempre resaltara tus valores por encima de todo. Y me temo decir que por eso ya no quieres nada… Que me he vuelto tan bueno y sano que eso no contribuye con tus aventuras, tus desgracias, tus aprendizajes en la vida y yo lo único que siento es el dolor por no tenerte. Supongo que tu debes aprender a compartir y yo a ser independiente, pero quien demonios puede hacerme olvidar tu linda sonrisa… Que si no me deseas es porque yo no te ayudo a crecer, que si yo te amo es porque eres lo mas lindo que he tenido en la vida. Son situaciones que no se entienden, y por eso tu me recuerdas de mala manera, y yo, te extraño tan intensamente…
Estoy trastornado, su aroma y mis nubes me han sacado de este mundo, me siento amputado de la realidad y la soledad no ayuda, me acobija tan tierna mente, que he perdido la comunicación con los demás. Son los síntomas de la locura, y nunca seré bueno para algo porque todas mis fuerzas están puestas en su espera, en las ganas de ver a quien nunca volverá a la vida…
No puedo hacer nada, hay una voluntad suprema de adorar a quien no se acuerda de mi. No sé con que fin pero es al parecer un vicio perseguirla, insistirle banal mente. ¿Y qué consecuencias trae para mi? Que si no la busco se me retuerce el alma, y si la busco y le digo lo que pienso, se me retuerce de igual forma porque es feliz lejos de mi y todo lo que quiere es olvidarme. Entonces sigo cuestionándome; que razones tengo para retorcerme. Ella no volverá, y si lo hace solo sera para dejarme migajas de su querer. Demonios, es como si yo no me amara que tanto me destruyo pensando en ella y ella por allá desnudándose frente a otro. No sé que conseguiré de todo esto, tal vez rebajarme, humillarme, hasta yo mismo se que no pude ser tan malo como para caer en este limbo ridículo de lamentos y dolores. Me pregunto hasta donde deberé llegar para asimilar su ausencia, a día de hoy no soporto la falta que me hace, no lo asimilo, no lo acepto pero deberé hacerlo, algún día, o si no seguiré buscándola para repetirme lo inútil de mis pretensiones. Y es que me gusta mucho, ella es el motivo de mi fuerza, pero deberé pensar en algo nuevo porque realmente este camino solo me llevara a la locura, el caos en mi propio corazón. Y cuanto quisiera que ella me buscara tan desesperada como lo hago yo, pero no es así, tal vez porque no lo merezco. Y cuanto quisiera llamar su atención de buena manera y no con estos patéticos intentos fallidos de ganarme su aprecio. Y cuanto quisiera quererla como antes, por las buenas, sin necesidad de verla, sin necesidad de ella, solo en el vacío de mi soledad para que sus recuerdos me invadan tierna mente, no como ahora que estoy ansioso por ella, como excitado, como un animal que debe aparearse, pero mas desquiciado, mas lunático, como un planeta que es atraído por la gravedad hacia el sol, pero no gira trivialmente, sino que va en camino a colapsarse y fundirse en fuego y lava y océanos de volcanes escupiendo calor, abrazando todo el planeta hasta derretirlo y crear una sola materia, pero eso es volver hacer algo que ya ocurrió, cuando sus ojos brillantes me miraban intensamente y yo disfrutaba de su cuerpo sobre el mio… Me pregunto y me pregunto algo que ya se, hasta de memoria como una canción, y es que si todos mis sentidos me impulsan a nuestro encuentro es porque ella realmente marco la diferencia, y no fue solo con sus besos, sino con estas ganas que tengo de matarla porque mejor que ella no existe, nunca existirá una mujer con tanta presencia, y estúpidamente la persigo aun sabiendo que no existe un hombre mas molesto para ella en todo el mundo que yo, hasta yo lo se, que la agobio, que le miento, que la traiciono, que le preocupo, porque nunca dejare de atravesarme en su camino, y esto es tan proporcional, que entre mas avance yo en el camino de aceptarla, ella lo hace de sentido contrario, y cuando mas la ame, ella mas me habrá olvidado. Y no puedo odiarla, ella es tan bonita, y ella no puede entenderme, soy tan bipolar…
Que demonios tengo que hacer para dejar de amarte, no te saco de mi cabeza y no es tu culpa pero eres la única que puede entenderlo
Todo lo escribí para ti, esto es una de diez partes, lo poco que puedo enseñarte… Decir, por decirte y ocultarte muchas, pero nada tan obvio como el hecho de que nada podrá cambiar esto; el que me hayas quedado grande, pero mas grande me quedo superarte. Paleta estúpida, cuanto sufro por tu ausencia, por mi incapacidad de tenerla en mis manos… Y cuanto me alegra conocerla, divertirme a su lado. Usted tenia razón; son sentimientos que no podemos comprender…
Lluvia… Es otro día, es un nuevo día, pero no un momento para mi, no es tiempo para cambiarme, pues todo lo que soy y lo que hago esta minuciosamente planeado para dejarme vivir. En otras palabras, aunque anoche la hice llorar, y me juro no querer volver a saber de mi, mi actitud no cambia, es bonita hasta cuando se molesta. Sin embargo se que ella esta sufriendo, que es mejor dejar de interrumpir su tiempo, y que yo debo, no se, recuperar mi cielo sin ella. Supongo que es normal mi boba insistencia después de encontrar su cuerpo y su alma tan pegada a mi; nunca habíamos estado tan cerca, y, tan cerca del odio al mismo tiempo. Que mujer tan fascinante, y complicada al mismo tiempo. Yo no soy tonto, se que le gusto, que me quiere, que se siente adornada conmigo, ella misma me lo confiesa, sabe que el mundo es bueno a mi lado, que hemos hablado y sonreído, jugado y abrazado como no se puede hacer con alguien mas y aun así prefiere culparme, yo se que no hice nada malo, ella estaba rota antes de que yo llegara, yo he estado vacío también pero ella me ha llenado, ella que es así toda rarita, pero ella no se llena conmigo, yo que he intentado de todo, hasta pareciera que es una nube y yo soy agua y me suelta y yo regreso por la inercia de la natural vida, y luego me suelta. Se que estoy infinitamente apegado a ella y que ella esta indudablemente indecisa… Eso que paso anoche ni me sorprende, lo ha hecho tantas veces y luego me habla dulce y consentida como si se le hubiera olvidado todo y por fin se sometiera al dulce del amor. Estoy triste… Me avergüenza que mis grandes esfuerzos no sean de su agrado, y que mi indiferencia tampoco contribuya, es como si no pudiese detener el destino, es sumamente triste, y supongo que solo me queda afrontarlo. Ella seguramente esta bien, (bien loca) y que disfruta mucho su vida con quien sabe quien, asi que no debo preocuparme. Pero yo… Yo debo recuperar su aroma, su buen nombre y el de Mafe, el de Camila, que Natalia no se corte el cabello para sentirse atractiva y olvidar todos estos problemas, que juntas vengan a mi, que me cuiden como el hombre asustado que soy, y que me dejen dormir en sus cuerpos para revivir de este trágico melodrama de la vida, y llevarlas conmigo, lejos, bien lejos donde no tenga que preocuparme por buscarte mas, donde te tenga para siempre, como siempre lo hice. Sugiero que esta vez piense mas de mil veces antes de accidentarme por casualidad contigo, esto no puede volver a pasar, eso de olvidarme de mi y con ello de ti y recuperar a quien jamas quiso estar.
Amarte a ti es la mayor de mis glorias…
Sólo es tiempo, todos vamos al mismo lugar pero evadimos el saberlo, sólo buscamos compañía para no hacer arduo el tiempo, sólo es entretenerse, divertirse, hasta que la estación llegue y nos lleve a otro lugar, otras reglas, otras gentes. Sólo es vivir esperando, sólo es no volverse loco, sólo es amar y sufrir, sólo es, tiempo para morir…
Sólo es tiempo, todos vamos al mismo lugar pero evadimos el saberlo, sólo buscamos, como sé, que me hace tanta falta tu presencia como el mismo aire, y que no puedo hacer nada, por mas que escriba y te obsequie y te regale y te cuente y te abrace y te escuche nada cambiara esto; el hecho de que eres imposible. Y te conozco, se que te torturo lentamente cuando te invito a salir, se que estas ocupada, cansada, y llena de monotonía, que tu al igual que yo cuando tenia tu edad, buscaba placeres cercanos. Que tu nunca volverás porque te aburre mi sencillez, que tienes y te sobran oportunidades mas útiles, que yo… Y también se que no puedo dejar de amarte, que me aferro a ti todo el tiempo para soportar mi horrible tiempo, que mi vida se la lleva el viento y tu recuerdo me sujeta, y se que no puedo seguir así pero hacer algo distinto seria peor. Cuan fuerte es mi amor por ti pero de nada te sirve ya que tu no amas, y si lo llegas hacer no sera por mi y se que eso ni Dios podrá cambiarlo. Que tu eres como eres y que por eso te amo; por ser inigualable, única, perfecta para torturarme, que no era mi plan pero termino siendo así; un terrible y tortuoso amor.
