Cuando los días se acaban

Episodio 1 «Introducción»

Normalmente una persona que vive experiencias de la muerte, tiende a desaparecer, a perder su personalidad o esencia, quizá más bien a desear que desaparezca. Yo no comprendo la inmensidad de mi propia esencia, ni siquiera sé si podría interpretar la locura de mis sentimientos y de mis pensamiento; Aun así conociendome tan poco como lo hago, logró comprender que estoy sintiendo que mi corazón está entre mis manos y que cada día se estrechan más y más, solo unos pocos podrían comprender lo que estoy experimentando, lo que significa contener el enojo, arrepentimiento, compasión, amor y odio en un mismo «jarrón».

Existir en un mundo incomprensible nos hace más incomprensibles aun, provenimos de creencias, poderes y razones que no se entienden; ¿Por qué deberíamos entender la existencia?, la vida y la muerte, el nacimiento y la vejez. Los relatos de la biblia, mi firme creencia en Dios, me han dado valentía sin embargo no tengo muchas respuesta y tampoco la ciencia, lo cierto es que acabo de experimentar uno de los momentos más tristes de mi vida, La Muerte. Nadie comprende la vida hasta que llega a su fin, ¿para qué existo?, ¿Cuál es mi propósito?, ¿Qué decisión debo tomar? y ¿Cómo debo ser?. Sin embargo cuando llega la muerte el dolor es tan profundo que no solo responde todas estas preguntas, sino que deja una incógnita aún más dolorosa, ¿Era tiempo de morir?, esta pregunta me la dejo a mi y a mi familia, la cual hoy sufre porque no encuentra un consuelo que responda a preguntas que el corazón hace.

¿Han sentido que les rompen el corazón?, claro que sí, cuando un hombre o una persona X nos lastima nos hiere el alma, la «tusa» nos dura meses y hasta años. Ahora han sentido que el corazón no cabe en el pecho?, ¿La ganas de llorar y de lamentar profundamente algo?, yo lo estoy sintiendo. Con el corazón roto decidí escribir esto, porque espero superar mi dolor y recordar a mi hermano como lo mejor que me pasó en la vida, y es que de pequeños eramos muy unidos por razones correctas e incorrectas pero era nuestro secreto. Lo mejor de todo esto, es recordar que cuando éramos pequeños, jugábamos a la mujer responsable «yo» y el bebe juicioso «el», y digo que JUGÁBAMOS, porque en realidad fue divertido, yo lo esperaba fuera del colegio y al salir el me tomaba de la mano, caminábamos más de 2 KL hasta la casa, todo el camino era jugando y cuidando que no le pasara nada. Como olvidar que tuve entre mis brazos un hermanito pequeño que me enseño a soñar, ser responsable y a proteger a mi familia; Recuerdo también que muchas de esas veces de protegerlo, lo descuidaba y se caía, yo debía correr a auxiliarlo, porque se lastimaba y lloraba mucho, nunca podría olvidar mi experiencia con el.

Hoy después de un mes de duelo, el ya no está conmigo, y me pregunto ¿por qué?, nadie sabe decirlo, yo solo concluyo que es la voluntad de Dios, ¿qué es la voluntad de Dios?, mi hermano menor se ha ido y si es la voluntad de Dios, es posiblemente la más dura y el castigo más vil que he conocido en mi vida. No por esto culpé a Dios, pero hoy necesito respuesta que no encuentro ni en el conocimiento, ni en el consuelo.