Ya te enseñe el camino,
Es hora que lo comiences a transitar.
El sendero siempre será el mismo
Y sólo existen dos,
Tu deberás elegir por cuál deseas caminar.
Mas siempre ten presente
Lo que en uno y otro hallarás.
Nada de otro mundo,
Sólo cuestiones que por tu cuenta
Tendrás que superar.
Ya conoces el camino;
Es tu hora de empezar,
De ver con tus propios ojitos
El sol y las estrellas;
La luna y su majestuosidad.
De recorrer un poco más el día
Y deslumbrante con la noche,
Y sus misterios sin igual;
Aún cuando debas de cuidarte,
En ella un poquito más.
Quien sabe que demonios,
Espíritus y fantasmas
A la vuelta de la esquina
Te puedas topar.
Sólo se precavida en tus pasos;
Tampoco hay mucho más.
Ya conoces el sendero
Y ya lo has recorrido tiempo atrás;
Y muy bien sabes por donde
Debes de pisar,
Más aún, conoces lo que sucede
Si mal pasos das.
La vida nos suele colocar muchas trampas
Para confundir y engañar,
Algunas ya has visto;
Pero existen otras tantas más.
Cuando te surja una duda
Y no sepas a quien consultar;
Recuerda cuando caminabas
A mi lado y de mi mano;
Quizás, ya lo hayas resuelto
Tiempo atrás.
Errores tuve a montones,
Y tal vez, algunos aciertos mas;
Sólo asegúrate de no cometer
Los mismo, será tu presente
Y del nadie más.
Ya basta de palabras,
De versitos y demás.
Ha llegado tu momento
Y debes comenzar a tropezar,
Sólo recuerda siempre…
Una y mil veces te caerás,
Más nunca te des por vencida;
Levántate y vuélvelo a intentar.
Nadie nació sabiendo;
Aunque con los años
Muchos sabios la vida da.
Equivocarse es parte de este juego;
Sólo que una única vida nada más en ella hay.
N.S.N.’79.-
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