CAPÍTULO 1: EL BROTE
Mi nombre es Ali, vivo en Japón desde que nací (el 27 de enero de 2040) y estoy estudiando en la facultad de ingeniería. Mis padres salieron de Venezuela en 2030. Y ahora yo vivo con ellos en Osaka.
Hoy Era 27 de enero de 2060 estaba cumpliendo 20 años era el día más feliz de mi vida, pero tenía que pasar algo malo…
Ese día cuando desperté, vi en las noticias decían que una persona había muerto por una neumonía grave, yo no le preste mucha atención y solo seguí con mi día.
Aunque era mi cumpleaños tenía que ir a la universidad. Cuando iba saliendo a la universidad, mis padres me dijeron que me pusiera un tapaboca y me llevara el gel antibacterial y un antiviral, yo les hice caso pero solo por respeto porque sinceramente creí que solo estaban en paranoicos.
Al llegar a la universidad me encontré con mi amigo Saúl que venía abrazado con su novia Ana. Saúl siempre fue un hermano para mi (aunque era un poco tonto) y Ana era una persona con un gran corazón a la que apreciaba mucho (y era muy inteligente)
Los tres teníamos algo en común, que nuestros padres eran de Venezuela, así que, en ese mundo de japoneses, tenía a dos venezolanos que me hacían compañía.
Cuando estoy hablando con este par de dos, veo pasar una silueta que me encanta, sus ojos eran negros completamente, tenía una sonrisa que iluminaba mis días y su cabello era más sedoso que cualquier otro, su nombre era Kukki, una japonesa que sabía hablar muy bien el español. Era mi mejor amiga, el único problema era que me gusta mucho y nunca había tenido el valor para decírselo.
Apenas me ve viene corriendo a abrazarme y desearme el feliz cumpleaños, mientras me abraza siento una calidez en mi alma, al que siempre me pasa cuando estoy con ella.
Le digo —Ya basta que me avergüenzas.
Pues te avergonzare, pero hoy es tu cumpleaños así que me vas a tener así todo el día —dice ella.
¡¡¡¡¡EPA!!!!! MATOOOOOOOÓN —Dice Saúl
Yo le digo —IDIOTAAAAAA —y le doy un pequeño golpe en el estómago.
Él se queja de dolor. Ana se ríe de él y dice —te lo mereces por idiota. Y mi mejor amiga la secunda diciendo —si, por idiota. Y creo poder notar un leve sonroja en su rostro.
Yo intervengo y digo —bueno kukki suéltame que hay que ir biología. Pero ella se niega y yo haciéndome el abochornado digo —Bueno…. entonces tendré que CARGARTEEE!!! (la pongo a caballito y la llevo al salón)
En cada paso que daba podía sentir como sus brazos se aferraban a mí. No era la primera vez que hacía eso, pero cada vez que lo hacía me sentía en tanta paz.
Cuando llegamos al aula de biología como siempre nos sentamos todos juntos pero el profesor esta vez se retrasa por 20 minutos tarde, por lo que solo quedábamos en el salón nosotros cuatro y otra persona que nunca hablaba con nadie.
Yo extrañado dijo —que raro que no ha llegado el profesor aún.
Y Ana dice —si, no entiendo siempre llega temprano y cuando falta avisa.
Saúl también interviene y dice —supongo que tuvo que hacer algo importante. Y kukki asiente estando de acuerdo.
Después de un rato analizo el salón y a lo lejos diviso a una chica que no se me hace familiar, por lo que digo en un susurro—oigan quién es la chica que esta allá en el fondo.
Ana igual de bajito me contesta —creo que se llama Nikoru.
Yo propongo que la vayamos a saluda y todos asienten de acuerdo conmigo.
Los 4 nos acercamos despacio hacia la chica y cuando llegamos a ella, un poco seca dice —¿Que quieren?
Yo me quedó un poco contrariado por su tono, pero seguro de mi mismo dijo —solo queremos hablar. Ana ayudándome dice dulcemente —¿cómo te llamas?
La chica ya más calmada aparentemente le contesta y descubrimos que Ana tenía razón, ya que efectivamente su nombre es Nikoru.
Yo le digo —Lindo nombre. Ella me agradece y después de un rato Saúl interviene —Nikoru hoy es el cumple de este señor —dice señalándome —¿quieres celebrarlo con nosotros?
Ella afirma en tono burlón no tener nada mejor que hacer y acepta.
Todos nos ponemos en marcha a petición de Saúl y aunque el camino a mi casa es un poco largo se hace bastante ameno ya que vamos conversando.
——–Mientras tanto en otro lugar. ———————–
¡¡MUEVANSE, CIERREN LA COMPUERTA!! —hago una pausa y luego vuelvo a gritar con pánico —¡¡¡ESO NO PUEDE SALIR!!!!
Uno de los médicos que está a mi lado dice —de inmediato. Y cierra las compuertas con rapidez.
El otro médico dice también alterado —QUÉ HAREMOS AHORA, ESTAMOS JODIDOS BIEN JODIDOS.
Un tercer médico trata de calmarnos a todos diciendo —Relájense por favor, hay que informar esto al gobierno, tienen que cerrar los vuelos de una vez antes de que se propague.
El primer médico interviene otra vez y dice —ya los estoy llamando señor!!!!
Informales que se ha vuelto más fuerte —El mismo tercer médico le ordena con voz firme —Inmediatamente señor!!
CAPITULO 2: EPIDEMIA
Ya no aguantaba las ganas de decirle Kukki que me gusta, así que me acerqué a ella y le dije —¿podemos hablar a solas? —No podía creer que yo Ali estuviera haciendo esto, pero ya no está dispuesto a esperar más. Ella tranquilamente dijo —Por supuesto.
Nos alejamos un poquito del grupo y con cada paso mi corazón latía más y más rápido. Estaba tan nervioso que las palabras no me salían, mi cerebro me decía que no lo hiciera, pero mi corazón me decía que no importara el resultado siempre íbamos a ser los mejores amigos.
Me tranquilice un poco y por fin logré hablar —te quería decir que desde hace un tiempo —hice una larga pausa mientras ella me mira expectante y rápidamente solté —me gustas muchos… hace mucho tiempo que me guardo este secreto y ya no puedo más —tomé una gran bocanada de aire y más rápido de lo que me gustaría solté un casi incomprensible —¿quieres ser mi novia?
De repente veo a sus ojos como se humedecen como si estuviera a punto de llorar y yo me asusté un poco. Pero contrario a lo que creí ella dijo —IDIOTA (con lágrimas en los ojos) —hace una pausa y luego dice —se supone que te lo iba a pedir yo.
En un instante todo mi mundo había dado un giro, tantas emociones pasaron por mi cabeza, pero yo solo podía repetir una y otra vez sus palabras en mi cabeza y preguntarme a mi mismo ¿me lo iba a pedir?, lo único que pudo hacer mi cuerpo fue darle un abrazo y un beso en la frente. Y siendo sinceros fue el mejor abrazo que le he dado.
Sentía su cara llorando de felicidad en mi pecho. De fondo logré oír a los otros celebrar y grabar desde la lejanía.
Como nos estábamos quedando atrás decidí cargarla a caballo hasta que por fin alcanzamos a todos.
Mi amigo con mucha emoción dijo —que viva la nueva pareja —luego algo más bajo, pero no dejando de ser audible para el resto dice —usen condón — y nos guiña un ojo felizmente.
Cállate (dije con furia) —y mi ahora novia también dice —CALLATÉ —en un pequeño grito y al mismo tiempo le dio una patada en la espalda.
Mi estúpido amigo haciendo un escándalo grito —¡¡¡¡¡AUUUUUUUUUU!!!!! ¡¡¡¡¡Me dolióóóóóó!!!!! —Deja la estupidez que te lo mereces —dijo Ana y al mismo tiempo lo agarró y besó su cachete
Después de un rato de bromas Nikoru preguntó con cansancio —Cuánto falta para llegar
Yo feliz le conté —Falta muy poco.
Kukki también quejándose dijo —¡¡¡¡estoy cansada!!!!