Para no hacer arduo el tiempo, sólo hay que entretenerse, divertirse, hasta que la estación llegue y nos lleve a otro lugar, otras reglas, otras gentes. Sólo es vivir esperando, sólo es no volverse loco, sólo es amar y sufrir, sólo es, tiempo para morir…
Es que somos muchos… Y tengo muchas ganas, pero también pereza, si, en exceso, un cumulo de oportunidades que no quiero por quedarme en la cama todo el día, tal vez mañana me decida a hacer algo, pero hoy no, hoy voy a pensar que somos muchos, que alguien vivirá por mi, amará, sentirá, se emocionará, descubrirá o quien sabe que. Tal vez no sea lo correcto, pero quien me asegura que vivir persiguiendo es el verdadero objetivo. ¿Perseguir? O preferiría decir; correr. Buscar incesante hasta por debajo de las piedras algo que se quiere. Y puede sonar muy interesante pero… ¿y luego? Yo opino que llegar no es algo que se disfrute. Llegas, lo logras, lo consigues y… ya. Yo prefiero quedarme escribiendo, confesarme lo que no entiendo, el hecho de que no quiera nada porque lo poco deseable es imposible. Yo prefiero renunciar, si, tirar la toalla delicadamente y que alguien la recoja, la mime, como si no pensara hacer lo mismo que yo
No puedo sacarte de mi cabeza… Y pensé que sería capaz, que podría, que tendría la fuerza para afrontarlo, para enfrentarme a ti. No he podido… Si no le he respondido es porque me ha dejado sin aliento, sin respiración, sin palabras; anonadado, infinitamente confundido, lleno de cosas que quiero expresarle pero no sé decirle, no sé detallar la forma en como la observo, como la reparo, la desnudo, en silencio, en calma me sumerjo en su piel ¿qué parte de ella no conocí? ¿acaso no detalle cada centímetro de ti, cada parte de lo que estas hecha y yo he admirado tanto? Entonces porqué insisto en observarla, porqué me obsesiono tanto con quien está frente a mi, qué ocurre, que puede pasarme, si todo lo había resuelto, lo había solucionado, pero no, es imposible, ha sido imposible perderte de vista, he sido incapaz de dejar de amarte. Y créame que regresé porque me sentía listo, preparado, más fuerte, más capaz, capaz de soportarla a usted y su incesante despliegue de todas las maravillas que he conocido, y regresé porque sabía que esto no ocurriría, pero por más que quiera tener buenas intenciones, y el deseo simple de ser su amigo, nada podrá evitar el hecho de que yo veo en usted un cielo infinito. Cuanto tiempo me tomé en superar sus ojos, tan pequeños, brillantes, que algún día se fijaron en mi, que en algún momento miraron junto a mi las mismas estrellas. Y pensé, ya es tarde, ya no podré recuperarte, ya todo ha muerto, mi corazón lo entregué sin medidas ha quien hoy me desea la mayor distancia, ya no tengo nada que dar, mis manos están vacías y tu ya no me recuerdas, mucho ha ocurrido, mucho tiempo se ha interpuesto en nuestros caminos, es el momento perfecto, el juntos, el exacto para verte y no enamorarme de ti. Que fantasioso fui… No puedo olvidar tu rostro, se ha clavado en mi tan profundamente, como la primera vez, y de repente siento la ola de recuerdos que me somete a las profundidades de un océano hecho de ti, y sé que es culpa mía, que no debí recordarte junto a mi todo este tiempo, que no debía preservarte, que debí llorarte, enterrarte, clavarte en el maldito poso de la desgracia como todas las personas lo hacen cuando han perdido lo que más quieren. Pero no fui capaz, me estaba secando el alma, preferí superarte despacio, o ni siquiera intenté dejarte ir. Cuando nos despedimos hace años yo te llevé conmigo, a todas partes y me sentía tan contento, tan entusiasmado, y después de eso conocí a tantas mujeres, amé a tanta gente, entregaba mis palabras, las regalaba como quien tiene montañas de ellas, pensé que eso sería suficiente, tanta gente, tanto amor derrochado, tantas caricias y besos serían suficientes para perderte por fin, sacarte de mi pecho donde te has sumergido como la sangre misma. Y no se imagina, volver a verte, yo que me sentía tan preparado, lo había planificado desde hace tanto tiempo, y simplemente me resurge el cariño que le tuve, las ganas que siempre he guardado de abrazarla y sentir su cuerpo tan delicado, tan pequeño, entre mis manos, y a medida que pasaba el tiempo y escuchaba su voz recordaba cuando caminaba conmigo, tan contenta, tan tonta, y yo en esos momentos, en que escuchaba su sonrisa, me ataba con las sogas de la demencia mis brazos, mis piernas, mis cuerpo entero lo tenía tan apretado, como si estuviese loco y me colocasen chaleco de fuerza, apretando mis manos y mi pecho, impidiendo que me lesione, impidiendo que yo vaya hacia ti, quería, quería, qué no quería, todo de usted ahí en frente mío, tan impotente me sentía, tan incapaz, ¿cómo era posible que mi sueño mas grande estuviese ahí en frente como si nada y yo no poder hacer algo? Y observarla me mataba, demonios, que hermosa, que linda, tenía la sed de un asesino, un violador, un histérico, un caótico, un católico en presencia de su dios, y cuanto quise tocarla, no me atrevía, usted pudo verme muy tranquilo pero en mi interior me mordía la lengua, sentía su olor, el deseo infinito de estar más cerca de usted, más cerca, escuchar su respiración, sentir su aliento sobre mi piel, sentir su piel, abrazarla, cuando usted caminaba en frente mio yo me colocaba esposas, toneladas de peso atadas a mis manos, debía mirar a otra parte, debía pero no podía, cuanto tiempo la imaginé en mis brazos para tenerla ahí y no poder hacer una mierda. Y luego mirarla, seguirla reparando como si fuera una linda oveja y yo un león que se relame de hambre, que le ruge el estómago, que sólo quiere devorarte, que sólo quiero estallar mis labios con los suyos, oh cuanta impotencia, cada palabra suya y mis ojos bien puestos en su boca, tan suave, debe ser suave, debería porque tiene que serlo, ya no la recuerdo, ya no recuerdo ninguna boca, sólo quiero estar ahí, donde no tengas escapatoria alguna, y yo sea lo único que quieres probar, y justo ahí me colocaba vallas, cercas, barrotes, yo mismo me encarcelaba, no podía ceder a tales impulsos malditos de un corazón que ha tenido mucho tiempo para pensarte, pensarte, es lo único que he hecho todo este tiempo, la he imaginado a usted sobre mi, debajo de mi, a lado de mi, en mi, en todas partes, usted se ve tan bien en mi cama, en mi cocina, en mi parque favorito, usted se ve bien en todas partes, es como esa pintura que sólo un hombre entiende y conoce, sólo hay una, sólo se ha hecho una, sólo se ha amado a una, sólo se quiere a una, solamente usted y yo no soy nadie, y me siento derrotado y aún no te has ido, pero no decaigo, escucharla me hace tan libre, tan grande, me pierdo en sus palabras, en las mías, no puedo creer que estés aquí, que te he amado tanto tiempo, que nunca te he quitado el ojo de encima, que he navegado, volado, caminado, por todo el mundo y es usted mi razón más íntima, más personal, nada ha podido detener este fuego que me consume y que es por su maldita boca, en la que he caído, de la que no he podido salir ni siquiera un poco, y recuerdo todo, y su aroma, y todas las veces que usted se perdió por unos segundos en el mundo en que yo me encuentro todos los días. Y Natalia me dijo que te soltara, que me deshiciera de esa carga, que eres muy feliz sin mi, y tiene razón, hasta Natalia conoce el verano lejos de mi, y fue lo último que me dijo, lo último que salió de su boca, y lo entendí, hasta entendí antes de escribir esto tu no puedes comprenderme, tal vez nunca has amado a nadie, y si lo hiciste no fui yo, y nunca seré yo, usted no puede definir este modo mío de maravillarme tan locamente por usted, y de tenerla tan clavada en mi vida, para bien, para mal, usted jamás ha entendido todo esto que siento y que le digo porque de haberlo comprendido se la habría de jugar tanto como yo lo hice, que nunca puse reproche de por medio, un segundo a su lado era suficiente para dejarme dormir toda la noche sin tener que preocuparme de nada. Y cuando entendí que usted no es y nunca será como yo, más ganas tuve de seguirlo intentado, pero es inútil, perseguirte es inútil, lo hice mucho tiempo, y anduve amando a muchas mujeres como para que en mi regreso no ocurra esto pero mire, como caigo, como le confieso algo que usted está aburrida de recordar, que yo en usted puse todas mis esperanzas porque usted ha sido tan buena conmigo como el perro al que le dan caricias y algo de agua. Y decidí dejar que usted flotara libremente para que ya no me volviese a sentir así, tan abandonado a mi suerte, pero me doy la sorpresa de que cuando regreso usted no sólo es la misma de antes, sino más hermosa, más frágil, más añorada para mi, y cuantas ganas tengo de cuidarla, de preservarla celosamente para siempre, y lo he hecho y por eso he estado así, a cada segundo, a cada hora, la recuerdo, está por todas partes, como el aire se ha penetrado su mirada en lo más profundo de mi, y cuando nos despedimos y regresé a casa me sentí como si hubiese hecho el amor toda la noche, y ni siquiera llegué a acariciarte, como explicar eso, como definir que me derrite su presencia, me deshace, me fascina su persona, tan usted, tan a su manera. Y me molesto porque no debería amar a quien sólo se ha burlado del tiempo, pero no puedo evitarlo, conozco en usted cosas que sólo yo he guardado de esta manera tan obsesiva, si le digo que soy inofensivo es porque soy mucho mejor para controlar mis instintos, que decir impulsos, inmensas ganas de expresarle todo lo que siento, pero debo asumirlo, debo asumir el tiempo, su falta de lo que yo tengo y mi exceso de lo que usted nunca utiliza, y yo me lanzo al vacío y me siento flotar con su nombre, y sabía que aunque ya estaba preparado para verte sabía que no era la mejor idea, y realmente no fue una buena idea, pero fue lo mejor que me ha ocurrido desde el día en que dejé de verte. Y no puedo hacer nada, este sentimiento crece hacia un mismo lugar, y ya nunca podré tocarte otra vez, no quisiera hacerlo tampoco, perderte es suicidarse, es morir, es sentir el frío del invierno que me ha llegado de repente. Usted me ha llevado a los dos bordes del universo, la muerte más dolorosa como el cielo más brillante. Ya estoy dudando seriamente si quiero continuar esto de ser amigos, ¿para qué? quiera o no terminaré profundamente enamorado de usted, esa es su magia, no puedo ver hacia otro lugar estando a su lado, a su lado soy feliz, no necesito ni abrazarla para sentir el calor que desprende su risa, usted me hace tanto bien, así es como funciona, yo soy artista y usted paisaje, y nada podrá evitar que usted sea hermosa, como nada podrá evitar que yo la adore por el resto de mi vida, y créame que me encantaría ser su amigo, realmente no tengo más ofertas más buenas que tenerla a usted un rato a mi lado, pero dudo aguantar mucho tiempo, dudo sostener estas sogas que atan mis manos, que me impiden acercarme más de lo necesario, más de la prudencia, me siento incapaz para resistir estar a su lado y evitar besarte. Que bueno que estoy tan lejos de ti, porque o esto resultará con un golpe en mi rostro, o más motivos para extrañarte.
Te soñé, y regresabas, no te explicabas como al igual que cuando yo lo hago, no podías justificar la necesidad de verme, no habían razones, y como que por fin lo llegas a entender, que estamos conectados, atados, y en nuestras vidas uno sin el otro no es mucho…
El destino es una sopa que se calienta despacio, no puedes dejar que se queme, se enfríe, se seque, tiene que estar en el punto justo, o no sabrá bien. Y cada paso, cada beso, cada decisión, te llevará a sentarte finalmente en una mesa, a comer lo que has estado cocinando por tantos años.
Mis mariposas, giran al rededor, ni siquiera están vivas, es que no pertenecen a este mundo, son mis novias muertas, con vestidos coloridos, toman formas bonitas para no revelarme su cadavérica apariencia, danzan, cantan, me hablan, son espectros de otro mundo que me persiguen, yo se los permito, pues llevo un cuarto de vida averiguando el camino correcto, y ellas son lo único conocido, ni buenas ni malas, sólo mías, porque aun no he pensado en que haré con el tiempo que me sobra, que se agota lentamente como un reloj antiguo, de cuerda, que ya no compra nadie, que a penas si funciona. Y si yo fuera cuerdo las abandonaría, todos me lo han dicho, estoy mas vivo allá donde nadie vive y eso no es bueno, es como abandonar el cine, y dejar que los demás vean la película, mientras camino, y pienso, a veces no pienso nada, la sensación de recordar es un éxito por si mismo, algo que no existe, que vaga por mi memoria como un deseo insatisfecho, pues vivo de ilusiones, ya que es muy difícil conseguirlas, es un desafió donde he luchado mas de una vez, me he quedado medio vivo, con un solo ojo, me ha matado esta vida, pero sigo aquí, con la mitad de mi ser en otro mundo, donde me cantan las sirenas, me abraza la arena, me susurran sus labios cosas que no he escuchado en todos los que he conocido, me susurran, me besan, me muerden, surge la sangre, son asesinas, diabólicas, tan hermosas, me arrancan a pedazos la carne, extremidades enteras, me devoran, me consumen, no dejan ni los malditos huesos, me prueban y degustan, ahora me tienen por completo en sus estómagos, y estoy repartido en partes, ellas no se sacian, pero yo no me preocupo, navego en sus cuerpos, soy diminuto, busco mis partes, nunca podré dejarlas, nunca podré encontrarme hasta que ellas no dejen ese voraz apetito, y sigo navegando… Buscando el camino.
