OJOS ROJOS

Había un grupo de cuatro chicos muy amigos todos, que todos los días salían a visitar una casa abandonada a fuera del pueblo para hacer los deberes porque era un refugio para ellos, tipo club de amigos. La tenían muy limpia por dentro ya que eran unos buenos chicos muy educados. Un día en clase uno del grupo puso encima de la mesa un periódico que estaba escondido en la casa abandonada. Al verlo los demás se quedaron boquiabiertos de la noticia que salía en el la portada del periódico, al salir de clase fueron a investigar lo del periódico a la casa misteriosa, estuvieron investigando y estudiando lo que les habían mandado en clase, por la noche uno del grupo investigo en el móvil la historia del pueblo que estaba relacionado con la portada del periódico que vieron en el cole y lo mando por el grupo de mejores amigos. A la mañana siguiente los demás vieron la foto que les había mandado. Cuando llegaron al colegio a la mañana siguiente, empezaron a comentar sobre la foto, el más valiente dijo:» hay que ir a ese pueblo donde sucedió esa catástrofe y que nos digan que sucedió, así se lo contaremos a la profesora y nos pondrá buena nota de clase, ¿os parece bien?», los demás aceptaron ,lo prepararon todo y les dijeron a los padres que se iban a un pueblo para hacer un trabajo de clase. Cuando llegaron al pueblo había poca gente y muchas casas, les parecieron extraño verlo así pero después pensaron de que era un pueblo y la gente joven se iba a las ciudades a trabajar y estudiar, llegaron a un hotel y pidieron dos habitaciones con dos camas, en el bar fueron a tomar algo y así preguntar a la gente sobre el periódico, cuando se lo preguntaron a un señor no le respondió ni la gente del bar tampoco porque tenían miedo de lo que le habían enseñado del periódico, entonces los chicos se fueron a dormir a las habitaciones muy intrigados por el silencio de la gente.

Por la noche un chico del grupo de los amigos escucho unas garras arañando la puerta de su habitación, por la mañana se lo conto a los demás, salieron a la calle y había un cartel en la plaza del pueblo que ponía (PERSONA ASESINADA), la gente del pueblo ya sabían lo que era porque lo habían vivido hace tiempo pero no lo podían contar para no alarmar a la gente que venían al pueblo, pero los chicos estaban intrigados por lo que pasaba y querían saber la verdad pero nadie decía lo que sucedió hace tiempo, los chicos estaban preocupados por el asesinato de la persona. La policía se puso a investigar el caso para que los chicos se quedaran tranquilos y no se preocuparan, hicieron el día como todo los días normales sin que hubiera pasado algo, a la hora de cenar escucharon un grito a las afueras del pueblo y toda la gente del bar donde estaban cenando se pusieron a mirar por las ventanas y las que no cabían salían a la calle a ver lo que pasaba pero nadie vio de donde salió ese grito ni sabían porque había sido. Entonces la gente volvió a las mesas para seguir con su cena, cuando los chicos se fueron a las habitaciones las cerraron con llave por si el asesino pasara por sus habitaciones, ya estaban dormidos pero de repente se escucho otra vez el grito, se despertaron los dos amigos de una habitación y miraron por la ventana y se escucho otra vez el grito y ya pudieron saber que venía de la montaña, a la mañana siguiente lo comentaron con los demás que estaban en la otra habitación, no les dio miedo porque pensaban que solo era un grito normal y corriente, pero fueron a mirar al monte a verlo que había sucedido en la noche, llegaron al monte y empezaron a buscar la persona que había gritado, pero no la encontraron, al cabo de un tiempo vieron a lo lejos una cueva pequeña y oscura, decidieron entrar con la linterna del móvil, vieron cadáveres de animales y humanos, entonces se asustaron y salieron corriendo del lugar hasta el hotel donde se alojaban, reflexionaron lo que vieron en la cueva y que habían sentido en aquel momento pero ninguno de los cuatro abrió la boca porque lo que habían visto era muy extraño «¿Porque había un cadáver humano en esa cueva?» se preguntaban los cuatro en su cabeza no podían entender lo que habían visto en la cueva y el más valiente dijo que seguro que ese cadáver humano seria de hace mucho tiempo, los demás le preguntaron: «¿y de los animales?»,decidieron salir a dar una vuelta. Dando la vuelta a la manzana del hotel se encontraron con una sombra extraña que parecía que les miraba fijamente a los cuatro, la figura parecía estar enfada y de mal humor siempre, momentos después sonó un cuerno cuando la figura extraña desaparece de la pared inesperadamente, los chicos sorprendidos por aquella sombra que se les había aparecido, después fueron hacia el lugar donde habían tocado el cuerno, cuando ya llegaron ven que se están preparando los hombres para ir a cazar al valle, se alistaron en la ficha y fueron a pedir un arma, terminaron de comer y salieron a la caza, ya en el monte se separaron del grupo y fueron solo los cuatro hacia la cima de la montaña para ver a los demás cazando animales del bosque, se hizo de noche y se quedaron arriba en el monte mientras los demás se iban hacía el pueblo cuando de repente desaparece uno de los amigos en el bosque sin dejar rastros, no le escucharon desaparecer en el momento justo de su desaparición en el monte, los amigos que quedaban en la montaña pensaron que se había ido al pueblo ya a descansar y dejar el arma que llevaba en la mano, ya en el pueblo los tres chicos que quedaban dejaron las armas y preguntaron al que estaba al mando si le había visto llegar a su amigo y dejar el arma, pero el chico dijo que todavía no había llegado al pueblo, caminaron hacia el bar por si estaba allí, pero tampoco estaba en el bar, ni en la habitación. Se quedaron asustados y extrañados al mismo tiempo. Subieron a las habitaciones para cambiarse la ropa que llevaron cuando se fueron a cazar, después de cambiarse se fueron al bar a cenar algo mientras pensaban que le podría haber ocurrido a su compañero desaparecido sin dejar rastro por ningún lado.