—pero si yo te he cargado todo el camino — con algo de gracia le dije sosteniéndola más fuerte
Y cuando por fin llegamos yo lo anuncié.
Mi casa era pequeña, peor lo suficientemente grande para que 7 personas cupieran.
Abrí la puerta y Saúl dijo —Por fin —yo les dí la bienvenida y los invité a pasar —Pasen sean bienvenidos
Bonita casa—dice Nikoru en un tono amable —yo amablemente contesté con un simple pero sincero gracias
Bueno ustedes siéntense ahí y Saúl y yo traemos la comida y bebidas —dije
Las chicas asintieron y se fueron a sentar.
Mientras estábamos sirviendo la comida en las noticias se oía que alguien había contraído una neumonía y había muerto en cuestión de horas.
Por un momento recordé la noticia de la mañana y también los muchos relatos que me contaban mis padres de aquella pandemia que había hecho tantas muertes en 2020. Pensé que solo eran casualidades así que no le puse mucha atención.
Pasamos el resto de la tarde tomando y conociendo mejor a Nikoru, Kukki no se despegaba de mí y tampoco yo de ella, era tan perfecto, todo había salido como lo planee. Todo era perfecto a excepción de que le había marcado varias veces a mis padres, pero no contestaban sus celulares y me sentía mal por eso, pero ver a Kukki tan feliz me hacía olvidarme de todo.
Ya eran como las 10 de la noche y no quería que se fueron con esa oscuridad, así que les dije a mis amigos que se quedaran a dormir. Y como mis padres no me respondían, decidí que lo mejor era hacer eso, así que les dije —chicos quédense a dormir, ya es muy tarde y no quiero que caminen en la oscuridad, hay 2 habitaciones restantes si no les molesta compartir, duerman ahí.
Kukki dijo —por mi bien
Y entre los otros tres gritaron “por mí también”.
Ya eran las 2 de la mañana y todos se fueron a dormir a excepción de kukki y yo portada estábamos en la parte de atrás mirando las estrellas, recostados en la grama y con un poco de frio, nos fuimos acercando hasta que ella con su cabeza se recostó de mi abdomen mientras la abrazaba me decía —Gracias por la sorpresa, aunque me hubiese gustado dártela yo a ti —en tono burlón.
Yo solo me justifiqué diciendo —no sabía que yo te gustaba. Y ella me contestó —yo tampoco sabía que yo te gustaba.
Yo dije con tono irónico —Ambos estábamos enamorados y no decíamos nada. Y ella contesto un suave —si…
Apenas me dice eso la levantó y le hago ver las estrellas, vimos a capricornio, la osa mayor y la menor un montón de constelaciones. Luego de un rato me arme de valor, la hice mirarme, nuestros ojos se cruzaron por mucho tiempo quizá segundos o minutos, no lo sé, pero se sintieron como horas mirándonos fijamente sin que nadie nos molestara.
Al pasar los segundos le agarro de la mejilla, ella agarra mi cintura, nos íbamos acercando lentamente, hasta que llegamos a estar a centímetros de distancia y en ese preciso momento nuestros labios se cruzan y surgió un beso que siempre había imaginado a la luz de velas, con la persona que amo, en ese momento dije nada puede arruinar esto, hasta que…. Saúl y las chicas llegan y él dice —Venga dejen eso para un hotel.
Ana lo reprende con grito fuerte acompañado de un golpe fuerte en el abdomen y dice —¡¡¡CALLATE!!!
Él todavía adolorido por el golpe responde —esta bien morena.
Ella medio carcajeándose le dice —así me gusta.
Esa noche todos nos reímos y jugamos, no sabríamos que ese mismo día más tarde iba a ser una pesadilla.
Más tarde nos despertamos a eso de las 12 de la mañana, entonces recogieron sus cosas los chicos y estaban a punto de irse, hasta que una patrulla había tocado a la puerta de la casa, yo como una persona normal, fui a abrirles, pero un abrupto grito de las personas de afuera me asusto —¡¡¡Abra la puerta, por favor!!! —decían con desesperación.
Seguí caminando hacía la puerta de mi casa con desespero y dije —Ya voy.
Otra de las personas de afuera siguió insistiendo —POR FAVOR, SEÑOR ABRA LA PUERTA!!!
Y yo digo —Ok, ya la voy a abrir —me acerco a la puerta y la abro con miedo.
Al ver afuera observo a varios oficiales y digo —Que pasa oficial.
Uno de los policías dice —Buenas tardes joven, venimos a preguntar si hay alguien más en la casa, si lo hay todos permanezcan en la casa y no tengo contacto con ninguna persona.
Yo digo —Si, oficial están mis amigos, ¿le puede preguntar algo señor?
Y él me dice —por supuesto joven.
¿Qué está pasando? —digo con miedo y desesperación a la vez
El policía dice —hay un brote de una enfermedad que creíamos extinta, se llama covid-19, se están tomando todas las medidas necesarias para controlar el brote
¿cuántas personas se han infectado? —digo
Un millón de habitantes contrajeron la enfermedad. Le voy a explicar varias cosas ¿ok?
Ok —digo con angustia.
Soy el oficial Ame, las siguientes semanas, les estaré suministrando comida y medicamentos, ¿cuántas personas dicen que son? —dice el tal Ame.
Somos 5 personas —le contesto.
Ok, 5 personas, tenga mi número de teléfono —me deja una hoja de papel con un numero escrito en ella —le estaré suministrando datos, para que se mantenga informado.
Gracias, oficial —digo.
No hay de que… bueno, me retiro señor, tengo que ir a la comisaria —me contesta
ok, gracias Ame —contesto yo.
En cuanto me despedí de él, cerré la puerta con seguro y volví adentro de la casa.
Chicos desempaquen todo —les digo
Saúl pregunta —¿por qué?
Yo le digo —hay una especie de cuarentena, provocada por el coronavirus…
Ana dice —¿eso no había desaparecido hace tiempo?
Y yo les digo —Al parecer no, lo importante es que no salgamos de la casa.
Está bien —dice kukki con angustia.
Nikoru también dice —ok.
Después que les di la noticia, todos llamaron a sus padre y afortunadamente estaban bien, yo seguía tratando de contactar a mis padres, pero seguía sin respuesta…
Estábamos sentados en el sofá viendo tele, mientras la veíamos se cambió repentinamente a un noticiero, estaban explicando que había una cuarentena, por una infección que se había extinguido hace mucho tiempo, dijeron que esta vez el covis-19 había mutado, se había hecho más contagioso y más letal, explicaban que ahora para que el virus incubara solo necesitaba de 4 horas
Me había quedado en shock, ¿cómo era posible que una enfermedad volviera el doble de fuerte?, mi otra pregunta era “¿dónde estaban mis padres?”, pero no podía responder ninguna de aquellas preguntas que me hacía en aquel fatídico día.
———————En otro lugar la noche anterior——————–
Se ha escapado señor, ya no se puede hacer nada —dice con miedo y desesperación el primer médico
Claro que se puede hacer algo, siempre se puede hacer algo —dice el tercer médico, después de una pausa, vuelve a hablar —por suerte el presidente ha cerrado los aeropuertos.
Por suerte —dice el primer médico
El tercero le responde con seguridad —tenemos la suerte que no va a poder salir a infectar otros países, solo será una pandemia Nacional. Solo tenemos que luchar contra ella.
El médico da un discurso para motivar a los demás y los manda a que con los datos que tienen, investiguen una cura, al parecer este “tercer médico” era el jefe de todos esos médicos que estaban en esa habitación. Dijo que si alguien se sentía mal o empezaba a toser que le dijeran a él para que fuera atendido inmediatamente
Esos médicos parecían ser la única salvación que tenía Japón para encontrar la cura contra este covid-19 mejorado.
———————- En la casa de Ali ——————-
Estábamos todos sentados en el sofá, aunque había pasado una semana todos seguíamos igual de angustiados, por lo menos los demás sabían de sus padres, pero yo seguía sin respuestas. La ansiedad me tenía cansando, por lo menos teníamos chucherías y comida para tres semanas, pero mi angustia era cada vez más grande, me temía que algo malo les hubiese pasado a mis padres.