Me pido explicar un sueño, todos los días es el mismo, y cuando nadie me ve me pregunto qué será, qué es lo que a veces me hace olvidar este miedo a vivir, el por qué estas repentinas necesidades de florecer, de tener otro color, otra actitud, un nuevo caminar dentro de un mundo que no cambia. ¿Y si no soy yo, y si realmente es alguien más, algo mágico que me ha rodeado desde mi nacimiento y ha reencarnado en tu sonreír? Entonces que puedo hacer yo si no tengo una voluntad más fuerte que aquello conocido y guardado en mis rincones del recuerdo. Qué puedo decir en mi defensa, ¿que aquello me ha atrapado, sometido, enjaulado y por ello es que hoy tengo ganas de abrir las puertas? Ganas de salir, de ver la luz, dejar que las viejas maderas de un hogar que me ha ocultado se fundan con las colgantes ramas y no con el pútrido fango que he intentado todo este tiempo correr de un lado a otro. Pero que quiere decir esto, ¿que mi jardín nuevamente vera el sol y no las nubes? ¿que en mis ventanas veré aves en vez de grandes goteras? significa que, realmente se ha movido algo, ha habido algo que sin esfuerzos modifico los principios que utilizaba para vivir o mejor, te he vuelto a ver.
Dígame, venga a explicarme este motivo exasperado que tengo de amarla, me enfurece, me corre la sangre destructivamente intentando averiguar mi maldita obsesión, que pensé seria mi juvenil corazón, pero podré tener novecientos años y no dejaré de temblar con su mirada tan sobre mi, me estremece, me hace volar por encima de la copa de los árboles. Absurdo, que usted no sea más que una mujer, y aun así me aplasta este intenso deseo de estar más cerca suyo, porque ni usted es tesoro ni yo ladrón, pero como la deseo locamente y sólo para mi; pues como la gloria cuán antojado me he quedado de su sabor.
«Cuando la edad enfría la sangre y los placeres son cosa del pasado, el recuerdo más querido sigue siendo el último, y nuestra evocación más dulce, la del primer beso.»
-Lord Byron
Mi niña… Déjeme descansar aquí un rato, a su lado. Si le dijera no se lo imaginaria, que anduve buscándola todo este tiempo, y ahora que esta aquí… Ha… Es cierto, tu no estás aquí. No sé cuando voy a digerir tu partida, supongo que nadie está, que nunca nadie estuvo, ni yo, pero entonces porque me aferro, a algo imposible, improbable, hasta dañino como tu. Me siento animal en busca de un páramo, pero no hay nada, el silencio de especies desconocidas me aterra, como si le tuviese asco a todo lo que no tiene que ver contigo. Me siento agotado, y su imagen se ha fundido con mis ojos, y su olor lo recuerdo, recuerdo que era olor a felicidad, por eso divago en tanto pesimismo, de no encontrar nada, nunca bueno, nunca tan bueno, porque su olor no lo encuentro en otro lugar. Y me aterra, me da miedo perderte, pero si es que nunca te tuve, la sensación de su cercanía es algo tan viejo, tan gastado en mi memoria, un salón que utilice tanto que hasta ha perdido el color, ya no queda nada, ni bailes, ni canciones, ni salidas al parque, ni poemas, ni encuentros, ni besos, al parecer he llegado al lugar donde todo hombre debe llegar, a enfrentarse con su vejes, su cansancio, su pereza, su soledad, el exilio mismo de este mundo esta en frente mio, quería ignorarlo pero es muy evidente los últimos años que no he podido verte, no porque no existas, sino porque no me amas, no lo harás nunca, y lo reconoces, sabes que mi amor pesa, duele, quema, arde, mi amor consume tanta tristeza que no puedes evitar el brillo de esos ojos al verme, no puedes evitarlo, no puedes igualarlo, no puedes cambiar el curso de tu frialdad. Nunca podré verte venir a mi como yo a ti, y ni mis fuerzas, ni las del mundo entero podrán cambiar el carácter de una mujer. Y me apena mi tanta necesidad de amarte, que por ello te he perdido, y no podré olvidarte, pero podré morirme de pensarte sabiendo que tu sólo podrás seguir ese largo y lejano camino que te separa de mi. Tanto querer, y aun sigo aquí, aun puedo, pero para qué intentarlo, cuantas vidas desperdicié buscándote, malgaste en ti, el mundo entero… No es que no me quede nada por dar, es que no quiero sentir el filo de esa sonrisa, con la que me cortas la garganta, me cuelgas como la carne en el mercado y me dejas desangrando obligándome a verte salir por esa puerta, otra vez, una vez más, llorar por ti. Y es una tortura, que ilógico, hasta para mi es estúpido, el mismo calor que no me deja morir es el que me quema, que tu me arrastras por el infierno cuando tengo frío, que me dejas perecer en silencio, y no te importa, hasta me culpas, que no eres tu sino yo el que tiene las sombras en su alma y un mil trucos sangrientos bajo la manga. Pareciera que no es amor, sino un odio mutuo, el deseo exagerado de torturar al otro, quien lanzará primero la flecha que atravesará al otro, quien tendrá el puñal más largo, más afilado, más brillante. Dónde caerán las gotas de sangre, y las de sal. Es como si cada uno tuviese una retorcida idea del amor. Porque mira el fruto de nuestros esfuerzos; almohadas mojadas, marcas de golpes en las paredes, periódicos rotos, pinturas maravillosas que nadie ve, que nadie compra, que nadie entiende, segundos de desgracia, y una eternidad de extrañarse. Parece que no te amo, te odio, y me encantas cuando te vas porque se ven hermosas esas caderas, y te vuelvo amar. Perra gracia, desde cuando soy masoquista, psicópata, estúpido, mal logrado, irritado, ansioso, perdedor, bueno, perdedor siempre, pero entonces para que te vi si no podría volver a ver algo mejor. Mejor, mejor, ya ni sé que significa, me siento inútil, por no ser lo mejor para ti pero cuando soy lo mejor; mejor soy para que me abandones. Es inútil, no es que yo lo sea, es el amor, el amor es inútil, la entrega absoluta es un suicidio, el tiempo dedicado, los besos, los abrazos, las ilusiones, las risas, la propia compañía, la única vez que tuvimos sexo, la única vez que me miraste sin pretextos, las pocas veces que te escuché, te vi cantar, te vi caminar, te he visto en tantas partes, te he hecho tantas cosas, y al fin qué, sólo conseguí odio, dolor, y un terrible sabor en la vida, como si lo único que hicimos fue cosechar la desgracia, por cada vez que nos tomábamos de la mano asegurábamos un futuro lleno de pena, de rencor, de un sentimiento irrompible, miedoso, aterrado, asustado, cansado de ser exprimido, harto de tu ausencia. Y yo que pensaba que el amor era el paraíso, el cielo, la obra, la gracia del señor, pura basura, es solo un boleto al infierno, y cuanto más amas, más sufres, más atado te encuentras, hasta que te quedas como yo, sin salida, no poder dar un paso atrás porque allá sólo estas tú, y no poder dar un paso adelante porque sin ti no hay nada. Y no poder poder porque ya no hay motivos para nada, solo, cansado, viejo, pequeño, y sin ti. ¡Qué me parta un rayo! A no, es cierto, no tengo tanta suerte…
Pretendo encontrar su aroma, el que perdí hace tanto en mis días de guerra, y hoy no precisamente me encuentro en el paraíso, pero se puede decir que tolero con más ímpetu este vivir abundante en su ausencia, en mi dolor, propagándose extensamente en mi presente, y soy mago, y sé alquimia, y propongo su delicioso aroma como la cura de esta terrible peste que ahoga mis sentires e ilusiones. Aquella floristería que desprendía su cuello cuando lo besaba, delicadamente como la pequeña y consentida niña que eras, que renunciaba a la realidad por dejarte tocar de mi, yo, un fugaz aliento de poesía y belleza, que nace en tus ojos y muere en los mismos, que algún día no pude ver mas. Si yo fuese dios escribiría dormir entre tus piernas y descansar en tu pecho, en el latir de dos corazones contentos, pero el mundo no es un mundo donde pueda hacer de ti mi mundo, o eso es lo que creen los demás, porque no me importa mucho, no me importa la distancia y el mérito excesivo del destino de alejarnos, yo no dejaré que usted se vaya, al menos de mi cabeza, porque de olores maravillosos me ha colmado su existir; yo que hasta entonces sólo podía transitar por calles tan sucias como su olvido.
Camila… He querido escribirle esto desde el día que dejé de verla, porque al igual que usted, yo desaparecí sin explicaciones y con muchas cosas por hacer, sin querer hacerlas realmente. No se imagina, ni yo, el tiempo que he dedicado para usted, no recuerdo mucho de mi felicidad desde el día que ya no te veo, tal vez todo ha sido como siempre, una rotunda soledad y pereza de la vida, volví con Mafe y Natalia cada vez que se podía pero no duraba ni un día el deseo de perseguir el uno al otro. La verdad, cuando usted se fue no lloré, no me arranqué el corazón y aruñé mi pecho como solía hacerlo siempre con los sentimientos, porque si bien conoces, y tu misma lo dijiste «nuestro amor no lo igualará ni los mismísimos dioses». Parecía un juego, pero antes de usted sólo encontraba problemas, mujeres indecisas, mal entendidos, abandonos, silencio. Y después de usted, lo mismo. Entonces por qué tu harías la diferencia. Es que usted, usted es la única mujer que no he insultado. Las demás podrán ser una perras, malditas, hijas de la desgracia, traídas a mi por el infierno. Usted cuando se fue, aunque se me acabó el impulso, no tuve nada por decir, no dije nada, el día en que te fuiste yo me senté en una banca a mirar la gente caminar, y aunque intenté resolver las cosas no encontraba motivos para perderte, y aunque llegada la noche; furiosamente llegué a casa, no derramé una sola lágrima por ti, ¿por qué? Me permito decir que no fue por una escases de sentimiento sino porque no quedaron marcas en mi piel, ni leves rasguños, como si hubiesen destrozado mis expectativas con algodón, y no hubiese pasado nada. Es decir, que en el poco o mucho tiempo que me di a conocerla, ni un muy pequeño trozo de dolor dio cabida en nuestro trato. ¿Entonces que trato fue? El único bueno que conocí… ¿sabes? Ahora que lo pienso he conocido muchas mujeres, muchas bocas, aromas deliciosos que me han cautivado como una abeja, y pieles por las que he surcado como nubes en los cielos, soy sorfista en la saliva de una mujer, simplemente no puedo detenerme una vez que comienzo, me deslizo por esos labios, me dejo llevar por ese sonido de sus palabras y persigo el brillo de sus ojos. Las mujeres resultan un plato tan agradable y deseado para mi. Pero, todo termina tan devastador, es una tragedia, un desastre, un acto de barbarie sin motivos algunos para colapsar tan bello paraíso. Y usted no fue la excepción, se fue cuando más tranquilo me sentía, pero no dolió, ni un poco, y a día de hoy lo he pensado, y me permito escribir todas estas cosas, porque ha sido un nudo en la garganta, he pasado todo este tiempo sufriendo, estoy tan derrotado que ni siquiera recuerdo el deber de mi vida en este mundo. Hoy me he sentido capaz de hacer algo por mi, de explicarle, porque explicarme lo he hecho durante años, hoy le digo que no he podido superarla, no he sido capaz, ni a usted ni a nadie, porque todo me ha matado, me ha derrotado y es la derrota que asumo todos los días y no puedo hacer nada, como el día que no pude hacer nada para detenerte; para evitar que te fueras, cuanto he querido llorar en sus brazos pero no me dejaste, no me dejaste, y yo me guarde las lágrimas que hoy me brotan porque, porque siempre intenté hacer lo que querías, siempre he intentado ser un hombre bueno dentro de lo poco bueno que he podido hacer por los demás, pero todo quedó en la nada, tan en la nada, que no me atreví hacer algo, la respete tanto, respete tanto lo que me dijo que no quise hacer nada, y entonces, entonces me dejé morir como el río que se estanca, y se queda ahí, a podrirse con la tierra. Yo no la culpo de nada, no le hecho en cara estos años de angustia, no me hecho ni