A la mañana siguiente, dos de los chicos que compartían habitación se levantan, van a la habitación donde estaba el tercer amigo, que estaba solo en la habitación ya que la compartía con el muchacho que había desaparecido el día anterior. Al entrar no había nadie, la ventana estaba rota y abierta y la habitación estaba desordenada; miraron por la ventana, había pasado lo mismo en el caso anterior, desaparecido sin dejar rastro, solo la habitación destrozada y en malas condiciones.

Bajaron a la recepción del hotel para contarles lo que había sucedido en la habitación de su amigo, ya en el bar desayunaron y pensaron en ir a la cueva que habían visto por si estaban allí los dos.

En la cueva no los vieron, se preocuparon aun más. En un momento se sintieron observados por una cosa extraña, que les inquiría atentamente detrás de una roca, eran unos ojos rojos que les miraban con enfado, el más valiente dijo que será un animalillo que les observaba con curiosidad y que no se tenían que alarmar.

Pero en ese momento el animal se abalanzo sobre el mas corpulento de los dos amigos, solo vio una enorme masa negra surgir de la nada y lanzarse sobre él, el terror que le enfundaban aquellos ojos rojos lo dejo inmovilizado. Su amigo corrió hacia la salida de la cueva. El miedo se había apoderado de él a pesar de ser el más valeroso de los cuatro amigos, a penas conseguía ver la luz del día, solo veía aquellos infernales ojos rojos, no encontraba la ansiada salida, solo escuchaba el aullido de aquel animal, le traspasaba y no le dejaba pensar en cómo escapar de ese lugar tan terrorífico. El latido de su corazón cada vez era más intenso, casi no tenía fuerzas para seguir corriendo, le faltaba el aliento y le costaba respirar, pensó por un momento que el animal le alcanzaba y se sintió desfallecer, se le seco la boca y el miedo le bloqueaba.

Cuando pensaba que todo estaba perdido y que nunca más podría ver a sus padres, ni volver a su casa, en ese momento en el que creía que era su último aliento, sonó el despertador y de un salto comprobó que todo aquello solo había sido su peor sueño.

No podía imaginar el placer de levantarse por la mañana y encontrarse en casa, el olor del café recién hecho de su madre y las magdalenas recién horneadas por su abuela le devolvieron a la vida. Al oír los ladridos de su perro toby sintió que el corazón volvía a latir en su cuerpo, que alegría escucharle, se asomo a la ventana para verle y fue entonces cuando algo se movió tras los arbustos y le congelo, simplemente unos ojos rojos.