—————————–Una semana después————————–
Mis padres aún no habían dado respuesta y mi angustia se convertía en desesperación, así que lo que hice fue que llamé al oficial, para mi mala suerte no dio respuesta.
Era raro que la señal de cable se fuera, pero igualmente así fue, no volvimos a oír las noticias, estábamos incomunicados, decidí que lo mejor era salir de mi casa e ir a comisaria que estaba como a 2 horas caminando.
Así que digo —Chicos tengo que ir a comisaria, no me aguanto más no saber que está pasando.
Y kukki (segura de sí misma) dice —yo voy contigo.
Nikoru dice —no tenemos nada que perder.
Saúl dice —Cuenta conmigo bro.
Ana también dice con alegría —conmigo también.
Los 5 alistamos nuestras cosas, nos pusimos todos un tapaboca y salimos hacia la comisaria. Las calles de mi pequeño pueblo en Osaka estaban vacías, no se oía ni el maullido de los gatos, las tiendas estaban completamente cerradas, se respiraba a través del tapaboca un aire limpio, un aire puro y la paz que se oía era muy relajante.
Llevamos una hora de camino. Mientras caminábamos admirábamos el paisaje. Yo le agarraba la mano a Kukki, mientras que Saúl cargaba a Ana a caballo y Nikoru iba admirando el paisaje.
En todo el trayecto que llevábamos no habíamos visto a ninguna persona, todo era silencio y paz. Después de otra hora que estuvimos caminando por fin llegamos a la comisaria.
La comisaria estaba vacía, no había ni un policía a la redonda todo estaba inhóspito. Decidimos entrar, pero antes dije —¿Listos chicos? —y todos dijeron con seguridad —Listos
Entramos los 5 a la comisaria solo para encontrarnos con nada, estaban las armas y cartuchos regados por el piso. No sabíamos que hacer.
Yo ahora más angustiado dije —¿porque todo está tirado?
Kukki dijo —no lo sé, pero no me da muy buena espina.
Entre los 5 recorrimos la comisaria sin tener nada de miedo, hasta que Ana encontró unos archivos y dijo —chicos encontré unos docum… —pero no pudo terminar la frase por su cara de terror
Saúl dijo —Morena, ¿qué te pasa?
Ana tartamudeando dice —Di…di…dice que hay más de 50 millo…millones de infectados y 10 millones de muert……muertes —le costó mucho terminar de decir esa frase por el terror que le causaba, pero finalmente lo logró.
Cuando dijo eso nos quedamos en Shock no sabíamos que se podía hacer. Solo iban 2 semanas cómo tanta gente pudo infectarse, me pregunté. En el documento decía que lograron contralar el brote y solo estaba en Japón, aun así, que hubiera 50 millones de personas era preocupante y alarmante, habían muchos reportes oficiales que decían que en otras partes de Japón la gente se había hecho sus refugios y algunas otras personas, atormentadas por lo que estaba pasando, habían comenzado a crear caos y pánico en las calles y sobre todo a matar…
Yo con toda la seguridad dije que nos armáramos con lo que había en comisaria y que solo usáramos las armas cuando fuera completamente necesario. Aunque no sabíamos muy bien cómo usarlas agarramos unas pistolas, algunas M4(metralletas) y todos los cartuchos que había.
También dije —tenemos dos metras, ¿quién las va a llevar?
Saúl de forma juguetona dice —yo me ofrecería, pero me duele la mano un poco.
Ana con seriedad dice —yo llevo una porque el TONTO este no tiene hombría.
Saúl tontamente dice —oye! eso me dolió en el pecho morena.
Kukki dice —dame una de las pistolas y el cuchillo
Yo le digo —enseguida cari.
Nikoru dice —yo quiero solo dos pistolas
Yo digo —hecho y tu Saúl que ¿vas a agarrar?
Saúl dice —afortunadamente, en uno de los casilleros de los policías había ¡¡¡ESTOOO!!! —y saca un bate relleno de clavos muy filosos
Ten cuidado con eso —digo en tono burlón
Ahora la pregunta más importante que nos hacíamos todos, ¿a dónde íbamos a ir?, en uno de los documentos decía que estaban experimentado con la gente infectada en akibahara, eso estaba al otro lado del país, si queríamos llegar primero teníamos que ir al monte fuji, subirlo y después bajarlo y antes de todo eso teníamos que ir a Shizouka, que caminando estaba a 2 días. Nos pusimos en marcha ya que nos esperaba un largo viaje de camino. Decidimos ir a un supermercado y robar provisiones ya que no había nadie, saqueamos una tienda cerca de la comisaria, así que decidimos vaciar todo lo que había de comida en la tienda, cuando ya teníamos todo lo necesario y salimos de inmediato.
CAP 3: EL LOCO DEL BOSQUE
Habíamos pasado ya 1 día enteró caminando. Hoy ya estaba anocheciendo y todos estábamos muy cansados. Para nuestra conveniencia estábamos yendo por el bosque y había unas cabañas de guardabosques, en las cuales no había gente, me decepciono, pero a la vez me alegro porque no corríamos peligro, pero no sabíamos donde estaba la gente y eso me angustiaba a cada minuto.
Ya estábamos dentro de las cabañas y estábamos desempacando la comida, cuando oímos un estruendo a la lejanía. Algo me decía que aún había personas vivas, yo con toda mi fe Sali de la cabaña, pero el estruendo estaba demasiado lejos para seguirlo, así que me rendí y volví adentro de la cabaña, adentro de la cabaña estábamos charlando entre todos.
Ana dijo —voy arriba a que hay una ventana para visualizar el bosque.
Ok —dije yo
Kukki dijo con felicidad —¡¡¡voy contigo Ana!!!
Nikoru también se unió diciendo —yo también voy con ustedes
Vale Saúl y yo nos quedamos aquí abajo —dije yo
Cuando las chicas subieron, comenté a Saúl sobre el estruendo.
Oí algo a la lejanía —dije.
También los escuche —dijo.
Eso era un disparo —digo con seguridad.
Si, lo era —dice él.
Hay que cubrir las puertas y ventanas por si acaso —digo yo.
Saúl dice —dale, por ahí debe haber cosas para tapar las ventanas y las puertas.
Saúl y yo nos pusimos a buscar cosas para fortificar la casa, había muy pocas cosas, pero logramos asegurar toda a planta de abajo, en eso que estamos fortificando encontramos un sótano oculto, estábamos extrañados de no haberlo visto antes, pero eso no importaba lo que importaba era nuestra sed de aventura, queríamos bajar, pero no sabíamos los peligros que nos esperarían, así que decidimos llamar a las chicas.
Ya estábamos todos abajo en frente de la puerta, todos estábamos ansiosos a la par que angustiados porque no sabíamos que encontraríamos, pero estábamos muy ansiosos.
Voy a bajar primero, ¿entendido? —digo yo
Ten cuidado cari —dice kukki
Saúl también dice —Bro ten cuidado
Ana con entusiasmo también dice —Tú puedes.
Nikoru bromeando dijo —Vuelve vivo.
Vale chicos ahí voy —digo
Baje las escaleras lentamente, todo estaba oscuro, como si no hubiesen bajado acá en meses, tenía mi metra en la mano, pero me sentía nervioso, más de lo que me he sentido nunca, estaba atrapado en mis pensamientos que me decían “¿Qué habrá al encender la luz? ¿Por qué hago esto? ¿Cuándo paso todo esto?”.
Por fin estaba frente a frente, con el botón de la luz, decidí poner el botón en “ON” de una vez y cuando se prendió veía a mi alrededor una sala con una camilla y una mesa con artilugios que parecían sacados de una película de horror. Atrás de la mesa había una pizarra con muchas fotos de chicas enmarcadas con una x, también había una laptop, que estaba abierta pero descargada, lo bueno es que tenía su cargador al lado así que rápidamente agarré la laptop y su cargador y me fui para arriba corriendo.
Cuando ya estaba arriba estábamos todos esperando a que la laptop cargara y de repente encendió.