yo la culpa, sé que hay cosas que deben suceder, sé que usted ha aprendido muchas cosas, yo también, y terrible aunque cierto, usted no me recuerda, no recuerda quien soy y que hice por usted. Yo le pregunté a mucha gente porque tengo que cargar con este peso del no olvidar, del no dejar atrás, del no poder seguir caminando, y me dicen que todos lo llegamos hacer en algún momento, hoy con este texto, que seguramente nunca conocerás intentaré hacer algo por mi, ya lo hice por todas las demás que llegaron ha atravesarme. Es como hacer las pases con el pasado, un pasado que fue bello, un futuro que se torna tan oscuro, tan triste, y un presente vacío, tan hecho nada, entonces me pregunto que hice toda mi vida, que llegué hacer por mi y por la gente como para tener este océano de sal en donde debería haber sangre. Si yo intenté ser alguien mejor… a lo mejor no lo recuerdas, pero yo si, yo lo tengo tan grabado en mi piel, un imborrable tatuaje ha sido su sonrisa para mi. Tanto, tanto he sido un hombre moribundo que escogí las mujeres más hermosas justo para hacerlas más imposibles, cundo te conocí yo estaba acabado, destrozado, sumergido en meses de llanto, no tenía razones para despertarme en mitad de la noche para plantearme las razones de mi soledad, y usted aparece dentro de tanto vacío y me deja sin nada que pensar, desde que la conocí, su voz fue una canción que repito todos los días para entretenerme, los únicos consejos que se han repetido de gente con más experiencia que yo son que no te debes aferrar a nadie, la gente muere, no porque muera sino porque no esta viva cuando la necesitas viva, pero así me he sentido todo este tiempo, tiempo atrás y tiempo delante de haberme encontrado con su dulce rostro. Y he caminado tanto por este mundo, y cuando tengo miedo, cuando estoy verdaderamente asustado pienso en ti, Camila… se que suena exagerado, yo también pienso que soy un mentiroso, pero sólo yo sé cómo me salvó la vida esa mano que me diste para levantarme esa mañana, cuando con tus palabras me diste la fuerza que no tenia, que me faltaba, que me ha faltado toda la maldita vida y que por ello he perseguido fines tan ruines, tan pobres, tan poco. Cuando yo la conocí a usted yo sentí algo que no he vuelto a sentir con nadie más, la salvación, el rescate, la gloria, aquello que los creyentes esperan cuando llegue su momento de partir. Y dejar atrás todo lo que me hacia daño para encontrarme con usted ha sido una se las mejores decisiones que he tomado en mi vida. Cómo me he ahogado en unos ojos que nunca me han mirado como para que usted tan frágil y pequeña llegara a invadir mi pena y dejarme estar a su lado, a su lindo lado. Me acuerdo cuando el sol salió esa mañana en que hablamos, te conté lo que nunca le conté a nadie, como si fueras mi amiga de toda la vida, pues no fui un muchacho de variadas amistades, y tu hiciste lo mismo, como una reacción química, un volcán preparado para estallar y sacar a flote todo ese ardor que guardaba. Y te vi… Cuando te vi, no fue como ver a la gente de la que estoy tan acostumbrado fue ver a alguien que quería verme. Imagine eso, imagínate eso, yo que siempre he deambulado por las calles solitarias mientras oscurece huyendo de los perros furiosos mientras persigo manzanales con nombre de mujer, mujer hermosa y dañina que no debí haber conocido, porque aunque me ha dejado oro en el pecho, también me ha causado terribles dolores, como la selva cuando se quema, y queda el humo y oscurece el cielo. Tú has cambiado aquel hombre que he sido, tan asustado, tan pequeño, tan triste, y sin pensarlo dos veces me miraste y me extendiste los brazos, en ese momento aquel cielo se abrió, la luz vino de nuevo, y este llano pobre se reverdeció intensamente. Tan intenso como su abrazo, dulce es su piel, me sabia azúcar su cercanía, y cuando la levanté a usted para apretarla fuertemente se sentía tan liviana, o era yo el que carecía de peso, o eramos los dos en aquel instante de fervor desconocido; porque nos perdimos en tal instante de encuentro, pues la sentí como un peluche hermoso que a su vez me sentía a mí. A mí, ¿cuando alguien me ha sentido a mí? ¿A mí? Por fin alguien me ve y no se ve a si misma en mis ojos… Y caminar con usted fue un paseo, el cual no he podido recuperar, ni colgando de unas mejores manos que las suyas, porque sus manos son tan pequeñas y las mías tan grandes, parezco tranquilo pero se me agitaba el corazón cuando te visitaba, en tu casa, al frente, aquellas escaleras que conocieron nuestras historias y tantas risas. Cuando salí a caminar con usted no recordé el mundo que en algún momento de derribó, tanto, que al pasar al lado de Natalia que misteriosamente se encontraba recorriendo esos lugares, ni mi corazón se arrugó, ni mi pena despertó de el ensueño en que la tenias, ni estaba seguro de haberle visto en algún momento, Natalia, una jovencita por la que en su momento hubiese llegado hasta el asesinato. Y junto a ti no volaba, por fin aterrizaba en el mundo en el que siempre estuve pero no conocí tan de cerca hasta que llegamos caminando hasta una pequeña construcción, donde nos sentamos en el barranco de tierra amarilla y piedras recién movidas, tal lugar estaba tan abandonado que sólo había un lugar para sentarse, y no cabíamos los dos, pero no te dio vergüenza alguna de pegarte a mí, de casi sujetarte a mí para no resbalar, ¿Cuándo he conocido algo así en otra? Qué otra podrá tener no sólo tu manera de ser sino tu talento para fascinarme, y en aquel instante me dijiste que te gustaba mi silencio, tan tranquilo, que te hacia una mujer tranquila estar conmigo y yo tan alterado por no saber como agradarte… En aquel lugar, pasaron tantas aves que nos quedamos mirando, el cielo y las nubes que presenciaban mi felicidad, la que nunca yo he conocido de otra manera. Y tú estabas tan concentrada en los pájaros que nos daban sombra, que yo no pude dejar de mirarte, estaba tan sorprendido por tu existencia, y sobre todo por la tregua que me regalaba el mundo en ese instante en que te dejaste conocer. Inevitablemente las conversaciones que en un principio eran para divertirse ahora asumían el papel de cuidarnos, como si uno fuera el terapeuta del otro, y llegábamos lentamente a aceptar que no era lo mismo hablarnos ha hablar con los demás. Y cuando salimos con Erika ese día al parque donde lloraste en las escaleras donde casualmente no había casi nadie, sabiendo que aquellas escaleras están tan colmadas de transeúntes, en aquella tarde no había nadie, y sonreíste, todo el camino lo hiciste, y finalmente te agachas en el regazo de Erika para llorar y yo me doy cuenta que tan linda niña no ha tenido una vida tan perfecta como sus ojos lo demuestran, que no tiene nada que ver su alegría con lo que ha sentido todo ese tiempo que no estuve. Lo que me dio a entender que no soy el único que ha atravesado las desgracias del mundo, reconocer que un ser tan especial como tu también pudo sufrir hasta aún más que yo me produjo el querer hacer algo más por mi, que no es el fin del mundo como hasta entonces lo había concebido. Y finalmente caí en tu boca como el fiel enamorado y entusiasmado por regresar aquella sensación de plenitud que había conocido por algunos cortos tiempos en la vida, pero que me habían dado las razones suficientes como para aferrarme más a este mundo. Y estaba tan nervioso, no sabia si te gustarían mis gestos, pero al parecer yo no fui el único que se regocijó en aquel florecimiento de las sensaciones más suaves y dulces que puede conocer la vida. Y no sólo fue eso, no sólo fueron los días que estuve caminado a su lado, llevándola y dejándome llevar a lugares tan lindos donde por fin olvidé por completo si alguna vez llegué a sufrir. Y nos besamos tanto, que hasta se enfriaba la saliva si permanecíamos más de dos segundos mirándonos, soportando aquel deseo de devorarnos y no simplemente frotar aquellos débiles y suaves labios nuestros, sonrisas de por medio, por donde surgían más besos, roses con mis brazos, mi cuerpo sobre el tuyo o el tuyo sobre el mío y los nuestros sobre la cama, la cama sobre la casa, la casa por debajo del cielo y nuestros ojos cerrados sintiéndose por encima de lo que esta por encima del cielo. Yo no pude dejar de abrazarte, me antoje más y más, me emborrachaba como un alcohólico, un drogadicto, ansioso, tan extasiado, como si yo fuese ellos y no tuviese nada mejor que hacer con mi vida, mas que estar contigo… Camila… Quién pensaría que siendo tan linda me llevarías a ese lugar donde siempre he querido estar, y vimos películas, y arreglé tu guitarra, y te ayudé hacer una cartelera, una tarea, a resolver un problema, a masajear tus pies, a cantar canciones por la noche, y te llevé el celular cuando por accidente se quedó en mi bolsillo, y me quedaba hasta tarde escribiéndote aún sabiendo que debía despertarme temprano para ir al colegio, y dejé de hablarle a Kelly, y deje de hablarle a Mafe, y abandone a Dayana, y estuve en tu cumpleaños, e hicimos la cena juntos, y te ayudé a cocinar la avena que tanto te gusta, y tomé el chocolate que me hiciste el día que tenia gripe, y esperé leyendo un libro a que llegaras de estudiar para poder vernos, y me quedé con tu gorro, y te lleve a un parque nuevo, y a uno al que ya habíamos ido muchas veces, y te abracé locamente, y te perseguí, y te seguía besando, y aunque a veces quería hacer algo un poco exagerado, no quería verte dejar de sonreír, y corríamos juntos, y te cargaba encima mio, y hablábamos de muchas cosas, y nunca me hiciste enojar aún cuando te ponías rara, y siempre deseaba quedarme más horas hablando en frente de tu casa, y me sentía tan capaz para continuar, y vi contigo los fuegos artificiales, y jugamos, y me dijiste que no querías perderme, y yo te dije que no pasará, y luego todo acabó. Me pediste que te besara de despedida, justo horas después de verte llorar incesante sobre mi, ojos rojos, labios secos, y ninguna respuesta, y querías que te besara, ¿Qué clase de pedir es ese? que clase, como puedes hacernos eso, si yo… y te fuiste… Cuando pasaron los meses he intenté interpretar las cosas a mi manera entendí que hay cosas que no se pueden detener como la lluvia, que cae ¿Y yo por qué caigo? Y nunca te maldije, pude haber ensuciado mi boca con malos deseos sobre todas las mujeres que conocí, pero tu no, tu jamás, y a día de hoy sigo sin hacerlo, pues no conocí el daño en los pocos pero maravillosos días que viví a tu lado. Luego me buscaste, yo encantado, no eras la misma. Lo que un día fue un abrazo se convirtió en un puerta cerrada experta en acusarme, me dijiste que estabas con otro, y tu fascinada, y yo. Y yo… A lo mejor fuimos muy felices, ardiendo espléndidamente, pero tu quemabas una etapa, mientras yo veía en ti toda mi esperanza; de ahí a que no te entregué la culpa de nada, siempre fui advertido hasta por usted misma de no quererte de esa manera, es suicida, es estúpido, es todo lo que tenia; tú. Ni una lágrima, pero si el deseo de tu bien, que es también el mío. Y entendí que usted disfrutó las caricias, cuando yo apreciaba tu compañía. Por eso en otros labios eras más feliz, yo con otros labios sólo tuve más problemas, porque volví a caer al agujero donde me habías sacado tú y me habías dejado gozando de la vida que ahora era vida, y no el rencor endemoniado que sientes cuando una mala mujer te aborda los pensamientos. Usted puede que no haya sido muy buena, pero realmente me lo hizo creer y hoy, hoy he sobrevivido con lo que sé de usted. Intenté muchas veces hablarte, pero ya no volviste a ser la misma y yo acepté tu muerte pero no la mía, no la nuestra, pues lo que en un momento llegó a ser un vacío hoy era un lugar lleno de tus recuerdos, entonces seguí con lo mío aún con el deseo de