Cuéntame mientras tus ojos derraman el agua que da la vida, intenta plasmar con las lineas de tus manos el camino que debemos recorrer, y sígueme si no encuentras la tuya porque yo compartiré contigo hasta el ultimo suspiro de mis pulmones. 

El sol no desaparece de nuestro horizonte y aun así parece que los rayos de sol no llegan a nuestra piel, que nuestros sentidos están dormidos, encerrados en una pequeña caja de cualquier color.

Los cantos de sirena siempre fueron soñados, y ahora suenan mas fuertes que nunca en nuestros corazones, como una mentira que se repite una y otra vez en nuestra mentes.

¿Imaginaciones o realidad? En que momento podemos saber que nuestra mente no esta jugando con nosotros, que no es todo un sueño superpuesto en nuestra retina, encerrados, sordos al mundo, mancos al cariño y anósmicas al olor de la esperanza, a los recuerdos envueltos en pañuelos bañados en perfume y cigarros consumidos.

Mis palabras parecen consumidas con los segundos marcados en el reloj, que hacen temblar el suelo. Rodeados de todo y de nada, parece que no somos capaces de ordenarnos las ideas si no nos enfrentamos al caos de frente.

Morir en el intento de regresar a la normalidad, o descubrir si vivíamos en una fantasía organizada y guiada por el miedo. 

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