Cuando encendió la laptop, se encontraban dos menús de inicio, uno de los menús decía trabajo y el otro se llamaba PRIVAD0, obviamente entramos en el que decía privado, convenientemente no tenía contraseña, cuando cargo el inicio, vimos que en el escritorio solo había una carpeta llamada, “adiós…”
¿lo abrimos? —digo con preocupación
Obviamente —dice Ana segura de sí
Ana con toda la valentía hace doble clic en la carpeta y le da doble clic en el único documento que había, el documento lo que decía era:
“Hola, me llamo Susuka Hatakeyama, hago esto porque este será mi último día en este tierra, solo quiero decir que si la policía encuentra esto “que les den por ·····”, esto no es para ustedes es para las familias de las chicas que viole y asesine, les quiero decir que lo siento, seguro se preguntaran porque les hice todas esas cosas a sus pequeñas hijas y les digo que fue por diversión, me arrepiento de todo lo que les hice, además el karma me lo devolvió infectándome con esta enfermedad tan grave llamada covid-19, solo quería decir que LO LAMENTO… Pero nada de eso va a importar, dentro de unas horas partiré a Akibahara, para PURIFICAR ESTE MUNDO, todos quedaran infectados, nadie quedara sanó, Akibahara será PURIFICADO “.
¡¡¡Que fuerte!!! —dice Ana exaltada
Nikoru dice —Que malo el bicho ese
Kukki también dice —Que miedo — y se acerca a mi agarrándome el brazo
NO MAMES —grita Saúl
Yo en ese momento estaba en shock, si cabía alguna posibilidad de encontrar a mis padres este psicópata me las había quitado, no sabía que decir, así que los más sensato que hice fue irme a la planta de arriba y pensar.
Cuando estaba sentando, viendo afuera por la ventana oigo que alguien se me acerca lentamente.
¿Kukki eres tú? —digo sin voltear
¡¡¡¡siiiiiiii!!!! —dice emocionada mientras se abalanza sobre mi
Estábamos los dos en el piso y ella estaba encima de mí.
Y entonces ella dice —vas a ver que vamos a encontrarlos.
Estoy seguro que si —le respondo con entusiasmo.
Después que dije eso, vi como se iba acercando poco a poco a mis labios, hasta que con su suave boca me da un beso en la boca, en ese instante recordé todas las cosas que viví con ella y todos los momentos que habíamos pasado juntos, no podía imaginarme estar sin ella ningún segundo de mi vida.
¡¡¡¡¡TE AMO!!!! —grita con emoción
Y yo a ti —digo alegremente
Después de ese beso, nos fuimos abajo y entre todos decidimos que debíamos partir al amanecer.
CAPITULO 4: PERDIDOS EN SHIZOUKA
—————————A la mañana siguiente————————–
El sol estaba empezando a salir, los 5 decidimos empacar e irnos muy rápido de aquella cabaña que en su interior albergaba tantos secretos. Después que empacamos nos fuimos directo a nuestro destino, lo malo es que esta vez para llegar al monte Fuji teníamos que cruzar por toda la ciudad de Shizuoka.
El trayecto fue largo, pero logramos llegar a Shizuoka de noche, esa ciudad que me traía tantos recuerdos de los viajes escolares a los que iba con Kukki. Pero ya esa ciudad se había convertido en ruinas, los vidrios de los edificios rotos, los establecimientos saqueados, no quedaba ni un solo alma en esa gran ciudad de mi queridísimo país. Empezábamos a ver, que cosas no estaban saqueadas, pero para nuestra mala suerte, todo se había acabado…
No sabíamos que hacer, el monte estaba solo a unas horas, pero no queríamos estar en medio del bosque, decidimos que en uno de los establecimientos que estaban saqueados pasaríamos la noche y eso hicimos, armamos la tienda, pero no nos quedaríamos, así que solo cerramos la puerta y tapamos las ventanas, los chicos se acostaron, en ese momento tenia a Kukki recostada de mis brazos, todos dormían en paz y armonía. Yo era el único que estaba despierto, atento a que no pasara nada, cuando menos me lo espere sonó un estruendo, que se asemejaba al sonido de una pistola, en ese instante todos se despertaron alarmados, yo les dije que no había nada que temer que eran disparos de otra parte de la ciudad, después que sonó eso, decidimos charlar para ver si íbamos a salir a enfrentar los disparos, todos quedamos de acuerdo en que si.
Ana dijo —¿todas las armas están cargadas?
Nikoru dice —las mías si
Yo digo —cargadísimas
Saúl dice —Bate listo y preparado
Kukki también dice —Cargada
Apenas terminamos de cargar las armas, con toda la seguridad debajo de la luz de la luna, nos fuimos a enfrentar los extraños disparos que acechaban en la oscuridad.
Estábamos ahí donde sonaban los disparos, no estábamos muy seguros de lo que iba a pasar, pero estábamos muy seguros de que ninguno iba a morir.
Chicos mucho cuidado ojos bien abiertos —dije susurrando.
Obvio que si —dijo kukki susurrando
Ana en susurrando dijo —veo a alguien
Los disparos provenían de unos tipos jóvenes disparándole a un pobre chico, en ese momento la ira no me detuvo, así que salí de mi escondite y grité con rabia.
¡¡¡¡¡METANSE CON ALGUIEN QUE SE PUEDA DEFENDER!!!! —grito con furia
¡¿¡¿¡O NO TIENEN PELOTAS!?!?! —grita Nikoru con ira
En ese momento uno de los maleantes, agarra su arma y le va a disparar a Nikoru, yo viendo las malas intenciones del rufián, quito a Nikoru del trayecto de la bala, pero me logra dar en el centro de toda la mano. Nikoru llena de furia, saca sus dos pistolas y empieza a disparar como una desquiciada hacia ellos.
¡¡¡¡¡NO TOQUEN A MIS AMIGOS!!!!! —grita mientras saca una ráfaga de balas en dirección de los maleantes
Nikoru no se detiene ni para parpadear, solo sigue apretando el gatillo, cubriendo así el cuerpo de los maleantes de balas de su pistola. la luna estaba en su punto mas alto, se veía hermosa y yo mientras tanto me cubría la mano u veía su locura salir, la luna la reflejaba a ella, su piel blanca resplandecía como si fuera un vampiro, el escenario era tan hermoso, pero a la vez tan aterrador.
Nikoru cuando se le acabaron las balas dejó de disparar, pero ya había matado a esos tres rufianes que nos podían haber matado a nosotros y le agradecimos la ayuda.
Después que le diéramos las gracias a Nikoru, Ana me coció unos puntos, con una aguja que cargaba en su mochila y cuando Ana termino de cocerme los puntos Kukki me vendo la mano.
Gracias, Ana —dije.
No hay de que —dice alegre
¿te sientes bien? —dice kukki preocupada
Yo digo —claro
¡¡¡IDIOTA!!! —dice Nikoru enojada
¿por qué? —pregunto yo
Te arriesgaste para salvarme —dice apenada
No hay problema eso hacen los amigos —digo amigablemente
Cállate tonto —dice jugando, mientras bebe agua
Todos nos dimos cuenta, que venir a buscar a estos rufianes no había acercado al monte Fuji. Así que ahora solo estaba a 1 hora de camino. Ya lo podíamos visualizar y de inmediato todos nos pusimos en marcha.
Bajo la luz de la luna, iba cargando a Kukki que se había quedado dormida en mi espalda, los demás estaban unos metros más atrás.
Por fin llegamos y yo digo —chicos ya lleguemos
Saúl me dice —si, por fin.
Ante nosotros se hallaba uno bosque lleno de arboles frondosos, que tenían una gran altura, el sendero que indicaba que fuéramos a la montaña había desaparecido, no sabíamos que hacer eran las 3:30 de la mañana y no teníamos una linterna que no alumbraban muy fuerte que digamos, pero no podíamos esperar más.
Decidimos entrar a ese bosque, con los peligros que estuvieran ahí dentro, no nos importaban porque estábamos juntos y en equipo.