buscarte, pero en vano, nada tenia gracia estando solo, te imaginé, te imaginé he hice de ti lo que fue, pues si ésta vida no me quiere a tu lado yo si lo haré, y yo estoy vivo aún, y aunque también dejé de recordarte, y volví con Natalia fue en vano, usted se hizo más fuerte en mi memoria ¿Sabe que aprendí? Que lo que yo nunca he llegado a sentir a diferencia de ustedes es el enamoramiento desenfrenado del adolescente, tan pasajero, tan volátil, tan consentido en la juventud. Yo nunca me enamoré de ti, yo vi en ti mi futuro. Y en Natalia y en Mafe y en Camila, y en Natalia y en Mafe y en Camila, y así sucesivamente, saliendo de la boca del león, para meterme en la del tigre, ninguna de ustedes podrá comprenderlo, no sé como viven y no sé quién tiene la manera correcta de vivir, pero jamás podrán entender esto que pienso y que siento muy adentro y que constituye mi vida, mi personalidad, y todo lo que soy. Y ellas me han quitado todas las vidas del gato que soy, y usted me hizo alguien, usted me ha hecho alguien feliz. Se lo expliqué a Natalia y me dijo que yo era tóxico, estúpido, tan ilusionado en el sentimentalismo inmaduro propio de alguien sin autoestima y falta de experiencia, me dijo que me alejara, no era de su bien. Y Mafe no dijo nada, me dijo que no me lo creía ni yo mismo, al final no dijo nada, y yo no le voy a explicar nada a usted Camila, jovencita que ahora es una maravillosa mujer llena de oportunidades, y problemas como todos, pero hermosa por no rendirse, porque sé que no me recuerda, ninguna lo hace, sólo yo soy el que me empeño y me esfuerzo en este hecho insólito y tan ilógico para la naturaleza humana, donde no sólo me aferro intensamente a una persona como tú, sino que la convierto en la esencia fundamental en la que un vehículo como mi espíritu puede seguir funcionando. Su compañía no sólo me ha transformado también me ha permitido vislumbrar un mejor futuro, un mejor camino, un mejor lugar para vivir, y estoy derretido en todo lo que eres, no estoy para nada enamorado, estoy absolutamente consciente que lo mío sobrepasa el romance y las necesidades químicas del cuerpo, lo mío supera hasta el amor mismo, donde aunque usted no existe vive latente en mi pecho, porque lo que yo amo no existe, yo recuerdo lo que alguna vez llegó a ser usted y después de eso no existe más, por ello me he tomado el tiempo de escribir todo esto, porque no soporto esto, porque me siento terriblemente mal, saber que construyo una ciudad donde no vive nadie, pero como ellas usted no vendrá, no tendrá ni piedad, ni ganas, ni sentimiento, ni lástima por mi, todo acabó cuando te fuiste, cuando me fui, cuando no volvimos hablar, y no quiero que regrese, sé que no es feliz conmigo, ni usted ni nadie, pues mi manera de ser supera los convencionalismos de esta sociedad, donde soy aterradora mente obsesionado. Pero pensándolo, no soy el único en esta guerra, en esta batalla, tanto hombres como mujeres se han sentido derrotados, es un recorrido estúpido pero inevitable donde vives con una herida el resto de tus días y nadie sabe para qué, sólo se sufre, sólo se vive, sólo se siente como duele. Pero entonces para qué estoy aquí, con qué motivos, qué me empuja a contarle esto. Pues que necesito desahogarme de esta necesidad suya en mi vida, últimamente me he encontrado muy mal por estar tan sumergido en esto, y sólo falta usted, sólo usted es el último bache en la carretera, con todas lo resolví, se los dije, y no lo entendieron pero me saque este nudo de la garganta, y no vine a pedirle disculpas, si bien no fui perfecto sólo tenia las ganas de hacerla feliz a usted y con ello lastimé sin querer a otra gente, pero a ti no, y si lo hice fue la consecuencia de un muchacho con poca experiencia con la gente. Tampoco vengo a juzgarla, ni a culparla, ni a ensuciarle las manos con su pasado, uno que seguramente tú y todo el mundo entierra, pero yo no, y nunca pensaré hacerlo, porque usted no me hizo daño ni siquiera ciando se fue, y si no la maldije antes mucho menos lo haré ahora, siempre será bonita y dulce aunque se halla marchado en busca de aventuras más asombrosas que las que yo le podía dar. Vine para confesarle mi amor. Algo que usted no le importó, pero a mi si, y esto no da de comer, no te hará más feliz ni resolverá tus problemas pero los míos si, porque necesito decirle que la amo, como se los dije a ellas para que se puedan ir de mi y quedarme con todo lo bueno y lo real como también lo que pasa todos los días en mi cabeza como es su dulce cuerpo descansando con el mio, en mi cama, donde me tumbo todas las noches a imaginarte a ti, y si me despierto me digo que es para encontrarte, y si me esfuerzo te veo a mi lado no sólo llevándome sino acompañándome, haciéndome creer que es posible. Y por eso te amo, porque vas conmigo, porque no fueron sus besos más fascinantes que su sonrisa, y eso no es ni la mitad de lo que me maravilla cuando escucho sus palabras. Así que tal esfuerzo necesita de honestidad, una inevitable necesidad de amarte, pero no puedes saberlo, no puede saberlo nadie, sólo yo, donde se que significa, no como tú y todas las mujeres que he conocido que desperdician tal significado y renuncian a este desbordante sentir en el que me encuentro. Y cuando usted se entere de ello yo por fin tendré descanso, porque no me ganaré nada de su parte, pero tendré la satisfacción de haberle dicho lo que pensaba, el día en que dejé de verte, que me dijiste debes alejarte, y no me diste respuesta, y yo me quedé con mil preguntas, y con mil motivos para buscarte pero te entendí sin entenderte y hasta el último amargo segundo de nuestra última salida yo te saqué a flote una sonrisa, haciéndote entender todo lo que me has dado, una inmensa calma. Y todos los días pienso en ti, y no te dejaré, porque es lo poco muy bueno que le ha ocurrido a mi vida, y no soy como los insensatos y crudos que dicen gracias, yo digo lo que nunca nadie se ha atrevido a decir. Y ahí me resuelvo, y ahí he de llorar por fin las lágrimas que nunca te mostré, y es justo ahí donde te entrego lo que te estuve guardando todo este tiempo. Vayase, siga con lo suyo, ni me lea, ni me recuerde, ni piense en mi, pues es la primera vez que hago algo por mi, y no por alguien. Que es escribirte sobre amarte, sabiendo que tu nunca podrás hacerlo.
Me pregunto cuando dejaré este rumbo, esta travesía tan solitaria, y saber que sólo me tengo a mi, solamente es un silencio nunca comprendido e inagotable. Sólo estoy yo para aconsejarme, abrazarme en el vacío de esta vida que me toca, que tengo, que no hay otra, que no puedo tener otra como no puedo tener a otro yo, como no tengo nadie con quien hablar… Y recuerdos inundan mi alma, llueve todos los días pedazos de los días que viví contigo, y vivo mojado, vagabundo sin donde esconderme del amor que te di en algún momento. Y lo que me aterra, lo que me preocupa, es que nunca ha sido tan tarde como lo es hoy, que ya no hay tiempo para reparar platos rotos, que ya no hay nada más que el trágico destino de mi alma anhelando la tuya. Y nada podrá cambiar esto, como nunca nada ha logrado que yo deje de quererte, añorarte y darte lo mejor de mi, para que, con que fin, con que objetivo estuve regalándote flores, las mismas que hoy veo tan muertas, pero si no fue tu culpa dejarme morir, yo no tenía ojos en aquellos tiempos para presentir el peligro, el riesgo que implicaba atravesar un río demasiado hondo, profundo, no pude predecir mi muerte, y me sumergí por completo, y me arrastraste contigo hasta lugares que no conozco, y después, aparecí en medio de la nada, sin idea quien soy y sin razón de por que no estas. Por eso nunca te heche la culpa, el motivo de nuestras lagrimas si es que alguna vez lloraste como yo, nunca te maldeci, yo sabia que no estaba en mis fuerzas poder soportar la marea de tus ojos, los que brillan, los que relucen, los que miro tan atentamente, no pude ser tan fuerte y morí, amando, amándote he muerto, y hoy padezco de frío, me quejo por este espacio devastador, donde soy fantasma, donde no tengo cuerpo, donde no soy nadie y el viento me trae y me lleva como el polvo, donde sólo tengo la certeza de haberte querido, y el mal sabor de no poder hacerlo más… Estoy honestamente delirando, imaginándote en todas partes y yo no puedo hacer nada, no tengo a nadie, no hay nada en mi vida, y la muerte ya no me sorprende, ya he muerto, ya no hay nada de vida en mi, desde que te dejé de ver…
Mírate tan feliz, todo lo que nunca tuviste conmigo, a lo mejor fue lo correcto, que mi exilio y tu distancia de mi fue la mejor de las decisiones, ahora eres feliz, en otros brazos, y parece que eso no le hace daño al mundo, a mi un poco, pero al final me llena de orgullo saber que estas bien. Y si no vuelves, y si yo nunca regreso, podré morir en paz, no te di una buena vida, pero alguien más si lo hizo, lo hizo bien, no como yo. Y al final sigo sin saber que hice mal, pero no importa, ahora estas bien, y es lo único que me importo realmente…
Qué haré para ganarme tu amor, qué haré para no dejarte, no perderte, no abandonar lo conseguido si es que lo consigo. Qué haré entonces conmigo y contigo, si hay tantas barreras de por medio, si yo promoví la renuncia, el silencio, si yo fui el primero en huir. Entonces… Qué ocurrirá, si no hago nada. ¿Acaso terminaré devorado por este mal entendido? Supongo, no hay salida de esta soledad. La derrota como se suele llamar, soy una derrota, y peor que eso, no hay nada ni nadie que pueda cambiarlo.
No he sido el único que se ha tumbado en el suelo lamiendo por años la misma herida. Y no seré el último, parece ser obra del tiempo que el hombre deba encoger su corazón de vez en cuando, pero algunos hombres, tal como ha sido mi suerte, se lo toman muy en serio, y lo que comenzó con una leve cortada hoy es un agujero por donde te puedes asomar a observar océanos de lagrimas y un silencio, un silencio terrible, vacío donde no hay lugar para nadie más que la dulce melancolía.
Después de nuestro efímero encuentro donde me encendiste y te fuiste dejando la vela y su enorme brillo, que se consume en la profunda oscuridad. Me llené de nostalgia al verte ir… Tu partida, fue mi pena porque tu presencia es la única entre todas las demás que me hace sentir débil, tan maravillado, vulnerable a su querer, me permite ser hombre. Con el poder de deslizarme en tus brazos sin poder sentirme inmortal; ahí en tus besos donde puedo ser el rey y al mismo tiempo el esclavo, pero de tus caricias. Yo que de fuego y lamento me consumo. En tu ausencia escribo, aunque este amor no se expresa en palabras; es tan corto y eterno, tan grande y doloroso, tan fuerte y débil, que permitame usted expresarle mi más dulce amor, porque usted logra de mi, una palabra que nadie ha podido merecer hasta ahora. Tú, reina de mis pensamientos inspiración de mi poesía te dedico mi tiempo, mi mas valioso tesoro, mi vida, que está en tus manos porque de ti me he enamorado. Y llenas de dolor mi alegría y de felicidad mi tristeza, ese vinculo perfecto entre la vida y la muerte donde puedo existir sin mitades, tu, campana de mi amor que tiembla a cada anochecer, cuando todos duermen y yo sueño despierto porque mis labios saben a ti y mis dedos tienen la huella de tu piel, como mis brazos el calor de tu cariño. Y no existe dolor ni placer mas grande que extrañarte, pues amo cada parte de ti porque de ti encuentro lo enorme, lo bello, lo que necesita un náufrago perdido como yo en medio del mar. Cuanta soledad me quitas cuando pasas por mi camino, ya que no hay presencia mas ardiente que la tuya, mi vida, mi amor, duerme, y descansa bien, yo no podré, porque hoy haré derroche de poesía con tu recuerdo…
Me preparo, voy alistándome, sé perfectamente que sin usted no seré feliz.
