Cae otra vez la lluvia y esta vez no moja
cae incesante como gotas de tinta transparente
y en un interminable repique aquí y allá
escribe poemas sobre la polvorienta tierra
la llena de bellas metáforas que del cielo nacen
y de a poco la tierra le devuelve el gesto
con cada gota deja ver los versos que se escriben
ellos hablan de esperanza y nuevos atardeceres
La lluvia como embajadora del cielo baja
la tierra como anfitriona colosal la recibe
ambas en ese intercambio de letras descubren
que todo lo viejo se muda, se transforma y vive
que todo lo nuevo nace y se hace fecundo
que el cielo y la tierra se pertenecen y se consumen
la lluvia cesa, la tierra fresca de la alegre escritura respira
hace brotar y pone en relieve todas aquellas bellas palabras
así se forman bosques, lagos, valles, y seres
porque la palabra es creadora, la letra es constructora
porque el cielo es a la tierra como la tierra es al cielo
ambos dominan en el espacio y son gemelos.
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