Estábamos ahí adentro no sabíamos ni que hora era, no lo podíamos ver en nuestros relojes porque estaba muy oscuro, solo nos guiábamos con la esperanza de que, si seguíamos recto, nos íbamos a topar con la montaña
Seguíamos caminando tranquilos y al mismo tiempo nerviosos, hasta que empezamos a escuchar unas fuertes pisadas que provenían de adelante.
Yo le dije susurrando a todo el grupo que se quedara completamente quieto. Las pisadas se nos fueron acercando poco a poco hasta que llego a estar con nosotros frente a frente un osos de 3 metros, con unas garras del tamaño de mi cabeza, no se si era el miedo o las ganas de vivir pero no me moví ni un centímetro, estaba paralizado como si medusa me hubiese convertido en roca, no di ni un movimiento y cuando pensé que el oso iba a comerme lo que hizo fue lamerme la cara y después que me lamiera toda la cara se fue como si nosotros no hubiésemos existido para él, tan insignificantes seriamos que un oso no nos quiso comer, eso digo yo que es tener un golpe de buena suerte.
¿alguien tiene una toalla? —digo riéndome
Amor estas lleno de saliva —dijo kukki aguantándose las carcajadas y dándome una toalla
Bro ese fue el mejor beso de tu vida ¿no? —dice Saúl carcajeándose hasta que Ana dice —te dije que te callaras —mientras le da un golpe en el estómago
¡¡¡AUUUUUUU!!!! si, si morena —dice Saúl con dolor.
JAJAJAJAJA, ¿te babeo todo no? —habla Nikoru muriéndose de la risa.
Después que nos reímos un rato por lo del oso, no sabíamos adónde ir, en resumen, estábamos muy perdidos. Decidimos que lo mejor era esperar a que amaneciera, así que nos sentamos y nos pusimos a esperar que el amanecer empezara
Yo digo después de un rato —Chicos estamos cerca de nuestro destino, gracias por acompañarme en esto, se que es duro y complicado el trayecto que hemos tomado, pero gracias por estar aquí
Siempre contaras conmigo amor —kukki me sonríe
Siempre me has ayudado, te lo tenía que recompensar —comenta Ana
Saúl dice —no te iba a dejar solo ni porque quisieras Bro
Y Nikoru dice —nos conocemos desde hace poco, pero es la mejor aventura en la que he estado.
Yo digo —está a punto de amanecer, recojan todo y alístense para otro día de viaje, mañana llegaremos hasta la cima del monte Fuji, descansaremos ahí y bajaremos hasta Akibahara
Entre todos gritaron ¡¡¡¡¡siiii!!!!!, sin saber lo que nos esperaría arriba de aquella gran montaña
CAPITULO 5: LOS MONJES DE LA MONTAÑA
Estábamos frente a frente con el monte Fuji, lo bueno del monte era que tenia un camino que guiaba directo a la cima de la montaña, antes de subir estábamos admirando dos monumentos que estaban en el principio del camino, eran como 4 metros y tenían las figuras de unos budas meditando, nos quedamos 20 minutos admirando aquellas estatuas que nos deslumbraban con su majestuosidad, cuanto terminamos de admirar aquellas estatuas nos pusimos a subir esa gran montaña.
————-Una hora de camino, después————
¿están bien? —digo con cansancio
¡¡¡¡CARGAMEEE!!!! —dice quejándose
No te quejes Kukki que ya vamos a llegar —dice alegremente Ana
Nikoru la apoya —si, solo faltan como 30 minutos, para llegar a la cima.
¡¡¡VAMOS QUE SE PUEDE!!! —dice intentando subir el ánimo, Saúl
Seguimos caminando unos 30 minutos y ya solo nos faltaba la ultima recta para llegar a la cima, en esa última recta habían como unas 7 personas que no parecían infectadas solo estaban sentados con los ojos cerrados.
Nos preguntábamos “¿quiénes eran?”, pero teníamos miedo de acercarnos a ellos. Esta vez era diferente que con los rufianes, entre los rufianes y nosotros había una distancia considerable, en esta ocasión teníamos que pasar por donde estaban.
Buenos días —se me ocurrió decir
En ese momento ninguno de ellos medio una respuesta, solo seguían quietos, seguí repitiendo los mismo como 5 veces, pero ninguno me daba una respuesta.
No sabia si pasar o gritarles, estaba en un dilema que no podría responder, me había decidido les iba a gritar, hasta que un hombre calvo, con una túnica naranja, como de unos 62 nos dice —Por favor, Jóvenes no hagan ruido
¿Quién es usted? —dije con intriga
Y si lo matamos —decía Nikoru a los demás susurrando.
No, no seas ¡idiota! -le respondió Ana igual susurrando
Queremos pasar ¿se puede? —digo con intriga
¡¡¡CLARO!!!, siempre son bienvenidas las personas —me responde el señor de el principio entusiasmado
Gracias —digo aliviado —¿cómo se llama señor?
Me llamo Shu, joven —responde
Yo digo —señor Shu, ¿qué es este lugar?
Y Shu dice —para explicarles eso, déjeme le cuento una historia.
Shu nos empezó a explicar que este templo, estaba aquí antes que apareciera la gran ciudad de Akibahara, también nos dijo que ese templo era una especie de protector de la ciudad, Shu al parecer era uno de los 5 monjes mayores que lideraban ese templo, nos dijo que en estos días uno de los monjes más pequeños había contraído una pulmonía grave, pero que además de contraerla la había expendido por todo el templo…
Esa enfermedad es un virus que esta en todo el país —le dije con angustia
Shu dice —lo se joven, pero lo único que pueden hacer esos monjes enfermos es meditar para que su cuerpo se purifique
Saúl comenta —pues eso ya es algo de esperanza
Y Shu le dice —si joven, ¿apropósito cuanto se van a quedar?
No nos quedaremos Shu, vamos directo a Akibahara —digo yo
¡¡¡AKIBAHARA!!! —dice Shu exaltado
Si señor, vamos al centro de Akibahara —digo
Shu preocupado dice —no pueden ir allá, es un suicidio
¿Por qué? —digo exaltado)
¿no saben lo que paso? —me responde él
No, la verdad no —digo aterrado, pero algo intrigado a la vez
Shu nos conto todo lo que vieron los monjes desde esta montaña, habían visto a la gente aterrada por esta nueva enfermedad, la gente había saqueado todo, la población de Japón había caído en la locura, los sanos ya no se escondían en sus casas, ahora se habían vuelto unos asesinos que mataban a quien ellos veían enfermo, los policías intentaban controlar la situación, pero todos los que intentaban controlarlos, acababan muertos…
Aunque Shu nos había advertido, teníamos que ir para allá, tenia que encontrar a mis padres era mi único objetivo, le dije a Shu que comeríamos y nos iríamos directo a Akibahara
Después de escuchar eso dije —gracias por la preocupación Shu, pero tengo que encontrar a mi familia.
Bueno supongo que vas decidido. Tengan cuidado jóvenes, que Akibahara ya no es lo que solía ser en su antigüedad —nos dice Shu
Y yo le contesto amablemente —lo tendremos.
De nuevo mis esperanzas habían descendido, ya no sabia si mis padres seguían vivos o no, pero lo que si sabia era que no me iba a rendir tan fácil.
Los chicos y yo comimos algunas cosas que nos ofreció Shu, recogimos nuestras cosas y partimos hacia el centro de Akibahara.
Tenía miedo, pero a la vez estaba emocionado, no sabía que me iba a encontrar en esa ciudad, no sabía si íbamos a tener que matar, no sabia si iba a encontrar a mis padres, pero el simple hecho que tener algo de esperanza, me emocionaba a más no poder, con todas esas dudas y todo el miedo del mundo empezamos a bajar esa gran cima, en done estaba ese gran monje llamado Shu.
CAPITULO 6: LA RESISTENCIA DE AKIBAHARA
Llevábamos ya 3 horas bajando, habíamos llegado hasta la parte más baja de la montaña, solo faltaba que camináramos en línea recta hasta el final del sendero, para nuestra buena suerte, solo era mediodía, así que todo se veía muy claro. Me acordare siempre de ese momento, Kikku aferrada a mi hombro, mientras hacia un sol que nos pegaba en toda la cara, Saúl iba agarrado de la mano con Ana y Nikoru solo estaba observando, me recordó mucho a cuando iniciamos nuestra travesía, era la misma sensación de paz y calma que sentía en aquel entonces.
Seguimos el sendero admirando el paisaje como si fuéramos unos niños que estaban deslumbrados con lo que tenían delante, seguimos caminando hasta que llegamos a la entrada del sendero, de pasar de un paisaje hermoso lleno de arboles a una ciudad hecha ruinas, con cadáveres por toda la calle, cadáveres que podían fácilmente llevar días ahí, no oíamos nada, solo el silencio abrumador que estaba en el ambiente.
Vale chicos, recuerden lo que dijo Shu —digo con seguridad
Saúl dice —¿cuál parte?, en la que morimos por las pandillas o por el virus.
Nikoru le dice —Ninguna de esas porque no vamos a morir, así que cállate y ponte los guantes.
¡¡¡VOY!!! —dice con entusiasmo absurdo Saúl
En ese momento Ana no hablo, no podía creer que el recuerdo de la ciudad en la cual nació y vivió antes de irse a Osaka, se viera manchado por esto, por la anarquía, el descontrol, la aniquilación, Ana solo se pudo parar a observar ese escenario tan borroso que le tocaba ver, yo estaba impactado, una de las mejores ciudades de Japón convertida en ruinas por un ataque de personas alocadas y una enfermedad que los aterraba.
No sabíamos que hacer, si correr en medio de la pila de cadáveres o quedarnos inertes aterrados por lo que se había convertido Akibahara.
Así decidí preguntar —¿qué hacemos?
Pues seguir —dice con angustia kukki
estamos preparados para lo que sea —nos recuerda Nikoru.
No, no lo estamos —dice Saúl con miedo
Si lo estamos Saúl —dice con amor Ana
Bueno y qué estamos esperando —digo con miedo
Seguimos caminando, esperando encontrar algún ser vivo, pero no había nadie solo una pila de cadáveres putrefactos, miles de personas tiradas a la calle muertas, nosotros estábamos pasando por en medio de ellos con el nefasto olor que provocaban.
Huele asqueroso —digo lo obvio
Si, traten de no respirar, que casi llegamos al centro —dice Ana medio ahogada por el nefasto olor.
Vamos que casi llegamos —acota Nikoru con optimismo
En eso que estamos caminando por los cadáveres, se oye una voz en el fondo que grita —¡¡¡AQUÍ!!! —dice apurado
Nos acercamos al desconocido de buena fe.
El tipo dice —quítense eso, tomen —mientras lo dice nos da unas máscaras de gas caseras
Gracias —hago una pausa y luego continúo hablando —¿Quién eres?
El responde rápidamente —Algunos me llaman gar, líder de Akibahara
En ese momento nos quedamos atontados
¿eres el gobernador de Akibahara? —pregunto
No, soy el líder de las bandas que hay, ya no existe una política así aquí —nos aclara Gar
¿Ustedes fueron los que mataron a toda esta gente? —digo con miedo
Gar anonadado contesta —no sé qué historia, les habrá contado, pero está equivocada, les contare lo que realmente paso
Mientras caminábamos al lado de Gar nos explicó lo que había pasado. Una semana después del brote (según sus cálculos) la gente comenzó a morir y el gobierno no hizo nada, decía que ya no podían sepultar los cuerpos porque no había espacio para tantas tumbas, la anarquía reinaba en las calles, todos locos matando a la gente, el que era uno de los mafiosos mas respetados, se tuvo que ocultar para que no lo infectaran.
Gar nos dijo que la policía se había vuelto corrupta ya no atendían a su razón común y empezaban a matar a quien veían sin mascarilla y enfermo, no solo la enfermedad había matado a la gente, los policías habían matado a la gente.
Quedamos atontados ante los que nos estaba diciendo Gar, era definitivamente una película de terror.
¿Quedan policías? —digo tratando de ocultar mi miedo
Gar dice —quedan algunos en una base en el centro de Akibahara, esa base está vigilada las 24 horas del día, dicen que ahí hacen los experimentos con humanos —dice con rabia mientras sigue caminado
¿A dónde vamos Gar? —digo
A la base de la resistencia, es un poco grande para las pocas personas que quedamos aquí —dice bromeando
Seguimos caminando un buen rato hasta que llegamos a la base de la resistencia, eran un edificio de ladrillos naranja con aprox. 13 apartamentos. En la puerta había dos personas paradas con máscaras de gas caseras, armados como si fueran la misma milicia.
Al entrar se encontraban varias personas hablando y celebrando, las paredes del edificio estaban pintadas de color negro con grafitis que decían la palabra “Corruption Police”, fuimos subiendo por las escaleras hasta llegar a una habitación de 5 cuartos
Aquí se van a quedar, mañana tendremos una reunión en la tarde, en la nevera hay comida y agua, aséense y descansen —nos dice Gar
Yo le agradezco y él dice —No hay de que —dice mientras cierra la puerta
Que acogedor, ¿verdad chicos? —digo
Nikoru dice —muy buena hospitalidad, tiene el tipo ese
Ana también interviene diciendo —la verdad nos trató muy bien para no saber quiénes somos
Pues es verdad —dice Saúl mientras besa a Ana
¿qué creen que nos diga mañana? —pregunta kukki
No lo sé, pero abra que esperar a mañana para averiguarlo —digo
Luego de que todos nos diéramos una ducha y comiéramos, cada uno se fue a su cuarto, Nikoru se encerró en su cuarto, Ana y Saúl se fueron a dormir y Kukki y yo nos quedamos admirando el cielo en el balcón de la casa mientras estábamos abrazados
¿Te gusta este sitio? —digo con ternura
Ella dice —Me encanta el sitio
Hemos pasado por mucho… —digo bajito, más para mi, aún así ella me escucha y dice —Pues sí, pero valdrá la pena si encontramos a tus padres, sé que es difícil, pero siempre te estaré apoyando —lo dice mientras se gira agarrándome del cuello
Se que siempre contare contigo amor —le digo agarrándola de la cintura
Te amo —dice ella y yo le digo —yo igual —mientras le doy un beso apasionado
Después de eso Kukki y yo nos fuimos a dormir, esperando que se hiciera de mañana para que Gar nos dijera que quería que hiciéramos.
CAPITULO 7: LA BATALLA DE AKIBAHARA
————————-A la mañana siguiente—————————-
Estábamos desayunando todos juntos, comíamos unas arepas con jamón y queso, terminamos de comer y todos juntos nos pusimos a hablar de lo que nos quería decir Gar, pero ninguno tenía respuesta para eso.
Nikoru dice —¿qué creen que nos quiera decir Gar?
Tal vez quiera que nos unamos a ellos —digo
A mí me gusta la idea —dice con optimismo Saúl
Ana de acuerdo dice —a mi igual
Kikku comenta —este lugar me gusta es tranquilo
Yo también pienso que es un buen lugar —digo
La final Nikoru dice —Bueno yo me quedo con ustedes
Nos pasamos toda la mañana hablando boberías riéndonos y jugando. Fue un buen momento. Después que terminamos de hablar ya eran las 2 de la tarde y a esa hora llegó Gar para que hablar con nosotros, llego con dos mapas gigantes, los puso en una mesa que había en la casa y nos dijo —esto es Akibahara, aquí está el edificio vigilado por polis —dice mientras marca con un círculo en color rojo —lo que les planteo es hacer un golpe con ustedes y mi gente para poder infiltrarnos y tomarlo para que nuestros biólogos investiguen el virus, ahora este es el plano del edificio —lo dice mientras nos muestra un edificio mas o menos de 15 pisos —solo hay una entrada y no hay más, solo podemos entrar por la entrada principal que está vigilada por 8 guardias y adentro quien sabe cuántos más podrá haber. Se que suena loco, pero es por un bien mayor
Lo haré —digo con seguridad
Yo voy a donde vayas mi amor —dice con ternura y seguridad kukki
Saúl como el cobarde que es dice —yo me quedo aquí tranquilo senta… —pero no puede terminar la frase por el dolor del golpe de Ana—
Si vamos —lo contradice Ana
Nikoru dice tiernamente —yo ya les dije antes que yo voy donde estén ustedes
Saúl jugando dice —vez que si tienes tu lado tierno.