Han pasado años, y aunque tenga la memoria empañada, el placer de estar con usted siempre vivirá conmigo. Siempre te amaré, aunque aquello me quite la vida poco a poco. Y pareceré infantil, y podré perecer de forma innecesaria, y no se los negaré, pero con ello también estoy diciendo; que conocerte ha sido el orgullo más grande, el motivo más especial del por qué estoy aquí.
Pienso en ello todo el tiempo; su vida, no sé qué será de ella, pero de lo que fue estoy completamente seguro. Tan intrigado por esta rara forma que tengo de ver el mundo que si no es por ti ni lo veo, ni me doy cuenta, que estoy vivo. Y digamos que el mundo tiene peculiares formas de recordarme tu aroma, uno que perdí cuando era joven, pero se mantiene estancado y florecido en mi alma, donde no sé que más hacer contigo, a donde llevarte o como tratarte, lo único que comprendo es que gracias a tus palabras hoy soy un mejor hombre, y me temo aceptar que gracias a tu compañía hoy soy feliz, porque si le soy honesto, no he sabido conocer el placer de este mundo lejos de ti… Lo que usted me dio fue lo único que necesitaba para seguir aquí, soportando este vacío en el que vivimos todos, enjaulados como una lata de sardinas, y usted fue mi libertad, ayer, y hoy, donde pensarte es mi único vicio, adicto me he vuelto a su recuerdo, y si es preciso enloquecer para no perderte de vista no le tendré miedo alguno, porque, no sé para que sigo respirando si no es para compartir mi aliento con el suyo.
Este jardín mal aprovechado, flores y hermosos colores olvidados por la gente, y mi sentir tan humano, medio enamorado y delirante, algo que me llevaré a la tumba, pero hoy no, dan ganas de querer lo que no se deja, como las aves que no quieren ser atrapadas, y un atardecer no se aprecia en una foto. Me temo que mi caminar no me llevará a tu lado, aunque realmente lo hago para eso, y si el mundo es eso, un devenir, un tiempo para todo, un juego de fichas con el color de tus ojos, un movimiento tuyo y late mi corazón, otro, y deja de funcionar, un experimento de dios, alejarte, retenerte, amarte. Vaya… soy rata de laboratorio, ojalá pudiese escapar de estas rejas hechas con las letras de tu nombre. O porque no asumo la derrota no me retiro, aunque sé que de este juego no quedan más apuestas y persisto en quedarme, vigilando el pasado, donde te conocí, y fue mi proeza más valiosa, trofeo que se lo come el polvo, una taza de té fría en mi mesa, no la dejo, no me apetece, no sé si podría, pero me encanta mirarla, como esa hay muchas, pero esa me gusta, aunque en la mesa no halla nada. No dejé de vivir, no me apetece escoger lo equivocado y terrible, es lo que hubo, que por más que insista no hay que lo supere en mi futuro. Futuro lleno de ella; una vida resuelta, fascinante. Una vida sin ella, el silencio… Me han dicho que a las personas que les gusta la música, no es porque les guste realmente, sino que quienes hablan, les proporcionan compañía, a lo mejor a nadie le importan los tonos y los instrumentos, sólo quieren hablar con alguien, alguien que los entienda. De ahí a que no te quiera sólo por bonita. Es química; reacciones repentinas. Física; dos elementos que por necesidad y de forma inevitable van a un mismo lugar, como un agujero negro: para destruirse. Los jóvenes que se plantean el sentido de la vida, les hace falta parte de ella, parte de alguien como tu, para enseñarles a ver algo que no está, y vivir contento con eso, sin necesitar más respuestas que un aroma inolvidable…
Que determinismo, clase, porte, que galantería, que hombre, que descarado. No suelo guardarme las ideas más interesantes, ya que me fascina ver realizada mi obra, y me exaltan de cínico, abusador de lo exagerado, escondido en lo supuesta mente hecho, y no tengo con que defenderme, más bien aporto a sus principios, como una certeza de que mi tiempo no se invertirá en diminutivos, debo ser extenuado, continuo, colapsante y recordado así sea en la derrota; un acosador de las posibilidades, que lleva al límite toda ocasión, de no ser así lamentaría mi valor para amar, porque mi victoria está en ganarme la sonrisa de una mujer.
La estaba atrasando, en encontrar lo que quería, y yo sólo le daba lo que necesitaba. Mal mio en persistir tanto, y una pena que haya sufrido por eso, sabiendo que yo nunca sería su deseo.
Pensé en la tarde, algo que se dice a menudo, y no me ha parecido, hasta esta tarde. Imaginé una obra máxima, una realización suprema de mi corazón, en una nueva mujer, delicada y lista, tan sufrida y consentida como yo, una dama enfurecida que me observe por la casualidad del destino, una nueva historia, algo sin fin. Sin fin… Y ahí me detuve, yo si tengo fin, si no hay fin hay muerte y si hubo muerte entonces nunca hubo nada. Entonces, para qué una nueva obra, si las anteriores fueron tan fascinantes, tan marcantes, inolvidables, que no sólo me han acabado, sino que me dan esta y las vidas que sea, fueron historias trágicas, aterradoras, y bellisimas como sólo una mujer puede serlo. Así que no comenzaré nada nuevo, aunque en ello desaproveche más aventuras soñadas, siento que ya tuve las suficientes, y mis huesos ya crujieron lo prudente, no quiero darle el polvo a una bella flor, pues ya esparcí todas mis gotas en noches anteriores.
Quiero que me olvides, si es que alguna vez llegaste a sentir algo por mi, y si no, también, quiero que me dejes en la tierra, donde lo innecesario muere, no quisiera que cargaras con mi castigo; el de tenerte a cada minuto en mi cabeza, y no poder sacarte de ahí jamás…
Tú tan tiempo y yo que me detengo…
Estoy en el borde, no me atrevo, pero lo observo obsesiva mente, no quiero, pero debo, o al revés. Ella me aprieta la mano, no quiere, no puede soltarme. Tengo el frío, producto del peso del mundo, me molesta, me fastidia tanto, ya no tengo fuerza, ni coraje, soy una paloma con las alas rotas, y ojos tristes, mirado hacia el agujero, y ella me mira, Camila nunca quiso algo diferente a mi bien, mi bien, es su nombre…
Nada, nada, que me pudra, que más voy hacer, mi vida es un regresivo y tormentoso remolino, a la mierda, que se hundan el dedo del medio cada uno de ustedes, porque de verlos me dan ganas de levantarme en la madrugada a darle fin a todos sus cuerpos echados y miserables, tanto, como para hacer sentir mal a los demás, como me han hecho sentir, vagabundos de corazón, ustedes, enriquecidos de maldad.
Aterrador el amor, pero mágico es su nombre, una cima a la que todos se atreven, todos caen de ella, y pocos vuelven a subir. Yo ya no me atrevo, pero me llevo el triunfo de haber subido, aunque de súbito me dejara caer. Una vergüenza, un hombre triste… Ellos me ven cansado, obeso, pesado, serio, aburrido. ¿Qué ha sido de mi? En dónde habré quedado… Si es que en algún momento fui algo, alguien. Por qué mi llanto, mis lágrimas, mi inevitable aullar y gemir de pena, como un niño, un animal herido, una mujer abandonada… No siento que este protegido por algo, ni mi familia me cubre la espalda, ni mi amor es el filo de mi espada, soy quien padece las circunstancias del mundo, y no hay nada que pueda ayudarme, solo y solamente yo soy las hojas que me cubren de las lluvias. Y me mojo, y no hay sol que me caliente, y mi tierra esta pútrida, y mis recuerdos polvo, y me siento cansado, acabado, nada que me empuje, que me mueva, que me lleve algún lugar, el hecho de no tener ningún hecho, ni logro, ni sueño, ni dueña, solo el pesar de no ser algo, alguien, no tengo nombre, ni definición, soy nube que se esparce en el cielo, que todos ven, que nadie ve, que no importa. Soy como el que se ha muerto desde hace años, siglos, y no queda ni su ataúd. Lástima tengo de mi, donde un día sólo era gloria, dicha de ser materia incontenible desplazándose en sueños. Hoy soy una niña asustada, en medio del bosque y oscurece, y los lobos se acercan, y nada que hacer, nadie a quien acudir, sólo yo y mi vista a la pronta muerte, lenta espera, triste final.
Podré quedarme aquí, con los sesos pegados de la pared, haciendo uso de mi única salida, demostrando mi cobardía, y no teniendo que deberle a nadie. Una bala, una dirección exacta, en mi cabeza, justo en la mitad, donde algún día sólo habían ideas, hoy son tormentos, y la mejor forma de sacar la basura de la casa, es quemando la casa. Y todo acaba, y ya nadie me molestará, y no deberé correr, ni buscar lo imposible, ni amar lo inalcanzable, sólo necesito un ligero movimiento en el gatillo, y todo queda solucionado, el laberinto se cae, las puertas se rompen, las ventanas se despedazan como los pedazos de las pinturas, trazos que se derriten, ya no queda nada, solo mi sangre, que se enfría en el suelo. O puedo persistir en este infierno, y aunque sé que no podré besarte nunca más, si podré recordarlo, una vida entera de aquí en adelante, para pensar en ti… Que tendría la idea de buscarte, para hacer de mi vida algo valioso, que no tenerte ha provocado lluvias heladas, que mirarte me hipnotiza, me deja ser feliz su calor y con el quiero morir, que pegado a ti quiero estar hoy y mañana, que su latido sea el mio, y cuando no estemos juntos sea su nombre la razón de mis poemas, su voz mi canción favorita, que calma el enredado vivir que me ha tocado.
¡Vamos! Viejo Sancho, que aunque la bravura de las hierbas altas, amenacen con la fiera vista de nuestros poderosos corceles, nada podrá evitar que seamos leyenda en este páramo maldito de nuestro destino.
¿Disculparla? Con una pizca de atrevimiento le sugiero no padezca tales síntomas, que ha sido el mejor tiempo para extrañarle. Usted y la lindura que le pesa bien se sabe deben caminar hacia rumbos desconocidos, no seré yo la excepción que evite que los lugares lleguen a usted jovencita de mis buenos sueños, porque de ser así el lamento mas terrible me abordaría, pues que error posee el disfrutar ver una avecilla en una jaula. Si es bien cierto que usted no puede escapar de mi corazón, o más bien, no quiero, pero por tales razones aun mayor debe ser la necesidad suya de vivir, y no precisamente bajo mi cuidado. Algo que en definitiva vengo explicándole, que no vine exactamente para rodear con mis abrazos su cuerpo, que también, pero vine más para deshacerme de este agobio de querer decirte algo y no llegar hacerlo por el miedo que produce el astio vuestro como única respuesta, por ello, es mi obligación como buen hombre con definidos valores sentirme orgulloso cuando tan bella dama siente el llamado de las cosas, y aunque fatal, pero necesario, veo como te lleva el rio de este mundo, lejos de mi. Sin olvidar con la certeza que corresponde a este sueño mio de saber que expresas con sonrisas las circunstancias de un mundo que suele producir los mas espantosos sentimientos. Algo que en definitiva me ayuda a existir, es recordar que ya no necesito poseerte para adorarte. Por lo tanto, la invito cordialmente a alejarse de mi sin remordimiento alguno, puesto que la habitación de mi alma jamás conocerá el olvido. Y su libertad, será un motivo más para no darle cabida a el delirio que me consumió el día en que pensaba aprisionarte para siempre, por el miedo exagerado de no querer enfrentar este mundo solo. Ahora si puedo, ahora si quiero, el tiempo me ayudo a pensarte, de buena manera.
