Amor a la Woody.

Nada importa realmente y esto es así

Y todo el amor que me juraste algún día te comerá el alma

También ese cuerpo traicionero que se vende al peor postor

Lindas piernas siempre depiladas que se abren con un hola qué tal

Maldita la hora en que baje la guardia ante tan impura acometida

No trates de entenderlo, no podrás

Y las heridas causadas por tu linaje sanarán

Tristes días que volví felices por ti

Yo que moví montañas por una sonrisa y camine desiertos sentimentales por verte

Muero de soledad en este inmundo hoyo

Mientras la puta princesa corona el pene de alguien más.

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