Ella amenazante dice (apuntándole con su pistola) —o te callas o te mato
¡¡¡entendido!!! —dice Saúl
Te apoyamos Gar —digo a manera de aliento
Muchas gracias, chicos mañana les explicaremos el plan completo, lo haremos en 4 días, así que mañana lo explicamos y podremos entrar en ese sitio en 4 días —dice Gar
Entre todos decimos ¡¡¡ENTENDIDO!!!
————————En la misma noche de ese día ——————
Yo ya me había ido a dormir con Kikku y Nikoru se había ido dormir en su habitación también, pero Saúl y Ana estaban en el balcón del apartamento hablando, yo me levanté para ir al baño, pero sin quererlo estaba escuchando lo que hablaban Saúl y Ana.
Saúl le decía —¿Ana me amas?
Ella segura de si le dice —claro que te amo
El dice —es que siento que a veces me tratas como un don nadie
Yo te amo con toda mi alma, pero es que a veces te comportas como idiota —dice Ana riendo —pero te amo y nunca dejare de hacerlo.
Saúl le dice —Gracias morena
Ana dulcemente le dice —de nada mi amor…
Apenas Ana dijo eso me fui corriendo a mi habitación a contarle a Kukki sobre lo que había escuchado, después de decirle y hablar sobre eso seguimos durmiendo.
———————–A la mañana siguiente——————————
Estábamos charlando en el sofá del apartamento, hasta que tocan a la puerta. Era García y dijo —como están chicos
Hola Gar, ¿qué tal? —le conteste
Todo bien, vengo a discutir el plan
Adelante —le digo
Sentados ya en la mesa gar nos explicaba que la infiltración iba a ser así —Lo que vamos a hacer es lo siguiente, vamos a ir 30 personas, ustedes vendrán en el frente conmigo eliminaremos a los guardias y entraremos. Al estar dentro una de ustedes tiene que arriesgarse y tirar la granada y la molotov, para que una explote y otra propague el fuego así le dará paso entre todos los guardias y tendremos posibilidad de llegar al jefe que esta en el último piso, ¿algún problema con el plan?
Con el plan no, ¿pero tienes un buen francotirador? —pregunto
No ¿por? —pregunta él.
Saúl ya sabes que hacer —digo yo.
Y el me dice —ohhhhhhh si, van a ver esos guardias lo que es puntería (dice con entusiasmo)
ok —dice Gar riendo —si no les importa me retiro
Nikoru le agradece diciendo —gracias Gar
Y él dice —no hay de que
——————————Esa misma noche——————————
Kikku se había quedado dormida en mi regaza mientras estaba en el balcón, mientras le estaba acariciando la cabeza Nikoru se acercó a hablar conmigo
¿qué onda Nikoru? —pregunte
Ella dice —nada nuevo —mientras bebe una cerveza
Yo curioso le digo —¿Te puedo hacer una pregunta Nikoru?
claro —dice con amabilidad
Finalmente, lo suelto —¿Como fue tu infancia?
Ella suspira y dice —fue un poco difícil, supongo, yo nací en una familia de pobreza absoluta, no teníamos casi nada, pero mis padres siempre hicieron todo para apoyarme, cuando era pequeña me hacían mucho bullying así que me aislé y no le hable a nadie desde primer año, hasta que los conocí a ustedes.
¿te hacían bullying también en secundaria? —pregunto intrigado
Pues sí —dice —tal vez muchos lo considerarían grave, pero a mí no me importaba porque no hablaba con nadie.
Ya veo —dije mientras acariciaba el pelo de kukki—tuviste una infancia un tanto complicada
Pues sí, pero cuando ese día te acercaste a hablarme me sentí contenta de que alguien notara mi presencia, de que alguien por fin me tomara en cuenta —dice mientras mira a la luna con una sonrisa
Bueno ahora eres uno de nosotros y siempre te apoyaremos —digo mientras sonrió
Seguimos hablando mientras tenia a Kikku recostada en mi regazo, ya era bastante tarde y Nikoru le había dado sueño así que se fue a dormir, cuando Nikoru se fue a dormir, yo cargue a Kikku hasta la habitación y nos fuimos a dormir.
—————————–Dos días después——————————-
Era el día de llevar a cabo el plan, estábamos nerviosos y aterrados, no sabíamos que iba a pasar ni que había a haber adentro, solo sabíamos que después de esto habría un cambio para bien.
¿Tienen todo listo chicos? —pregunto
Si, tengo el franco preparado —dice Saúl
Pistolas cargadas y cuchillos en manos —dice Nikoru
Ana también dice —Metralleta lista
Kikku dice —También mi franco está listo
¿Esta segura de ser francotirador? —le pregunto
Tranquilo, le cuido la espalda a Saúl —dice mientras se ríe y me da un beso en la mejilla.
Cuídate —le digo mientras le beso las manos.
Morena cuídate —dice Saúl abrazándola
Cálmate idiota —dice ella mientras se ríe amablemente
chicos ya hay que irnos —nos apura Nikoru
Cuando llegamos abajo del edificio Gar nos explico que los francos se iban a ir a un edificio a media cuadra del edificio y los demás nos íbamos a ir en frente del edificio hasta que Gar diera la señal para que los francos dispararan.
Una hora después seguimos esperando a que Gar diera la señal
¿Preparados los francos? —dice él suso dicho por la radio
Preparados señor —se oye la voz de Saúl a través de la radio
Si es así, ¡¡¡FUEGO!!! —por fin dio la señal
Se oyeron los estruendos de los francos vimos como los guardias de la puerta caían desplomados en el piso, yo estaba con Ana y Nikoru mientras avanzábamos hacia la puerta
vamos chicas que ya casi llegamos —decía yo entre todos los disparos
Nikoru me apoyo y dijo —estamos cerca vamos
Nos tardo 20 minutos para llegar a la puerta porque la cantidad de guardias que salían era impresionante ya solo me quedaban 4 cargadores de la metralleta y 2 de la pistola, a Nikoru y a Ana también se les estaban agotando las balas, pero por lo menos estábamos dentro del edificio, una vez dentro seguía la siguiente parte del plan
¿Nikoru esta lista? —digo gritando
¡¡¡SI!!! —dice emocionada y gritando
Hazlo —digo
Nikoru se asomó desde el sitio que estábamos ocultos y con sus dos brazos lanzo una granada hacia unos guardias y con el otro le encendieron un molotov y lo lanzo a otros guardias que se encontraban en otra parte, después de unos segundos la granada había hecho ¡¡¡PUM!!!, vimos como todos los guardias que estaban en ese lado habían salido volando muertos la granada se había llevado a unos 33 guardias con ella el escenario era tan sangriento que daba asco, mientras tanto los guardias que estaban con la molotov se estaban quemando vivos y poco a poco los 20 hombres que habían de aquel lado iban cayendo muertos por aquel fuego provocado por la molotov que les había tirado Nikoru creíamos que era todo pero seguían bajando los guardias y ya nos quedaban pocas balas
¡¡¡SUBAN USTEDES DOS, YO ME QUEDO AQUÍ CON GAR!!! —dijo Nikoru
Nosotros dos nos negamos y dijimos a unísono —ven con nosotros
Ni, yo los cubro vayan al ascensor y suban al último piso
Ok —dijimos finalmente
Ana y yo corrimos hasta el ascensor Nikoru y Gar nos cubrían de todos los policías, nuestro objetivo era llegar al ultimo piso y matar al jefe de esta corporación, logramos subirnos en el ascensor con la ayuda de Nikoru y Gar mientras que ellos y todos los demás luchaban para no morir contra aquellos guardias
¿estarán bien? —dice Ana preocupada
Claro que estarán bien —digo sonriendo)
Estábamos en el ascensor esperando que llegara hasta el piso 24 donde enfrentaríamos al jefe de esta organización tan mala.