Saber que tengo a alguien así de compresivo conmigo y que sin decir nada el ya me entiende, cuando digo algo mucho más… eso es verdaderamente delicioso, es que todo esto es por el hecho de que no sabemos que queremos pero se que solo usted puede dármelo. Algo que me aterra en gran medida, ¿te acuerdas lo que me dices, que sólo eres un espejo y en ti reflejo lo que soy? Hasta llego a pensar que nunca te he visto, sólo eres un medio para desahogarme, hacer de mis pasiones algo palpable, dar sin medida mis sentimientos porque los demás ríos ya no fluyen y en ti encuentro tiempo de sobra para dejar ir mis penas. Pienso que no te amo, solo amo tu forma de regalarme tiempo, que es lo mismo a darle comida a un miserable. Me apena si quiera pensarlo, que no eres tu, sino lo que tu me das…
Es el pensamiento de todos, es difícil, no imposible, conlleva sudor y fracasos, pero la meta sabe a dulce merecimiento, luego la muerte, así es la vida. Por mi, ausentese, evadase, estudie, investigue, no se excuse, no la ato, no me molesto, no me preocupa, suficiente con la compañía que me ha dado, añoro sus antojos, yo no los tengo, le deseo la libertad suprema, que haga, que venga, que diga que hable que se calle, por mi, descubra, entreténgase, averigüe, aprenda, piense, estrés, ansias, maldad, inocencia, futuro, metas, por mi, logre, consiga, llegue, diviértase, ame lo que haga, la invito, pero no lo necesita, usted sabe, cosas que yo no. Yo la quiero, desde siempre, nunca la olvide, ni un segundo, sabia que seria importante, no se asuste, no soy tan entusiasta como solía ser, conozco el futuro, se por que no nos hablamos tanto tiempo, se por que cada uno escoge sus caminos, así que no voy a arrebatare las opciones como solía hacerlo, mas bien, le brindo mi imaginación, espero le guste, porque no he tenido un día tan bueno como hoy desde, ya ni recuerdo, creo que no he tenido un día tan bueno. Postergo mi vida, ya se acabo desde hace mucho, mis recursos son limitados así que no espero mucho a cambio, si quiere responde, si quiere no, pero ya le describí el por que mis escritos, mis muchas palabras, mis disparates, estoy solo, y no es lo malo, estoy solo e histérico, por eso vengo, la llamo, soy gentil, no voy abusar de su confianza, puede estar tranquila, soy inofensivo ahora, pero soy extraño, mis principios son indiferentes, mis decisiones arrebatadas, no soy muy valiente, me tome una semana juzgando mi carácter frente al suyo, un mes pensando que si hablarle era buena idea, tres años averiguando una manera de acercarme a algo que no me hunda mas en esta condición de conversar con las paredes, con la noche, con mi silencio inagotable. Así que si le hablo fue porque realmente fue oportuno, no pienso hacer mucho, no tengo nada maravilloso que ofrecerle, pero yo si me siento maravilloso obsequiándole mi tiempo, a otra persona no daría el mismo resultado, créame, se lo que hago, no dude, ni se deje llevar, usted sabe tanto como yo cuando es el momento, fue terrible abandonarla, pero así es la vida, cosas necesarias e inevitables deben ocurrir y tal vez ya lo entiendas, y te volveré a decir adiós en algún momento, espero que no, pero nada es para siempre, su compañía es hermosa, hoy mas que nunca, en mi adolescencia, en mi juventud, y ahora en mi pronta adultes, es su magia, usted es bonita y se lo agradezco, por eso no debe asustarse, ni sospeche asuntos inoportunos, estoy encerrado, así que no me tema, solo busco sus palabras, me encanta escribir así que no se preocupe si no me imita, si no alcanza mi creatividad, yo no busco que se iguale, sino que lo disfrute, tanto como yo disfruto recordarla…
Exigencias artísticas de toda clase, es todo de lo que se nutre el mundo, lo nuevo, lo raro, lo mejor, lo extremo, emocionante, arriesgado, violento, estúpido. Como si la vida fuera una aventura. Una historia donde unos ganan y otros pierden, ¿acaso no puede ser bueno todo, o malo todo? Siempre una guerra, una lucha, una búsqueda de algo; de lujo, de placer, de quien da más, de quien es mejor, de quien y qué hace con su vida. Como si no les gustara la realidad, donde cada uno es una rata de laboratorio, confinada a este pedazo de tierra mugrienta, sobreviviendo a los oleajes pestilentes de la alcantarilla. La vida es una burla, pero vivirla con ustedes hace que ya no me de risa.
¿Qué fue eso? Nada amigo, solo un fallo en el sistema. Pero parecía tan real… Nada, los sueños últimamente son muy impactantes, tal vez solo era el recuerdo. Si, seguro…
Yo me acuerdo cuando tenia 19 estaba tan tranquilo, la vida resuelta a tan temprana edad, nada podía preocuparme pues tenia los logros mas grandes, a los que ni siquiera aspire a llegar, logros que ante ojos ajenos son como tener un puñado de arena, pero ante mi, solía ser lo mas especial, y recuerdo que atesore todo lo que en un momento me hizo sentir vivo, de bueno a malo, de terrible, a lo fantástico, que si volviese al lugar en donde ya estuve, fue porque realmente conocí mi alma en ese momento, ese momento, en que te conocí… Aunque las duras rocas del fondo consigan aterrar mi pequeño corazón, deberé ser valiente para seguir naufragando en este minuto eterno de mi silenciosa vida.
Eres de esas mujeres que solo se conocen una vez en la vida, que llega y en vez de utilizarme, lleva sus manos hasta la superficie de mi corazón y lo desempolva, le da el soplo del cariño y la sonrisa hermosa que solo puede dar una mujer como tu… Nada de lo que haga, y ningún lugar por mas sorprendente que sea, será mejor que tener tus cálidas manos de niña en mi pecho, recordando le a mi vida que no todo es una perdida de tiempo
En cambio maria suena a un poema, recuerdo melancólico, nombre de la que nunca se obtuvo, demasiado caro el precio, el valor de su nombre no es para que sea mencionado por cualquiera, maria es nombre de barcos, épicos naufragues, tormentas que nunca la hundieron, barcos que venció, batallas inolvidables, maria es nombre de historias aterradoras y románticas, de lugares lejanos, hasta de dioses, maria es la novia de los libros de los poetas desgraciados, maria es un nombre muy famoso, conocido, pero letal.
Créame cuando le digo, que mi palabra posee mas voluntad que el mismo universo, y desde que su maravilloso pensar encontró concilio a mi lado, yo jure con mi vida proteger y preservar ese dulce aroma del amor que comenzó a crecer en mi, en ti y en el resto de nuestros días en este mundo. «Mi existir despojado, que pretende alojarte un lugar para que tenga cabida tu luz; como las ventanas en las paredes de mi espíritu.»
Es que en realidad es la naturaleza del amor el ser egoísta y posesivo, para obtener bienes y elementos de provecho, para conseguir aquello que precisa la satisfacción. Mas sin embargo solo es una de sus primitivas faces, y por ello me disgusto, hasta me decepciono, ya que dispuse de mucho tiempo de mi juventud para desenterrar todos aquellos saberes, que entre otros, había uno que trataba al amor como máximo fundamento, una especie de elixir de la juventud, que su manejo debía ser muy cuidadoso, y su búsqueda era el encuentro de dos seres excepcionales que se encaminan a un mismo lugar, no la necesidad ni el capricho; esa entrega desmedida provoca dolores excesivos, habría que perseguir la luz en el momento que se entrelazan dos miradas y se sostienen, se funden, se dispersan los colores que le hace falta al mundo y le da un respiro al ser que tenemos dentro. Pero no soy capaz, me falta la fortaleza para proseguir mi camino sin depender de aquel sentir, me falta el saber para amar lo que eres y no lo que quiero, porque todo lo que he hecho es amoldar mis miedos a alguien, el temor de permanecer solitario toda mi vida… Hago que todo lo que este en mi adore todo lo que esta en ti por voluntad, por exigencia, por disciplina de mi corazón, porque te necesito, te quiero en mis días para quitarles el peso de lo aburrido, de ti sustraigo lo bello del mundo y contigo adquiero el poder para tener los pies en la tierra y el alma en el cielo, sin ti, o sin ellas, sin algo, no tengo razón de ser en este mundo. Y por mas que busque en mi un remedio para eso, no encuentro más respuestas. Todo se reduce a que tengo el deber de amar todo en mi camino, y que no soporto mas cargar con tanto, que me siento pleno e infinitamente agradecido por tenerte a mi lado, pero me entristece no poder ser para ti lo que eres conmigo, tu te entregas linda y comprensiva, sin pasados, sin lastres, sin cadenas, sin preferencias, con la despreocupación que caracteriza al ser libre y contento, y las ganas de quererme con facilidad por ser un simple hombre que tu encuentras inigualable, no como yo, que te veo y te coloco un título, un nombre, una preferencia, te veo como un rescate, una salvación para este naufrago, una mujer para mi, que esperaba, que añoraba, no por ser quien eres, sino por la desventaja que sostengo cuando no tengo nada. Y no solo eso, también te obligo a cargar con mi pasado, te enseño todo mi dolor para que lo remedies con tu compañía, y aunque me sanes y me abraces yo nunca volveré a ser el mismo, ellas son el tatuaje en mi piel y tu no, porque ellas son cicatriz y tu jamas me harías daño, de todas formas ya no tengo espacio en mi piel que no haya sido lastimada. Y tu sabes que es estar aterrado, asustado hasta la muerte, imagine todo eso de mi, por no ser el hombre que conviene para ti…
Es lo poco que puedo esforzarme, por buscar que seas feliz, porque yo tengo lo que quería, su delicado cuerpo me ha colmado para vivir tranquilo, y su maravillosa mente me tiene encantado y alegre, así que mi única preocupación es que yo, a pesar de tanto pasado, y tantos defectos, pueda darte una buena compañía, y es bastante notable el tiempo que me tomo en explicarle lo hermosa que es, lo sé, sólo son palabras, pero éstas detallan lo importante que eres, así no te vea y solo me vea, así no te ame y solo te necesite, así no sea capaz de estar sin depender, solo intento hacerle entender que ni ellas, ni el mundo, ni sus cosas, hará que yo me vaya, y mientras esté aquí para ti, haré todo lo posible y daré todo lo que disponga mi espíritu para cuidarte, amarte y protegerte. De faltar a mi palabra, solo daré razón a mi venida innecesaria a este asqueroso planeta.
Leyendo, estudiando, tendiendo la cama, no, es muy temprano, creo que te acurrucaste en la cama, abrazas al conejo de felpa, escuchaste un perro matar un gato, no es el tuyo, porque acaba de pasar por la ventana observando la tragedia, tu duermes, con los audífonos puestos, escuchando rock, te rascas una pierna, te volteas, te ruge el estomago, pero el sueño vence… silencio… un respirar pausado, suave, nadie te ve, sola en tu cuarto, olor al sol calentando el viento, deseos de no despertar, las canciones cambian, el reloj gira, y tus ojos cerrados, tu cabello recogido, ocultándose al día, tus uñas sin pintar, sigues respirando, tu corazón latiendo, tu sangre caliente, tu piel blanca, tu lunar en la mejilla, solo un silencio abordando el mundo
Hasta pareciera antipático, mesquiso, eludido, transitorio, hasta pareciera que somos desconocidos, distantes, apagados, poco confiables, hasta pareciera que no nos amamos. Pero nada es lo que parece. Somos adultos, nuestras vidas son el fruto de una civilización explotada, demasiado enjaulada en su industrial aburrimiento, nosotros, las fichas que sostienen el armagedon del tiempo, poco nos queda para dar, si todo lo que somos lo invertimos descaradamente en lo que necesita el mundo de nosotros. Si todo lo que queremos es un momento para respirar, si todo lo que tenemos son horas y horas de una desmedida esclavitud, una vida siendo lo que no se quiere, es irrisorio pensar, que después de eso se tengan ganas de amar, que después de hacerse falta a si mismo se pueda llegar hasta donde el otro nos espera, que a su vez, solo quiere esperarse un mejor futuro. Es natural este desabrido momento, nuestros silencios son cómplices, ya no hay mucho que decir, no porque no tengamos cielos donde volar, sino porque nuestras alas no suelen practicar muy a menudo. Y para ser mas claros, es aburrido pretender encontrar un lenguaje con letras sabiendo que nos entendemos tan bien con nuestros besos. Nuestros labios escurridizos abrazándose hasta fundirse, extraño eso, lo extraño como extraño mi vieja vida, tranquila y despreocupada, tu debes de sentir lo mismo, el mundo es gris en esta época, y nuestro amor de lejos no es la cura, aparenta serlo, pero el cansancio es una nube negra mojando nuestra linda flor. Y aunque todo aquello sea una cruel desventaja para lo que se supone son dos almas lucidas y realizadas, seguimos aquí, esperando, pacientemente a volvernos locos o a conquistar el mundo. Mi mujer, cuanto aprecio su presencia en mi vida, a veces la pierdo de vista, y al momento de recuperar la me lleno de una fuerza inexplicable, cuanto deseo llegar a ti y hacerte entender este intenso anhelo de vivir a tu lado… Mientras, sigo en mi lucha, diaria, demoledora para mi estado de vejez en la misma rueda de perdiciones en la cual no puedo evitar participar, y tu, lo mas seguro es la inexplicable capacidad para persistir en ese sistema cuadriculado de voces, sonidos, mensajes automatizados que te carbonizan el espíritu, y los dos, sosteniendo la llama de nuestro amor, oculto para no ser apagado por la tempestad del destino, pero inevitable, como la gracia y el valor que me da saber que tu existes.
No sabe cuantos años he escrito, ocultando mi soledad, creyendo que hablo con alguien, buscando la salida de este lugar, no sabe, y se lo digo, yo tampoco, cuanta vida he desperdiciado. Y podría seguir y no comprometerla en esto, no intervenir en su tiempo, no interferir con sus pensamientos, pero seguiría igual, aburrido, cansado, somnoliento, viviendo por vivir, respirando por la inercia del viento, no es culpa suya, pero si es razón suya de que yo la este saludando, me hace recordar buenos tiempos, tiempos donde no estaba como ahora estoy, y no es su responsabilidad, pero si la mía de cambiar algo que inevitablemente me posee y me aflige, es ese callar de forma innecesaria todo lo que siento, y de no hacer algo al respecto creo que las ideas mas aterradoras llegaran a mi como ha sucedido todo este tiempo, así que me auto medico considerando las únicas personas que me conocieron y que me toleran, y no queda nadie mas que usted, discúlpeme, pero la necesito. «Que el amor nada tiene que ver con el sexo, pero que ganas de besarse tiene el amor, y nada tiene que ver con eso, y que ganas de un abrazo tiene el amor, y nada tiene que ver con la cercanía, y que ganas tiene el amor de sentir el calor y la suavidad, y nada tiene que ver con los cuerpos, y que ganas tienen de amarse dos seres, y que ganas tienen de sentirse vivos, y que ganas tiene el sexo de amor, porque uno sin el otro no es mucho.»
«Eres escultura, milimétrica estructura, detallada y culta, enredada con la hermosura me roba la mirada, imposibles las razones para desprender tanta añoranza, perfecta y delicada y no se rompe, es una taza de te que nunca cae y me tiene atento, tonto, tanto invierno si no te veo, demasiada luz cuando me miras, un delicioso aire sabor a libertad, una mujer con mas de una razón para extrañar.» Que encantado estoy, sumergido en la profunda esencia de tus recuerdos, que me detallan una vida buena, y no sé si reír o llorar, pero perderte ha sido un agujero en mi alma, porque encontrarte fue la razón por la que a pesar de tanto caos, el universo sigue funcionando…
Viejo mundo, viejo hombre, un entorno extraño, un interno recuerdo de aquello que no será, mi gran riqueza de ser feliz, mi enorme fallo por el deber de morir, me hace querer la inmortalidad, ¿para qué? No por el mundo y sus inexplicables decadencias, sino, por tu ausencia… Un aroma a grandeza que compartí sólo con aquello tuyo, mi yo no lo compensa, alivio del silencio que me ha quedado y el entusiasmo de verte en mi memoria, y aun así, mis días en esta alfombra civilizada, pierden de vez en cuando su totalidad, su sentir absoluto, no es tonta mi intuición, sabe tanto que te extraño desde hace mucho tiempo. Dulce niña, ¿crees que soy tonto? Finges temerle a la oscuridad para pegarte a mi, sé que eres más fuerte que yo porque en mi derrota tu risa me cura el alma, y aun así, quieres que crea que me necesitas para ser feliz, si evidente es mi desgracia, eres tu la que te apiadas y me esperas, tal vez eso es querer, y tu aprecio niña mía es un milagro que pensé jamás llegaría.
Te quiero, y no te quiero. Maravilloso título, demuestra mi profesión de poeta. ¿no será esta una confesión? O un problema. Me imagino contigo todo el tiempo y mi piel resuena su música de ternura y delicia. Hoy, precisamente no salí de la cama hasta después del medio día para postergar ese grato sentimiento procedente de combinar un recuerdo con la fantasía, un excelente y entrañable pasado donde mis manos reposaban en la tenue figura vuestra, y mis labios danzaban con los tuyos en un salón frío y oscuro que se iluminaba al paso de los besos. Todo aquello, al compás de la idea de tenerte, ahí, al lado mio, en mi cama, de esa nueva mañana. El resultado fue exquisito como si estuviese sentado, sobre una mesa fina y blanca, y el plato; un bufet de corazonadas salsas de electricidad rasgando la piel, y un postre de hermosas sensaciones. Y, como aprovechado he sido y siempre seré, me enrede con las sábanas y las mantas y las almohadas y los audífonos que destellaban una melodía suave, hasta quedar atorado en mitad del cuarto, y con los ojos cerrados, soñé despierto, contigo. De ahí en adelante me invadió el gran y dichoso valor, que encaramado y acaramelado en mi cabeza, estaba ansioso por ver llegar el momento, el momento, en que todo eso que soñaba fuese otra vez. A las muchas horas estaba enfrente de tu casa, y lo único que podía hacer era girar en círculos esperando tu respuesta. Bueno, después de mucha espera y uñas comidas termine, triste y acongojado caminando con los pies aburridos a cualquier lugar. Pensé muchas cosas, imagine muchas otras, pero la verdad era clara y sin tapones: no te vería hoy. En una de las muchas calles que esta ciudad conecta con todas las personas, se apareció en frente de mi un viejo amor, de esos que no arrancas ni muerto. Bueno, fue tan impactante para mi que le seguí como un pajarillo a su nido, y cuando este amor se vio obligado a toparse conmigo, no, ocurrió, nada. Una pena, tampoco es que lo desee, incontables noches de llanto para remediar la partida me dejaron con pocas ganas de intentar algo semejante. El punto es que no ocurrió nada, ni siquiera se percato de que era yo y que seguía vivo, creo que, no me recuerda. Bueno, le seguí encantado y entusiasmado, el pecho me ardía, los pies me ardían, era una explosión andante hasta que le perdí de vista, y solo quedo el silencio, de esos que hay en una hospital al morirse el paciente. Después de eso me deje llevar por mi enredo de emociones hasta una banca, donde platique un rato. ¿esta grande no? ¿por que no me miro? ¿se acordara de mi? Parece que no importa… Y me di cuenta que estaba de nuevo, en la vista superficial de un navío que se hundió en las profundidades hace mucho, pero que yo, no he abandonado en mi alma. Se dice que el capitán se hunde con su barco pero me aburren las profundidades, y, le tengo algo de miedo al agua, así que deje de preocuparme por ello. Y te recordé, pero me llenaba de tristeza, que amargo, todo este luto por querer hacer contigo lo que, ya no puedo hacer con nadie más… Me imagino nuevamente en la cúspide, en la cima, o mas bien, en la planicie de los anchos cielos, mi barba de pirata, mi lenguaje bárbaro y lleno de gloria, y una digna mujer que se atreva conmigo a enfrentar este filo de la vida, a ir en busca de lo desconocido, la pasión por desentrañar los escondites del mundo donde tesoros aguardan a los valientes, una mujer que carezca de miedo, y que derrame su encanto por donde camina, una mujer que me mire y se sobresalte, que me incite a tener coraje, que me permita tomar su mano para aguantar el oleaje que se impone en la distancia, y allí, en la pura victoria de haber vencido, se sienta a mi lado y cierre sus ojos, plena y confiada de mi, dispuesta a que yo dibuje con la tinta de mi ser, paisajes en su alma… y pensé en la última vez que hice tan grandiosa hazaña, y recordé aquel amor que se atravesó en mi camino hace unos bastantes minutos. Un suspiro largo seguido de lo que he sabido todo este tiempo; cuando, todo lo he entregado y de mi solo queda la satisfacción pura reposando sobre la tierna arena blanda y delgada, acompañada de mi cuerpo extasiado y flotante, se abren mis ojos, y vislumbran un amanecer con huellas que se van a la distancia… no hay objetos, ni ropas, ni cartas, ni siquiera un cabello de esa mujer enredado conmigo, nada, solo yo, el aire soplando en dirección al fantasma de ella, y una nueva lágrima, resbalando por las nubes mientras caigo de repente, caigo de mi mismo, un pozo negro mio que no tiene fin jamás, y mi terror nace, y mis mil preguntas de siempre… ¿tan malo soy? ¿tan malo soy? ¿tan malo soy?… y se esparcen en ecos profundos y mas y mas…
Aguanta, tranquilo, persigue, observa, preserva, controla, el corazón, continua, analiza, no guardes rencor, recuerda, saborea, no te detengas, si lo haces no te demores, la vida espera, no espera nada, ¿tu que esperas?, no la esperes, no vendrá, ama, ten cuidado, pisa fuerte, mira arriba, sueña, golpea, ataca, muévete, esquiva, agacha, salta, sigue, la noche, el nuevo día, el sentimiento, la sangre, el cordón hecho de infancia que te liga a ella, ella, tu, y todo, y nada que hacer, no llores, paciencia, dominio, todos lidian con algo y tu no eres la excepción, calla, habla, di, pero sereno, que el mundo acabará, y otro nacerá.
¡Sorpresa! que este momento me suaviza el corazón, que ese deletrear tu nombre es un vicio dañino pero tan adictivo como mis repentinos andares, y yo vago en un palacio, me dejo reposar por el pasado, y es mi orgullo llegar a viejo con mil historias para contarte…
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