He descubierto que
puedo reinventarme
mirarme a mí mismo,
descubrirme como soy,
a cada momento,
ya no necesito la mirada
de aprobación o de rechazo
de alguien para ser;
por el contrario dejo los rincones
para subirme al escenario de la vida
y ser el gran protagonista
no puede ser que quiera una vidita,
quiero una vida normal;
siento que el niño que fui
le está dando paso
al hombre que soy ahora,
siento la metamorfosis
empiezo a salir de ese lugar
cómodo en el cual estaba,
donde nadie me demandaba nada.
y ya no soy un minusválido,
para que atiendas mis reclamos
de niño abandonado.
aprendo a sentirme como adulto,
donde crecer también es sufrir
y, tal vez, si tú quieres,
puedas conocerme,
ya no como el niño que fui,
sino con la persona que soy ahora
y quizás puedas enamorarte de mí
desde otra perspectiva.
© Daniel Mariscal
Patagonia-Argentina
Mayo 2017
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