CAPITULO 8: CURA
Estábamos Ana y yo en el ascensor esperando el momento en el que se abriera esa puerta y diéramos con el jefe de esta nefasta compañía.
¿Nerviosa? —digo jugando
Mucho —dice nerviosa
Si es nuestro último día quiero que sepas que fuiste la mejor cuñada/amiga del mundo —digo con ternura
Tu igual —dice mientras me sonríe
En ese preciso momento se abrieron las puertas, teníamos las armas en la mano y cuando vimos alrededor había guardias firmes como estatuas, no nos apuntaban ni nos miraban solo se quedaban quietos como piedras, fuimos caminando poco a poco muy pegados cubriéndonos las espaldas, llegamos a una gran puerta de roble en la cual un guardia vestido de mayordomo nos estaba esperando
Buenas jóvenes soy Alfred, el señor los esta esperando adentro, ¿me permiten saber sus nombres? —dijo el tal Alfred
Soy Ali —digo con desprecio
Soy Ana —dice ella mientras lo ve con una mirada de amargura total
Adelante, jóvenes Ana y Ali —nos invita a pasar Alfred mientras abre la gran puerta de roble
Cuando Alfred abrió la puerta, había una habitación gigante hecha con paredes de árbol de sauce, con unas librerías de tamaño descomunal, la habitación tenia un tapete de zorro polar en el medio de la habitación y más atrás del tapete había una mesa donde estaba una computadora y una silla volteada hacía una chimenea que tenía detrás.
Alfred informa nuestra llegada —Señorita ya llegaron
¡¡¡BIEN!!! —dice con entusiasmo la chica adentro, mientras se gira
¿Quién eres? —pregunta Ana
Una chica que va al grano, ¡¡¡ME GUSTA!!! —dice con alegría —mi nombre es Sherlock y lo sé soy una mujer, pero es mi nombre en clave —dice relajadamente
No sabia que estaba pasando esta mujer con el pelo castaño y ojos verdes nos estaba tomando el pelo
O me explicas que pasa o Ana y yo les volamos los sesos —digo un poco alterado
Cálmate muchachón tengamos una conversación sensata —dice mirándome de abajo hacia arriba
Ve al punto y listo “Sherlock” —escupe con desprecio Ana
Vale que me desvió de los temas con facilidad, disculpen. Pero ahora lo que va a pasar es que mis hombres y yo nos vamos a retirar, ya tenemos lo suficiente para irnos —dice con una sonrisa
y que te hace pensar que te haremos caso —digo con furia
Pues los hombres que tienen detrás de la puerta —dice riéndose
entonces ¿qué, te escapas y ganas? —pregunta Ana
Básicamente señorita —dice Alfred
Estábamos parados, mientras aquella mujer y el mayordomo salían de la habitación, Ana y yo veíamos a esos dos con una cara de odio, desprecio e ira, pero no podíamos hacer nada
Adiós Ali —dice Sherlock mientras me lanza un beso
Te vamos a encontrar y matar —dice Ana muy molesta
Inténtelo —dice mientras ríe
Cuando esos dos salieron de la habitación los 10 hombres que estaban afuera entraron a la habitación desarmados
¿Lista para luchar? —le preguntó a Ana
Siempre —dice con seguridad
¿yo 5 y tú 5? —digo
Hecho —me responde
Nos libramos a golpes con todos esos guardias Ana apenas comenzó el combate ya había derrotado a uno, yo me distraje un segundo y me agarraron me estaban golpeando en el estómago, Ana estaba muy ocupada como para ayudarme así que lo único que podía hacer era resistir
¡¡¡AHHHHHHHHH!!! —digo con dolor
Resiste ya casi termino —dice mientras la rodean 3 más
¡¡¡NO IMPORTA, CORREEEEE!!! —digo mientras escupo sangre
Suena un estruendo y le vuela los sesos al guardia que me golpeaba
Entonces aparece Nikoru y dice —nadie morirá hoy
Cuando Nikoru llego caí desplomado en el piso, pero no me rendiría, como pude me levante y comencé a patear a los guardias mientras que Nikoru les disparaba.
Llegaste a tiempo —digo mientras lanzó golpes a diestra y siniestra
Sabía que me necesitarían —responde ella con voz socarrona
—————————–12 minutos después —————————
¿esos son todos? —digo agotado
Creo que si —dice Ana jadeando
¿Se encuentran bien? —Nos pregunta Nikoru
Yo si —digo
También estoy bien —dice Ana
Le explicamos a Nikoru lo que había pasado y nos conto que ella oyó que un helicóptero había salido, pero lo más importante que unos minutos después que nos fuéramos, Gar agarro una granada y se la lanzó a los guardias que quedaban, cuando vieron que todos murieron él le dijo que subiera rápido y eso hizo
Después que nos contamos, nos dimos un abrazo grupal
Vamos a bajar que nos deben estar esperando todos —digo con una sonrisa en mi cara
Ya estábamos abajo del todo, Kikku me estaba esperando apenas me vio me dio un abrazo enorme
¡¡¡ALIIIIIII!!! —grita entre lágrimas mientras corre para abrazarme
Estoy bien calma —digo mientras le acaricio la cabeza
¡¡¡MORENAAAA!!! —grita Saúl mientras la abraza
Cálmate estoy bien —dice ella amablemente
Qué bueno que están bien chicos, por cierto, cuando estaban allá arriba nosotros encontramos a los pacientes de prueba, Ali ve a ver si alguno de ellos son tus padres —Dice Gar
Fui yo solo al lugar que me indicaron estaba nervioso por fin iba a lograr ver a mis padres.
Llegué al lugar y los vi eran mis papás estaban ahí sentados, esperando
¡¡¡MAMÁ, PAPÁ!!! —digo llorando
Ellos emocionados también dicen —¡¡¡HIJOOOO!!!
Nos acercamos los tres y cuando estábamos lo suficientemente cerca nos dimos un abrazo entre los tres, un abrazo que nunca olvidare, por fin los había encontrado después de tanto, estaba reunido con ellos.
Mamá, Papá que les hicieron —digo entre lágrimas
Es una historia larga hijo —dice mi mamá mientras se limpia las lágrimas
Mis padres me contaron que ese 27 de enero que salieron a comprar, un policía los agarro y los arresto, no sabían porque, pero se los estaban llevando, tardaron una hora de camino, cuando llegaron a su destino los sacaron del coche y les explicaron que los iban a encerrar en una habitación donde un doctor vendría todos los días a revisarlos, me contaron que el doctor cuando les agarro confianza les dijo que esto se llamaba experimento Discord.
Era un experimento en el que probaban con células de otras personas para lograr fortalecer una enfermedad que le estaba dando a todo el mundo en Japón.
¿y cómo los trataron? — digo
Mi mamá dice —nos clavaban agujas a cada rato, pues bien
Perfecto, vengan hay que irnos de este nefasto sitio —digo yo
Nos fuimos de ese lugar, les dije a mis papás todo lo que habíamos pasado, lo que había pasado con Kukki, lo que había vivido con mis amigos, las emociones que había sentido.
Llegamos arriba y me abrace con todos mis amigos, recordando todo lo que habíamos hecho para llegar hasta aquí todo lo que habíamos pasado y todo lo que habíamos vivido, todo lo que hablamos y sentimos, pero mas importante que nos habíamos vuelto todos los mejores amigos
Ahora nuestros objetivos habían cambiado, nuestro principal objetivo ahora era encontrar y matar a Sherlock, lo vamos a lograr y no descansare hasta que ese ser muera por mis manos
——————————EN UN HELICOPTERO————————–
¿cuándo vamos a llegar Alfred? —dice Sherlock quejándose
Si Alfred, ¿cuándo? —dice la chica a su lado Sherlock
Ya casi llegamos a la base señoritas —dice Alfred
¿Y viste a alguno que te interesara? —dice la chica al lado de Sherlock
¡¡¡AMIGA!!!, me encanta uno, creo que se llama Ali —habla Sherlock
Tendré que conocerlo amiga —dice la amiga de Sherlock
Y lo harás Watson —le dice Sherlock
Eso espero —dice Watson soltando una risa macabra
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