SOBRE ESPINAS Y CADÁVERES

SOBRE ESPINAS Y CADÁVERES

anathema

28/04/2020

Sin cesar, empujo fuertemente dentro de mi armario

cada uno de los recuerdos que me estremecen,

cada una de las promesas selladas en aquella esquina,

y cada uno de los errores

que tanto tardé en asimilar.

Pétalo, tallo, néctar, flor,

espinas, dolor, sangre, rencor.

Rosas hermosas, vivas y rojas,

flores marchitas, secas, apagadas.

Las espinas en todo mi cuerpo

envolviéndome el tórax

oprimiéndome el pecho

erizándome la piel.

Tus espinas en todo mi cuerpo

envolviéndome el tórax

oprimiéndome el pecho

erizándome la piel.

¿Quién en su sano juicio iba a imaginar que una fina y delicada rosa podía ser tan letal?

Ahora en mi armario hay un cadáver

que no tengo fuerzas para desechar,

en el patio debería haber un pozo,

que nunca podré cavar,

y en mi pecho, hay un dolor,

que ni en el auge de mi cólera

podré asesinar.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS