Dulce es tu sonrisa,

dulce es tu mirada.

Siento tu presencia,

me siento acompañada.

Amado mio,

mi amor eterno.

Te miro y sonrió,

te acercas, me alejo.

Tu pelo castaño,

y tus ojos hermosos

provocan algo que no conozco.

Siento algo adentro,

cierro los ojos

no me detengo.

Sigo sin miedo,

observo tus ojos,

que miran a los míos.

Y yo solo sonrió.

Sin pensar más,

de la nada me detengo.

Abro los ojos,

no es lo tengo.

Recuperó la cordura

y lo comprendo,

no es lo que quiero,

sino lo que tengo.

Pero pregunto,

¿qué es lo que tengo?

Tengo un guerra,

tengo deseos.

Tengo esta guerra que no finalizá,

tengo dolor que no se terminá.

Sujeto su arma,

pero no comprendo.

¿Qué haces mi amor?

Salte del medio.

No me lo permito,

no lo lastimaría.

Pero no tengo de otra,

la cosa esta fría.

Sujeto su mano junto a la mía,

cierro los ojos,

ya no respondía.

No oigo ya nada,

solo mis latidos.

Un momento,

no oigo nada,

esta guerra ya terminá.

Gracias, C.V.

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