Era una noche preciosa , con la luna llena brillando como si tuviera miedo a apagarse ; la miré un instante y en ese lapso olvidé todo, incluso lo que me motivo a salir de casa y me retenía en el umbral de lo que creía era mi hogar , sin embargo , el frío nocturno me pegó de golpe y devolvió todo lo que sentía segundos atrás.
Cerré la puerta con mas voluntad que fuerza y avancé como flotando por inercia ; con cada paso que daba más dudas me carcomían sobre a dónde me dirigía o qué debería hacer , solo seguí caminando como esperando a que mis pies me dieran la respuesta. Me sentía mareado y con un calor que iba creciendo , aquello sea lo que sea que te creaba el «nudo» en la garganta , se proliferó rápidamente como una explosión y unas lágrimas se escaparon de mis ojos , mas no permitiría que se dieran más fugas nunca más y cerré los ojos con fuerza esperando que todo desapareciera sobretodo las lágrimas y el dolor pero solo una de ella se fue cuando abrí los ojos.
No estaba seguro de cuánto llevaba caminando y mucho menos de dónde estaba , fue un reflejo en el charco que acababa de pisar lo que me hizo levantar del todo la cabeza y enfocar la mirada perdida que tenía. La luz neón me hizo pestañear un par de veces y lo único que llegué a distinguir fue la palabra bar ; ¿será esta la respuesta de mis pies? me pregunté.
Sin cuestionar mucho más ingresé al local y a pesar de ser casi el amanecer , la poca iluminación aún daba cobijo a unas 9 almas. Me acerqué a la barra y me senté donde más oscuro estaba , de alguna manera temía que alguien me reconociera aunque por extraño que parezca no me importaba , rara mezcla de sensaciones; que mas dá.
Pedí una botella de lo más fuerte que hubiera y cuando entrecerré los ojos mientras me sentía desvanecer ; la botella llena se transformó en cuatro vacías , la barra se mecía cual barco a la deriva ,pero no le di importancia fue que por un instante me pregunté con qué dinero pagaría todo , duda que se desvaneció cuando vi a un encapuchado al lado mio cuya ropa le llegaba y cubria los pies. No sabia cuánto llevaba tan cerca mio , no obstante, mientras divagaba con las dudas el encapuchado movio levemente su cabeza hacia mi y puso otra botella al frente mio; con extrañeza y duda pude notar que su mano era muy blanca y sumamente delgada a pesar de la poca visibilidad , pero no llegaba a ver su rostro al fin y al cabo no me importaba en lo más mínimo ver sus facciones.
Tome la botella y atiné a decir: «A tu salud» , tomé un gran sorbo , baje la botella con una fuerza inconsciente que de pura suerte no reventó al estrellarla con la barra ; fue en ese momento donde escuche claramanete que el encapuchado ,casi inerte, dijo: «Aún no respondes sobre el viaje que te propuse hace rato» , su voz me transmitió una calma que deseaba con todo mi ser y anhelaba que siguiera hablándome en busca de esa consoladora voz, era como si lo conociera de hace mucho; salí un poco del transe y giré la cabeza a todos lados preguntándome si eran para mi las palabras ,no distinguí a nadie cerca de nosotros y las dudas fueron aumentando ; ¿Hace mucho que hablo con él? , ¿Qué le dije? , ¿Cuál viaje? , ¿A dónde? , ¿Lo conozco realmente de algún lugar? Mientras me ahogaba buscando respuestas habló de nuevo: «No tienes que responder ahora ,pero por lo que me contaste necesitas mucho de este viaje; ve al baño a lavarte la cara para que lo pienses con algo más de lucidez pero no olvides que la invitación formal está en tu bolsillo». Apenas terminó de hablar mi cuerpo empezó a moverse , mas yo no lo controlaba solo se movía y ya , toda mi voluntad se vio mermada por su voz. Me dejé llevar hasta el baño y fue ahí cuando mi cuerpo volvió a mí , algo agitado y confundido recordé lo último que dijo el encapuchado , metí la mano al bolsillo buscando conseguir algo que le dé sentido a todo lo que estaba sucediendo y mientras estaba con los ojos entreabiertos mirando la nada , sentí en la mano un frío metálico que estuvo ahí todo el tiempo incluso desde que salí de casa ; tomé la dichosa invitación y como por arte de magia todo obtuvo cierta coherencia , esta revelación dibujo una pequeña sonrisa en mi rostro , por que sabia que finalmente tenia una respuesta a qué es lo que debería hacer para sentirme mucho mejor.
Miré por un momento la respuesta a mis males que yacía en mi mano y finalmente comprendí que la oferta de quien recién me di cuenta ,era un gran amigo, era lo mejor que podía hacer ; algo tembloroso pero con una profunda tranquilidad decidí aceptar la invitación y con el movimiento de un solo dedo empecé el viaje con mi amigo.
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