Liberación de la rima

Aún no te conozco, pero te intuyo

Presiento tu cuerpo, tu sexo…

Sé que un dia vendrás a mi

con tu blanquisima piel

y tus negrísimos ropajes.

Mezcla de virgen y prostituta

De curadora y asesina,

Tu único beso, primero y último,

de fidelidad extrema.

Amiga de alma oscura,

antigua como la vida.

Dejáme beber de tus pechos,

que quitan el aliento.

Desnudá tu piel,

ávida de carne palpitante,

apropiate de mi color y mi sangre.

Vierto mi semen en vos,

esperando redimirte.

Mi alma se eyacula en el último aliento

Caigo en la inmensa negrura de tu mirada.

Y ya no soy.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS