Yo sola (poema)

Son la una con treinta y cuatro

yo esperándote hace ya un rato,
triste, porque sé que nunca más
estarás en mi cuarto
y te quedaras pasadas la cuatro.

Son las tres con treinta y seis
mis ojos se parecen a la lluvia de ayer
sinceramente ya no sé si quiera ver,
sentir, soñar o siquiera aprender
sabiendo que no estás aquí
estoy convencida de que no quiero volver a sentir.

Ya es por la tarde
y no paro de pensarte
sigo escribiendo, pensando que así
podría volver a tocarte y besarte
aunque sea por un mínimo instante.

La noche llego
y de nuevo sin ti estoy
sintiéndome sola, apartada,
sin vida, y hasta me arriesgo a decir,
que sin alma.

Otra vez es la madrugada
y me encuentro sola tirada en mi cama
esperando tu regreso, ese hermoso suceso
que aunque fuese imposible,
para mí era de lo más creíble.

Otro día, otra semana, otro mes y miles de madrugadas.
Yo sola, llorando como boba, esperando a que regresaras.
No pasó, y no pasará de eso segura ya hay que estar.
Por ello una nueva vida hoy vamos a empezar.